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Capitulo 7

Luka Kozlov

 

El inició de otro día, veamos que cosas emocionantes pasarán, aunque diciéndolo enserio, no creó que hoy sea un buen día con este clima tan nublado ¿Por qué deben ser así los primeros días de clases? No es que no me guste, pero la idea de que este lloviendo me desagrada un poco, aunque si le vemos el lado positivo podré ir al lado de Chloe y eso si que me gustaría, no es que este diciendo que empecé a sentir algo por ella, solo que si me haría feliz.

 

Esta mañana no me e despedido de mi madre porque no quería que se despertará, solo tomé mi chamarra color café, suéter negro, mi bolso gris y un regalo para ella, claro, también un paraguas. Mientras más voy pensando me doy cuenta que ya estoy cerca de la casa Chloe, una cuadra más y podré verla.

 

Pensé que podría llegar hasta su casa y esperarla en la entrada, sin duda alguna eso me hubiera gustado pero quien iba a imaginar que en vez de eso iba a conocer a su amiga Sofía, bueno supongo que es ella con la que viene hablando, veo que se detienen en la esquina de la calle para despedirse y de repente escucho un grito.

 

- Cuídamela bien oíste.

 

Me sorprendí y al instante contesté.

- Lo haré, lo haré.

 

Deje de ver a la chica y regrese mi mirada a Chloe, parecía una niña pequeña dando pequeños saltos en los charcos con una gran sonrisa, sin duda alguna me sorprendió pero a la vez me hizo feliz.

 

- Hola Luka - Sin dejar de mostrar esa linda sonrisa camino al lado mío -

 

- Hola Chloe.

 

- ¿Por qué traes un paraguas? Si solo es una pequeña llovizna.

 

- Pensé que iba a llover bastante - Claro que no fue por esa razón, solo quería que ambos nos cubriéramos con el mismo paraguas, pero como le digo eso-

 

- Mmm... Bueno si tu lo dices, por cierto, te diría quien era la chica de antes pero ya lo has de saber, ya que eres un chico espía o algo así.

 

- A que viene eso tan de repente.

 

- Y no solo eso, das miedo por todo lo que sabes.

 

Esto último me desconcertó, pero que le iba a ser, ella tenía razón, aunque todas las cosas que vi fueron por casualidad.

 

- ¿Qué es lo que andas en la mano por cierto?

 

- Esto, es un regalo para ti.

 

- Me lo puedes dar - Como si de una niña se tratará cuando pide un dulce lo dijo - Siii.

 

- Hagamos algo, piensa en algo que podríamos hacer hoy y al final del día te lo daré, te parece.

 

Suspiró y contestó.

- Déjame pensar y al salir de clases te diré que podríamos hacer. Apresúrate llegaremos tarde.

 

Empezamos a correr por las calles empapadas de agua y charcos por doquier, nuestras ropas se empezaban a humedecer, pensé en decirle a Chloe que nos detuviéramos pero no fue necesario ya que ella misma lo había hecho.

 

- Y si mejor vamos caminando y abrimos el paraguas - Dijo ella- No es que no me gusté este clima, solo no quiero mojarme más.

 

- JAJAJA como tu digas.

 

Abrí el paraguas y como se pueden imaginar, lo que había planeado esta mañana sucedió y no solo eso, ella tomó mi brazo y empezamos a caminar hacía nuestro destinó, la felicidad no duró mucho porque la escuela ya se veía y Chloe se iba separando poco a poco de mi, todo quedo en completó silencio hasta que dijo esas palabras que hicieron que recordará su mala fama en este lugar.

 

- Será mejor que no hablemos y no nos vean juntos, no quiero que tu también tengas mala fama en este lugar.

 

Sin decir más salió corriendo hacía un grupo de personas que no tuve ni tiempo para decirle que eso no me importaba, que era al contrario, preferiría estar con ella estos últimos meses que me mantendré vivo, pero bien, dejemos esa plática para después ahora debo dar mi mejor presentación en este lugar y que no piensen que soy un chico depresivo y con pensamientos de suici...

 

- Hola otra vez.

 

- Ah... Hola.

 

- Listo para tu primer día de clases.

 

- Creó que si, por cierto tu eres Liam verdad.

 

- ¡Si! Ese mismo soy.

 

- Algo me dice que seremos buenos amigos.

 

- Yo también lo creo. Pero apresúrate, llegaremos tarde a clases.

 

Y aquí estábamos otra vez, a unos cuantos pasos para ese momento incomodó en el que todas las personas tienen sus miradas en mi y debo aparentar ser el chico amigable y sonriente que todas las personas quieren ver. Claro, se preguntarán que por qué lo hago, mi respuesta sería esta.

 

No tengo la menor idea.

