CAPÍTULO 8: CONFESIONES.

Damián.

Acerco una silla que hay en el cubículo hasta la cama, tomo asiento y miro hacia su abdomen para verificar que aún este respirando, vuelvo a tomar su mano con cuidado, tocando el yeso y sus dedos desnudos. Regreso mi vista hacia su rostro.

- Alexa, recupérate por favor, hay mucha gente que te necesita y te quiere. Eres la mujer más fuerte que conozco, tienes que resistir. - Le digo mientras le toco el rostro con mi otra mano, pero el guante me impide sentir su piel con la mía.

De pronto, siento que su cuerpo empieza a moverse con suavidad y luego con más fuerza, las alarmas de los equipos de monitoreo comienzan a sonar. Unos segundos después, empieza a salirle sangre de la boca, luego ingresan las enfermeras y el doctor, me sacan del cubículo y todo se convierte en un caos.

Hay un enfermero haciéndole reanimación, al mismo tiempo escucho cuando el doctor dice que hay que llevarla de nuevo a cirugía, salen del cubículo y entran por un ascensor especial solo para pacientes rápidamente. De inmediato siento como si una oscuridad me envolviera, solo miro hacia el cubículo con un miedo y una zozobra inimaginable. Sé que en ese momento, Alexa está muriendo y yo la estoy perdiendo para siempre.

Nuevamente estoy en la sala de espera, que al parecer se ha vuelto mi hogar desde hace un par de días y estoy totalmente desesperado, camino de un lado para otro pero cuando me logro calmar, llamo al señor Bale para infórmale de los acontecimientos.

Ya es de madrugada otra vez y Andy es el primero en llegar.

- Qué pasó Damián?. - Me pregunta al momento de entrar en la sala de espera.

Levanto la vista y creo que mi rostro habla por mí porque en cuanto me ve, se queda congelado, pero después de unos segundos reacciona.

- Ven, vamos a otro lado. - Me dice y me levanto de la silla, luego le hace algunas señales a uno de los agentes para que este al pendiente mientras nosotros regresamos.

Salimos de la sala y entramos a uno de los baños públicos del piso, Andy cierra la puerta con seguro al revisar que no haya alguien más con nosotros y yo sólo pego la espalda a la pared del frente y comienzo a deslizarme hasta sentarme en el suelo.

- La estoy perdiendo Andy, se está muriendo y por primera vez en mi vida no sé qué hacer, ni siquiera cuando mis padres murieron me sentí tan perdido como ahora. Me siento impotente por no poder hacer nada para salvarla. - Digo en susurros y con reproches dirigidos hacia mí, sabiendo que Andy me escucha en silencio.

- Sabes que no me importa verla con alguien más, tragarme mis celos y rabia, con tal de que sea feliz. Me siento bien con solo estar a su lado siempre y cuidarla. - Continúo hablando para desahogarme un poco.

Andy se sienta al lado de la puerta en el piso como yo, mirándome de frente.

- Hermano no pensé que fueras tan cursi. - Me dice tratando de colocar humor a la situación pero cuando mi mirada lo fulmina, toma seriedad de nuevo.

- Veo que no estás para bromas ahora y me disculpo pero es que no sé qué decirte, solo que tienes que tener la fuerza y la frialdad que siempre te ha caracterizado para encontrarle la salida a cualquier situación. Además, ella te necesita y tienes que ser fuerte por los dos, trasmitirle esa fuerza para que ella pueda sobrevivir. - Me dice mientras mira hacia el techo.

- Y si no resiste la cirugía?. - Le pregunto con miedo.

- Mira Damián, yo tengo fe de que ella va a sobrevivir pero también tienes que pensar en que Lisa te necesita. Tal vez es muy difícil hacer lo que te estoy diciendo pero no te puedes rendir, ella sigue con vida y tampoco te puedes culpar por lo que está sucediendo. No es culpa de nadie, son cosas que suceden y nadie puede evitarlas, ni siquiera nosotros que arriesgamos nuestras vidas para evitar situaciones mortales.

