Renacer en algún mundo.

Atención, esta es una de las historias que tengo guardadas en borradores, si les interesa que siga subiendo capítulos, comenten y boten por esta historia.

Tengo tres capítulos más de esto guardados, los iré soltando según vea el apoyo, tal vez 4 comentarios por capítulo.

Para mis viejos lectores que siguen esperando capítulos, todavía estoy algo enfermo y estoy haciendo esto con la ayuda de un amigo, ya estoy mejorando, pero es lento, volveré con mas capítulos de mi otra historia mas tarde, eso es todo, nos vemos.

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Se que estoy muerto.

En mi vida fui un asesino experimentado, formé parte del escuadrón de combate 8113 en la guerra de Afganistan, peleando codo a codo con los míos.

Luego de la guerra, no podía simplemente dejarlo, me había cambiado, lo sabía, la adrenalina de estar siempre al borde de la muerte, de ganar contra otros a pesar de que uno de los dos bandós debía morir para que el otro viviera.

Por eso me convertí en un asesino, un mercenario, ganaba mucho con eso y en mi tiempo libre entrenaba o me relajaba con mis dispositivos para entretenerme, siempre me arrepentiré de no poder formar una familia debido a mi forma de vida.

Además, siempre ayudaba en distintas partes del mundo, había creado una empresa hace algún tiempo, mi sobrino se hizo cargo, pero me mantuve vigilando el dinero, por si acaso. Tomaba la mitad del dinero de cada trabajo que completaba y se lo daba a la empresa, quien a su vez ayudaba a todas las personas que podía, dentro y fuera del país.

Seguí haciendo lo que me mantenía vivo, matar. Hasta que ese maldito volvió a aparecer, me enteré que alguien le había puesto una trampa a uno de nosotros en el 8113, y supe que algo andaba mal, pero estaba trabajando en Europa en ese momento por lo que no podia ir a ayudar.

No fue sino un año después que me enteré de ese maldito bastardo, Solotov, no se cómo sobrevivió, pero ya había matado a uno de nosotros, y por lo que mis conexiones me dijeron, había alguien detrás del 8113, por lo que vendrían por todos nosotros.

Me dieron caza cuando estaba en Asia, los malditos tenían a la mayoría de los Yakuza y a la Tríada bajo su mando.

Cuando llegue a México, lugar donde se encontraba uno de los dos últimos sobrevivientes del 8113, le disparé con un francotirador a un tipo que estaba en una piedra alta, apuntando su rifle a mi compañero, esa bala atravesaría tanto a Bob Lee como a July Swagger de no ser por mi.

Pero a cambio revelé mi posición a un tipo que me perseguía desde China, me disparó en el hígado, y lo último que vi fue su cabeza siendo atravesada por una bala.

Ahora estoy aquí, frente a dos personas, uno tiene el cabello dorado con ojos dorados rasgados, con su melena cayendo detrás de él con pequeños brotes de madera cortados en el, y un traje de negocios negro.

La otra tenía una cabellera negra cual noche con pequeños detalles de estrellas en el, sus ojos son totalmente negros y su moderadamente grande y curvilínea figura atraería a cualquiera, con un apretado traje de negocios rosa que abrazaba sus cuevas.

"¿Y bien? Que es lo que hago aquí, no es así como me imaginaba la vida después de la muerte". Les dije, si me espera el infierno entonces lo aceptaré con los brazos abiertos.

Fue el hombre quien respondió. "Cuida tus palabras, humano, ahora mismo no estás en posición de preguntar o hablar, cierra la boca". Fruncí el ceño ante sus palabras llenas de arrogancia, siempre me gusta golpear a personas como el.

Lo mire, al menos eso puedo decir ya que no se que es exactamente lo que soy ahora. "Escucha pequeña mierda, no creas que puedes hablarme como se te de la gana". Le dije, sacándole el dedo medio, creo, no puedo ver mi mano.

