Mundo Shinobi - Resultados - 238

Al otro día Kain dejo durmiendo a Mito en su cama mientras él salía temprano en la mañana. Una vez que llegó a la puerta Torii que daba a la calle, miró el cielo despejado y el sol incandescente en ascenso. Por alguna razón el aire se sentía diferente. Kain negó con la cabeza, no era solo el aire, todo su cuerpo se sentía diferente de lo usual. Era como si se sintiera ligero, flexible y tranquilo. Sin embargo, no le dio muchas vueltas y avanzó por la calle con dirección sur, a los portones de entrada de Konoha.

Una vez que atravesó los portones, Kain empezó a correr por el bosque y después de dos kilómetros, saltó a la rama de un árbol y se comenzó a mover de árbol en árbol. Algunos anbus de raíz lo quisieron seguir, pero solo vasto con que Kain se pusiera serio y los perdió de inmediato. Después de eso, siguió subiendo por el mapa con dirección Norte para llegar al dichoso Valle del Fin. Donde estaban las estatuas de su padre y su tío en una posición frente a frente, separados por una cascada y haciendo un sello de tigre con una mano, como si estuvieran en una especie de competición. Lo cual era ridículo y burlesco, el dios shinobi tuvo que matar a su amigo, un pecado que lo acompaño hasta el día de su muerte.

Cuando Kain vio la parte superior de las estatuas se detuvo por un momento pensando en su tío y su padre. Ambos enfrentados por una cultura bélica que solo engendraba más odio. Tomo una profunda respiración y continúo caminando hasta llegar al borde de un acantilado, donde había una caída de más de cien metros con un extenso lago en la parte baja alimentado por la misma cascada. Sin embargo, la mente de Kain fue ocupada por la visión de su tío y su padre en esa postura tan estúpida, como si estuvieran en una competición. Era una broma de mal gusto, pensó, entonces se enojó tanto que por un momento pensó en destruir ambas estatuas. No obstante, eso no cambiaría el pasado ni la visión que tenía la gente.

—No te preocupes, tío, haré mi mejor esfuerzo por hacer de este mundo un lugar mejor. Y por la sensei, lo siento. No fue mi intención, pero ella dijo que estaba bien porque éramos sensei y discípulo. Así que solo me protegeré en esa excusa—

Kain tomo una profunda respiración y miró hacia el precipicio, viendo el extenso lago en la parte baja. En medio de la superficie había un hombre de cabello cano, vestido con unas ropas negras con bordes rojos. Kain lo conocía bien, así que salto desde la parte alta del acantilado cayendo como un meteorito sobre la superficie del agua. El agua saltó para todos lados, se produjeron olas, pero eso no fue todo. Kain se impulsó con toda su fuerza, activando al mismo tiempo su mangekyo y le lanzó un puñetazo. No obstante, el anciano solo le vasto una mano para atajar el golpe.

—A sido un tiempo, Kain— dijo el viejo Xiao con una sonrisa amable

—Maldito anciano del demonio— respondió Kain con una sonrisa salvaje —no pensaba verte tan pronto—

—Bueno, aquí estoy, tenemos mucho de qué hablar—

Xiao empujo a Kain con sutileza y este último cayó sobre el agua a tres metros de distancia.

Kain extendió su mano derecha y dijo —mi anillo y el cadáver del dragón—

Xiao torno los ojos al cielo y negó con la cabeza en un gesto de fastidio. Hizo un ademan, apareció el anillo con la piedra azul, lo atrapo con su mano y se lo lanzó. Kain lo atrapo y se lo puso en el dedo índice de la mano derecha.

—El cadáver del dragón lo deje en aquel mundo ¿Te acuerdas?—

—¿En el mundo donde vive Hera o en el mundo del alma oscura?— preguntó Kain

—En el mundo donde vivía Hera—

—¿Dónde vivía?—

—Claro, han pasado muchos años y han pasado muchas cosas. Tenemos mucho de qué hablar—

Kain se calmó y asintió más relajado, lo que le dio una ventana a Xiao para realizar un ademan y crear un piso de cristal sobre el agua. Después hizo un ademan e hizo aparecer una mesa y dos sillas.