Ánimo hombre, Alexa te va a necesitar por que viene una recuperación muy larga, tanto física como mental. Eres mi hermano del alma y voy a estar ahí para apoyarte y ayudarte. - Me dice con toda la sinceridad que siempre le he agradecido.

- Gracias Andy, eres mi hermano del alma. - Le contesto con total gratitud.

Volvemos a la sala de espera y vemos que Kelly es la única que ha llegado, cuando me ve, viene a mi encuentro.

- Cómo está ella Damián?, me dijeron que se puso mal y yo que no había podido venir después de... tenía que mantener todo en orden en la empresa ya que el señor Roger y Alexa no están.

- Ella está muy delicada señorita James, está en cirugía de nuevo porque tuvo una recaída, al parecer uno de sus pulmones volvió a colapsar. - Le responde Andy.

- No puede ser. - Responde en un susurro y con lágrimas en sus ojos.

Mientras estamos hablando, el doctor sale de los quirófanos y va directamente hacia nosotros.

- Cómo está la señorita Alexa doctor?. - Pregunta Andy porque ni la señorita James y yo podíamos hablar.

- Ella sigue con vida. Como saben, uno de sus pulmones colapso y provocó una hemorragia bastante importante. Pero a pesar de todo, la situación está controlada y esperemos que siga así. Debo decir que ella es un milagro viviente, cualquier paciente en su situación ya habría muerto, definitivamente es una mujer fuerte.

- Podemos verla?. – Pregunta Kelly.

- No es factible en este momento, se les avisara en cuanto se pueda, con permiso. – Dice el doctor antes de irse.

- Gracias doctor, creo que deberíamos irnos a la cafetería y tomarnos algo para que nos tranquilicemos. - Propone Andy al vernos las caras a los dos.

Llegamos a la cafetería y Andy va a traer las bebidas y algo de comer.

- No puedo creer que todo esto esté sucediendo por culpa de ese infeliz, ojalá se desaparezca de nuestras vidas de una vez y por todas. - Comenta la señorita James con rabia, después de que nos sentamos en una de las mesas de la cafetería.

- No creo que se alejé tan fácilmente. - Le comento.

- A qué te refieres Damián?.

- A que ese hombre ya hizo su aparición por acá, como si nada hubiera pasado, exigiendo ver a la señorita Lennox como si aún tuviera derechos, según él, sigue siendo su futuro esposo. - Le contesto bastante molesto, acordándome de la escena.

- No te creo Damián. - Responde muy sorprendida.

- Definitivamente hay gente que no tiene vergüenza. - Termina de decir muy molesta.

- Pero me dio la excusa perfecta para hacer algo que había querido hacer desde hace mucho tiempo. - Le digo con una media sonrisa.

- Noooooo, le pegaste?. - Pregunta emocionada y con las manos en el rostro.

- Y no solo eso, lo humilló delante de todos porque le dio la oportunidad de que lo golpeara primero y el pobre no fue capaz, hasta tuvo tres oportunidades. - Le comenta Andy al llegar a la mesa con las bebidas y un poco de comida en una bandeja.

- Ay ay, como me perdí esa escena, la hubiera disfrutado tanto… - Contesta la señorita James un poco triste.

- No creo que vaya a ser mi último encuentro con ese hombre, porque no voy a permitir que se le vuelva acercar a la señorita Lennox y mucho menos si yo no estoy presente. Él no volverá a lastimarla. - Lo digo sin pensar en que aún sigo acompañado, mirando hacia mi café y con rabia en mi voz.

- La amas mucho verdad?. - Me pregunta la señorita James al mismo tiempo que bebe un poco de té.

Andy solo comienza a beber su café, haciéndose el de la vista gorda.

