webnovel

Legado del Angel: Norte oscuro

En los años 20 del nuevo milenio, el mundo no podía estar prosperando más. Nuevas tecnologías y descubrimientos que dejaron a todos atónitos. Todo apuntaba a una época de cada vez mayor prosperidad y grandes expectativas. Entonces, los demonios invadieron... Todo lo construido con fuerza se derrumbó en unos pocos días, y la humanidad cayó en su hora más oscura. Entre guerras y conflictos, se perdió la hipocresía, y los humanos cayeron en una espiral desenfrenada. La gente buena se extinguió... Entonces los ángeles eligieron a los más dignos de entre los humanos. Aquellos recibieron su legado, y un poder inimaginable empezaba a nacer en ellos. Depende de ellos salvar a la humanidad, oh, déjarlo ... ¿Salvarán a los humanos? Oh, ¿se salvarán a sí mismos?

Samyasa · Horror
Not enough ratings
20 Chs

Capitulo 19 : El rincón más oscuro

Sander no sabía dónde estaba, el cielo era color rojo como el atardecer, mientras que la tierra era como la sangre. Camino durante varios minutos, hasta llegar a un valle, un valle repleto de cadáveres.

Los cadáveres de su familia...

Los cadáveres de sus amigos y compañeros...

Oh de sus simples conocidos...

Morris, Madison, Bill, Mayor, Abby, Allison, Ethan, Klaus, Bruce, y por supuesto...ella también.

Su esposa...

Un ataque de terror lleno el alma de Sander, todo lo que conocía, todo lo que alguna vez conoció, se había ido. Una mirada en blanco apareció en su rostro mientras sus ojos enrojecian de locura.

Por un momento, perdió la razón...

Sander no sabía cómo había llegado aquí, pero no se molesto en pensarlo. No sabía si lo que veía era real o no, y tampoco se molestó en pensarlo.

Solo habia una cosa que si sabía, lo que sentía...

Desesperación, eso era lo que sentía...

El horror lleno su rostro, cuando del cielo cayó un demonio, de dos metros y con gigantescas alas.

Se acercaba lentamente, paso a paso, hasta que estuvo justo frente a el y entonces, levantó su espada y atacó.

Sander no trato de defenderse, solo se quedó ahí, sin moverse.

. . . .

–Sander, ¿Que te pasa?, despierta–

–¡SANDER!– Solo entonces Sander reacciono, cuando miro a su lado, era Morris, su viejo compañero. El estaba disparando hacia el demonio que lo había atormentado.

Sander miro a su alrededor, y vió a Mayor, Madison, Bill y todos su compañeros Disparando hacia el demonio.

Todos estaban peleando...

Sander levantó su arma y atacó al demonio, no era el momento de soñar, había que matar a esa cosa.

Sander disparo todo lo que pudo, pero el demonio parecía inalterable. Tomaba todo lo que le lanzaban y seguía matando a todos.

"No, esto no se puede repetir" Sander apretó los dientes con fuerza, disparó con tal ferocidad y certeza que casi parecía una máquina incansable he incapaz de fallar.

Sin embargo, no importa lo que hiciera, los oficiales seguían muriendo.

Bill murió...

Madison murió...

Mayor murió...

Ethan murió...

Pronto, solo quedaba el...el y el demonio.

Callendo de rodillas, Sander se rindió a huir, lo dejo todo, y sucumbió ante la desesperación.

Al final, vió como todo daba vueltas a su alrededor.

Su cabeza fue cortada...

. . .

–Cariño, cariño. Despierta– Sander escucho que su esposa lo llamaba, y abrió los ojos y la vió, tan hermosa como era.

–¿Tuviste una pesadilla?– Ella lo miro con una hermosa sonrisa.

–Si– Entonces, Sander la abrazo suavemente, le dió un ligero beso, y le dijo. –Volvamos a dormir–

. . . . . . . . . . . . .

Ethan estaba en un almacén, no sabía cómo había llegado ahí, solo podía seguir caminando hacia adelante.

