webnovel

Capitulo 12: Dia Normal

POV Daisuke

El famoso "Habla Jutsu" o también conocido como el "Yo antes era como tú", esta es la habilidad es la habilidad insignia de Naruto Usumaki.

Y desde que vi el Anime cuando era gerente general de "Ocelotl" siempre me pregunté… ¿en qué consiste la habilidad?, recapitulemos… el Habla Jutsu se especializa en convencer a otras personas sobre tu punto de vista, así cambiándolo de camino o de mentalidad.

¿Pero como sucede todo esto?, fácil en si Naruto no tiene un poder "especial", ya que en realidad este era muy común, El ninshū fue un poder creado y trasmitido por el Sabio de los 6 caminos con el objetivo de unir a la gente.

Naruto al ser la reencarnación del hijo de Hagoromo este pudo obtenerlo… pero ahora llega la cuestión, ¿qué es ninshū? y ¿Por qué este poder evangeliza a las demás personas?, fácil, el ninshū es el camino para conectarte con los demás y al realizarlo puedes comprender mucho mejor a la persona con la que estas conectado, esto es por ambas vías, ya que la otra persona también pude comprenderte mucho mejor.

En realidad, se podía decir que el ninshū te ayuda a trasmitir tus sentimientos y voluntad a la otra persona, mediante los recuerdos que te marcaron.

Ahora se preguntarán por qué les cuento todo esto…

Se los cuento ya que con el ninshū fue el cómo le conté a mis Prometidas sobre mi vida.

-Y por eso estamos aquí… ¿Dudas? - dije mientras tomaba té con Arturia.

-Yo una… me puedes explicar, ¿por qué mostraste también tu vida sexual?- dijo Arturia levantando una mano, mientras se sonrojaba profundamente.

-En primera, te enseñe "Todos" mis recuerdos porque no puedo elegir que mostrar- dije alzando un dedo. -En segunda… ¿que acaso te gusto lo que viste? - dije con un tono sugerente mientras me acercaba hacia ella.

Cuando fui un empresario, aprendí a mentir muy bien, tanto que uno no podía saber si lo que decía era una verdad o una mentira, cosa que ella sabía, pero como dije antes… ella no sabía que mentía.

-N-No C-Claro que no- dijo ella mientras miraba hacia otro lado.

-Bueno… como sea- dije mientras le daba una sonrisa y me alejaba. -Ahora… en temas más importantes hablemos de que vamos a hacer en esta Guerra del Santo Grial…- dije mientras me ponía serio.

Después de esa pequeña platica le conté mi plan acerca de qué hacer en la guerra, también contándole en como el grial se corrompió, y como este gracias a ello se convirtió en una pata de mono…

Cuando ella se enteró de eso casi se pone a llorar, contemplando esta posibilidad la consolé con dulces horneados y palabras bonitas.

Cosa que después de acabarse 20 donas, esta se calmó y me dejo contarle mi plan para purificar el Ritual.

Cuando comprendió mis intenciones un poco de luz volvió a sus ojos y ella juro formalmente su espada para mi causa.

Poco tiempo después, nos dirigimos hacia nuestras habitaciones para pasar la noche.

En la mañana Siguiente.

Mientras me despertaba pensé en cual debería de ser mi movimiento siguiente, ya que de echo tenía más de 2 meses antes de que la guerra ocurriese.

Decidiendo que lo mejor sería pensarlo con el estómago lleno, apure mis rituales matutinos.

Cuando me dirigía a la puerta de mi habitación, el Gran Sabio me aviso de que Arturia se encontraba fuera de la puerta esperándome.

-Buenos días, Maestro…- dijo ella mientras me miraba salir de mi habitación.

-Buenos días a ti también Arturia… pero dime ¿No tienes acaso una habitación? - dije dirigiéndonos al comedor.

-En efecto Maestro, pero no puedo dejarlo solo…, quiero evitar de que sea atacado cuando yo no lo mire- dijo ella sinceramente.

-No tienes que preocuparte sobre eso…- dije acercándome hacia una pared cercana. -Toda la casa, fue construida por mi Usando la 1era magia, además de que esta modificada con miles de formaciones…- dije Tocando la pared apareciendo diversos jeroglíficos y runas inelegibles -Solo un Dios como el Bíblico podría siquiera arañar la primera capa- dije muy confiado.

