1 capitulo 1: objetivo.

Soy un joven huérfano de 21 años y mi único objetivo en la vida es entrar a la mejor universidad del país para poder decidir mi propio destinó y no dejar nada a la suerte.

Desde que perdí a mis padres, he dedicado todo mi tiempo y a estudiar, tanto así que no recuerdo la última vez que juegue o la última vez que me reí como un niño. No tengo familia ni amigos cercanos, solo estoy yo y los libros con los que estudió. Todo ese arduo trabajo que hice desde que tenía 8 años finalmente está a punto de dar sus frutos. Mañana es el día en qué haré el examen de admisión a la universidad a la que apuntó, estoy nervioso pero preparado. Este es el momento que he estado esperando desde que era un niño pequeño y me prometí a mí mismo que haría lo que fuera necesario para tener mi vida en mis manos. Me siento solo, pero también determinado.

No podía dormir... Mi corazón latía a mil por hora mientras pensaba en el examen de mañana. No era solo un examen cualquiera, era el examen que decidiría mi futuro el examen que . Me levanté de mi cama y salí del dormitorio, tratando de no hacer ruido para no despertar a los otros las otra tres personas con la que comparto habitación en el ostal.

me mudé aquí cuando cumplí la mayoría de edad y me fui del horfanato, este lugar es un lugar barato la noche cuesta 6 dólares, por ellos obtienes un

colchón amarillento que parece una piedra y huele a mugre, un balde de agua para bañarse, un techo sobre tu cabeza y algunos piojos...

decidí quedarme en este lugar ya que era muy barato y podía pagar la noche y me sobraría dinero para comer algo. para ganar algo de dinero voy al mercado y trabajo descargando los camiones que llegan con mercancía la paga es una mierda comparada con el esfuerzo que se realiza, pagan 1 dólar por cada 5 bultos que lleves a las bodegas. siempre trabajo dos horas al día en el mercado y consigo entre 10 o 12 dólares si tengo que ir a las bodegas más cercana o las que están un copo más lejos. después de recibir mi paga regreso al ostal para bañarme y luego me dirijo a la biblioteca todo el día, he repetido esta rutina desde que cumplí los 18 y me mudé aquí.

Salí al patio trasero del hostal y me detuve un momento para admirar las estrellas. Era una noche clara y el cielo estaba lleno de luces brillantes. Me recosté en un banco y cerré los ojos, tratando de calmar mi mente.

Pero en lugar de ayudarme a relajarme, mis pensamientos mi me te me llevó a la época en el horfanato, recordé las burlas de los otros niños, recordé cómo se reían de mí porque siempre estaba leyendo libros y no hacía nada más. Nunca había encajado con los demás niños, siempre había sido diferente. Pero una vez más hoy, mientras miraba las estrellas, me di cuenta de que eso no importa. Lo que realmente importa era que yo tenía un sueño y que estaba dispuesto a luchar por él.

Volví a pensar en el examen de mañana y sentí un poco de calma. Sabía que había estudiado tanto por este día y no permitiría que malos recuerdos nublaran mi mente, entonces, con una nueva determinación, me levanté y volví al dormitorio. Ya era hora de dormir y estar listo para el día de mañana.

El día esperado había llegado. Tomé el tren temprano y me dirigía hacia mi destino. Mi corazón latía con fuerza mientras miraba la ventana del metro, podía ver mi reflejo allí. El cristal reflejaba a un joven delgado de pelo negro, ojos cafés, nariz fileña y cejas pobladas, en su mirada se podía ver un fuego que era casi palpable.

Finalmente, llegué a la estación, la universidad que estaba a 20 minutos a pie aproximadamente.

Me bajé del tren y miré al norte y luego camine, después de alguna tiempo pude ver una gran planicie Verde al lado de la carretera y a muchos jóvenes que al igual que yo nos dirigimos al campus. luego de un tiempo lo ví. delante de mí se alzaba un gran letrero que en una fuente elegante decía .... universidad nacional de Córdoba.

luego de adentrarme un poco me detuve en el centro del campus y miré a mi alrededor, maravillado por las impresionantes instalaciones de la universidad. Los edificios altos y modernos se erguían ante mí, con sus ventanas reflectantes y arquitectura elegante. Los jardines estaban cuidados y llenos de flores y árboles, creando un ambiente relajado y acogedor.

Caminé por los senderos pavimentados, admirando las fuentes y las esculturas que adornaban el campus. Había una gran cantidad de bancos y áreas verdes donde los estudiantes podrían sentarse y disfrutar del sol.

Llegué a la biblioteca, que era uno de los edificios más grandes e impresionantes de la universidad. Era un lugar silencioso y tranquilo, lleno de libros y computadoras. Me detuve un momento para imaginarme a mí mismo sentado en una de las mesas, estudiando y preparándome para mi futuro.

