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Tsukuro wo Monogatari

Todos tenemos algo que ocultar. Desde secretos hasta nuestros mas oscuros pensamientos, personalidades distantes e irreconocibles que están dentro de nosotros. Por cierto, Takafuji Eita es un chico normal y corriente que se ve arrastrado por los malentendidos que causa, todo se debe a una serie de incidentes hace dos años que hicieron que toda una ciudad odiaran a un solo chico. ¿Qué fue lo que hizo hace dos años? Tranquilo, puedes viajar dos años en el pasado para vivirlo en carne propia, MC-kun

Keiichi_Otoshigami · Fantasy
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Como en toda historia improvisada, no hay titulo para este capítulo

Ah~ ah~

Con esa introducción no estoy explicando nada... ni yo mismo estoy seguro de que rumbo tomara esta historia...

Y como dato para agregar, esta es la autobiografía de Takafuji Eita, desde este día, o quizás "Ese día", pues una historia empieza cuando ocurre algo ¿No es cierto?

Pues estoy seguro de que algo ocurrirá hoy.

bueno, soy un estudiante completamente normal, tengo 15 años, 3er año de secundaria...En la sinopsis o quizás el prólogo que me colocaron, pusieron algo sobre la juventud, pero a mi me vale nada, no busco ponerme dramático, ni siquiera pretendo ser romántico, solo quiero vivir en paz...

Pero si algo me ha enseñado el anime y el manga es que: "Cuando mas quieres vivir en tranquilidad, algo te ocurrirá, y tus días dejaran de ser monótonos".

Ojala si eso aplicara en la vida real ... ugh... Acaba de salirme una lagrima.

La verdad es que dije eso desde que entre a secundaria, y todos los días son repetitivos, como me gustaría que mis días fueran diferentes...

Mi situación es la siguiente... Mi capacidad de narrar es un poco confusa, no soy un genio literario, pero al menos quisiera escribir algo sobre mi aburrida existencia, no estoy mal eh?

Me río un poco para mi mismo*

Me encanta bromear sobre este pedazo de papel, aunque sea imaginario, porque con mi mente es mas fácil recolectar todos los datos que vaya mirando, mejor que tratar de recordar y ponerlo en un papel... cosa que también hago.

El febrero ya paso... como siempre los mas azucarados de la clase, se regalan chocolates... ¿que pasa conmigo?, no recibí ni uno en estos últimos tres años, creo que es por la maldición de mi aspecto, no destaco para nada...

Ahora estamos en marzo, donde los últimos días de la secundaria se van como si fuesen espuma de jabón, lo que mas espero... es la semana de vacaciones.

Advertencia, no pretendo confundirte con mi forma de narración, hace poco hice parecer que paso un mes, pero en realidad fueron unos cinco segundos de pensamientos aleatorios, solo un pequeño fluir de ese verdadero yo...

Antes de dar un paseo por la escuela en mi ultimo día de secundaria, voy a decir unas cuantas cosas extras sobre mi...

Ciertamente, durante un tiempo poseía una enfermedad psicológica, el "Síndrome de Octavo Grado", en esos momentos de gloria instantánea vivía con aires de grandeza, creía que tenia habilidades especiales, forme un gran grupo de personas y luego la realidad me golpeo con toda su fuerza, y fue realmente cuando comprendí... "No existe en este mundo, algo parecido a la magia".

Me distancie del grupo y me dedique mas a los estudios, pero la sociedad, bueno, para ser precisos, mis compañeros de clase aun me rechazaban por los destrozos que había causado cuando era un "Chunnibyou".

Una persona, que se creía mejor que los demás en el pasado, que la apariencia no sea la mas favorable y que hayas causado problemas, eso te volvería sin dudas un enemigo de la sociedad actual, pero puedo decir con certeza de que he cambiado.

