41 El Terror De Una Élite (I parte)

Al ver que un tipo con una máscara osea yo, entro a la cafetería por la puerta donde debería estar custodiada por los soldados, el tipo entro en pánico ya que al parecer se dió cuenta que algo les había pasados así que se sacó su arma y cuando estaba apunto de dispararme, le tire un clavo justo por dónde iba a salir la bala haciendo que se le trabara la bala.

-Que asquerosidad de persona veo frente a mi, que un nazi y peor uno de la SS haga esto"

Le dije mientras me le acercaba, el tipo tenía todo su uniforme pero su rostro tenías cicatrices muy feas, talvez de un encuentro con algún enemigo.

-Por fin obtuve una presa a la que si voy a disfrutar.

-Quien eres!? sabes lo que estás haciendo!?

-Claro que lo sé, soy experto matando a locos como tu...

Con esas palabras me le acerqué.

-No te acerques o te voy a matar!!.

-Tales palabras solo harían temblar a una persona común, pero a mí? no es más que una broma.

El tipo retrocedió hacia atrás y cuando vio a la chica tirada quiso tomarla como escudó pero ya era muy tarde, porqué yo ya estaba frente a el.

-Umm... ya veo, ahora que estoy más cerca veo lo que te paso, son cicatrices de alguna explosión y con cicatrices que probablemente sean alambre de púas la que te ocasionó, te ves muy feo, me imagino que por eso le pegas a la mujer en el rostro, un ser superior como un nazi se sentiría inferior interiormente y entonces buscas como dañar a la gente que se ve bien para satisfacer tu pequeño ego.

-Dejame adivinar, probablemente el que te hizo eso fue algun rebelde que les hizo alguna redada y por eso buscas a los rebeldes desesperadamente, como un animal herido, pobre... pareces un animal.

Al escuchar detalladamente mis palabras, poco a poco fue pasando de una mirada de pánico a una mirada de furia, apretando los dientes, apretando los puños y con la respiración agitada.

-No eres más que un ser inferior, que se hace llamar raza superior.

Cuando termine de decir esas palabras, escupí en sus zapatos, el tipo no pudo soportarlo más y se tiró hacia a mi.

Esquivé cada uno de sus golpes, como si de un niño se tratase, disfruto de su frustración, el como se pone desesperado, pero en sus ojos veo un atisbo de desdén.

-Si piensas que te voy a dar tiempo para que vengan los refuerzos están muy equivocado, solo te demuestro que no eres más que un juguete para mí.

Con esas palabras lo agarre de el pelo y tire de el hacia abajo y le di un rodillazo en la cara, escuche un gemido de dolor seguido de un chorro de sangre proveniente de su nariz.

-como se siente un poco de tu propia medicina? no te preocupes, eso solo es un poco de lo que te espera.

después de el primer rodillazo le di un golpe que hasta lo desmayó. fui a ver la situación de la chica que estaba tirada en suelo.

"Va estar bien aunque le va costar sanar la herida de la nariz ya que le partió la piel. mejor me voy de este lugar, ya me demore demasiado en este lugar y no quiero que me rodeen."

Cuando levante a la chica, ella se despertó muy asustada pero cuando vio que el tipo que la golpeó estaba desmayado en el suelo y que estaba sangrando se relajo, le dije que se sujetará de mi y obedeció. Cuando pase a lado de el tipo, lo agarre del tobillo y lo jale hacia fuera de la cafetería de arrastrada.

Después de salir de el lugar aunque fue complicado, porqué había un poco de gente y me tocó despistarlos. Cuando llegue a mi consultorio, cerré la puerta y la chica que llevaba en mis brazos se sorprendió el que la llevé a ese lugar.

Lleve al tipo al sótano y cuando volví a subir ya estaba usando mi identidad de van Hohenheim.

-Que día más agitado y yo solo quería un café.

-Asi que era usted todo este tiempo!!.

-Si, si, ahora no es el momento para sorpresas chica, estás en graves problemas sabes.

-... yo... lo sé.

-Que bueno que lo sabes, de todos modos te saqué de el pequeño apuró en el que estabas sabes? lo más probable es que te hubieran castigado muy mal. Es más, el castigo más ligero sería que te enviaran a una base de concentración nazi

-Yo, lo sé.

-Parece que no sabes nada... es poco probable que lo hicieran, lo más probable es que te torturan y si no hablabas te mataban, como un ejemplo a los que se une o coopera con los rebeldes.

-...

-*suspiró* ven sígueme, te quedarás en el sótano, no te descubrirán allá abajo.

-Enserio?! muchas gracias!!.

Me dirigí de nuevo al sótano y era espacioso en una de las habitaciones estaba el tipo que traje aún desmayado.

-Te vas a quedar aquí un tiempo ya que te estaran buscando, sabes lo que tienes que hacer no? evitar hacer ruidos fuertes o cuando vengan a buscar, evitar hacer ruidos.

uno

-Si, lastima por mi cafetería...

-Mientras sigas viva puedes recuperarla, solo no te desesperes y actúes precipitadamente...

-Que vas a hacer con el nazi?

-No deberías de preocuparte por eso sabés?

- E-eso... es cierto, tienes razón no debí preguntar eso.

-Es bueno que sepas.

Salí de la habitación rumbo a la habitación donde estaba el nazi que todavía estaba desmayado, pero lo tendré que despertar, así que agarre agua de la que tenía guardada en el almacenamiento del sistema y se lo tire.

-Ugh... uff... uff... puah... dónde, donde estoy.

-Hola bella durmiente 🎶~.

-Tu... tu eres ese tipo, te exijo que me sueltes!!.

-Exigirme? a mí? parece que no sabes en qué situación estás eh... hehe...

Después de sonreír le di un puñetazo en la mejilla.

-Ugh... tu, me la vas a pagar!!.

-Oh... todavía no entiendes?

Después de volver sonreír le volví a dar otro puñetazo en la otra mejilla.

-Tu... Ugh...

-Que? yo qué? pequeño nazi te sientes humillado?

-Maldito gusano!!

-Vamos grita, grita todo lo que quieras nadie vendrá a salvarte... no, espera eso sonó raro...

"Por un momento se me salio lo sádico... ya extraño a Agna. Todo por este idiota..."

Con eso empecé a golpear su rostro tal cual le ví haciéndolo a la chica.

-No te gusta solo golpear a la gente en el rostro, pues toma de tu propia medicina maldito retardado.

-Para, para, eso duele.... ugh...

Ohh... se le cayó un diente... me pasé de más?, nah nunca es de más contra estos tipos, sigamos con lo siguiente. Con eso me fui a una mesita dónde estaban unas herramientas y tome unas tenazas.

Al ver que me acercaba con unas tenazas, el tipo entro en pánico.

-Que vas a hacer con eso!...

-Cuanto es 1000 menos 7?.

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Nota: hasta aquí el capítulo gracias por verlo hasta aqui, comenta si te gusto, si le faltó, si tienes alguna sugerencia y dudas. Recuerda también darle al corazón para agregarlo a tu biblioteca y asi te aparezcan mis nuevas actualizaciones.

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