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CAPÍTULO 4: SORPRESAS.

Christofer.

 

En cuanto salgo del baño, me cambio de ropa para ponerme a trabajar de inmediato en el diseño de la naviera que ya tengo algo adelantado. Abro el correo electrónico y comienzo a leer las peticiones que me envió la señorita Hayden, que para mi sorpresa, son peticiones bastante interesantes y algunas de ellas ya las había pensado incluir para presentarlas después.

 

- Puedo pasar?. - Me pregunta mi hermano Terry al abrir la puerta sin tocar.

 

- Ya pasaste, no?. - Le digo con sarcasmo.

 

- Veo que estás trabajando, parece que te interesa mucho el proyecto de la naviera. - Me dice mientras acerca una silla a mi escritorio de dibujo.

 

- Sabes que esto es lo que me gusta, más que hacer diseños para casas y cosas de esas.

 

- mmmm oye... que te pareció Stefania Hayden?, a mí me dejo muy sorprendido. A parte de ser una mujer muy hermosa, es muy inteligente.

 

- A mí también me sorprendió bastante y más cuando puso en jaque al idiota de Joey, por lo que ya me cae bien. - Mi hermano inmediatamente suelta una carcajada.

 

- Hasta Mark se puso colorado y quería pegarle por idiota... - Los dos nos reímos.

 

- Solo espero que así como se ve que Stefania Hayden es de inteligente para los negocios, lo sea para que no vaya a caer en las garras de Joey. - Comenta mi hermano.

 

- Por lo poco que pude ver, seriamente lo dudo y voy a disfrutar cada momento en que ese tonto se estrelle contra la pared cada vez que ella lo ponga en su sitio como lo hizo hoy apenas conociéndolo. 

 

- Cambiando de tema, porque no fuiste al bar hoy?.

 

- No, tengo que trabajar y la verdad es que no me siento de ánimo para haber ido hoy.

 

- Chris, estás enfermo o qué?, como que el soltero más codiciado y el más mujeriego del mundo, según las revistas amarillistas de este país, no quiere ir de rumba hoy... - Me dice Terry burlándose de mí.

 

- Definitivamente eres un completo tonto, no sé cómo la pobre Bárbara te aguanta. - Le digo mientras continuo con los planos.

 

- Hombre, estoy jugando... sabes que antes no me gusta que vayas tan seguido a esos lugares, aunque también sé que no haces nada malo. De vez en cuando tienes tus citas por ahí pero nada más, y también sé que el sesenta por ciento de lo que dicen las revistas, son completamente mentira y que muy pero muy en el fondo eres un buen tipo. - Me dice al tocarme el hombro con una de sus manos.

 

- Terry... que baboso eres... - Le digo y los dos nos volvemos a reír.

 

- Solo te digo que deberías buscar a alguien y sentar cabeza. No te puedes pasar toda la vida sufriendo por ella, ella lamentablemente ya no está Chris, piénsalo... Bueno, me voy a dormir con mi amada esposa, descansa. - Me dice Terry al alborotarme el cabello con la mano para luego salir de mi habitación.

 

- No crees que lo he intentado?... pero nadie es como ella, ninguna le llega a los talones... - Digo en voz baja, casi en un susurro, luego tomo un poco de aire y después continuo con mi trabajo.

 

Suena el despertador y me estiro porque desde hace rato ya estoy despierto, no he dormido muy bien ya que me estuve despertando mucho. Me doy un baño, me pongo uno de mis trajes y bajo a la cocina para tomar algo de jugo.

 

- Hola corazón. - Me dice mi abuela quien está sentada en la barra de la cocina bebiendo té y leyendo su periódico.

 

- Hola abuela. - La saludo y luego me acerco para darle un beso en la frente.

 

- Por la cara que traes, creo que no dormiste bien. - Me dice.

 

- Sabes que sigo pensando que eres bruja, verdad?. - Le digo al sentarme al frente de ella con un vaso de jugo de naranja.

 

- Soy bruja y de las que esculcan y se meten en la vida de sus nietos... - Me sonrío al escucharla.