-Aún me cuesta creer como es que Dios está muerto…- dijo ella mientras agachaba la cabeza.

Cuando vi que ella se pondría en un modo depresivo, solo pude hacer una cosa, abrazarla…

-¡¿Q-Que está Haciendo M-Maestro?!- dijo nerviosamente mientras la abrazaba y ponía su cabeza en mi pecho.

-Arturia… cuando te di mis recuerdos, también supe los tuyos…- dije sorprendiéndola por mi afirmación. -No tienes que fingir delante mío ¿si?- dije mientras la tomaba de sus mejillas y la hacía verme.

Arturia siempre fue una chica con una gran responsabilidad, ya que desde muy pequeña tuvo que entrenar y acondicionarse para ser un Rey, tanto que después de años fingiendo ser un hombre ella le avergonzaba ser una mujer.

Y no solo eso, ella jamás pudo experimentar lo que era ser una niña, todo el tiempo que estuvo con su padre adoptivo lo uso para entrenar su estilo de Espada o estaba recibiendo clases para ser una buena gobernante.

En pocas palabras ella era una adulta con el corazón de una santa y la mente de una niña.

Paso un tiempo para que dejáramos los ojos del otro, pero el tiempo no perdona y antes de darnos cuenta Suzue nos llamaba a desayunar.

-Arturia… Después del desayuno iremos a la cuidad- dije tomando su mano y yendo al comedor de la mansión.

-Umm…- Murmuro dándome un asentimiento con un rubor que coloreo toda su hermosa cara.

El compartir sus recuerdos con alguien, es lo más rápido para acercarse íntimamente con alguien, ya que le muestra a la otra persona tu personalidad, tus ideales, tus metas, tus fracasos, tus victorias, esto crea un vínculo contigo, haciéndolo más cercano a ti.

Este es el "Habla Jutsu".

El Vinculo que compartíamos Arturia y yo era uno que nos daba seguridad, aflojando sus defensas siendo más proactivo conmigo, teniendo cada vez más confianza conmigo.

Y de hecho la "Confianza", puede convertirse muy rápidamente en amor…

Con una sonrisa mire hacia adelante ya que…

Todo iba de acuerdo con el plan…

En la Tarde.

-Dime… Suzue recuérdame… ¿porque accedí a esto? - dije mientras me ponía un traje de Marinero.

-Porque Arturia necesitaba Ropa, además…- dijo mientras se acercaba sugestivamente hacia mí. -Porque me amas- dijo con una sonrisa sensual.

-Multa…- murmure.

Después de un rico desayuno y que Arturia se comiera más de 10 platos, decidimos que lo mejor sería explorar la zona colocando en el proceso trampas.

Cosa que le pareció fascinante a Suzue porque ella tenia la escusa perfecta para hacer turismo por la ciudad.

Actualmente nos encontrábamos en el centro comercial de Fuyuki, porque Arturia necesitaba ropa para mezclarse mejor en la sociedad, además siendo uno de los lugares con más personas, eran perfectos si uno quería hacer algún tipo de ritual.

Cosa que no permitiría, aunque era una mierda de persona, manipuladora y todo eso, aun tenía limites, como el de no tocar a los inocentes y sobre todo proteger a los niños, así que mientras nos "divertíamos" estaba investigando la zona.

Así que aria todo en mi poder para evitar de que Barba Azul fuera convocado o si no podía evitarlo, yo sería quien acabaría con su vida.

Pero dejando de lado todo el pesimismo. En este momento estaba guardando todas las compras de Suzue y algunas de Arturia en mi inventario ya que después de comprar un helado nos iríamos hacia un parque ya que quería ver si podía encontrar a un par de personas.

-Suzue… ¿porque?- pregunte decepcionado usando un atuendo de marinero, siendo más pequeño al usar las funciones de mi armadura, mi estatura y aparecía indicaba mi verdadera edad.

-¡Porque jamás hemos ido a un parque!- dijo alegremente mientras me arrastraba por el parque.

Cuando llegar al parque, Suzue rompió todo acto de Onee Sama y se emocionó mucho a ver dónde habíamos venido…

Cabe aclarar que en el Clan Kambe no había mucha "Socialización" los parques que teníamos estaban destinados a ser usados mayormente para reuniones, que para que los niños jugasen, y Suzue como mi prometida, no pudo conocer la alegría de ser una niña normal.

