Mundo Shinobi - Señores de la guerra - 434

Una vez que Kain sano a Madara y Tobirama, le hizo el gesto con la mano a su padre para que se acercara y los tres quedaron a dos metros del otro formando un triángulo.

Kain se cruzó de brazos y les preguntó —¿Qué tal la sensación del chakra? ¿Mucha diferencia con cuando ustedes podían producir su chakra?—

—La mayor diferencia— dijo Madara —es que se siente como si fuera un contenedor con un líquido que se va gastando poco a poco. En estos momentos estoy medio y solo fue media hora de combate—

—Exacto— dijo Tobirama —se siente como algo poco natural, más parecido a una comida. En estos momentos estoy a ¾ de mi capacidad total—

—En ese caso, la eficiencia de padre en el uso del chakra es poca—

—Todas las personas con grandes reservas de chakra caen en el mismo error— dijo Tobirama —puede que por eso mismo tienen grandes reservas de chakra. En lugar de buscar ser eficientes en su uso, se mentalizan en producir más chakra—

—Es una posibilidad— dijo Kain asintiendo —bueno, solo significa que oto-sama tiene que trabajar más esa parte—

Madara asintió con seriedad.

—Bien, ahora espérenme aquí— dijo Kain, se dio la vuelta y camino hacia donde estaban Orochimaru y Kiyomi.

El anciano Orochi miró a Kain y vio la sonrisa astuta. No le gustaba para nada esa sonrisa.

Kain llegó delante de Kiyomi y le dijo —ven, vamos a hacer equipo—

—¡¿Qué?!— preguntó Kiyomi

—Dije que vamos, nadie te está preguntando— dijo Kain con seriedad

—Sensei, es imposible ¿Me quieres matar?—

—Nadie te va a matar, escandalosa— respondió Kain, después miró a Orochimaru y le preguntó —¿Crees que te puedas mantener el ritmo?—

—Kain— dijo el anciano Orochi —no creo que sea buena idea—

—Tranquilo, abuelo, ellos necesitan aprender, Madara y Tobirama necesitan entrenar y yo necesito una limitante para poder ponerme realmente serio—

Orochi levantó su ceja y miró a Orochimaru. El niño de cabello oscuro y piel pálida como el papel lo miró de vuelta. Orochi puso una expresión seria y le preguntó —¿Cómo te sientes al respecto?—

Orochimaru miró a Kain y le preguntó —¿Qué piensa nii-san?—

—Soy de la idea de enfrentar los miedos. Te aseguro que después de este entrenamiento Tobirama no significara nada para ti, solo un obstáculo a superar. Nada más—

Orochimaru asintió con seriedad y miró a su abuelo —voy, abuelo— dijo

Orochi soltó un suspiro y miró a Kain —cuida de Orochimaru, él no es como tú ¿Entendido?—

—Sí, abuelo, no te preocupes, seremos la mejor combinación—

Orochimaru miró a Kain y avanzó hasta atravesar el domo de energía producido por las unidades de apoyo.

Kain miró a Kiyomi, ella parecía indecisa. Kain estiro su mano derecha y sonrió —vamos, Kiyomi-chan. Siempre has sido genial, este no es momento para olvidarse de lo buena que eres—

Kiyomi frunció el ceño y lo apuntó con el dedo índice —si muero vendré desde la tumba para atormentarte— dijo

Kain soltó una risita y Kiyomi camino fuera del domo de energía. Ella le tomo la mano y lo quedó mirando a los ojos. Kain le guiño un ojo y miró a Orochimaru —bien, seremos equipo. Yo me ocupare de uno y ustedes se ocuparán de otro, pero eso no quiere decir que deben bajar la guardia. Yo estaré pendiente y los ayudare, pero a su vez, ustedes deben luchar con todo lo que tienen; este no es un entrenamiento natural. Les daré cinco minutos para que se acostumbren, después de eso, estarán por su cuenta—

—Eso es imposible— protestaron Kiyomi y Orochimaru

—Por supuesto que es imposible en su estado actual— dijo Kain con una sonrisa astuta —pero no puedes esperar estar preparado para enfrentar los problemas. Los problemas llegan cuando uno menos se lo espera, por eso uno entrena. En todo caso, no se preocupen, de ahora en adelante entrenaran con una mentalidad diferente. Por otro lado, lo que no sepan, lo pueden sentir. Y lo que no tienen, no lo necesitan. Como siempre le digo a Kiyomi, concéntrate en lo que tienes, no en lo que te falta—

Kiyomi y Orochimaru lo quedaron mirando con algunas dudas. Kain sonrió de forma astuta y les desordeno el cabello. Kiyomi y Orochimaru fruncieron el ceño y ambos le dieron un manotazo para que él quitara su mano de sus cabellos.

