Extraña sensación

"¿No hay otra forma...?" Pregunto Hong Tian con una mirada complicada.

"No tengo la mas mínima idea... no es mi problema. Es suyo... por lo que no es de mi incumbencia ni interés lo que hagan ustedes, par de hermanas, para levantar tal sello." Respondió Feng Yang con indiferencia mientras se encogía de hombros.

Desde el comienzo hasta el final siguió recostado en el suelo, como si no pusiera a Hong Tian en sus ojos.

Al escuchar las palabras de Feng Yang, Hong Tian confirmó la sospecha en su corazón, sabía que Feng Yang no era la amable y benevolente persona que aparentaba frente a Ming Yue.

Pero incluso cuando sabía esto, Hong Tian se sentía impotente porque por alguna razón no podía comunicarse de ninguna forma con Ming Yue, incluso si dejara palabras escritas o otras formas de comunicación, en el momento que Ming Yue tomaba de nuevo el control de su cuerpo, todo lo relacionado con ella, Hong Tian, se esfumaba... incluidas las palabras que había dejado en ocasiones escritas o grabadas...

Aunque no comprendía esto, de cierta forma llegaba a entender que ciertos requisitos todavía no se habían cumplido como para que ella y Ming Yue pudieran comunicarse...

"De hecho simplemente debes de tener relaciones sexuales con una persona de tu sexo opuesto para levantar el sello, en este mundo, el Reino del Señor del Cielo no creo que falten voluntarios para ayudarte en tu buena causa." Se burló Feng Yang con una extraña sonrisa mientras miraba a la impotente Hong Tian.

"¡Eres repugnante!" Resoplo Hong Tian con asco al mirar a Feng Yang, pero solo podía insultarlo... no tenía el valor ni la fuerza como para intentar darle una paliza...

"¿No tengo razón?" Pregunto Feng Yang.

"¿Por qué preguntas lo obvio?"

"¿Realmente disfrutas de qué me encuentre en esta situación?" Pregunto Hong Tian enojada.

Sabía que de cierta forma Feng Yang tenía razón y que era demasiado simple el levantar el sello en ellas... solo que su inocencia no podía ser entregada... simplemente no podía siquiera imaginar en entregarla y mucho menos a hombres tan repugnantes como Shi Tianshi.

"No... nunca estaría tan aburrido como para disfrutar de tu desgracia e impotencia... solo que siento que tu situación actual es bastante interesante... lo que me lleva a pensar, ¿qué harás para levantar el sello en ti y Yue'er?" Pregunto Feng Yang con sarcasmo y curiosidad.

"¡¿Quién te dio el derecho a llamar a mi hermana tan íntimamente?!" Resoplo Hong Tian con enojó al escuchar como Feng Yang se dirigia tan íntimamente hacia Ming Yue.

"Jajaja... no creo que a ella le moleste que yo, Shi Tianshi, la llame así... ¿Entonces por qué te molestas tú?" Se burló Feng Yang.

"..." Al escuchar las palabras de Feng Yang, Hong Tian no tenía como refutar tales palabras, por que sabía que de hecho Ming Yue no sólo no se enojaria sino que realmente no le molestaría que Shi Tianshi la llamara tan íntimamente...

"¿Tal vez hay un límite de tiempo?" Pregunto Hong Tian de repente ignorando completamente la pelea verbal que estaba teniendo con Feng Yang.

"¿Para qué hay un límite de tiempo?" Pregunto Feng Yang con curiosidad mientras fingía ignorancia.

"Suspiro, deja de fingir ser ignorante, me estoy refiriendo al veneno con el que nos envenenaste..." Dijo Hong Tian con una expresión realmente irritada.

"Oh... con que eso era... claro..."

"¿Lo hay...?" Pregunto Hong Tian con una expresión alegre.

"No lo sé..." Respondió casualmente Feng Yang, rompiendo secamente todas las ilusiones y esperanzas de Hong Tian.

"Tú... tú... ¡Eres la persona más molesta e irritante que he conocido!" Reschino Hong Tian mientras se mordía el labio inferior con odió.

"Suspiro, que lastima, que lastima..." Suspiro Feng Yang con algo de amargura.

"¿Qué?" Pregunto Hong Tian con frialdad.

"Que lástima, es una verdadera lástima que una mujer tan hermosa sea tan molesta y ruidosa. Si fueras tan... amable, como Ming Yue, podría llegar a considerar tomarte como mi concubina pero simplemente..." Dijo Feng Yang con algo de disgustó al terminar de hablar mientras miraba de reeojos a Hong Tian.