Eso pareció molestarlo mucho cuando apuntó su mano hacia mi. "Te lo advertí una vez, no hay una segunda". Así que es de los que no pueden recibir lo que dan.

"Vete a la mierda, ¿quieres ir a llorar a los brazos de mami? Levántate y párate frente a mi, resolvamos esto como en la vieja escuela". Levante mi mano para hacerle señas para que se acerque. "Ven aquí, ¿acaso tienes miedo? No te preocupes, lo entiendo, no muchos pueden competir con el gran yo". Me señale a mi mismo con arrogancia, me gusta ver a estos tipos caer en la rabia ciega por su propia personalidad.

"Te matare". Su mano brillo en partículas doradas, pero la mujer sentada junto a él le agarró la muñeca, impidiéndole hacer algo.

Ella inclinó ligeramente la cabeza hacia mi luego de que las partículas doradas se desvanecieran. "Disculpa a mi hermano menor, es nuevo en el trabajo y no está acostumbrado a tratar con almas mortales. Iré directo al grano, ya que los de tu especie prefieren eso a una larga charla que no escucharán o olvidaran, ya que no podrán recordar casi nada de esta charla una vez se vayan de aquí". Ella levantó la cabeza, mirándome por un momento.

Bien, ahora estoy curioso, no se que sea ese brillo dorado, pero parece que aquí, muerto, solo estoy en forma de alma, y bueno, aparte de eso no se nada más y eso debería ser aterrador, pero ya me había mentalizado para morir antes, en y después de alistarme para la guerra.

Lo desconocido no me aterra, me emociona.

Ella me sonrió un poco, parecía que me estaba evaluando, en cambio, si las miradas mataran, mi alma ya habría dejado de existir si la mirada que me daba ese sujeto.

"Reencarnas en un mundo que elige el que está arriba, no tienes elección, pero a cambio, se te conceden tres deseos que no pueden superar el límite de tu nuevo mundo, también se te concederá una pequeña sorpresa que se te entregará en algún momento de tu nueva vida, puedes escribir aquí, solo por el nombre de lo que quieres e imagínalo tanto como puedas". Dijo, mientras me pesaba tres pequeñas hojas con dos lineas que se pueden usar para escribir.

Así que no me estoy muriendo y en cambio soy reencarnado, mentiría si dijera que no quiero o que no me siento emocionado, es lo contrario, siempre me e sentido atraído por este tipo de trama, y si mi historia está siendo escrita ahora mismo, me importa una mierda, porque esta es mi vida.

"Tengo una pequeña duda". La mire, y ella asintió para indicarme que continuará, mientras que ella no había soltado la mano de su hermano, quien estaba callado y sentado, pero su mirada en mi no desapareció.

Esto es algo que quiero saber. "Si solo gasto uno de mis deseos, ¿puedo elegir guardar los otros para usarlos en cualquier momento que desee? Por ejemplo, si uso la palabra "Osesed" para hacerle saber a alguien que quiero utilizar los otros deseos, ¿sería eso posible?" Le pregunté, esto es algo que quiero saber, si voy a un mundo como Tensura, Lovecraft o Warhammer 40K me gustaría tener un plan de respaldo.

Ella asintió. "En teoría es posible, pero debes entender que si usas esa palabra, que es básicamente deseos escrito al revés, el código se dirige directamente a la persona que te dio los deseos, ósea yo, pero aquí también tenemos vida personal además del trabajo, que ya de por sí es agitado, por lo cual, nada asegura que atienda de inmediato, podría tardar horas, días, semanas o meses en el peor de los casos, mientras que puede qué tal vez sea instantáneo, ¿estás seguro de arriesgarte así?" A su pregunta, le sonreí.

Esta mujer me gusta. "Si, es mejor algo que nada, ademas, si muero, siempre puedes buscar mi alma y revivirme por un deseo". Tome un papel y un lápiz apareció mágicamente en mis manos.

No tenía que pesarlo mucho, ya que en mi vida lo único aparte de matar, ejercitarme y pasar el tiempo en internet, era consumir anime y todo lo que estuviera relacionado, además, la mitología fue punto clave que me hizo unirme al lado otaku y a leer fanfics.

