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Secretos del oficio...

"no te voy a contar nada de esto porque te tenga cariño, o me caigas bien, solo es cordialidad entre colegas... si te tengo que aguantar en el futuro trabajando en esto mejor no comenzar con mal pie..." Sus justificaciones lo hacían aun más sospechoso de lo normal.

"Seguro que tu primera intención en la negociación era quedarte alguno de los objetos ¿me equivoco?" Asentí con la cabeza"sin embargo se te olvidan las recompensas que recibirás por finalizar el tutorial... 1 objeto por una clasisficación D, 2 por una C, 3 por una B, 4 por una A, y 5 por una S... Eso no lo sabes tu, pero yo sí ya que si no fuese por Data tendría que encargarme de otorgarlas... En fin de haber continuado te hubiese cambiado valor por valor y habría 5 objetos desperdiciados...

Me acerqué a los montones de objetos y recogí la espada a dos manos, mi lanza, el arco, la gema, y el escudo, y los aparté...

Cambie la mochila por la capucha, y aproveché para ir guardando cosas en ella. El siguiente intercambio fue la armadura, el cinturón y la capa, conseguí convencerle a cambio del cetro de agua... sería difícil que yo contactase por el momento con la gente de las profundidades...

Pese a sus reticencias, me quedé con los guantes, por lo que me había dicho Ildra en el continente donde llegariamos había ciudades enanas... sería una buena carta de presentación devolvérselo junto con el escudo. Le añadí mi anillo de regeneración, la espada y daga del drow y el hacha de mano del enano, y lo cambié por la túnica y los cuchillos...

Para cuando acabó el intercambio equivalente aun me quedaban buenas cosas por intercambiar...

Me quedaban por lo tanto morning star, látigo y espadas como objetos valiosos, la corona como tesoro real, y el libro... No era mucho, pero quería ver cual era el siguiente paso Irtrum...

"bravo... como ya estarás intuyendo la siguiente trampa sería ofrecerte habilidades por estos objetos, pero la cuestión es que las recompensas ya te las otorgarán, y el resto con tu propia capacidad no tardarás en hacerte con ellas... ¿así que que podría ofrecerte a cambio? "el hecho que me siguiese sonriendo como si yo fuese tonto me ponía nervioso...

 

"¿algo para comerciar en Athair?" le contesté.

"Exacto esa es la clave para ti del negocio, recuerda que las razas que ya están en Athair no tienen ninguna obligación de protegerte, atenderte, o enseñarte nada, cuando lleguéis estaréis solos... además la raza a la que sustituiréis no es famosa por ser especialmente acogedora... es lo que tienen las formas de vida basadas en el silicio... Así que lo que más necesitaréis será comida... y lo único que necesitan ellos ahora que están a punto de trascender, son cristales..."

Lo que siguió fue otra exposición aburrida sobre Athair, y sus monstruos... No pude evitar bostezar por dentro ante tantos datos... Una cosa es que tuviera un poco de acceso al background del juego y la otra era una sobresaturación del lore y de datos...

A diferencia de lo que pasaba con los monstruos en el tutorial, los seres vivos en Athair tenían dentro un cristal que condensaba su energía y que podía ser recogido cuando estos morían, estos cristales eran fundamentales para que las distintas razas evolucionasen sus físicos desde su estado natural a los distintos Tiers, tal y como pasaba con el cuerpo evolucionado de Ildra que estaba más allá de toda capacidad natural que hubiese conocido. Para una raza a punto de trascender, ni objetos, ni oro, ni ninguna otra cosa sería de utilidad para comerciar con ellos excepto los cristales, era lo mismo para otras razas menos avanzadas, una suerte de moneda común...

Cuanto mayor era el poder del monstruo mayor calidad tendría el cristal y por tanto mayor valor...

Considerando que tenía un tesoro real, un libro que en el que estaba muy interesado y variso objetos valiosos, Irtrum me ofreció 3 cristales de grado mítico, y como moneda común de cambio 120 cristales de alto grado y 200 de grado medio y 1100 cristales comunes...

Pese a mis suspicacias sobre que me estaban timando Irtrum, o el maestro Irtrum como parecía que le había cogido el gusto a que le llamase me aseguró que no, que con esa fortuna podría garantizar la comida y la vida de los 2000 jugadores, no solo la mía durante meses...

El viejo Dream Rider me miró con solemnidad cuando acabamos nuestros negocios...

"Dejame darle un consejo a mi primer discípulo..."mierda no había tenido ningún otro discipulo antes..."Más allá de tu gusto por las mujeres no dejes que el resto de razas sepan que eres un omnimagic hasta que no seas suficientemente poderoso como para protegerte a ti mismo... muchos han acabado esclavizados en mazmorras como si solo fuesen sementales de cria..."Un escalofrío me recorrió la espalda al acordarme de Ildra...

