Filia Medici y Samson: Capitulo 2

Sus parpados comenzaron a abrirse, el color oscuro que emanaban se convirtió en rojo claro. Al hacerlo comenzó a levantarse lentamente, con un poco dolor en la zona del disparo. Al terminar de hacerlo, se apoyó en la pared para estabilizarse y, cuando se percato del entorno, su rostro mostró una emoción de miedo.

—¡Cadáveres! ¡¿Pero que acaba de pasar aquí?!

—Filia, serás mejor que te vaya de esta casa—Aconsejo el parasito, instalado en su cabeza

—¡¿Quién anda ahí?! ¡¿Eres el asesino?! ¡Te pido por favor que no me mates, no conozco a estas personas!

—¡Tranquila mujer! Escucha tienes que subir a la segunda planta, a tu habitación que es la segunda puerta a la izquierda, allí hay una ventada, puedes salir por allí

—Por favor. Estoy segura que es una trampa. Quieres que te haga caso para que me hagas daño o me hagas algún tipo mal

—Si no te marchas te puede ocurrir algo peor. Por favor te lo pido, hazme caso y luego te contare todo lo que quieras. De verdad, te lo pido Filia

La joven se quedó pensante, no tenía recuerdos de quien era o en qué lugar se encontraba. Sin nada que perder opto por hacerle caso a aquella vos. Cuando salto de la ventana, se agarró del árbol cercano para llegar al suelo sin lastimarse, su compañero le guió como si fuese una brújula a un lugar con esperanza de estar a salvo, ella corrió siguiendo sus indicaciones. Su desconfianza con aquel tipo se mantenía, pero el hecho de ser encontrada en la escena del crimen y ser culpada por asesinato era una alternativa inaceptable.

Corrió hasta llegar a un tren que comenzaba de poco a poco moverse, Samson le aconsejo subirse, pero el vehículo le ganaba distancia, hasta que el parásito desplegó sus brazos en formas de alas con tal de darle más impulso a su nuevo usuario. Logrando que los dos llegaran a su destino.

Una vez calmada la situación, ella exigió su parte del trato. El parásito se presentó formalmente, para no hostigarla demasiado con los recuerdos contó lo más básico para que supiera como moverse por la ciudad, mientras más hablaba más intriga le generaba a la chica, que le escuchaba mientras se cubría con una pequeña manta, mientras observaba los edificios sentada.

—Un asesinato, no entiendo como pude verme involucrada en eso

—Mejor deja de pensar en eso amiga. ¿Por qué no duermes un poco?

—No tengo sueño gracias. Que linda brisa tiene el día de hoy, está bastante fresco.— comenta la joven al recibir el viento en el rostro

—Últimamente el tiempo se encuentra un poco arbitrario, a veces hace frio y otras veces no

—Si pero bueno, hay que disfrutar un poco...¿Qué es eso? —Pregunto curiosa la joven al atrapar un papel que volaba cerca de ella— Es un "Se busca"

—Déjamelo ver primero, tengo curiosidad—expresa el parasito

—No creo que te interese, es sobre una niña desaparecida hace poco. Según esto se llama Carol

—¿Carol? ¡Carol! —Arrebata el papel a su colega— Según esto desapareció cerca de tu colegio, bien ya tenemos un lugar en donde buscar

—Perdón por la pregunta, pero ¿Quién es ella? Te veo un poco exaltado

—Esta chica, es tu mejor amiga. Te doy de nuevo la imagen para que la veas y la recuerdes

Cuando se lo devolvió, la chica se quedó mirando a la desaparecida. De golpe unas imágenes con las dos se manifestaron en su cabeza, como flashback mostrándolas feliz y muy unidas e incluso, el recuerdo de que por ella conoció a su parásito y la propuesta de encontrarla. Genero un fuerte dolor de cabeza, pero al recomponerse en unos pocos minutos tomo la decisión de bajarse del tren para llevar a cabo su tarea.

—Podríamos tardar demasiado, si quieres podemos tratar de encontrar al Skullhearth primero y así que consigas la totalidad de tu memoria—Sugirió su socio que obtuvo un negativo como respuesta, si bien sus recuerdos no eran del todo claros, eran un detalle menor... su amiga ahora el principal objetivo

Llego a las puertas de su colegio, examino los alrededores si encontraba algo que le guiara a su objetivo, examino cada callejón y arbusto encontrado, con la esperanza de tener como mínimo algún dato importante. Los que pasaban creían que era una joven jugando a ser detective, incluso algunos se animaron a preguntarle el porqué de sus acciones, la cual no obtuvieron ninguna respuesta salvo el que no la molestaran por ahora.