 

Sucedió lo mismo de siempre, chicas hablándome, grupos deportivos invitándome a jugar con ellos y muchas personas que desean llevarse conmigo, como dije al inició este día va de mal en peor, aunque tengo la esperanza de que hoy haremos algo nuevo con esa chica que no puedo dejar de pensar.

 

- Luka.

 

- ¿Sí?

 

- No la hagas llorar amigo mío.

 

A que venía eso tan inesperado mientras estamos en clases y por alguna razón sabía de quien se refería.

 

- ¿De quien hablas?

 

- De Chloe, la chica con la que has salido los últimos días, ella es mi amiga aunque ella dice que no, pero no quiero ver que este sufriendo por ti, entiendes eso.

 

- Lo entiendo amigo, no la quiero hacer llorar.

 

Mostró una sonrisa y como si esta plática no hubiera pasado siguió prestando atención a la clase. Quien podría creer, la chica que no le gusta llevarse con las personas tiene buenos amigos y que harían lo que fuera para verla feliz.

 

La clase se empezó a sentir aburrida y mis ganas de salir de aquí iban creciendo, como si de un deseo se tratará entro esa chica con grandes ojeras y pelo desarreglado.

 

- Así que aquí estabas Luka, ven conmigo, ya se que haremos hoy.

 

Qué estaba pasando, esta chica esta loca, no le tiene miedo ni a los profesores de este lugar, me encanta así de atrevida que es.

 

- Señorita Chloe hágame el favor de salir en este instante.

 

- Ya me voy, solo vengo por alguien y sigue dando su tonta y aburrida clase.

 

El profesor se quedó desconcertado por lo que había dicho Chloe y yo, pues hice lo imposible para no reírme.

 

Me levanté y le di una sonrisa a Chloe antes de tomarla de la mano y salir corriendo.

 

[Al mismo tiempo]

 

Chloe Johnston

 

Lo siento Luka por haberte dejado solo en la entrada pero no mereces que te traten como a mi, no soportaría ver a mi luz apagarse, se que todos te van a querer y ya no tendrás tiempo para mi, es lo mejor, pero si me preguntas a mi, desearía que me eligieras y no al resto.

 

- Señorita Johnston, mire al frente y presté atención.

 

Subí mi mirada y no piensen que era una de esas miradas que daría una pequeña y triste niña, no, le di una mirada fulminante que hizo que ella quitará su mirada en mi y siguiera dando la clase. No lo podría negar, esa satisfacción de intimidar a las personas es la que más me gusta y es una de las razones por las que vengo a la escuela.

 

La señora Paula siguió dando su tonta y aburrida clase, claro que era buena maestra y se podría decir que una de las mejores de la escuela pero a mi no me gustaban las clases y siempre obtengo buenas notas aunque ni yo se el por qué, pero ese no era el problema en este momento, le había prometido a Luka que pensaría un lugar y que podríamos hacer después de clases, pero no tengo ni la menor idea y ya me siento aburrida.

 

Vamos Chloe, tu puedes, se que tu puedes, levántate en este momento y di que esta clase no te interesa y que te vas. Di un gran suspiró antes de levantarme y empezar mi búsqueda de aquel chico de pelo amarillo y con perfecto rostro que últimamente no salía de mi mente.

 

- Señora Paula - Di una sonrisa antes de decir la siguiente tontería- Su clase me parece tan aburrida que prefería gastar mi tiempo armando un rompecabezas de cien mil palabras y lo haría muy emocionada.

 

- No toleraré su falta de respetó en mi clase, se podría sa...

 

- ¡Salir! No me lo debe ni decir, yo misma me voy para no seguir en esta tonta y aburrida clase.

 

Tomé mi bolso y salí apresurada de la clase, cada segundo que pasada mi corazón iba incrementando sus latidos y no solo eso, mis nervios subían y sentía un escalofrío por todo mi cuerpo, donde carajos estaba Luka e abierto cada maldita puerta y aún no lo veo, hasta que llegué a la última y lo vi, di un gran suspiró otra vez antes de llamarlo.

 

- Así que aquí estabas Luka, ven conmigo, ya se que haremos hoy.

 

No tengo la menor idea de que haremos y solo me quería escapar de clases, pero como le diría eso, además que todavía esta procesando lo que esta pasando delante de el.

 

- Señorita Chloe hágame el favor de salir en este instante.

 

- Ya me voy, solo vengo por alguien y sigue dando su tonta y aburrida clase.

 

Lo siento pero en este momento siento que mi corazón estallara y solo tengo algo en mente, que el me elija a mi y no a todos. Total ya luego puedo disculparme, no esta bien pero... Apareció esa sonrisa que me gustaba tomándome de la mano y dirigiéndome hacía nuestra libertad.

