Parte de la verdad

Anke subió desde la ventana francesa de su habitación, había estado en el patio segundos antes de llamarla. Eileen abrió la boca pero no salió ningún sonido de ella, no estaba segura de cómo y que preguntar primero. Y no hizo falta, Anke la observó unos segundos y dijo: -"Ya llegó Lua, ¿No?" Eileen abrió los ojos atónita y casi al instante Lua tomó el control -"¿Annius?.." se podía escuchar el temblor en su voz. La serpiente parecía sonreír, o al menos en la imaginación de ambas así era -"Se que ambas tienen muchas preguntas sin respuestas, solo puedo decirles que sí, su teoría es cierta, Annia, Annius y Anke, somos lo mismo; nombrada como su guardián, se me encargó guiarlas y protegerlas hasta donde llegue mi límite. No puedo darles más explicaciones, al menos no por el momento. Pero con el tiempo lo descubrirán, no me hagan más preguntas porque no puedo responderlas"

Ambas tuvieron su mente en blanco, habían pensado en muchas posibles respuestas, pero nunca pensaron en esta. Todavía tenían la necesidad de intentar sacar más información de ella, pero se contuvieron. Por alguna razón sentían que si la serpiente terminaba respondiendo más de lo que debe, tal vez nunca volverían a verla. No podían explicar ese sentimiento, pero decidieron seguir su instinto que les ha salvado la vida muchas veces, al menos no pueden arriesgarse a perderla otra vez. -"Entonces... ¿Cómo prefieres que te llamemos ahora?" preguntó Lua/Eileen, aunque estaban nerviosas, no pudieron evitar sentirse felices. Lua recuperó a Annius y Eileen recuperó a Annia.

-"Anke es mi nombre ahora, así que llámenme así" respondió la serpiente con un tono suave que no podía ocultar su amor.

-"Anke... ¿Puedes decirnos que eres ahora? Quiero decir, ¿Eres una serpiente o humana?" preguntaron con duda.

-Ahora soy una serpiente, una criatura mágica en eso" respondió.

-"¿Quieres decir que no volverás a ser humana?"

"-Lua..." -suspiró- "nunca digas nunca, el universo es enorme y siempre puede ocurrir algo fuera de planes, nada está escrito. Por el momento solo seré una serpiente, no esperes nada por favor"

La niña suspiró -"Está bien, tenía que preguntar...".

Finalmente después de tener una larga conversación de reencuentro, bajaron las escaleras para desayunar. Su padre estaba leyendo el periódico mientras su madre parecía concentrada haciendo dibujos en una esquina del comedor, su tío estaba desaparecido, lo más probable es que aún este durmiendo. La escena se sintió extrañamente cálida. -"Buenos días" exclamó Lua con una gran sonrisa.

Maureen levantó su mirada hacia ella y corrió hacia la cocina mientras gritó -"Buenos días, princesa". Massimo dejó el periódico a un lado, se acercó a ella y le besó la frente -"Buenos días" sonrió.

Segundos más tarde, apareció su madre con muchos platos en sus manos, le traía el desayuno. Eileen al verla dejar todo en la mesa, se sentó y comenzó a comer, mientras comía parecía perdida en sus pensamientos y de repente levantó la mirada hacia sus padres, -"Lua robó mi cuerpo y durmió con ustedes, así que tienen que dormir conmigo esta noche" reclamó un poco ofendida y con celos no ocultos en sus ojos. Lua en el espacio del alma no pudo evitar palmear su frente, se fue, su barco se ha ido...

Ambos adultos estaban sorprendidos y confundidos, no entendían de que estaba hablando su hija, Eileen pareció darse cuenta de su error y sonrió avergonzada -"Lua es mi otra personalidad..."

-"..."

Segundos después:

-"!!!!!"

-"¿Otra.." preguntó Maureen.

-"Personalidad?" terminó su padre.

Después de una larga explicación, los tres adultos parecían perdidos. Si, su tío había llegado en algún momento y se unió a la charla. Ofrecieron llevarla al Hospital San Mungo e incluso a algún hospital muggle para ayudarla a saber que le ocurre y cómo puede tener dos personalidades tan diferentes entre sí. Solo había pasado un día pero los tres ya habían notado la diferencia en la niña, después de todo, es el tesoro en la palma de la mano de todos ellos, podían percartase aunque faltara un solo cabello de su cabeza. Quiere decir que si, habían notado que ambas son muy diferentes entre sí, como el blanco y negro, hielo y fuego y muchos ejemplos más. Pero creyeron que el cambio se debía a qué era su primer cumpleaños en familia, ahora parece que no era así. Estaban muy preocupados pero Eileen les aseguró que no había nada malo con ella, con el tiempo volverían a ser una. Aunque no estaban del todo calmados lo aceptaron, Anke habló con su padre sobre algo que no pudieron escuchar y éste hablo con su madre y su tío. Este acontecimiento fue el que los convenció de que todo estaba bien, suspiraron aliviadas aunque sentían curiosidad por saber que fue lo que le dijo Anke a su padre. Pero fue cortado con una sola frase de ella -"No hagan preguntas" se sintieron arrepentidas y se callaron.

Los días pasaban rápidamente, Eileen fue guiada por Anke, al contrario de Lua, ella tenía mayor afinidad con la luz. Al tener su alma dividida en 2, aún podía entrenar su afinidad con la oscuridad, algo de lo que Lua se quejaba porque no tenía mucha emoción por volver a entrenar desde cero. Al comenzar su entrenamiento se sorprendieron de que pudieran practicar el cultivo de otro mundo en este mundo, pero Anke les explicó que no importa a qué mundo vayan, siempre habrá luz y oscuridad; lo que sonaba razonable y no continuaron cuestionando bajo la mirada amenazadora de la serpiente que sugería que no respondería más que eso. Lo irónico entre las dos es que Eileen tiene afinidad por la luz y el hielo y Lua por la oscuridad y el fuego; Anke les dijo que ésta es la razón por la que su alma no se fusionó de inmediato en cuanto Lua murió, no son compatibles entre sí y están en constante lucha, tienen que encontrar por si mismas el equilibrio para poder fusionarse. Lo que negó la teoría que habían pensado anteriormente de fusionarse a los 18 años. Se dieron cuenta de que obtenían algunas respuestas de Anke cuando no preguntaban, y parecía que cuando ciertos eventos ocurrían desbloqueaba el sello para que ella pudiera explicarles. Por ejemplo, notaron que ambas tenían afinidades incompatibles entre sí y Anke pudo decirles la razón de porqué no pueden fusionarse. Parece que tienen un largo camino por recorrer y Lua sentía dolor de cabeza al solo pensar en ello.