Continué mi recorrido por el campus, visitando los laboratorios de ciencias, la piscina olímpica y el campo de atletismo. Cada instalación estaba diseñada para proporcionar a los estudiantes la mejor experiencia académica posible.

después de mi pequeña camita finalmente, llegué al salón donde se realizaría el examen de admisión. Me dirigí hacia mi asiento asignado y me senté, mirando a mi alrededor era posible palpar a simple vista la tensión que estaba en el aire. El lugar estaba lleno de estudiantes ansiosos, todos con una misión similar a la mía: conseguir una puntuación lo suficientemente alta para entrar a la facultad de ingeniería de la universidad nacional de Córdoba.

luego de un tiempo el profesor a cargo del examen llegó, era un hombre de mediana edad con una gran barba y una sonrisa amistosa, subió al escenario y se presentó. Comenzó a hablar con un tono amistoso y con palabras de motivación, nos dijo que habíamos llegado hasta aquí porque éramos los mejores y los más preparados.

"El examen de hoy es una oportunidad para demostrar lo que valen", dijo. "Pero es importante recordar que no se trata solo de obtener la puntuación más alta, sino también de aprender y crecer como personas".

Después de su charla motivacional, el profesor nos explicó los detalles del examen.

Dijo que la puntuación necesaria para aprobar el examen y entrar a la facultad de ingeniería era de 85 puntos sobre 100 y cada pregunta según su nivel de dificultad te daría diferentes puntos.

También nos dijo que el exámen contenía 320 preguntas, 150 de matemáticas, 100 de física, 50 de inglés y por último 20 de comprensión lectora y te mismos 5 horas para terminar.

Finalmente, el profesor nos deseó suerte y se retiró del escenario. Yo respiré hondo estabilice mi ritmo cardíaco y me concentré en las hojas sobre mi escritorio, preparándome para el desafío que tenía por delante. Era hora de demostrar lo que valía y luchar por mi sueño en estas cinco horas de exámen.

con los latidos demi corazón ya estables me concentré y comencé a leer la preguntas de matemáticas cuidadosamente, tratando de entender cada detalle y recordar la información que había estudiado.

Leí detenidamente la primera pregunta, tratando de comprender. La pregunta decía:

"Calcula el área de un círculo de radio r = 7 cm."

A) 153,94 cm^2

B) 44,75 cm^2

C) 22,36 cm^2

D) 47,12 cm^2

Tomé un respiro profundo y traté de recordar cómo se calculó el área de un círculo. Sabía que era necesario utilizar la fórmula A = πr^2, por lo que tomé mi lápiz y escribí los cálculos en la hoja.

Después de unos momentos de cálculo, llegué a la respuesta 153,94 cm^2 y comparé con las opciones dadas. Me alegré al ver que coincidía con la opción A.

Marque mi elección con confianza y continué leyendo las siguientes preguntas, ansioso por demostrar mi conocimiento y lograr mi sueño de entrar a la mejor universidad del país.

Pasé de una pregunta a otra, trabajando con rapidez y precisión. La tensión en el aire se hacía cada vez más palpable, y se podía escuchar el sonido de las páginas girando y los lápices escribiendo.

Pero a medida que avanzaba en el examen, comencé a sentir una sensación de incertidumbre. Algunas de las preguntas parecían desafiantes y no estaba seguro de cómo responderlas. Sin embargo sabía que era capaz de hacerlo yo había pasado toda mi vida preparando para este momento y no iba a permitir que los nervios truncaran mis sueños

*** 5 horas después ***

Finalmente había terminado el examen de admisión. Tomé un respiro profundo y sonreí al pensar en todo el arduo trabajo que había hecho para llegar hasta aquí. Con cuidado, doblé la hoja y la deposité en la pila de exámenes entregados.

Sin embargo, mientras salía del salón de examen, comencé a pensar en algunas de las preguntas del examen.

"En un circuito eléctrico, ¿qué factor afecta la cantidad de corriente que fluye a través de él? "

"Si tenemos un conjunto de datos con una media de 100 y una desviación estándar de 10, ¿cuál es el rango de valores que incluye aproximadamente el 74% de los datos?"

"Si una fuerza de 52 newtons actúa sobre un objeto durante 26 segundos,¿cual sera su aceleración?"

No pensé mucho sobre las preguntas de inglés y comprensión lectora ya que eran básicas, en compresión lectora simplemente leíamos un texto y nos preguntaban algo sobre el texto que no estaba implícito en él, por el contrario en inglés simplemente teníamos que completar palabras y traducir pequeñas conversaciones y decir de qué hablaban.