Así que cuando vio como los niños se divertían en el parque no pudo evitar rogarme para que fuéramos a jugar, cosa que lamentablemente acepte.

-¡Bien!, pero solo estaremos una hora, ¿okey?- dije soltándome de su agarre.

-¡Okey!- dijo alegremente corriendo hacia un grupo de niños a la distancia.

Negando con la cabeza di un trote ligero siguiéndola.

Arturia que se quedó cayada en toda nuestra discusión pero una sonrisa amable se formo en su rostro ya que le alegraba ver como nos comportábamos como niños de nuestra edad.

Mientras seguía a Suzue, me di cuenta que el mundo ciertamente era pequeño, ya que de hecho en ese grupo había 3 personas de gran importancia.

-¡Hola!, oigan perdón que les pregunte, pero… ¿podemos jugar con ustedes?- pregunto nerviosamente Suzue.

-¡Claro!- respondió energéticamente la rubia del grupo. -¡Mi Nombre es Chitoge, encantada de conocerlos!- dijo sin bajar la intensidad de su energía. -Y ellas Son…- dijo mientras le daba un codazo a una de las niñas para que se presentara.

-Mi nombre es Rin- dijo tímidamente la niña pelinegra que vestía un abrigo rojo.

-Mi nombre Marika- dijo mientras se pasaba un mechón de pelo detrás de su oreja.

Después de que ellas se presentaran seguimos nosotros y como el mayor en esta situación fui el primero.

-Un gusto de conocerlas, mi nombre es Daisuke, pero dígame Dai- dije dandoles una gran sonrisa que sonrojo a las niñas.

-¡Y yo soy Suzue!- dijo Suzue levantando la mano saludándolas.

Después de esa pequeña presentación jugamos un par de juegos, como el famoso escondite, el juego del calamar, peor enemigo, etc. Después de unas hora jugando sin parar las chicas tuvieron que retirarse.

-Ven… vamos Arturia- dije cargando a una Suzue dormida en mi espalda ya con mi tamaño normal.

-Claro Maestro…- dijo con una sonrisa caminando detrás de mi…

Cuando llegamos a la mansión, notamos con en ella había varias firmas de energía maligna, notando esto Arturia materializo su armadura con su espada y levanto su guardia, enrollada como un resorte se preparo para la batalla

-¡Maestro!, detecto varias firmas malignas, deme ordenes- dijo mirando intensamente hacia la entrada.

-Claro… mi orden es… guarda tus cosas y ábreme- dije divertido acercándome hacia la casa.

-…¿Qué?...- dijo perpleja.

-Estas firmas… son aliados- dije entrando a la mansión.

Arturia, aunque confundida aun así cumplido con mis ordenes, guardando su arma con su armadura me seguido cauta de cualquier ataque sorpresa.

Cuando llegamos al vestíbulo, tuve que evitar que Arturia decapitara al borrón rojo que se me aventó en sima.

-¡Cariño!- grito Rias aventándose hacia mi, casi derribándome.

-Rias también te extrañe, pero estoy cargando a Suzue sabes…- dije señalando con mi cabeza atrás de mi, mostrando a Suzue quien dormía plácidamente en mi espalda.

-¡Oh ya veo!- dijo avergonzada alejándose para después ayudarme a recostar a Suzue en un sillón cercano.

-¿Cariño?- pregunto muy sorprendida Arturia mirándome convivir con un demonio, cosa que la extraño.

-Amigos de la infancia, compromiso, larga historia- resumí mientras era estrujado por una muy alegre Rias.

Arturia al comprender que el asunto era complicado, asintió dándome su apoyo poniéndose detrás de mi conformándose con ver mi interacción con la alegre peliroja.

Pero volviendo a mi situación solo pude resignarme porque sabía que cuando Rias se ponía así de melosa, ya no podría zafarme de ella por un buen rato.

