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Oculto en la Fuerza

Viral fue alguna vez un Jedi que lucho mano a mano por la luz, enfrentando a sus enemigos. el conde dooku fue su alguna vez maestro y también su enemigo, los clones fueron sus aliados y mas tarde sus perseguidores, Anakin fue su hermano y mejor amigo, mas tarde la razón de su muerte. después de vivir una vida completa donde solamente vio guerra muerte, destrucción y dolor. su alma es enviada a un mundo diferente, en un joven estudiantil al borde del suicidio. un mundo de superhéroes y cosas anormales, pero sin tecnología para salir al espacio. Viral quien sufrió toda su vida, ahora tiene una segunda oportunidad conservando sus dones de la fuerza, donde esta no esta corrompida por la oscuridad, donde solo el sabe usarla y en su máxima capacidad. (si la historia resulta bien, entonces se creara una tercera historia, de otro personaje en otro universo, el cual contara con el personaje de esta historia y el del la historia de Marvel en algo sorpresa)

Moon579 · Anime & Comics
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16 Chs

¿Hogar?

aunque perdido en esta nueva realidad Viral podía seguir como si nada le influyera, se parecía a su antigua vida, pero no lo era, héroes, villanos e incluso el mismo había muerto.

su madres, abandono a su padre y a el cuando aun era un niño, ella se fue para investigar LexCorp en Metropolis una ciudad que nunca existió para Viral, pero daba igual ya es la segunda vez que cambia de mundo, con el tiempo te acostumbras, el problema es su padre, le debía a unos mafiosos de Gotham desapareciendo un día sin dejar rastro, ante tal situación un niño de 16 años no lo soporte y acabo con su vida en ese puente, arrojándose de el, fue en el momento que estuvo apunto de saltar que mi conciencia dentro en su cuerpo, adueñándose de su vida acabada.

mientras seguía dándole vueltas a la situación en su mente, Viral llega a una casa de dos pisos, en el piso bajo un comedor pequeño donde se debería atender gente, pero ahora estaba completamente rallado con pintura, por dentro abandonado y sucio, completamente cubierto con una capa de polvo, los vidrios en mal estado y la comida en el congelador era lo único con buen aspecto y olor.

-no tengo mucho apego con su familia, lamentablemente, pero si algo se es que para vivir necesito dinero-

subiendo al segundo piso, una habitación con diferentes botellas de licor vacías por el lugar, basura en el alrededor y ropa sucia, aun así lo que mas llamo la atención a Viral fue las navajas con sangre seca y los paños con la misma arrojados en un rincón.

-¿porque?-

las lagrimas pasaron por sus ojos, aunque el sea otra persona, aun existen los sentimientos dolorosos de quien estuvo antes.

débilmente seco sus lagrimas y se empeño en limpiar el lugar, un arduo trabajo, pero completamente grato para crear un ambiente para dormir.

aun así seguía teniendo la costumbre de no dormir en las noches, por su vida de fugitivo aun le quedan secuelas.

a paso lento y calmado, decidió limpiar el pequeño comedor, con un trapo agachado en el suelo, limpiar el suelo, mientras los recuerdos con su maestro batallando contra los Sith.

recuerdos bellos por los cuales logro sacar mas de una sonrisa, recuerdos cuando su maestro se unió a los Sith traicionándolo, las memorias lo golpean desgarrando su cerebro, se combinan con memorias de su padre ebrio en el piso, de las cartas de su madre, negando la existencia de haber tenido un hijo, de un muñeco negro encapuchado que el admiraba cuando joven.

-haa... a..-

el dolor y la desesperación las voces, cada imagen, cada acción, los gritos de auxilio, las voces de odio y dolor, se mezclaban con la fuerza, una ciudad tan caótica y su gente sufriendo en cada rincón, todo golpeo instantáneamente la mente de Viral cuando solo escucho una, una voz que se acercaba.

-¡Eres una ingrata Hija!-

-¡Déjame salir nadie te ayudara!-

"debo alejarme, y-o-

dudando en sus pensamientos sobre que hacer, sintió la calma de la fuerza en el, recordando sus enseñanzas y valores.

"no, yo soy un maestro Jedi y debo guiar en el camino de la luz a quienes tengan problemas"

abriendo la puerta que da directamente a el comedor, logro ver una joven en el suelo sujetando su cabeza con dolor, la ropa sucia oscura, una expresión oscura y apagada en su rostro, sin mencionar el inmensurable dolor que debía estar sintiendo para hacer una cara de tanto sufrimiento.

dudando si acercarse o hablarle solamente la joven lo miro con miedo y pánico en su mirada, aun con las manos en su cabeza por el dolor, Viral la compadeció con la mirada y alzo su mano, un viejo truco Jedi que aprendieron fue crear una protección mental con la fuerza.

-haa, que interesante, tienes algo aterrador dentro de ti-

levemente los dolores se fueron calmando y la joven logro soltar un suspiro de calma, pero aun así con la mirada fría en dirección del joven frente a ella.