 

- Nunca pensé que harías algo como esto- Una gran sonrisa se formó en su rostro- Me has hecho feliz.

 

Yo no dije nada, no se si era por mis nervios o la felicidad que sentía al estar con el, aunque también estaba esa pequeñita y simple pregunta que no salía de mi mente ¿Qué carajos vamos a hacer cuando salgamos? No tenía ni la menor idea de que pasaría pero algo era seguro, hoy tendremos un día maravilloso.

 

- Ya estamos afuera, a donde vamos hoy.

 

- Respecto a eso...

 

- No me digas que aún no sabes y que salimos porque te sentías aburrida ahí dentro.

 

- ¡Exacto! Así paso.

 

Dio una gran carcajada y luego me miró.

 

- Sin duda alguna eres una chica rara, aunque yo también lo soy un poco, pero bien, vamos al centro del pueblo, quizás veamos algo que nos emocione.

 

- Si, vamos.

 

Empezamos a caminar y a hablar, este chico es maravilloso, sin duda alguna nadie hubiera hecho lo que hizo haya en la escuela pero bien, aunque quiero seguir recordando ese momento debo enfocarme en el presente.

 

- ¡Luka!

 

- ¿Sí?

 

- Quiero un adorno de gato de los de ahí- Sin darme cuenta e hablado como una pequeña niñita, me di asco-

 

El empezó a reírse y lo que dijo después me dejo sin palabras.

 

- pensé que nunca lo pedirías Chloe, vamos por uno.

 

Nos encaminamos a comprarlo cuando vimos un anunció acerca de un concurso de juegos de bolos y al parecer pensamos lo mismo con Luka porque al instante nos observamos y con un movimiento de cabeza decidimos ir después de la compra.

 

- Señora, puede darnos el adorno de gato mas adorable que tenga.

 

Este chico si me entendía, me daba paz estar con el, quisiera estar así por siempre.

 

- Chloe ¡Ten!

 

- Si, si lo cuidaré muy bien.

 

Mostrando su estúpida y hermosa sonrisa dijo.

- Se que lo harás.

 

- Vamos a ver de que trata el concurso.

 

- Sí.

 

Nos encaminamos hacia nuestro destinó cuando veíamos que muchas parejas iban al mismo lugar, no me digas que esto solo es para parejas porque me muero de la vergüenza. Al llegar observamos que hay unas señoras apuntando a las personas y rápidamente nos dirigimos hacía ellas.

 

- Hola, queríamos apuntarnos al concurso.

 

- Hola, solo deben decirnos sus nombres y si son parejas.

 

- Mi nombre es Luka y el de ella es Chloe, como puede ver somos pareja.

 

Solo me quedaba viendo lo que estaba sucediendo ante mis ojos y más el hecho de que haya dicho que somos pareja y me haya agarrado la mano me emociono mucho.

 

- Los números 31 y 33 van a utilizar.

 

- Perfecto.

 

- Pasen adelante.

 

- Muchas gracias.

 

Lo se, lo se, se que parece que me e quedado muda pero aún estoy procesando que este chico descaradamente haya dicho que somos pareja y aún me lleve de la mano, aunque no me quejó por eso.

 

¡ATENCIÓN PARTICIPANTES, EL JUEGO ESTA A PUNTO DE COMENZAR!

 

Ese anunciado me regresó a la realidad, carajos, pero lo agradezco, no me gustaría andar viendo a mi Romeo con una cara que me daría asco. Soy esa típica persona que muestra cariño y a la vez se da asco por hacerlo.

 

- Chloe, vamos a sentarnos en esas bancas a esperar nuestro turno.

 

- Si, pero aún no sabemos cuales son las reglas del juego.

 

- Hablas de estas.

 

El sostenía un cartel en sus manos, a que hora y de donde lo agarró pues no se.

 

- Ah...

 

- Al parecer es un juego de dos, ambos participantes intentarán hacer el máximo de puntos y los que hagan más ganarán.

 

- Es sencillo.

 

- Si lo es, pero el problema es... Yo nunca e jugado bolos y tu.

 

¡Qué carajos! Pensé que el si sabía, porque yo no tengo ni la menor idea de cómo se juega esto, claro que no le iba a decir eso y como ya han de suponer lo que respondí a continuación, fue lo peor que pude pensar.

 

- Yo si puedo jugar bastante bien- Mostrando una sonrisa arrogante lo dije- Yo te enseñare, no te preocupes.

 

Los participantes empezaron a avanzar y nuestro turno se empezaba a acercar, cada minuto que pasaba era un minuto menos que tenía para aprender a jugar un poco y no quedar avergonzada al frente de todos.

Aaa preferiría que la tierra me tragara en este instante y me botará en otro lugar.