En la cena

-Haber déjame ver si te entendí…- dijo Arturia señalándome con una pierna de pollo frito. -Conoces a… Rias debido a que tu familia invito a la suya a una fiesta donde ustedes se conocieron, y desde entonces se convirtieron en mejores amigos casi inseparables- dijo para verificar si había entendido lo que le había contado, después de dar un mordisco a su pierna de pollo y tragarlo siguió hablando. -Y desde hace un par de meses, debido a que el prometido que había elegido su familia era una mierda, tu decidiste salvarla y comprometerte con ella en el acto- dijo Señalando a Rias quien muy contenta comía una pechuga de pollo.

-Umm… si, de echo eso fue lo que paso- asentí devorando una alita.

Poco tiempo después de que Rias se calmara fuimos a cenar y como nadie tenía ganas de cocinar hicimos lo más sensato…

Sip… mandamos a las sirvientas de Rias hasta México por unas cuantas cubetas de pollo KFC…

¿Qué?... Se me antojaron…

-Ummm… Okey…- dijo Arturia comiendo de un bocado otra pierna de pollo.

Para Arturia le fue extremadamente fácil digerir todo eso, porque en su tiempo, no era extraño que uno comprometiera a alguien por un interés, por una deuda o algo parecido, ademas por eso existían duelos para decidir quién se quedaba con la mano de la doncella.

Diablos incluso ella se casó por un matrimonio político…

Y sobre el Harem de su Maestro, sinceramente a ella no le importaba mucho, ella consideraba que solo mostraba que tan grande era el corazón de su maestro ya que ella sabía que por lo menos el… Jamás las dejaría ir.

Sin saber los pensamientos de mi Sirviente seguía comiendo mi pieza de pollo, esta era muy diferente a lo que recordaba, mayormente porque esta de echo Si estaba echa de Pollo y no de una carne artificial…

Después de esa extraña cena nos dirigíamos hacia el salón para jugar un par de juegos de mesa estábamos aburridos teníamos que esperar y eso nos irritaba además, no nos podíamos ir a dormir porque Rias esperaba que le trajeran sus cosas ya a la pelirroja convenientemente se había olvidado de traerlas.

-¡Genial!, ¡Paga!- dijo Rias extendiendo su mano hacia mi.

-Bien…- dije suspirado entregándole la renta que marcaba la carta donde había caído.

-Dios mío… como puede ser tan buena en esto- murmuro Arturia viendo como le pagaba a Rias. -Digo apenas vamos 10 vueltas al tablero y ya nos dejo casi en banca rota…- dijo deprimida mientras veía su dinero notando que solo tenía 5 dólares y 4 propiedades hipotecadas.

-¡Se Llama estrategia Arturia San!-dijo Rias masajeandose la cabeza por el dolor. -Y puedes no decir ese nombre ¿si?- dijo Rias mirando con ojos llorosos a Arturia.

-Manipuladora…- murmure mirando como Arturia se sentía culpable y asentía, por culpa Arturia le dio lo que le quedaba así teniendo ella 2 partes del tablero.

Puede que en el exterior no lo pareciera, pero en realidad Rias había cambiado mucho en este poco tiempo, no solo había empezado a entrenar muy duro con su hermano el Lucifer, sino que también había comenzado a manipular a la gente, recibiendo un poco de ayuda de mi parte estaba en camino de convertirse en una Diabla de todo derecho.

Manipuladora y Poderosa…

Cabe aclarar que ella ya era muy buena en eso sin siquiera intentarlo, pero cuando le empecé a mostrar como manipular a las personas, su talento innato la había echo avanzar a pasos agigantados atrapándome de vez en cuando en algunas manipulaciones suyas.

Diablos, confieso que justamente cuando ella me llevo por primera vez entre la espada y la pared, me empecé a enamorar de ella.

Hubiéramos seguido jugando, pero fuimos interrumpidos por un círculo mágico rojo con la cresta de los Gremory.

-Rias Sama vengo a dejarle sus co…- dijo Grayfia apareciendo del círculo, pero sin embargo se calló al ver a Arturia.

-¡Grayfia!- dijo asombrada Arturia.

-¡R-Rey Arturo!- dijo tartamuda Grayfia, rompiendo la fachada de Reina de Hielo que siempre ponía.

Yo por mi parte solo podía sonreír divertido por lo que sabía que pasaría…

{Cap reinscrito!!}

Creation is hard, cheer me up!

Like it ? Add to library!

Zekrmoncreators' thoughts