Y al final, ya estoy en mi verdadero punto de salida, por fin podre ir a la preparatoria, donde no conoceré a nadie y podre rehacer de nuevo mi vida escolar sin hacer ninguna estupidez...

Ahora cuando la Golden Week esta a punto de comenzar, me empiezo a sentir nostálgico, pensando en que jamas volveré a pisar este lugar.

Pasando ligeramente por el portón principal, se puede ver claramente el anuncio que dice: "Ceremonia de Graduación", todos los estudiantes que estaban en mi grado se ven muy felices por cumplir su meta de pasar a la Preparatoria, donde estudiaran por tres años mas.

No intento ser para nada retorcido, pero la felicidad ajena a veces me da envidia, y cuando recibes el trato que yo recibo, es como querer decirles a todos con mis propias palabras, en voz alta y entendible...

"Váyanse al demonio"

Sus sonrisas son enfermizas, no soporto su felicidad, no soporto que me hagan a un lado, incluso, los amigos que tenia en el grupo, todos me abandonaron...

Pero entonces pienso un poco mas profundo y me encuentro con que, fui yo quien los abandono primero, como quisiera disculparme, ah~ ah~ mi cabeza todavía sigue hecha un lío, creo que puede ser una secuela de mi enfermedad psicológica.

Después de llegar al casillero, donde jamas volveré a cambiarme de nuevo los zapatos subo las escaleras hasta la segunda planta, los pasillos se ven un poco mas pequeños que antes, eso quiere decir que ya he crecido.

Hasta recuerdo que el primer día le temía a las escaleras, porque pensaba que me caería.Cuando estaba perdido en mis recuerdos varias personas pasan a mi lado felicitándose unas a otras.

[Oh, felicidades Eita-kun]

dijo una voz suave, era una chica.

[...]

¿Eh?... ¿alguien felicitándome a mi?

[...]

[¿Eita-kun?]

la voz persiste, pero aun no he visto su cara, no se de quien se trata...

Mis ojos dejaron de ver un momento el suelo para ver quien era la persona que me hablaba, y como era de esperarse, era la única persona con la que podía hablar después de los incidentes que causé...

[...]

[Felicidades a ti también, Saotome-san].

dije con una voz un poco desanimada e indiferente, ella se da de cuenta y frunce el ceño.

[aahh, hasta me estoy esforzando por hablarte, muestra un poco mas de entusiasmo basurero andante]

Dijo Saotome-san en un tono completamente diferente rascándose la cabeza con furia.

[...]

Aquí es cuando soy todo un narrador y digo... esa chica no es lo que parece, puede ser linda, sus medidas pueden ser casi perfectas, puede ser la persona mas amable de todo el colegio, pero un sabio una vez dijo, "Todos tienen un secreto que ocultar"...

Y eso es precisamente de lo que quiero hablar, Saotome Ayumi, 15 años de edad, cuerpo muy bien formado para ser de esa edad, Ojos azules, muy brillantes, labios de cereza, cabello castaño oscuro, cara angelical...Pero todo eso se oscurece por culpa de lo que lleva dentro.

[Como es de esperarse de la presidenta de la clase, ¿no es un problema mostrar tu verdadero "yo" en este lugar?]

Pregunte de forma sarcástica sonriendo de forma superficial.

[Vaya, el basurero se preocupa por mi... no te preocupes, casi todos están en el lugar de la ceremonia... ¿y que te trae por aquí?]Pregunta Saotome-san con indiferencia, haciendo un gesto con el cabello y su dedo.

[Nada, solo estaba dando el ultimo paseo, ya que esta sera la ultima vez que pise este lugar]

Respondo con voz de delincuente juvenil.

[Ah?~ ¿Podrías dejar de usar ese dialecto? realmente no te queda para nada]

Dice mientras me da la espalda y empieza a bajar las escaleras.

[No vayas a llegar tarde a la graduación, o yo misma me encargare de que te cocinen y te tiren a los perros]

Dice con su voz inocente típica y se va.