Kiyomi miró a Orochimaru y le dio un reverencia —estaré confiando en ti, Orochimaru, ya que sensei es demasiado descuidado—

—Lo mismo digo, Kiyomi-san— respondió Orochimaru y le devolvió la reverencia —nii-san solo piensa cosas raras y nadie lo entiende ¿Tú le entiendes?—

—Ni media palabra—

—Lo mismo yo—

Kain soltó un suspiro y les dijo de mala gana —ya, vamos, par de llorones— comenzó a caminar y murmuro —¿Cuántos podrían decir que cruzaron golpes con Tobirama y Madara? Santo cielo, que par de malagradecidos—

Kiyomi y Orochimaru se miraron, sonrieron y siguieron a Kain al trote.

Kain llegó delante de Madara y Tobirama con los dos niños y ellos se lo quedaron mirando con rareza.

—Ellos serán mi equipo, no se preocupen, cada uno es bastante bueno. Así que comencemos—

—Kain Uchiha— dijo Tobirama alzando la voz

—Nadie te ha preguntado— dijo Kain con seriedad, Tobirama se quedó callado, pero lo miró con profundo resentimiento. Kain mostro una pequeña sonrisa —atácame con todo lo que quieras, yo me hago responsable de ellos— Kain miró a Madara y le preguntó —¿Entendido?—

—¿Estás seguro?— preguntó Madara —Kiyomi tiene algún nivel de habilidad, pero todavía es promedio—

—¡Oye!— protesto Kiyomi

—Es la verdad— dijo Madara mirándola a los ojos, Kiyomi tirito de solo mirarlo a los ojos y Madara continuo —a lo sumo podrías alcanzar el nivel de Tobirama cuando mucho. No creas que te podrás comparar conmigo o Hashirama, todos ustedes están muy lejos de eso. Incluso Kain tiene la mitad del chakra que poseía yo en mi mejor momento—

—Pero hemos luchado antes— dijo Kiyomi

—Idiota ¿Qué clase de adulto lucha en serio con una niña?—

—Kiyomi-chan— dijo Kain, le dio una mirada severa a Madara y este último miró en otra dirección como si no fuera su problema. Era brutalmente honesto, pero el problema era que para una niña influenciable podía ser letal y matar todas sus aspiraciones. Así que Kain miró a Kiyomi y le dijo —no te preocupes, oto-sama solo cree en el talento, pero no entiende la perseverancia. Como siempre te digo, si Kiyomi se enfoca en sus puntos fuertes, será invencible—

Kiyomi hizo un puchero, pero asintió. Kain le acaricio la cabeza y le dio un beso en la mollera.

Kain miró a Orochimaru y le dijo —esto es un entrenamiento, recuerda lo que hablamos. Juega el juego, aprende las reglas y ve lo que puedes aprender. Una vez que domines el juego, podrás ganar casi siempre. Este es el momento para jugar, no en el campo de batalla ¿Entendido?—

—Sí, nii-san— dijo Orochimaru con seriedad

—Eso es— dijo Kain con una sonrisa astuta y le desordeno el cabello. Después miró a Madara y Tobirama —vamos, empecemos—

Kiyomi y Orochimaru saltaron hacia atrás y se pusieron en posición de combate. Kain le hizo el gesto con ambas manos a Madara y Tobirama para que vinieran. Madara se lanzó de frente y Tobirama desapareció utilizando los sellos que había dejado en el suelo. Apareció para atacar a Orochimaru como si quisiera aprovechar el miedo que le tenía el niño.

Kain recibió el ataque de Madara y fue retrocediendo a medida que interceptaba los golpes.

Al mismo tiempo, Kiyomi como usuario de sellos, percibió la activación de un sello y saltó para atacar con una patada.

Tobirama fue sorprendido por un instante, nunca se esperó tal reacción de Kiyomi, pero se recuperó y atajo el pie de Kiyomi con la mano. Sin embargo, Tobirama se vio otra vez sorprendido por un conjunto de serpientes que se lanzaron contra él. Tobirama soltó a Kiyomi, dio un salto hacia atrás y miró a Orochimaru. Este último realizo una secuencia de sello, junto aire en sus pulmones y lanzó un chorro de agua de alta presión. Tobirama se agacho y evito ser decapitado.