 

¡PARTICIPANTES NÚMERO 31 Y NÚMERO 33 PASEN ADELANTE!

 

Quería llorar, ya no quería estar aquí, lo siento Luka, pero debo salir corriendo de este lugar lo más pronto posible, lo siento, lo siento, espero me disculpes después.

 

- Chloe, divirtámonos, se que no puedes jugar, pero si vamos a dar pena, hagámoslo a su máximo esplendor, te parece.

 

Y claro que me convenció, quien no quisiera pasar pena con una persona que la llena de alegría, mis dudas y mis miedos desaparecieron y una gran sonrisa apareció en mi rostro. A este chico lo quiero para varios años en mi vida.

 

Nos adentramos a la pista de juego como si de grandes profesionales se tratará, este era nuestro momento, ese premio lo ganaríamos a como diera lugar, claro que ni nosotros nos creíamos ese cuento.

 

- Luka, cómo debo agarrar la bola.

 

El empezó a reírse mientras colocaba mis frágiles dedos en la bola.

 

- Así debe ser, enfócate en tirar para la frente.

 

El momento de la verdad llegó, las personas mirarían mi potencial y se darían cuenta que soy una prodigio en los bolos, lo que pensé y lo que sucedió fueron cosas muy pero muy distintas, la bola no siguió el camino recto que había imaginado y salió disparada hacía el otro lugar de juego, la pena me mataba, no quería darme la vuelta y ver todas esas miradas encima de mi.

 

- Fue un excelente tiró Chloe.

 

- Ey, no te burles de mi.

 

- Mira en donde quedó mi bola.

 

Observaba para al frente pero no la encontraba hasta que vi que Luka señalaba hacía atrás, me di la vuelta y la bola estaba ahí, no pude contener mi risa al ver que el era peor que yo.

 

- Ahora eres tu la que se burla de mi.

 

Empezamos a tirar las bolas y ninguna acertaba pero las risas no faltaban, al final solo una bola logró llegar, una de Luka.

 

- Mira eso Chloe e logrado derribar uno.

La emoción y superioridad se podían ver a kilómetros.

 

- Espera y ya verás que te ganaré.

 

Si me pagarían por cada vez que doy pena ya sería millonaria, no e logrado botar ninguno.

 

- Ajá y entonces no era usted la que dijo que iba a ganarme.

 

¡PARTICIPANTES NÚMERO 31 Y NÚMERO 33 PUEDEN SALIR DEL ÁREA DE JUEGO!

 

- JAJAJA mira eso, ni el de los anuncios nos quiere ver jugar.

 

- No le gusta verte jugar a ti es, vio que no botabas ninguno.

 

- Y también a ti.

 

- Vámonos a esperar los resultados.

 

- Quieres que demos pena hasta el final, yo creo que ya es mucho no.

 

- Mmm... Por qué lo dices.

 

- Quizás porque solo obtuvimos un punto.

 

Ambos nos vimos y empezamos a reír a carcajadas hasta que agarró mi brazo y empezamos a correr, a este chico le gustaba escapar de este tipo de situaciones.

 

Entre risas dije - A donde vamos.

 

- Saldremos de aquí.

 

Llegamos a un lugar solitario y nos detuvimos, mi pobre corazón se empezaba a acelerar que sentía que se saldría de mi pecho, de repente se dio la vuelta quedando al frente de mi y en un susurró me dijo.

 

- Ahora te pertenezco.

 

Y estampo sus mojados y suaves labios contra los míos, asiendo que el beso fuera tan placentero que no quería separarme de el, me separe un poco de el para decirle lo siguiente.

 

- Te has robado mi primer beso Luka.

 

- Y tu has recibido el primer beso mío Chloe.

 

Mis mejillas y orejas se empezaban a calentar que no lo pensé dos veces para volverlo a besar y mostrarle que yo tenía el control de la situación. Entre beso y beso el tiempo paso volando hasta que decidimos detenernos y seguir nuestro camino, ninguno de los dos decía nada mientras íbamos tomados de las manos.

 

- Luka... Lo que le dijiste a la señora de los apuntes es verdad.

 

- ¿Lo de ser pareja?

 

- Sí.

 

- Si era verdad.

 

- Entonces ahora somos novios.

 

- Si lo somos.

 

- Por cierto, me darías el regalo que prometiste.

 

- JAJAJA Si, aquí esta.

 

- ¿Una fotografía de un gato?

 

- Es del gato que compré para que lo cuidemos juntos.

 

Este chico cada vez me hacía más feliz, por favor nunca te vayas y ayúdame a vivir.

 

Nota del autor

 

Espero les haya gustado el gran giro que dio la historia.😳

 

A mi me gustó mucho cada escena que pasaba.