-¿quien eres? ¿Por qué me ayudaste?-

reincorporándose con firmeza y con sus manos atrás, analizo a Viral con la mirada fría.

-Calma niña, no quiero hacerte daño, te ayude porque necesitabas ayuda en el sendero oscuro que te atormenta-

confundida por sus palabras Viral volvió adentro de el comedor, pero la miro atrás.

-pasa, juzgando por tu aspecto no as comido, ni descansado como corresponde en mucho tiempo-

aun así no se movió del lugar.

-¿porque debería confiar en ti?-

pero por un momento Viral miro el suelo con la mirada triste y destruida, como si algo hubiera pasado por su mente en ese segundo.

-no debes, déjalo a tu criterio-

las veces que esas palabras llegaron de otras personas que no pudo salvar, las veces que la gente dudo de el e incluso lo atacaron por eso mismo, talvez ya se había cansado de escuchar eso.

Viral volvió dentro y comenzó a preparar un platillo de arroz acompañado con carne y verduras fritas, cuando la joven también dio pasos tímidos al interior.

-perdona el desorden, me encontraba limpiando-

-hum-

con un sonido de aprobación tomo asiento en la barra frente a la cocina, observando el alrededor.

-Soy v... Vail Smith-

recordando en sus memorias, el nombre de el propietario de este cuerpo era Vail Smith, Viral Fulgus ya no era necesario, ya no era un maestro jedi, solo una persona normal.

ella mirándolo mientras cocinaba, decidió también hablarle.

-soy Rachel Roth-

con una voz casi en susurro dejo salir su nombre, mientras Vail dejaba en la barra frente a ella un plato de arroz con verduras sobre el y otro con carne ensalzada.

-perdona si no sabe muy bien, hace demasiado tiempo que no cocino-

dando una escusa, sobre sus dotes de cocinero, pudo ver como alegremente la muchacha comía de los platillos con alegría.

-ja ja ten cuidado, te puedes ahogar si comes muy deprisa-

dejándole a un lado de la comida una botella de jugo, Vial continuo limpiando las ventanas del comedor.

-¿como sabes sobre lo que tengo?-

esta vez Rachel había iniciado la conversación.

-tengo un don, que me permite saber algunas cosas que otros no y también hacer algunas cosas que otros no-

como demostración estiro su mano y un trapo en el lava bajillas llego a sus mano rápidamente, Rachel no se sorprendió por la demostración de Vial, pero aun así pudo ver la aprobación en su mirada.

-¿vives aquí solo?-

-si-

solo cuando escucho esas palabras comenzó a caminar por el lugar con algo de libertad.

-no pareces muy viejo ¿también es por tu don?-

aunque parecía un interrogatorio, Vial podía entender claramente la confusión en ella preguntando esas cosas e incluso pudo notar un poco de interés.

-no, solo tengo 16 años, aun sigo estudiando-

-¿y tus padres?-

pasando de limpiar las ventas a acomodar los asientos y mesas, le respondió con calma a Rachel.

-mi madre se fue y mi padre esta muerto-

el silencio lleno el lugar y Vial dejo salir sus palabras con calma.

-tu no eres de por aquí ¿cierto?-

-no..-

aunque pareció algo incomodo para ella hablar sobre ese tema, Vial necesitaba saber que era para ayudarle.

-¿tus padres?-

el silencio lleno el lugar, ante ese incomodo silencio, dado por la difícil pregunta hecha de su parte para Rachel, Vial decido subir para acomodarle un lugar para dormir.

-vamos, para hacer un lugar para que duermas-

-estoy bien así-

claramente la joven no tenia intenciones de dormir, pero Vial la convenció con unas pocas palabras.

-puedo mantenerlo controlado mientras duermes-

casi se ilumino completamente el rostro de la joven, dejando ver claramente su piel pálida como un papel sin machar y su cabello violeta oscuro fugándose por la capucha.

Vial decidió hacerle la cama con las pocas sabanas limpias que le quedaban.

-duerme aquí, yo estaré abajo, si me necesitas solo dilo-

preparado para alejarse, Rachel toma una punta de su camisa, con su mano.

-gracias..-

musitando tímidamente las palabras, Vial solo le asintió y se dio vuelta para acariciar su cabello.

-no estas sola, tranquila-

dejándola así, Vial se llevo una chaqueta para dormir en una silla del comedor.

la oscuridad y el silencio llenaron el lugar, Rachel después de mucho tiempo pudo descansar, pero por el otro lado Vial se encontraba usando los poderes de la fuerza en su máximo esplendor de pie en el centro del comedor, para contener el demonio dentro de ella, un ser que aun encadenado y hechizado, tenia un poder de tal magnitud, esa noche Vial entendió que sus poderes con la fuerza, no eran rival para lo que sea que era esa cosa, si quería ayudarla debía ser uno con la fuerza.