—Vamos— dijo Xiao señalando con la mano —siéntate, no hay apuro. Lo hecho, hecho está y lo único que nos queda por definir es lo que vas a hacer de aquí en adelante—

Kain se sentó sintiéndose inseguro de lo que Xiao iba a decir, no pintaba para nada bien, pero de todos modos se sentó. Xiao hizo un ademan para que apareciera sobre la mesa una tetera de porcelana y tazas. La tetera emanaba un vapor con un aroma dulzón a té negro.

Xiao sirvió las dos tazas y le acercó una a Kain —toma, creo que el cambió te gustará—

—Gracias— respondió Kain, ambos bebieron un sorbo de té y Xiao lo miró a los ojos con seriedad, lo que Kain intuyo que no era nada bueno.

—Has atraído la atención de mis…hermanos— dijo Xiao

—¿Tus hermanos?— preguntó Kain alzando una ceja

—Otros primordiales— respondió Xiao

—¿Te refieres a esa mujer de los cuernos?—

—No, no la vieja cabra. Son el tonto de amarillo y Kthanid—

—Eeeh— dijo Kain algo confundido —siento que el de amarillo no te cae bien, pero el otro no lo entendí—

—Sería difícil que pronuncie su nombre en mi forma humana, así que déjalo. Solo tienes que saber que son existencias peligrosas. Así que trata de mantener la distancia, también tratare de ayudarte—

Kain soltó un suspiro, recordó a la mujer de los cuernos y rogó para que fueran igual de despreocupados. Después miró a Xiao y le preguntó —¿ya llego la hora en que se despierte aquel demonio que partimos a la mitad?—

—Con respecto a eso…— dijo Xiao con incomodidad —él ya despertó—

—¡¿Qué?!— grito Kain poniéndose de pie —y porque no me despertaste, pero…—

—¿Con que cuerpo? Recién empiezas a desarrollar tus poderes en este mundo. Sin contar que te tuve que buscar en muchos lugares. Sencillamente no se pudo—

Kain agacho la mirada, se sentó y esperó a que Xiao continuara. Para bien o para mal, era como él decía. No había forma de solucionar aquel problema. Ahora solo quedaba lidiar con las consecuencias.

—Es bueno que lo entiendas— dijo Xiao —con respecto a Hera, ella se hizo cargo y creo un sello de espacio tiempo para ese demonio y su progenie quedaran atrapados, pero tuvo que pagar un alto precio—

Kain sintió que el mundo estaba vacío y no se escuchaba ningún sonido después de escuchar aquellas palabras. Él había llevado a Hera a ese mundo prometiéndole una vida mejor, pero parece que todo fue para peor.

—Ella no lo hizo por ti— dijo Xiao, Kain levantó su rostro con una expresión de confusión y Xiao continuo —ella lo hizo por su hijo, él estuvo en su corazón, así que ella no dudo en ningún momento. Incluso si ocupo su divinidad hasta que no le quedaron fuerzas y su cuerpo se destruyó. Su alma vagó dando vueltas por la tierra durante unos años, quise tomarla para traerla junto a ti, pero algo o alguien la tomo y se la llevo a otro lugar. Lo siento—

Kain asintió sin decir palabras, no podía procesar lo que sentía en este momento. Era un sentimiento tan frio y desolador que lo odiaba. Se quedó sentado, mirando la mesa mientras se escuchaba la cascada a lo lejos y el ruido de la corriente del lago. El viento soplaba llevando la humedad del agua, pero Kain se sentía como si estuviera en una burbuja.

Después de media hora de contemplación, Xiao le dio unos golpecitos a la mesa y saco a Kain de sus pensamientos.

—Lo siento, solo estaba pensando— dijo Kain en un tono de voz indefenso

—No es tu culpa, incluso nosotros los primordiales no somos todo poderosos. Estamos lejos de poder ver todo y estar en todos lados, sin contar que no lo podemos reparar todo. Acostúmbrate a este sentimiento, porque te sentirás de esta manera durante toda la eternidad—

Kain tomo una profunda respiración y asintió sin creer dichas palabras. Siempre se podía cambiar o torcer el destino, solo había que saber el qué, cuándo y dónde. Xiao soltó una risita al ver la mirada del viejo vástago del equilibrio y pensó que algunas cosas nunca cambian, no importa cuantas vidas pasen.