Solo escribí tres cosas allí y pensé en ellas en profundidad, además, siempre me gustaron este tipo de poderes.

El papel desapareció en partículas blancas.

La mire mientras pensaba en algo. "Quisiera pedirte un favor. ¿Podrías hacer que lo que pedí esté fuera de los poderes mundiales o universales? Por ejemplo, si alguien con el poder del Imagine Breaker me toca, no pasará nada porque mis poderes no son de ese mundo. Si, ya se que el Imagine Breaker lo anularía de todos modos, pero es un ejemplo, además, si puedes hacer que mi mente vuelva a mi a la edad de 4 años sería genial, no quiero ser un bebé de nuevo". Pude verla pensarlo.

Colocando su mano derecha en su barbilla, observó el vacío durante algunos segundos. Esta mujer es peligrosa, hay algo en ella que me atrae, no se si son esos ojos sin vida que oculta muy bien, o tal vez es su comportamiento casual que oculta su ser aburrido y apático.

Ella me miró con un poco de sorpresa, pero siendo sincero no se a que se debe, oh, ahora que me doy cuenta, esta mujer es realmente cautivadora por si misma, no importa su cuerpo, ese algo en ella que me llama es tan intrigante que anhelo el día en que pueda descubrir que es.

Ella se recompuso y soltó a su hermano, tosiendo un poco para llamar la atención. "Bien, puedo cumplirlo, ya que no es demasiado, con eso fuera, ya es momento de dejarte ir. Solo me da un poco de curiosidad, ¿no harás las preguntas que se hacen todos los que han llegado aquí? Cosas como: ¿Por que yo? ¿Que hago aquí? ¿Acaso morí? ¿Es este el infierno? ¿Por que no voy al cielo o al infierno? Los humanos generalmente siempre hacen este tipo de preguntas". Ella me preguntó, y supongo que es comprensible que quiera saber.

Antes de responder me moví ligeramente cuando aparecieron números, letras, runas, signos e imágenes frente a mi, pude comprenderlos todos con solo una mirada, y mi cuerpo o alma reaccionó antes de que lo que supongo es mi cerebro espiritual lo procesará.

Dos agujas doradas pasaron volando por el lugar que una vez ocupe.

Mi mirada estaba en el tipo arrogante que tenía un dedo levantado formando "Mi hermana es demasiado amable con ustedes mortales, pero yo no, pagarás caro por tu insolencia, nunca en mi vida había conocido a alguien tan audaz". Su comportamiento había cambiado ligeramente, ahora parecía alguien más accesible, pero su aura de muerte dice lo contrario.

Lo ignore para concentrarme en estas cosas frente a mi, son fórmulas complejas, antes no podría entenderlas, pero ahora es casi como respirar, instintivo.

"Respondiendo a tu pregunta, ya e aceptado la muerte hace mucho tiempo, siempre estuve bailando sobre la cuerda que está en el vacío, por lo que el miedo que alguna vez sentí se transformó en emoción, ¿que es lo qué hay después de morir? Ese es un misterio que todos quieren saber, pero que otros anhelan descubrir, yo quiero hacerlo con toda mi alma, por eso no me importa donde voy". Mi respuesta pareció interesarla, pero su hermano había decidido que no le gustaba ser ignorado.

En sus manos apareció un arco, estaba más allá de mi lo hermoso que era, y una flecha dorada estaba en el, el soltó la mano que reteñía la flecha.

Pero ella extendió la mano y un pilar de luz gris rodeó al hombre, encerrándolo en el interior.

"Veo que tus pedidos ya se han integrado con tu alma, es bueno saberlo, ahora, debes ir a tu nuevo mundo, espero que la suerte te acompañe". Antes de que si quiera pudiera moverme, me desvanecí del lugar, lo último que vi fue su sonrisa, y muchos números, letras, signos, runas e imágenes.