capitulo 1

Capítulo 1. 

- ¡LUCY HA VUELTO A CASA PERRAS! El grito todo poderoso de un hombre joven de más o menos unos 17 años de edad con cabello blanco puro, y un par de inquietantes ojos rojos brillantes con locura. 

-¡hola caballero! Sin embargo, pese a todo esa voz parecía tan alegre y despreocupada que en realidad le fue desconcertante, sin embargo no era como si realmente le importara mucho así que simplemente se giro para ver a su viejo amigo el viejo Peter quien… espera desde cuando era rubio y no tenia barba. 

- Oh un nuevo San Pedro. Pregunto con una sonrisa realmente no le importaba, aunque se preguntaba que cosa había hecho el anterior para ser reemplazado, aunque si no se equivocaba lo más probable fue que el pobre tuvo un colapso nervioso hace diez años durante su última visita y este era su reemplazo. . 

- Así es ¡sea bienvenido a la tierra prometida! ¡el eterno descanso donde podrás reunirte con todos tus seres amados y gozar de una ás que jamas hayas imaginado! Dijo el hombre rubio con una sonrisa alegre, sin embargo, el peliblanco por su parte simple y llanamente bufo esta no era su primera vez en este lugar y sabia que el cielo era casi tan depravado como el infierno solo que era mucho más hipócrita ya que en el infierno no ocultaban sus depravaciones. 

- Ppppffff si claro. Se burlo el peliblanco antes de simplemente tomar su teléfono y tomarse una foto junto a san pedro para enviársela a su padre como prueba de que había venido a ver a su madre, y de paso para re tuitear la nueva estupides cometida por su hermano menor Rizevim. . 

-Entonces caballero. San pedro en realidad estaba un poco confundido ahora mismo, normalmente las almas no traían ese tipo de aparatos y generalmente estaban un poco más exenticas respecto a su muerte, pero este joven simplemente se burló. - ¿What is your name? Pregunto Provocando que el peliblanco le dijera algo en un idioma completamente incomprensible. – ehm, no entendí eso. 

- Oh es verdad ya nadie conoce ese idioma. Dijo el peliblanco antes de encogerse de hombros. – Naruto Némesis Morningstar. Dijo finalmente antes de simplemente mirar a San Pedro. – vine a ver a mi madre, ahora quieres dejarme entrar realmente no tengo ganas de estar en este basurero más tiempo del necesario. 

- Entonces veamos, bien, veamos Morningstar… Morningstar… shhh. En ese momento el ángel cerro su libro con un golpe seco haciendo que Naruto le enarcara una ceja. – me temo que no estás en la lista. 

- . . . Naruto por su parte no dijo nada ahora deseando que el otro pedro estuviera aquí, aunque no duro mucho pues simplemente saco un catálogo de jardín, tal vez este chico sería una buena tumbona. 

- . . . san pedro por su parte simplemente miro completamente desconcertado al muchacho frente a él preguntándose de donde obtenía estas cosas que sacaba de la nada. – entonces… no vas a pelear. 

- Nah, realmente el que este jodido aquí eres tú. Le dijo el peliblanco con genuino desinteres en su voz antes de mirarlo directamente con sus penetrantes ojos rojos como la sangre antes de negar con la cabeza, definitivamente una tumbona no le quedaría para nada a este sujeto. 

- ¿No preguntarás porque no estás en la lista? Le pregunto a Sanpedro realmente queriendo seguir con el protocolo normal, después de todo tenia que informarle a alguien porque motivo se lo mandaba al infierno. 

- No. Dijo Naruto con desinterés después de todo era el jodido pecado original, el fruto prohibido que su padre Lucifer Morningstar entrego a su madre la segunda mujer del mundo Eva. 

- Bueno, tienes tratos con varios dioses paganos, y además eres el pecado original. Dijo San Pedro eligiendo seguir el protocolo incluso si este chico no lo deseaba. 

- Espera que, no tengo tratos con dioses paganos. Dijo Naruto completamente confundido, que el recordara no tenía ningún tipo de contrato con ningún dios, bueno no a menos que contaras su trato con la loca de los gatos para que matara a Susanoo por matarle a su caballito, o el que tenia con Hades para asegurarse de que su hermano idiota Zeus no tocara a su esposa, o… okey tenia muchos tratos con dioses paganos. 

- Bueno, están Amaterasu, hades, Loki, Indra, y como 40 tratos más. Dijo San Pedro con genuino miedo esperando que este pecador en realidad no estallara en ira. 