—¿Qué te ha parecido este mundo?— preguntó Xiao

—Esss, un mundo fuerte. Incluso con mi técnica de Fortalecimiento Celestial, tengo una pequeña ventaja, pero no siento que sea significativa como en los otros mundos. Hay muchas habilidades raras, conceptos extraños, la capacidad de darle vida a un golem hecho de elemento. El chakra es mágico y la energía natural es un misterio. Existen habilidades que supuestamente no se pueden reproducir y otras que están arraigadas a un linaje. Hay tanto que entrenar—

—Tuviste suerte— dijo Xiao

—¿Por qué?— preguntó Kain confundido

—Porque justo antes de llegar a este mundo lograste darle forma a tu divinidad, así que, desde ahora en adelante, gracias a tu divinidad, nacerás con la misma fortaleza genética. Si lo hubieras hecho antes, hubiera sido una enorme perdida. Incluso te verías raro en este mundo naciendo con las largas orejas de un elfo—

—Explícate—

—Este es tu primer cuerpo después de haber adquirido tu divinidad. Eso quiere decir que tu estructura ósea será grabada en tu divinidad y cada vez que renazcas la reproducirá. El único problema es tu poder—

—¿La oscuridad?—

—No cualquier oscuridad— añadió Xiao —es la oscuridad que, hasta los supremos, existencias que están a solo un escalafón por debajo de nosotros, temen. Sin embargo, tu divinidad no tiene más usos ¿Eso es lo que querías lograr? ¿Poder matar todo lo que se te cruce en frente?—

—No— respondió Kain con una sonrisa astuta —al final, estoy buscando un modo de escape. Nada puede destruir la oscuridad del universo ¿no?—

—Nada—

—Entonces es bueno— respondió Kain con una idea en mente. Ahora ya tenía una ayuda valiosa para lograr su objetivo, solo le faltaba dominar el tiempo y el espacio para poder completar su objetivo. No obstante, puede que eso lleve tiempo.

—No te entiendo, de todas las divinidades ¿Por qué elegiste esa? No tiene ninguna fortaleza más allá de la destrucción, sin contar que primero tienes que dominarla. En estos momentos destruiría tu cuerpo—

—No necesito dominarla, ya verás, será de una incalculable utilidad—

Xiao soltó un suspiro de cansancio y trato de cambiar la conversación —veo que en esta vida te involucraste en cosas complicadas. Siempre te mantuviste al margen de los conflictos a menos que afectara a tu familia ¿Por qué ahora?—

—No siempre, ayude a crear la ciudad tecnológica de Lapan ¿te acuerdas?—

—Solo una cosa pequeña que, dentro de todo, no implico ir a la guerra, pero mírate ahora—

—Bueno, solo puedo decir que conocí a una persona sin igual. Alguien que, a pesar de todos sus defectos, fue un verdadero dios benévolo, aunque él lo renegó hasta el final de sus días—

—¿Hashirama Senju?—

—Sí, él fue grande, la mejor persona que he conocido. Alguien que lo daría todo por un buen futuro, un dios de verdad. Porque a pesar de que tenía el poder para conquistar todo el mundo, lo ocupo para crear una paz, que lamentablemente no duro mucho—

—Nada es para siempre—

—Puede ser, pero eso quiere decir que la guerra algún día se acabará y llegará la paz. Esa era la esperanza de mi tío y también se ha vuelto la mía—

Xiao sonrió al ver a Kain tan optimista. Esto a su vez cambió su percepción sobre la divinidad de Kain y pensó que no estaba todo perdido. Todavía podía alcanzar la fuerza de los primordiales. No obstante, él no lo haría a través de un poder, si no que a través del conocimiento. Al igual que como había dominado todas aquellas magias y habilidades.