No encontró nada, solo tocaba pregunta a la gente que caminaba, tras hacerlo con una treintena de ellos, solo tres le informaron que vieron a alguien arrastrar algo en una bolsa a un camión. La segunda versión, deducía que ese "algo" se podría tratar de un cuerpo humano. Porque el cierre si bien no se encontraba abierto, se lograba visualizar con mucha dificultad un dedo gordo, a pesar de pasar cerca. La última, comentaba que una de las que cargaban la bolsa era una mujer de pelo azul, de un cuerpo bastante llamativo, sugerente, pero de mirada letal y aniquiladora.

—Gracias, con esto tengo algunas pistas, que tenga un buen día—Se despidió Filia de la última interrogada, con lo que disponía, su búsqueda podría avanzar a pasos lentos pero seguro, dado que al menos sabe el aspecto de uno de los secuestradores y sería fácil reconocerla.

Antes de volver a Maplecrest siguieron explorando la ciudad y todas sus zonas, vieron gente muy pintoresca y llamativa al igual que matones que solo buscaban pelea y dinero. Cuando pasaron cerca del casino, el parasito se desplazó hacia abajo para generarse unas piernas, para llevar a su huésped a un callejón. La ocultaba de la vista del sicario responsable del tiroteo en su hogar. El mismo, con gran estatura y una cara un tanto extraña pasaba en frente de ellos con la multitud, se mantuvieron callados y si bien la chica no entendía el accionar, comenzó a seguirle el juego de tener precaución.

—Ese tipo es peligroso, si te ve probablemente te mate sin pestañear—Le comento al distanciarse de él, ella dedujo que ese individuo tenga algo que ver con los asesinatos en aquel lugar. La noche se les echo encima al estar cerca del destino, se preguntaban en qué lugar podrían dormir y comer, el primer lugar que se le ocurrió a la amnésica es su antiguo hogar, cosa que su parásito no le convenció, pero acepto.

"Perfecto, todo lleno de cintas, barras, pero no hay ni un solo guardia" Pensaba para ella, al ver el edificio. Entro por el mismo lugar por donde escapo, al quedarse mirar el entorno poco a poco se dio cuenta de que aquel lugar, era donde vivía y ese era su cuarto. Debajo del escritorio encontró una mochila llena de cosas, como ropa, collares, y algo que le llamo mucho la atención, una foto con su mejor amiga. De repente se puso a llorar al verla, su cuerpo reaccionaba de forma involuntaria de esa manera sin entenderlo, las lágrimas mojaban el suelo e incluso la hicieron resbalar levemente, para luego recomponerse y acostarse en la cama.

Era raro, no esperaba que se pusiera así por una persona que no recordaba, interpreto que su cuerpo actúo por su cuenta y aquellas lagrimas mostró el valor que Carol tenía para ella.

—Filia...descárgate, levántate cuando termines

—No...estoy bien. No sé qué me ocurrió. Fue al verla y simplemente me derrumbe. Pero ya, se me paso la tristeza

—Oh vaya, veo que tienes hambre jeje

—Jeje, tienes razón veamos si hay algo o se llevaron todo—Responde la joven Recompuesta

—Pollo, pescado y algo de pan ¿Qué prefieres? —Pregunta el hambriento al ver la heladera abierta

—Re calentare este pollo. Espero que no te moleste

—Ja, igual sé que no sabes cocinar. Esa es la opción más obvia

—Si bueno, espero que haya alguna vela por aquí. Prender la luz llamaría mucho la atención

—¡Ya pon el maldito pollo en el microondas que tengo hambre!

Los dos cenaron bien dentro de las circunstancias, la comida estaba aceptable para ser algo pre cocinado, pero Samson le hubiera preferido cocinado a punto y unas cervezas. Mientras comían, ella puso en su mesa varias fotos de sus familiares frente suyo, las mismas se encontrabas rotas y no se visualizaban los rostros, pero algo llamaba su atención, uno de los marcos se encontraba vacío. Se pregunto el porqué, quizás fue el sicario, pero no tendría sentido dejar las demás, la otra opción fue que alguien entrara a esta casa a saquear y se llevó la foto por alguna razón, pero, ¿Qué valor tiene una simple foto familiar?

—Samson, mañana seguiremos la búsqueda y si para el anochecer no la encontramos, y espero que sí, buscaremos ese artefacto. Buenas noches—Comunicaba a su compañero, que daba un apretón de manos, él también le deseaba buenas noches. Ella se acostó después de asegurarse de que todas las entradas se encontraran selladas y si alguien entrara lo sabría.

"Mañana será un día largo, Carol ojalá estés bien, espero encontrarte de verdad. Eres la última persona que amo, que esta convida y no quiero perderte" Repetía aquella ultima palabra la joven antes de cerrar los ojos y abrazando fuerte, una de las almohadas