- No, no me malinterprete señorita James, es que yo soy su guardaespaldas, es mi trabajo y además yo le tengo mucho aprecio a la señorita Lennox por todo lo que ha hecho por mi hermana y por mí. Ella es la mejor persona que conozco y no se merece lo que le está pasando. - Le contesto tratando de evadir lo que ella me ha acabado de preguntar. Solo escucho a Andy silbar como diciéndome que ya me puse en evidencia.

- Por favor Damián, estamos los tres solos, no hay nadie más. No insulte mi inteligencia, hace mucho tiempo que descubrí lo que sientes por ella, es más que obvio para mí. La manera en que la miras, la cuidas, la manera como te colocabas cuando la veías con ese infeliz. - Me dice con total seriedad bebiendo su té.

La miro fijamente hasta que me doy por vencido y suelto una bocanada de aire.

- Se me nota tanto?. - Pregunto un poco avergonzado.

- Uyyyyy nooooo, que va. - Me contesta Andy con un tono de sarcasmo y de burla.

- Andy, no le digas eso. No le creas, no es evidente, lo que pasa es que yo soy una persona muy observadora y me doy cuenta de cosas que otras personas no las ven, aunque las tengan en las narices, como mi querida Alexa. Este tonto te dice que es evidente porque te conoce desde hace mucho tiempo. - Contesta guiñándome un ojo.

- Oyeeeeee. - Dice Andy con indignación.

- Lo siento Andy, pero ella ya te conoce muy bien. - Le digo mirándolo muy divertido.

Después de verle la cara a Andy, la señorita James y yo nos reímos, luego la señorita James se inclina un poco sobre la mesa como para decirme algo en voz baja.

- Te confieso que siempre he pensado que tú eres el hombre perfecto para Alexa, porque sé que nadie la amará y protegerá como tú. Los dos son muy atractivos, amables, dulces, sensibles y muy trabajadores, en fin. Nacieron el uno para el otro, yo diría que son como almas gemelas, lástima que se haya metido ese hombre en la mitad.

- Prométame señorita James, que nunca se lo dirá a nadie y mucho menos a la señorita Lennox, por favor. - Le pido con tono de preocupación.

- Por supuesto que no, si se enterará alguien más que sea del resto de la familia empezando por Gisselle o de pronto el señor Bale, dejarías de ser el guardaespaldas de Alexa y ella quedaría muy desprotegida. No, no soy tan tonta, parezco, pero no. Tú secreto está a salvo conmigo. - Me dice guiñándome nuevamente un ojo, así que le expreso mis más sinceras gracias y me siento aliviado al saber que será discreta.

Terminamos de conversar y regresamos a la sala de espera, cuando ingresamos, vemos que ya se encuentra ahí el señor Lennox, la señora Sonia y el jefe Bale, quienes ya están al tanto de la situación de la señorita Alexa.

El señor Lennox toma asiento un poco alejado de nosotros con la señorita James para darle algunas indicaciones con respecto al trabajo, ya que prácticamente ella está a cargo de todo. Cuando terminaron, ella se despide de todos para irse, por lo que yo también lo hago, ya que necesito recoger algunas cosas en la casa y estar con Lisa un poco de tiempo. Así que le digo a la señorita James que la llevare a la oficina, por lo que salimos juntos del hospital.

No me gusta mucho la idea de alejarme de la señorita Alexa, pero estoy un poco más tranquilo porque el señor Bale junto con Andy y Simons, estarán liderando la seguridad en el hospital y tampoco pienso demorarme demasiado.

El recorrido hasta la oficina fue ameno, ya que hablar con la señorita James resultó ser muy agradable, es una mujer encantadora. Ya entiendo por qué es la mejor amiga de la señorita Lennox, tienen pensamientos y caracteres un poco parecidos, claro que eso no quiere decir que no pensara bien de ella antes, pero no había tenido la oportunidad de tratarla un poco mejor.