Al mismo tiempo, Kiyomi y Orochimaru se ponían uno al lado del otro.

Por su parte, Kain siguió intercambiando golpes con Madara, sonreía de lo divertido que era. Su abuela y su tío le habían dicho que su padre era el guerrero definitivo y ahora lo podía presenciar por su propia cuenta.

Hace un mes, cuando Madara había sido revivido, apenas entendía su percepción, pero ahora era como una segunda naturaleza y seguía mejorando. Ahora podía leer todos sus movimientos y corregir sus debilidades.

Kain por fin tomo la ofensiva, lanzó un par de puñetazos a la cara, Madara retrocedió interceptándolos con las manos y retrocediendo con fluides. Kain lanzó una patada a la cara, Madara lo imito y ambos chocaron. Al mismo tiempo, fueron repelidos por la fuerza del golpe y saltaron hacia atrás haciendo una pirueta y cayendo a cinco metros del otro.

Sin embargo, ese no fue el fin. Madara quedó cerca de Kiyomi y Orochimaru, así que ahora los ataco a ellos. Por su parte, Kain ataco a Tobirama. El intercambio era fluido y Kain tenía que mantener un ojo en Kiyomi y Orochimaru en todo momento, pero se tuvo que poner serio cuando su padre los ataco con un jutsu de fuego.

—Katon, goukakyu no jutsu— dijo Madara y soplo una llamarada que se condenso en una bola de fuego. Entonces voló con dirección de Kiyomi y Orochimaru.

—Déjamelo a mi— dijo Kiyomi y sacó un papel de sello. Ella lo sostuvo con ambas manos y Orochimaru la quedó mirando. El fuego los golpe de frente, pero Kiyomi utilizo el papel de sello y lo fue absorbiendo poco a poco. Ella frunció el ceño, pero se aguantó el dolor y lo absorbió todo.

Kiyomi quedó con las manos ensangrentadas y roja. Sin embargo, Madara no le dio tiempo para recuperarse y saltó al ataque.

Kain le dio un ligero golpe a Tobirama en la boca del estómago dejándolo impedido por unos segundos. Saltó e intercepto a Madara. Ellos intercambiaron golpes.

Por otro lado, Tobirama ataco a Kiyomi y Orochimaru. Estos últimos estaban más preocupados por las quemaduras de Kiyomi que cualquier otra cosa. Tobirama apareció y Orochimaru reacciono lanzando un grupo de serpientes que emergieron desde la manga, pero Tobirama volvió a desaparecer y apareció detrás de Orochimaru.

—Hiraishingiri—

—Como si te fuera a dejar— grito Kain, apareció delante de Tobirama y con su percepción, atajo la mano con el kunai en forma de tridente. Kain se agacho, uso la inercia del movimiento y redirigió a Tobirama al suelo. Este último tuvo que poner su otro antebrazo para rodar.

Al mismo tiempo, Madara apareció detrás de Kain, levantó su puño para golpearlo en la nuca, pero Kain se movió más rápido y se puso de pie pasado por al lado del puño. Madara quedó con las costillas expuestas. Kain le dio un golpe con el revés de la mano y lo mando a volar.

Madara cayó un par de metros mientras se agarraba las costillas con la mano izquierda y fruncia el ceño.

Por otro lado, Tobirama estaba en cuclillas en el suelo, sosteniendo el kunai en la mano derecha. Tenía una mirada fría y analítica, pensando que el famoso "juego" de Kain, era más real que solo su estúpido orgullo Uchiha.

Kain no aparto la mirada y apuntaba hacia adelante con el puño izquierdo mientras que con la mano derecha sostenía un papel de sello. Su mano emitía el aura verdosa del ninjutsu medico potenciado por el elemento de madera. Una vez que termino de canalizar ninjutsu al sello, lo tendió hacia atrás sin apartar la mirada de Madara y Tobirama.

—Toma, Kiyomi— dijo Kain con seriedad, ofreciéndole el sello —solo lo colocas sobre tus manos y lo ocupas como cualquier sello. La energía emergerá y sanará tus manos. Vamos a tener que trabajar más con la absorción elemental—

Kiyomi estaba junto a Orochimaru, solo fueron unos segundos, pero casi pierden el combate sin darse cuenta. Sin embargo, y más importante, el sello con el ninjutsu médico le trajo una idea ¿Y si ella pudiera almacenar una bola de fuego dentro de un sello y después ocuparlo en combate contra un enemigo?