¡Esta chica!... No tengo palabras tan fuertes para describirla en este momento, pero aun así estoy agradecido con Saotome por haberme salvado de ese mundo de mentira, aunque ella sea un objeto potencial de peligro andante que también posee la enfermedad que yo tuve...Si, como estas pensando, bueno, si no lo estas haciendo te iluminare...

Ella sufre de múltiple personalidad, por eso la amabilidad y hostilidad que posee en contra mía, aunque no estoy seguro de por que su personalidad hostil se manifiesta solo cuando esta conmigo... esos síntomas también se pueden presentar mientras tengas el "Síndrome de Octavo Grado".

Espero que no se me vaya a contagiar de nuevo...

Cuando termino de poner mis pensamientos en orden (Aunque mi cabeza sigue siendo un lió) vuelvo al mundo real y me encuentro con que ya es lo suficientemente tarde como para que la presidenta me eche a los perros, así que camino lo mas rápido posible hacia el lugar de la graduación, cuando de pronto...

Choqué accidentalmente con algo...

Caí en dirección contraria de hacia donde caminaba, sacudo mi cabeza y abro mis ojos para evitar una confusión, y cuando logro distinguir con quien fue el choque, mi piel se puso pálida, mi cuerpo un poco frío, mi habla completamente bloqueada y unas ganas incomparables de salir huyendo...

[Takafuji... Eita...]

Una voz tan fría como el Ártico y el viento Polar, ademas de la pausa que hizo al nombrarme, me congelan en el acto.

[Minase-san...]

Es lo único que puede decir mi voz temblorosa...

Su nombre es Minase Kaori, tiene mi edad, cabello completamente negro, ojos azules, su pecho es una talla B, pero tiene un gran trasero...

Si tienes dudas de por que se esos datos lo diré...

Culpo a mi enfermedad que causo ese incidente en el que ella dijo que no podría casarse por mi culpa y que debía tomar la responsabilidad...

No paso nada, lo juro... bueno, lo único que recuerdo es un cuerpo sin imperfecciones grabado en mi mente, y un gran golpe en mi cabeza que dolió a muerte.

[Estas equivocándote, Querido...

cuando dijiste Minase-san, ¿quisiste decir en realidad, Kaori-san?]

Una pregunta que lanzo un gélido viento que me traspasaba el hígado.

[S Si... Kaori-s san]

Mi dolor de estomago se hace mas grande cada vez que estoy cerca de ella.

Hay una razón por la que siento esta incomodidad irracional cuando estoy en frente de ella, y es...

[Ojou-sama, le ayudo a levantarse]

Un hombre musculoso vestido de gala aparece en mi campo de visión, le da la mano a Minase-san, y cuando me mira, de alguna manera puedo sentir su sed de sangre.

[Muchas gracias Alexander, vuelve a la entrada principal, estaré bien]

Con una voz realmente amable se dirige a su mayordomo... quizás guardaespaldas, y el me mira, frunce el ceño, y se va a regañadientes.

Miro la sonrisa de Minase-san y veo que ella también puede sonreír de manera dulce... con otras personas que no sea yo.

[Por cierto, Takafuji Eita, hoy tengo un presente especial para que no me olvides]

Nuevamente el pasillo se congela, por alguna razón soy incapaz de moverme...

[Es justamente como te gustan]

Sonrie...

Ella de forma calmada se inclina hacia adelante, y pasa su dos manos por debajo de su falda llegando a sus caderas, mi corazón empieza a decir peligro como loco, pero mi cuerpo no responde...Mis ojos pueden ver claramente sus hermosas medias largas, y como ella lentamente se baja las panties...

[Quiero irme, quiero huir... no quiero estar aquí...]

Esas son las únicas palabras que me cruzan por la mente...

Después de unos treinta segundos de espectáculo, ella tiene en sus manos unas panties blancas con rayas azules, su rostro esta completamente rojo, pero de alguna manera puedo ver como se esfuerza...