- si bueno, ¿me vas a dejar pasar o no doradito? Dijo Lucy quien en realidad no estaba insultándolo por el único motivo de que su madre le hizo jurar por su vida y alma que no iba a insultar a nadie mientras estuviera en el cielo. 

- Si lo siento chico… pero ya sabes las reglas son reglas. Y con eso dicho y antes de que Naruto pudiera decir algo, San Pedro presionó un botón rojo en su escritorio que hizo que literalmente el cielo se abriera bajo los pies del primer pecador, quien simplemente desplego un par de alas doradas de ángel, para sorpresa. de san pedro. 

- Ja buen intento ramera. Dijo Naruto con un gorjeo alegre solo para que poco después una gigantesca bota lo golpeara en la cara mandándolo hacia el infierno en caída libre. – ¡me las vas a pagar perra! Grito de forma dramática, aunque San pedro juro que lo escucho dar un grito divertido. 

San Pedro no tenia ni idea de lo que acababa de provocar, al menos no hasta que un teléfono sonó debajo de su escritorio. 

- ¡aquí san pedro! Dijo Pedro con su voz amable olvidándose completamente del evento que acababa de ocurrir. 

- Oye novato. El guardián de la puerta se quedó desconcertado cuando escucho la voz del primer humano, ¿Por qué razón lo contactaría? Es decir el señor Adán tenía mejores cosas que hacer que llamarlo a él. 

- Hola señor, ¿Qué puedo hacer por usted? sin embargo si el primer hombre le llamo entonces no iba a discutir después de todo luego de los 12 serafines del cielo esta era la máxima autoridad del cielo. 

- Bueno solo quería informarte que esta es la semana de la visita de mi hijastro idiota, viene a ver a su madre por una semana, así que por lo que más quieras déjalo pasar y no lo provoca a no ser que quieras terminar con tu cabeza en el trasero de algún animal. Dijo Adán completamente desinteresado en realidad se llevaba bastante bien con el pequeño bastardo pero si era honesto realmente sus visitas cada diez años no podrían importarle menos, solo se aseguraba de que lo dejaran entrar porque sino lo hacía Eva se pondría triste, y si Eva se ponía triste Gabriel se enojaba, y si Gabriel se enojaba el padre de todos se enojaba y si el se enojaba bueno la ultima vez Lucifer fue enviado al infierno junto con la zorra de su Ex y poco después Eva tuvo al pequeño bastardo como represalia del universo . 

- Oh no hay problema señor, como se llama el chico. pregunto San pedro con genuina curiosidad por el hijastro del señor adán. 

- Naruto Némesis Morningstar, lo reconocerán bastante fácil tiene cara de ramera barata y ojos de lunático. Le dijo Adán aun con su tono desinteresado. 

- Oh. Dijo San pedro quien ahora solo pudo sudar en frío. – si el aun no llega. 

- No me importa solo deja pasar al pequeño cabrón. Su corazón simplemente se detuvo por unos segundos cuando escuchó eso. 

- Si señor apenas llegue lo… 

- ¡OH PEDRO! Sin embargo antes de que pudiera terminar de hablar la inconfundible voz de Naruto resonó en todo el cielo haciendo que Adán simplemente dejara salir un profundo suspiro de resignación si esto no iba a terminar bien. 

- Lo mandaste al infierno verdad. Pregunto Adán ya pensando en quien debería ir al infierno a buscar a su hijastro, no sería Lute definitivamente la ultima vez que el envío hace unos 100 años, la pobre termino con traumas vitalicios y un miedo profundo a los cactus con forma de mono ya los conejitos explosivos… honestamente aun no tenia ni la más remota idea de que significaban todas esas cosas pero bueno realmente no le importaba un carajo.

- No… dijo Pedro con su voz vacilante. 

- ¡me debes un teléfono maldita ramera! Y con ese grito una gigantesca explosión de poder demoniaco se sintió por todo el cielo.

- . . . 

- . . . 

- Estas despedido. Y con eso dicho Adán simplemente colgó el teléfono y ni dos segundos después el suelo a los pies de san pedro se abrió una vez más y acto seguido la misma bota que había enviado a su hijastro al infierno envio al guardián de la puerta al poso más profundo, vale su hijastro era un pecador, el pecado original no menos pero aun así hacerlo enojar era un crimen ya que cuando ese lunático se enojaba muchas personas morirían, no es que le importara pero aparentemente a los altos jefes no les gustaba morir a manos de un idiota andrógino con fetiches muy raros. 

Fin del capítulo.