Al fondo del pasillo, Ethan podía ver vagamente una figura que colgaba de una cuerda como un péndulo colgando tranquilamente del techo. Cuando la vio, Ethan aceleró el paso para llegar antes.

Sin embargo, cuando llegó frente a esa persona, quedó completamente conmocionado.

Esa persona. Ese hombre...

El responsable de la muerte de su familia...

¡Demitry!

–¿Que pasa? ¿El gato te comió la lengua?– Al no ver ninguna respuesta por parte de Ethan, Demitry tomo la iniciativa de hablar. –Tu debes ser Ethan, cierto? el pequeño pez que escapó de la red–

Después de escucharlo, Ethan se volvió una furia. Se acercó con una mirada asesina y empezó a golpearlo, lo golpeó con todas sus fuerzas. Solo había un pensamiento en su mente, lo mucho que quería matarlo.

–jajaja ¿Que pasa? ¿Estás enojado por qué mate a toda tu familia? ¿Quieres matarme, verdad?– Cuanto más hablaba Demitry cubierto de sangre, más enojado estaba Ethan, en su mente solo quería acabar con el.

–Si quieres matarme, tendrás que esforzarte más. ¿Ves ese bat a tu derecha? ¿Por qué no lo usas?–

Reaccionando a las palabras del hombre, Ethan tomo el bate sin mediar palabras, y comenzó a golpearlo con el. Con tanta fuerza que, se podían escuchar huesos romperse.

–Jajajaja Eso es, descarga toda tu ira. Entrégate a la oscuridad–

. . . . . . . . . . . . . .

Alexa abrió los ojos, y se vio a si misma acostada en una cama, en una habitación pequeña, donde solo había un escritorio. Fijándose un poco más, se dió cuenta de que estaba en un sótano.

Estaba en el lugar... Donde vivió durante muchos años...

La tristeza en el rostro de Alexa se volvió tan devastadora que, haría que el alma de quién la viera, se rompiera en pedazos.

Se escuchó el chirrido de una puerta, y alguien bajo por las escaleras. mientras que Alexa se sentó en la cama con el rostro hacia abajo.

–¿Como has estado, mí pequeño ángel?– La voz de un hombre de acento británico, pero Alexa no levantó la cabeza. mientras el se acercaba, la mirada de Alexa perdió su brillo.

–No sabes cuánto te he extrañado– El hombre extendió su mano hacia ella, mientras que Alexa murmuraba.

–¿De verdad... todo fue un sueño?–

. . . . . . . . . . . . . . .

En medio de una inmensa oscuridad, Klaus flotaba en medio de la nada. No podía moverse, no podía ver nada, tampoco oír nada.

Era como si no existiera...

Pero en medio de esa oscuridad, Klaus estaba incomparablemente tranquilo. No había emociones en su rostro.

De repente, una luz cegadora empezó a expulsar toda la oscuridad. Klaus tomo esa luz con su mano, y la luz se convirtió en una espada.

Al sostenerla, Klaus la blandito en el vacío, cortando la oscuridad por la mitad.

. . . . . . . . . . . . . .

Sander descansaba plasidamente en el lugar más querido de su corazón, no sabía cuánto tiempo había pasado, solo sabía que si pudiera, se quedaría aquí eternamente.

–Es hora de despertar– Sander solo logró escuchar esa voz, antes de que todo a su alrededor se iluminará con luz.

. . . . . . . . . . . . . . .

La vista de Ethan estaba completamente roja, había olvidado el concepto del tiempo, solo seguia golpeando la fuente de su odio con todas sus fuerzas.

Como si no importará el mañana...

Pero sin importar lo que hiciera, la fuente de su odio seguía ahí, burlándose de el, riendose de el. Pero eso ya no importaba.

Ethan ya había perdido la cordura...

Entonces escuchó la voz...

–Es hora de despertar–

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Justo cuando ese hombre iba a poner su mano en el hombro, una voz profunda se escuchó junto a su oreja.

–Es hora de despertar–

El hombre se desfragmenta en trozos de luz estelar, y desaparece completamente. y detrás de él, una figura con la mano extendida se vuelve débilmente visible.

La sonrisa más hermosa del mundo, apareció en rostro de Alexa...