"¡Maldita sea! ¿Crees que me importan tus palabras o gustos? ¡Vete a la mierda! ¡Te pudriras en los rincones más profundos del infierno cuando mueras! ¡Eres simplemente desagradable al extremo y me repugna todo en ti...!" Maldijo y grito Hong Tian mientras apuntaba con su dedo índice a Feng Yang.

Al escuchar sus palabras, Feng Yang que parecía disfrutar de molestarla y hacerla enojar, simplemente sonrió al escuchar como lo maldecía Hong Tian.

Luego tan pronto como Hong Tian termino de maldecir, como si fuera un fantasma, Feng Yang apareció detrás de Hong Tian que estaba sentada y se puso en cuclillas mientras movía con su fría y pálida mano el cabello blanco de Hong Tian.

Hong Tian que en este momento estaba maldiciendo a Feng Yang, sintió como un escalofrío recorría su columna vertebral al mismo tiempo que se daba cuenta que Feng Yang que estaba frente a ella, había desaparecido.

"¡Ah!" Al mismo tiempo que noto la desaparición de Feng Yang, Hong Tian exclamó con sorpresa al sentir una aspera y fría mano que agarraba su barbilla, no solo eso... sintió como otra mano acomodaba su cabello y se deslizaba por su cuello...

Todo sucedió tan rápido que cuando Hong Tian se dio cuenta, vio como las ásperas, frías y pálidas manos de Feng Yang que parecía un fantasma, estaban tocando su cintura y barbilla.

Mientras el rostro de Feng Yang estaba a unos centímetros del de ella, ambos estaban tan cerca el uno del otro que incluso podían sentir sus respiraciónes, al notar todos estos rápidos sucesos. Hong Tian se sobresalto y su corazón se aceleró...

"Suspiro, si no estuvieras en el cuerpo de Ming Yue, tal vez te hubiera dado una lección..." Se burló Feng Yang mientras enredaba su brazo izquierdo alrededor de la cintura de Hong Tian y con su mano derecha sostenía su barbilla mientras que al mismo tiempo mordía el labio inferior del cuerpo de Ming Yue.

"Tú... tú... me repugnas, aléjate del cuerpo de Yue'er!" Rugio furiosamente Hong Tian mientras temblaba de ira, no solo eso, el cuerpo de Ming Yue estaba completamente sonrojado y su piel blanca como la nieve había tomado un color rojizo.

"Jajajaja, dices que no con tu boca pero que si con tu cuerpo..." Se burló Feng Yang mientras se alejaba de Hong Tian, como si nada hubiera pasado...

"¡Muérete!" Maldijo Hong Tian con enojó.

Luego se alejo a lo más profundo de la cueva y se quedó sentada en silencio... mientras estaba en guardia contra Feng Yang.

Por otro lado, Feng Yang salió de la cueva y se subió a la copa de un árbol frente a la cueva y se recostó. Luego de acomodarse, cerró los ojos y mientras sonreía burlonamente comenzó a descansar un poco...

Extrañamente, sintió gran interés por este par de hermanas gemelas que eran tan... opuestas.

Pero había que decirse que entre Ming Yue y Hong Tian, le agradaba e interesaba un poco mas la última. Disfrutaba de hacerla enfadar e irritar... sentía que se veía bastante más hermosa que Ming Yue cuando se enfadaba...

"Feng Yang, oh, Feng Yang... ¿Estás tratando de volver a ser nuevamente lo que fuiste alguna vez en el pasado...?" Se burló interiormente Feng Yang por los cambios casi imperceptibles que comenzaban a ocurrir en su corazón...

Había pasado mucho tiempo desde que sintió tales ondas en su corazón por última vez.

Sabía que el alma del Feng Yang de este mundo habia sido completamente borrada, pero las emociones de este las cuales habían sido heredadas atraves de sus recuerdos, no habían sido borradas o suprimidas completamente... estas se habían fusionado con lo más profundo de todo su ser.

Despertando en ocasiones a aquella parte de él la cual era más emocional, pero antes de que aquella parte despertara completamente, su personalidad firme y decidída se mostraba... haciendo nuevamente presente la frialdad e indiferencia hacia todo y todos en el mundo.

...

Seis horas después...

Feng Yang seguía durmiendo tranquilamente en la copa del árbol.

Por otro lado, una figura había comenzado a salir de la cueva...

