Paz...
Todos alaban la paz, una y otra vez he escuchado la añoranza y la glorificación de ella.
Nunca me ha gustado esa palabra, no es que sea caótico o que particularmente ame la guerra, es solo que odio el efecto y poder que esa simple palabra tiene sobre mi. La tristeza que me inunda y el hueco que me deja en el pecho siempre me ha desconcertado, eso me desagrada.
-¿Y bien?
Nege varias veces.
-Simplemente me desagrada la palabra.
No era algo nuevo, toda mi vida habia sido asi, y asi sera hasta mi final.
-Sabes, a lo que me refiero es que no debes callar con todos los problemas.
Ja, todos son asi, finjen como si realmente importara. Me levante, dispuesto a irme.
-No actúe como si importará.