 

- Va a desayunar señor Christofer?. - Me pregunta la chef de la casa.

 

- No, gracias Mary. - Le respondo.

 

- Qué te pasa?, porque no dormiste bien?. - Comienza el interrogatorio de mi abuela.

 

- No pasa nada abuela, solo que trabajé hasta tarde.

 

- Es el proyecto de la naviera que tiene tan feliz a tu padre?.

 

- Si, ese... - Le respondo para luego beber un poco de mi jugo.

 

- mmm, este fin de semana voy a ir al hospital, me quieres acompañar?.

 

- No, no podre ir contigo esta vez, lo siento y doy por terminado este interrogatorio porque tengo que ir a un lugar antes de ir a la oficina.

 

- Esta bien, que te vaya bien corazón...

 

- Gracias, nos vemos. - Le digo a mi abuela al despedirme de ella.

 

La relación que tengo con mi abuela es muy estrecha. Es mi mejor amiga y ella es la que se ha mantenido conmigo cuando mi madre no está por estar con mi padre en sus viajes de negocios. Quiero mucho a mi mamá, pero mi abuela y mi hermano son los más cercanos a mí, ellos saben completamente todo de mí y mis secretos.

 

Salgo de la mansión y me subo a mi Aston Martin V12 Vantage, que se encuentra en la entrada estacionado, enciendo el auto y cuando me preparo para conducir, alguien me toca el vidrio de la ventana del auto, procedo a bajarlo para ver que es mi padre quien pide mi atención.

 

- Hola hijo, veo que vas de salida y quiero decirte que necesito hacer una reunión extraordinaria con Terry y contigo, así que me gustaría que pospusieras por el día de hoy lo que piensas hacer, quiero que el proyecto de los Hayden salga sin inconvenientes.

 

- Quieres hacerla acá o en la empresa?. - Pregunto algo molesto por cambiar mi itinerario.

 

- En la empresa en treinta minutos.

 

- Nos vemos allá. - Le digo al levantar el vidrio para luego arrancar el auto.

 

La reunión duro algún tiempo, mi padre quería saber si teníamos todo preparado y listo para la señorita Hayden, hasta me pidió que le mostrara lo que ya tenía listo de los diseños y me sorprendió mucho que esta vez no tuviera objeciones sobre mi trabajo. Al contrario a lo que me había ocurrido con algunos proyectos anteriores y también me sorprendió que por primera vez en mucho tiempo, no estuvieran en la reunión los Hazzard. 

 

Al terminar, observo la hora en el celular y puedo ver que son las nueve y treinta minutos de la mañana.

 

- Oye, tengo hambre, qué tal si vamos a desayunar?. - Me dice mi hermano.

 

- Si, me parece... – Digo y luego salimos de la oficina de mi padre hacia la cafetería.

 

- Nunca había visto a papá tan nervioso con un cliente y me ha sorprendido que no haya involucrado a los Hazzard en la reunión. - Comento al sentarnos.

 

- Por lo que he escuchado... los Hayden son personas muy respetadas, son considerados los genios de los negocios. Creo que a Stefania Hayden la llaman la reina de midas, todo negocio que toca y crea es un éxito total. La reputación que manejan ellos en todo américa y gran parte de Europa, es enorme. La gran cacería que tuvo que hacer papá para lograr llegar a ellos, fue inmensa, como por dos años más o menos y ahora el hecho de poder trabajar para ellos en un proyecto tan importante, es todo un logro que nos abrirá muchas más puertas y tendremos mucho más peso y nombre en el mercado.

Con respecto a los Hazzard, creo que por primera vez en mucho tiempo, mi padre tuvo algunas diferencias con Mark ayer después de la reunión por el comportamiento de Joey con la señorita Hayden en todos los aspectos y él por ningún motivo quiere poner en peligro el negocio con ellos. - Me dice mi hermano.

