La despedida del Zar

Unas horas después, de vuelta en la oficina de Guillermo con Zaragoza a un lado, llamaría al Zar.

''Bien señor Zar, quisiera preguntarle ¿por qué nos está haciendo retirarnos en plena ofensiva?''. Dice Guillermo hablando al teléfono.

''Preguntas ¿por qué?, ¡porque eres un traidor y mentiroso!''. Dice el Zar.

''¿De qué habla?''. Dice Guillermo confundido.

''No te hagas el estúpido, los británicos me informaron como compraste Alaska por su gran cantidad de recursos que en ningún momento nos informaste que tenía, te aprovechaste de nosotros, por lo tanto no puedo confiar en alguien así como aliado''. Dice el Zar.

''No es nuestra culpa que usted no haya tenido la capacidad de conocer sus terrenos y aprovecharlos, yo page por ellos y no mentí en ningún momento, usted solo está desquitando su frustración en mí, le recuerdo que esté hablando por un teléfono es gracias a mí''. Dice Guillermo.

''No me importa lo que tengas que decir, nuestra alianza esta rota,lástima que hable con mi hija por teléfono hace rato y dice que aun así no te abandonara y se quedara contigo, no pensé que sería una traidora''. Dice el Zar, esto último haría sonreír a Guillermo.

''Bien, pero sus fuerzas militares tienen que devolvernos todo el armamento que les asignamos a las fuerzas rusas''. Dice Guillermo.

''No lo creo, el armamento asignado a soldados nuestros nos lo quedaremos como compensación del engaño''. Dice el Zar.

''¡No!, nos devolverá cada una de nuestras armas si no quiere repercusiones, no me importa ir a la guerra con usted, le está robando a mi país y eso nunca lo perdonaré''. Dice Guillermo.

''Pues intentalo, el Imperio Ruso no caerá sin pelear''. Dice el Zar colgando.

''Guillermo...''. Dice un dulce voz.

''Anastasia, ¿escuchaste todo?''. Dice Guillermo.

''Sí... ¿Iras a la guerra con mi padre?''. Dice Anastasia.

''Si, pero planeo acabar con esto rápido temo, que tendré que acabar con su vida de un solo ataque''. Dice Guillermo.

''¡Pero es mi padre!''. Dice Anastasia preocupada.

''Lo sé, pero entiende, él no entiende razones, está dispuesto a mandar a morir a cada uno de sus ciudadanos a una guerra con nosotros que sabe que es imposible de ganar para él''. Dice Guillermo.

''P-pero''. Dice Anastasia sollozando.

''Anastasia te pido no como un noble o alguien de poder, sino como tu amado y un humano, no dejes que tu gente vaya a morir por las frustraciones de tu padre, no haré esto a menos que tenga tu permiso''. Dice Guillermo.

Después de unos segundos recibiría una respuesta.

''Hazlo''.

Guillermo asistiría.

''Tu, el maletín''. Dice Guillermo a su escolta, este le entregaría el maletín y lo abriría.

Guillermo procedería a llamar a los encargados de los lanzamientos, daria los código y datos necesarios. Una vez dados, los hombres encargados durarían vuelta las llaves.

De un silo en el Desierto de Colorado, un misil balístico intercontinental R-7 Semiorka, saldría disparado e iniciaría su trayectoria orbital, como hasta ahora no tenían un arma nuclear en servicio el misil solo va cargado con 5 toneladas de explosivo TNT, que es mas que suficiente para esta tarea.

50 Minutos despues en el palacio de invierno estaba el Zar tomando un café en su balcón, cuando de repente escucha un ruido fuerte acercándose, en cuanto estuvo a punto de voltear en dirección al sonido, toda la zona del palacio de invierno explota matándolo a él y todo lo circundante en un radio de 80 metros. Toda la ciudad entra en conmoción ante la enorme explosión presenciada.

Mientras tanto en México.

''Señor, el misil ha impactado con éxito''. Dice uno de los encargados del lanzamiento.

''Bien, gracias por su servicio''. Dice Guillermo para cortar las comunicaciones. Se sentía aliviado de haber desplegado el sistema de localización satelital hace poco para poder poner en servicio los misiles balísticos que partir de ahora se armaran con cabezas nucleares o al menos algunos.

''Papa...''. Dice Anastasia sollozando.

Guillermo, decidió darle espacio, el no comprendía que hacer, le parecía hipócrita ir a consolarla cuando él ordeno el asesinato de su padre.

''Zaragoza, ordena la retirada de nuestras fuerzas del territorio ruso''. Dice Guillermo.

''Pero señor, le está dando la victoria a los Británicos''. Dice Zaragoza.

''No Zaragoza, solo es parte de mi nuevo plan, una vez que la guerra ruso-británica, quede totalmente concluida, los británicos no querrán entrar a una guerra debido al desgaste y daño económico que le ha causado esta lucha, además conozca la forma de pensar bolchevique, después de que los bolcheviques tomen el control, romperán relaciones con los británicos, ahí será cuando atacaremos, tomaremos toda Rusia una vez hecho eso la anexaremos al imperio junto a todos sus recursos, después de todo el objetivo de los británicos nunca fue darle el poder a los bolcheviques, sino evitar el fortalecimiento de Rusia''. Dice Guillermo.

''¿Entonces que haremos?''. Dice Zaragoza.

''Tendremos que producir nuevo equipo, para superar al que fue tomado por las fuerzas rusas''. Dice Guillermo.

Fin.