"Maestro puedo pedirle un favor... ¿podría verle otra vez antes de tomar la nave para el mundo de Athair? Creo que tendré una oferta que le podrá interesar..." le pregunté...

"no es habitual pero no debería haber problema, aunque recuerda que la oferta debe ser buena, no me gusta perder mi tiempo..."

Se volvió traslucido, y después desapareció como en una voluta de humo como Ildra...

Estaba solo en la sala de la estatua, la sensación de haber cerrado una etapa era tangíble... La voz de data resonó en mi cabeza...

"Felicidades al jugador por haber completado esta fase del tutorial, ¿deseas finalizar y unirte al resto de jugadores en este momento?"

Me acordé del consejo que me había dado el maestro de reunirme antes con la estatua de la diosa...

 

"data voy a seguir un rato.."

Me acerqué a la estatua de la diosa, aunque yo no era ateo, aunque yo no conocía el credo de esta diosa, me salió rezarle una plegaria agradeciendo haber velado por mi durante todas las pruebas del tutorial...

Una luz comenzó a irradiar de la estatua... lo que hasta hace un momento era mármol inmóvil comenzó a reducir su tamaño y a cobrar vida...

Deslumbrante, bella, atractiva, definitivamente con una apariencia humana, el pelo con todos los colores del arcoiris recogido en un moño coqueto que dejaba al descubierto sus hombros y su cuello con una piel blanca... La túnica se pegaba a sus contornos... era una visión apabullante para cualquier hombre... su dignidad, ese halo de divinidad que emanaba...

Estaba realmente hipnotizado hasta que sus primeras palabras salieron de su boca...

"¿Entonces lo de la sucia, guarra, chantajista, ladrona, aprovechada, casquivana,*****,*****,*****,*****,******, y fea Elfa esa es algo serio o sigues soltero y sin compromiso...?" Ella sería una diosa pero tenía una lengua y un vocabulario peor que la más arrabalera de las mujeres que había conocido... y yo tenía de nuevo un problema...

"No fue planeado, solo... paso... no sabía..." comencé a escusarme como si estuviese ante mi ex novia...

"que no sabías, flirteando conmigo desde el comienzo, meditando a mi lado, incluso pediste una cita..." ¿de que diablos estaba hablando...?

"¿cita yo no...rec...?" no me dejó seguir hablando su dedo me estaba taladrando el pecho de forma acusadora...

"No lo niegues ahora... para que sino elegirías ser reconocido por los dioses sino para hablar conmigo... conoces más dioses acaso... eso era una cita maldito adulteroooooo, si ya lo veía yo venir... que lo de Cheater no era por tramposos sino por que engañas a todas las mujeress que caen en tus manos..." La diosa estaba fuera si, si seguía dándome con el dedo me haría un agujero en el pecho... así que hice lo que todo hombre hubiese hecho en mi situación...

La abracé con fuerza y la besé mientras le decía... "no te preocupes si he hecho algo mal te compensaré..."

Horas después estabamos dormidos en el suelo, ella acurrucada contra mi pecho como un gatito... tenía miedo de molestarla... había sido distinto... divino... aunque costó que se calmase, y más sin conjuros de fortalecimiento... pero lo hice lo mejor que pude...

Cuando se despertó yo ya estaba poniéndome la armadura...

"Vuelve a prometerme que visitarás mis santuarios y me rezarás de vez en cuando..." Mierda no solo tenía que luchar contra una Elfa mercenaria experimentada sino que añadía a mi acerbo personal una grupie obsesionada conmigo...

"Te lo prometo estate tranquila... te visitaré y te rezare a menudo..." contesté sin pensar...

"Como me vas a rezar si no me has preguntado ni mi nombre... eres de ese tipo de hombre que tratas a las mujeres como basura... las coges y las olvidas... soy muy antigua como para que me engañen tipos como tu..." El berrinche comenzaba de nuevo, así que desaté mi armadura de nuevo y fui a ofrecerle el consuelo que necesitaba... Esto parecía que sería largo...

La diosa de la magia se llamaba Vania... además de consolarla también me interesé por su historia o eso fingí, de este modo poco a poco se fueron calmando sus continuos ataques... Solo era una pobre muchacha que se sentía sola... las diosas también sufren, tienen carencias y se sienten solas...

Tardó más de lo que esperaba pero cuando Vania ya pudo confiar en mi, procedió a darme las recompensas por mi desempeño en el santuario, fueron mucho más de las que me esperaba, para cuando terminamos y nos despedimos ya no era el mismo novato que minutos antes...

 

"Data, ahora si hemos terminado por fin con el tutorial..."