 

- Pues al parecer, si mi padre llegara a terminar con ellos definitivamente, sería gracias a los Hayden y habría que agradecérselos en el alma si eso llegara a suceder, porque lo que somos tú y yo, nunca pudimos quitarle la venda de los ojos a nuestro padre con respecto a esa familia. Él debería darse cuenta de que en todo este tiempo, solo él le ha sido fiel a su amistad. - Le digo a mi hermano después de beber un poco de mi café.

 

- Si, si no es porque hemos estado al pendiente de los negocios, desde hace mucho rato, los Hazzard ya nos hubieran dejado en la calle y se hubieran robado todo. - Vuelve a decir mi hermano.

 

- Lo que me pudre de todo esto, es que por más que he intentado y he buscado pruebas en contra ellos y sus malos manejos en otras cosas que menos mal no tienen nada que ver con nosotros, no las encuentro. Hasta he intentado con el tema de los acosos sexuales de Joey, pero tampoco he tenido suerte. Parece como si tuvieran pacto con el diablo para esconder, tapar y desaparecer cualquier denuncia y prueba en su contra, y sabes perfectamente que sin ninguna prueba, mi padre nunca nos creerá. - Vuelvo a comentarle antes de comer un poco de mi omelet con jamón y queso.

 

- Yo soy creyente de que algún día tendrán que caer. - Comenta mi hermano mientras le pone un poco de miel de maple a sus hotcakes.

 

Después de que terminamos de comer, mi hermano se va a su oficina a recoger algunas cosas que necesita para trabajar luego de que termine de hacer sus cosas con su esposa. Cuando voy llegando a mi oficina, puedo ver que viene mi padre caminando con la señorita Hayden, por lo que deduzco que él está por mostrarle su oficina porque esta queda prácticamente al frente de la mía.

 

Al acercarme a ellos, veo cuando mi padre abre la puerta de la oficina y ella entra. Me hago en la entrada un poco atrás de mi padre, quien todavía no se ha percatado de mi llegada y al estar ahí, me sorprendo por la reacción que tiene la señorita Hayden con su oficina y lo hago mucho más, cuando ella nos dice que su oficina en Vancouver es mucho más sencilla que esta, por lo que me agrada saber que es una mujer bastante sencilla y eso es una cualidad o virtud muy difícil de hallar en estos tiempos, mucho más, entre gente que tienen tanto dinero, incluyéndonos. Nosotros gozamos de una gran posición económica y social, somos ricos pero no tanto como los Hayden.

 

Cuando mi padre se acerca y me pide diciéndome al oído que me haga cargo del tour por la empresa que él le iba hacer a la señorita Hayden por que le resultó algo de lo que se tenía que encargar, no me gusta mucho la idea pero lo hago sin protestar.

 

A medida que le voy mostrando la empresa y sus procesos a la señorita Hayden, me llevo aún más sorpresas con ella. Es una mujer muy inteligente, muy capacitada, ya que por las preguntas que me formula, me doy cuenta de se ha ilustrado en todo el tema al que se dedica nuestra empresa y de los procesos de la construcción en general. Además, es muy amable, saluda a todo el personal con el que nos encontramos en el camino, les sonríe al interactuar con ellos.

 

Me sorprende de manera positiva porque es muy difícil encontrar mujeres tan instruidas en todos estos temas en mi mundo de negocios, que sepan tan bien lo que quieren y que no sea solo para ropa, zapatos y peinados. Que sean humanas y que no miren a las personas por encima del hombro como varias que conozco, que sean amables y les guste aprender de las personas de bajo rango porque sin ellas, ninguna compañía en el mundo podría seguir adelante si no son por sus empleados y ella es una persona consciente de ello. Incluso de nosotros, que a pesar de tratar bien a la gente y de ser justos con ellos, muchas veces se nos olvida la amabilidad por el día a día.

 

La verdad, es que no es tan horrible y aburrido el tiempo que estoy pasando con la señorita Hayden, hasta estoy aprendiendo cosas por medio de algunos de sus comentarios mientras vamos por la empresa de un lugar a otro. De hecho, resultó ser una mujer muy interesante con una conversación amena cuando habla, ya sea haciendo preguntas o con algunos de sus comentarios.