[Esto es para ti]

Dijo con una voz casi inaudible... su cara estaba completamente roja, sus ojos miraban a otro lado, Por otro lado yo seguía congelado sin saber que hacer.

Ella se acerco avergonzada, tomo mi mano, y dejo las panties en mis manos en silencio y se marcho...Si alguien se entera de esto, en especial su familia, me mataran...Ahora no se como decirle a Minase que lo que paso en aquel entonces fue un malentendido...No se cuantas veces he llorado desde mi corazón en este capitulo.

[...]

Bien, ahora que ella se ha ido, su hechizo de congelamiento se ha terminado, ¿ahora que rayos haré con estas panties de señorita?...

Algún día se las devolveré y me disculpare de una vez por todas.

[...]

Voy caminando a toda velocidad hacia el lugar de graduación (De nuevo) y como un narrador de alto nivel que soy, voy a contar algo de interés natural...

La familia de Minase Kaori, es una familia que tiene al menos unos cuatrocientos años de historia, la razón de mi temor hacia ella, es porque su familia esta conformada por la cabeza de los yakuza, y es la razón por la que me es imposible decirle un "No" a esa chica, así que en un futuro no muy lejano, puede que muera a manos de una familia yakuza.

Después de ese momento incomodo, guardo las panties de Minase en mi bolsillo derecho, y finalmente llego al sitio de graduación.Puedo agradecer que haya llegado aquí justo a tiempo, la presidenta de la clase me mira fijamente y luego como si me ignorara mira al escenario.

Los minutos pasaron lentamente mientras pasaban los estudiantes a buscar su titulo, cada vez que decían un nombre habían ovaciones en todo el lugar, se podía sentir en el ambiente el fruto del esfuerzo empleado para alcanzar esta meta.Al final, (bueno son como unos 300 estudiantes, y soy el numero 148) llego mi turno de pasar al escenario, y como era de esperarse, las ovaciones que antes se escuchaban ya no podía escuchar ni una...

Este momento, uno de los momentos mas importantes de mi vida, se volvió completamente incomodo, pero este es el momento indicado.

[Este... ¿podría darle unas palabras para mis compañeros de clase?]

Le pregunte a la profesora encargada de llamar a los estudiantes.

[Esta bien, es bueno saber que has cambiado desde aquella vez]

Dijo la profesora con una sonrisa.

[No es necesario que me lo recuerdes, sensei (-.-)]

[No me siga recordando esos incidentes por favor sensei]

Dije con una voz silenciosa.

[Este... Buenas tardes a mis compañeros graduandos, en este momento, cuando me dan el derecho a la palabra, quisiera expresar mi agradecimiento a todas las personas de esta escuela por haberme tenido tres años, de las cuales hoy finalizo de forma exitosa.Todos sabemos que la raíz de todos los incidentes ocurridos en los años pasados yo fui el causante, pero me siento muy apenado por eso, en ese momento fui realmente un idiota, pero aquí estoy, afrontando la culpa.Pero aun así, estoy feliz de haberme graduado con ustedes]

Estaba completamente nervioso, pensé seriamente sobre si ese discurso improvisado podría ayudarme a recuperar mi reputación, pero nada ocurría...

Paso un segundo, luego dos, finalmente de un silencio de diez segundos pasaron...

Hasta que dos personas empezaron a aplaudir, esas dos eran Minase y Saotome, al escuchar sus palmas los demás no evitaron hacerlo también.

Cuando el momento de tensión paso, decidí secarme el sudor de la frente con mi pañuelo, así que lo saque de mi bolsillo derecho...

Ese fue el ultimo incidente que ocurrió en la secundaria por mi culpa...

Todavía sigo preguntándome hasta el día de hoy...

¿A quien se le ocurre secarse el sudor de la cara con unas panties usadas?