"¡Tianshi, Tianshi, despierta!" Grito la mujer que acababa de salir de la cueva mientras se ponía de pie frente al árbol en el que estaba descansando Feng Yang.

"¿Hmm...?" Al escuchar el grito, Feng Yang abrió sus parpados y dirigió su mirada hacia la hermosa mujer que lo llamaba.

Al mirar hacia la fuente de la voz, Feng Yang entrecerro los ojos, por que esta era Ming Yue.

Lo que hizo que Feng Yang se sorprendiera por que anteriormente pensó que Hong Tian se había apoderado del cuerpo de Ming Yue, pero ahora está última había vuelto a la normalidad con sus hermosos e inocentes ojos color azul marino acompañados de su cabello y largas pestañas negras.

Pero la sorpresa era simplemente sorpresa y Feng Yang bajo rápidamente a hablar con Ming Yue.

"¿Estás bien? ¿Pudiste descansar?" Pregunto Feng Yang con una sonrisa.

"Mm, Tianshi, tú pudiste descansar bien?" Pregunto dulcemente Ming Yue con una sonrisa.

"¡Lo hice!" Asintió Feng Yang.

Luego de hablar un rato con Ming Yue, Feng Yang la acompaño al interior de la cueva y sacó varías provisiones para comer y beber con ella.

Después de hablar por unas dos horas, Feng Yang se puso a cultivar. Comenzó a circular su Verdadera Técnica del Yin Celestial y a absorber locamente la energía mundial en la atmósfera de éste Reino Secreto.

En tan solo unas seis horas, Feng Yang formó veinticuatro gotas de Yin Qi y esto fue solo porque Feng Yang no uso su Verdadera Técnica del Yin Celestial al máximo de su nuevo límite.

Esto era porque Feng Yang sentía que si forzaba mucho la velocidad de circulación de su Verdadera Técnica del Yin Celestial en el Reino Refinamiento de Qi, en el que sus meridianos eran todavía muy frágiles, en el futuro podría ser perjudicial para su cultivación.

...

Luego de estar por tres días en este mundo llamado el Reino Secreto del Señor del Cielo.

"Tianshi, Tianshi, a donde vamos a ir ahora?" Pregunto Ming Yue con curiosidad e interés mientras miraba a Feng Yang que estaba de pie en la entrada de la cueva, mirando hacia el cielo con una expresión pensativa.

Realmente había comenzado reflexionar seriamente en que dirección se dirigiría, deseaba aumentar su fuerza y también ver si podía encontrarse con la civilización de perlas de cultivo que eran similares a seres nativos de este mundo...

"Norte... nos dirigiremos hacia el norte..." Respondió Feng Yang con una expresión digna y misteriosa.

"Mm, por mi está bien... a donde sea que vayas, te seguiré." Sonrió dulcemente Ming Yue.

Al escuchar sus palabras Feng Yang simplemente asintió. Pero en su corazón todavía no podía entender del todo como alguien como Ming Yue podía ser tan... extraña, incluso como para poder confiar en él, alguien que conoció hace poco.

Luego de un rato, Feng Yang y Ming Yue dejaron la cueva y comenzaron a dirigirse en dirección hacia el Norte.

...

Así rápidamente pasaron aproximadamente dos días y Feng Yang junto a Ming Yue seguían caminando en dirección hacia el Norte, deteniéndose de vez en cuando para comer, beber y dormir.

Feng Yang solía hacer guardia mientras Ming Yue dormía y en ocasiones él descansaba unas horas mientras Ming Yue se quedaba a su lado, lista para despertarlo por si se acercaba el peligro.

En este día, mientras seguían su tranquilo viaje, Feng Yang y Ming Yue habían salido complemente del enorme bosque en medio de las montañas en el que habían aparecido.

En este momento estaban bajando de una de las enormes montañas que rodeaban el bosque en el que habían aparecido. Al bajar la montaña llena de árboles y pasto verde, Feng Yang y Ming Yue incluso podían escuchar su respiración por el gran silencio que había en sus alrededores.

De repente Feng Yang se detuvo, sintió una extraña sensación de inquietud recorrer todo su cuerpo...

"Tianshi..." Ming Yue que caminaba detrás de Feng Yang tiro suavemente de la túnica de Feng Yang mientras miraba en cierta dirección con algo de miedo en sus ojos.

Aunque Feng Yang solo sentía una extraña sensación de ser observado, Ming Yue realmente había visto algo...