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Esclavo de la Oscuridad

El mundo pertenece a los humanos, pero lo que ellos no saben es que en las oscuras horas de la noche hay un mercado de esclavos que ocurre en el bosque. Nadie sabe de él excepto aquellos que son ricos y pagan una cuota por la membresía. A medida que el mercado de esclavos se traslada de ciudad en ciudad, finalmente alcanzan su destino donde llaman al comprador para hacerle saber que han llegado con algunas mercancías intrigantes que podrían interesarle. La esclava que fue comprada del mercado de esclavos en medio de la noche fue llevada a su nuevo hogar por su primer Amo. Se siente segura con él pero no recuerda nada de su pasado y no sabe qué secretos acechan en su mente. El Amo que compró un nuevo juguete pensó que ya que ella era lo que estaba buscando. Esperaba que ella durara más que las demás, pero lo que no esperaba era que el pasado volviera a él después de cien años sin él. Con sus nuevos recuerdos se ablanda, pero solo por ella, ya que ahora ella es todo para él, no se detendrá ante nada para protegerla y ayudarse mutuamente a recordar su pasado juntos. Extracto —¿Quién te crees que eres? Te haré echar de esta zona si sigues merodeando por aquí. Justo estaba charlando con mi futuro hombre cuando tú me interrumpiste —la chica señaló a Yuki culpándola. —Cariño, ¿ibas a buscar a alguien más cuando ya me tienes a tu lado? —Yuki se giró y presionó su cuerpo contra el suyo. Restregó su pecho en su costado para mostrar que él era de ella. —Sabes que no puedo reemplazarte, Liliana. Solo les estaba diciendo a estas señoritas que no podrían tener el bolso que encargué especialmente para ti —movió su mano a su trasero y apretó. Las damas parecían avergonzadas por un momento. —¡No, conseguiré lo que quiero! ¡Quiero a ese hombre y ese bolso! —La dama gritó y su cara se volvió roja como un tomate. Yuki giró la cabeza. —No puedes controlar los sentimientos de alguien. No puedes compararte conmigo de ninguna manera, forma o figura —Yuki giró la cabeza con elegancia. —Ah, ¿es así? ¡ENTONCES TE RETO A UN CONCURSO DE BELLEZA! Hoy hay una competencia por la reina de la playa y si ganas te dejaré en paz y me inclinaré ante ti, pero si gano yo quiero ese bolso y a tu hombre! La portada es un Producto encargado y todos los derechos pertenecen a mí y al artista que lo creó para mí.

Shirokitsune · Fantasy
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213 Chs

15 Ven a ver dónde lo encontré

Translator: 549690339

Yuki lo observa irse. No se perdió su ojo contrayéndose. —Oh, tú sabes que este libro es sobre vampiros. Apuesto a que trató de traducirlo y fracasó miserablemente —se ríe mientras pasa su mano cariñosamente sobre el libro con una sonrisa en su rostro. Se cortó el dedo y una gota cayó sobre la cubierta del libro. —Como la reina de la noche, te ordeno que tomes mi sangre y reveles la verdad que estás ocultando —hubo un destello de azul y el libro se abrió en la página 251. Su dedo se curó automáticamente. Se acuesta boca abajo con el libro en su almohada y comienza a leer el texto antiguo. —Esto está lleno de la misma información que ya conozco, pero hay una declaración interesante en esta página. Este pedacito de información será útil, pero, ¿necesitaré usarlo siquiera?

Cedric no pudo terminar de traducir el libro debido a esa una frase pero estaba feliz de haber terminado con la mayor parte. Decidió que eso era suficiente por hoy y se levantó y regresó al dormitorio. Retiró los hechizos de la puerta y entró. Observó a Yuki desde la puerta mientras ella disfrutaba del libro. Se acercó sigilosamente a la cama para ver si podía ver en qué se estaba concentrando. El texto antiguo seguía siendo intraducible incluso para él. Agarró un mechón de su cabello. —Pareces estar disfrutando de ese libro, ¿hay algo de lo que debería estar al tanto en los textos? —observa su reacción facial.

Yuki no se había dado cuenta de que Cedric había vuelto a la habitación y sus ojos estaban embotados mientras leía los textos antiguos en el libro. Yuki no se movió cuando él tocó su cabello pero cuando él habló finalmente notó su presencia en la habitación. —¿De dónde salió este libro? Han pasado más de doscientos años desde la última vez que lo vi —cerró el libro y lo miró a los ojos. Su expresión era oscura y teñida de tristeza. —Pensé que era un libro falso pero es verdadero. Este es mi libro.

Cedric no pudo ocultar la sorpresa en su rostro. —Estaba en esta mansión cuando la compré. Me llevó seis meses solo traducir el título. ¿Esto significa que puedes leer el libro y lo reconoces? Pasó la mano por su mejilla. —Podría mostrarte dónde encontré el libro en la mansión si eso ayuda.

—¿Ha estado aquí todo este tiempo? Este es uno de mis libros así que por supuesto, puedo leerlo, Amo Cedric. Pasó la mano por el libro. —No sé si sería prudente a menos que vacíes la casa de los mortales. Sería trágico si pierdo el control y ataco a alguien mientras exploro el área donde el libro se ocultaba. Sus ojos finalmente se enfocan. —Quiero ir a donde se encontró este libro, pero probablemente tendrá el hedor de sangre allí.

—Enviaré a todos a casa. —Camina al teléfono y marca el número del mayordomo—. ¿Puedes conseguir que todo el servicio se vaya de casa y vuelva a sus hogares por el resto de la noche, por favor? Quiero estar a solas con mi compañera. Recibió la respuesta de que todos se irían en 15 minutos y luego colgó el teléfono. Se acerca a Yuki y la agarra y levanta su cara hacia su cuello. —Aliméntate ahora antes de que te libere. Así podrás controlarte mejor. —Sabía lo que había pasado en el lugar al que la iba a llevar—. Me pregunto si solo será mi sangre allí abajo o si habrá otros olores de sangre.

Yuki observó tus acciones de cerca. —Parece saber que el área es peligrosa para mí. —Sintió su piel debajo de sus labios y su cuerpo se estremeció. Ella no le responde pero muerde suavemente y bebe lentamente. Puede sentir algo de miedo en él que era intoxicante, haciendo que la necesidad de su sangre fuera aún más deliciosa para beber. Yuki solo bebió lo suficiente de su sangre para apaciguarse. Realmente no tenía hambre de alimentarse. Lamió las marcas del mordisco hasta que cerraron. —Si te ataco más tarde, sabe que no estoy en control de mí misma. Además, trata de mantener el control de cualquier miedo que puedas sentir. Estaré más inclinada a atacarte si capto siquiera un atisbo de miedo. —Yuki se lamió los labios y se levantó de la cama y buscó en el armario algo apropiado para ponerse. Sacó un vestido de sol de color azul pálido y se lo puso.