1 Capítulo 1: Hacia un nuevo mundo

Jun, él era un niño de apariencia normal, este niño era la definición de antisocial, a él jamás le importo socializar, no le tenía pavor a las personas pero no le interesaba enlazar una amistad con gente que no conocía, para él la libertad estaba en vivir libre y sin preocupaciones, no le agradaba los extraños.

Jun venía de una familia pobre, su familia era algo grande, tenía 2 hermanos y entre ellos se apreciaban mucho, sus padres trabajaban duramente para darles a sus hijos una vida sobresaliente, ellos trataban de que sus hijos estudiarán pasa que salieran adelante.

Jun lo sabia así que intento hacer todo lo posible para no decepcionarlos.

Sin embargo la vida no sonríe como debe de ser, Jun qué una vez tuvo un sueño comenzó a cambiar durante su vida, hasta el punto donde nada le importaba, sin embargo si había algo que le importaba era el anime.

Cuando descubrió este mundo, todo cambio, fue como si su alma se uniera con este fenómeno, fue increíble.

El manga, los videojuegos y la música también formaron parte de su vida por lo que él comenzó a transformarse más en un otaku más.

Le agradaba el anime y le parecía increíble este pasatiempo, tanto que era su única motivación para vivir.

Al pasar los años Jun dejo la escuela, este comenzó a trabajar, al inicio sus padres se negaron a eso pero pronto lo apoyaron, Jun se fue por su cuenta y comenzó a hacer su vida en solitario, él solo trabajaba para sus hobbys y nada impedía qué eso sucediera, a lo largo de la vida Jun tuvo algunas novias, pero muchas de ellas no encajaban con el por lo que terminaban rápidamente, pero lo que más le dolió a Jun fue cuando una de sus novias, una de las que más enamorado estuvo, le fue infiel con otro hombre, el factor NTR le dolió mucho.

Le tomo tiempo lograr salir de esa herida pero de nuevo le hicieron lo mismo por lo que dejo de buscar mujeres y mejor se sumergió en el mundo del anime.

Su vida fue así hasta que un día como cualquier otro se fue a su jornada laboral, el día era normal, solamente que en un momento el tranquilo día se transformó en una pesadilla, toda la ciudad fue sacudida por un terremoto de 8.8 de magnitud, fue terrible haciendo que el edificio en donde Jun trabajaba colapsara por completo, por suerte todas las personas del edifico habían salido con éxito, bueno a excepción de Jun el fue el único que no salió, y ¿el por que?, bueno, su vida era una completa basura.

Él ya estaba cansado de vivir, cuando supo que había temblado el simplemente encontro la oportunidad perfecta para morir.

Morir por un desastre natural era algo que le agradaba y esperaba que eso sucediera, y tal como predijo el murió aplastado por las rocas del edifico, simplemente fue glorioso.

Lo último que pensó fue en darles las gracias a su familia, el estaba agradecido qué ellos le ayudarán mucho, una última lagrima salió de su ojo antes de morir con alegría.

.

.

.

"puajj"

"cof, cof"

"aghhh, donde estoy..."

"oh.... Si, recuerdo haber estado en ese edificio y..., morir"

"arghh, no recuero exactamente, ¿acaso fue un sueño?"

"no, no es un sueño"

"hmm..."

Jun volteo hacia donde se dirigía la voz y cuando vio el hombre este se sacudo hasta la médula.

".."

La figura que estaba frente a Jun era colosal, su cuerpo media alrededor de 20 metros, tenía una larga cabellera color blanca, su rostro era perfecto pero apenas visible, su cuerpo era como el de un dios, exactamente como el que los humanos pensaban, cuerpo alto, fornido y que inspiraba poder, tenía cuatro brazos qué le daban un aire de terror, este tenía un aura negra rodeando su cuerpo, para Jun era la definición de Dios.

"bienvenido humano, estas ahora mismo en mi aposento, soy el que muchos llaman Dios, otros me llaman demonio y muchos me llaman simplemente el creador".

El hombre hablo con una voz que inspiraba grandeza, la voz era simplemente como la de un mi so "Dios" era profunda y no parecía tener expresión o más bien no detectaba qué emoción en manaba la voz.

"H-hola..."

"no tengas miedo humano"

"ok, es solo que es increíble que Dios exista, jamás creí en Dios"

"jajaja, bueno eso ocurre con frecuencia, pero no te preocupes, cuando los humanos me ven todos se vuelven creyentes"

—Quien no se volvería creyente después de ver a tal cosa—

"lo siento señor, no creía en usted durante toda mi vida así que le pido qué me perdone ante mi blasfemias qué pude haber dicho"

"para mi que tu creas o no me es insignificante"

Dios decía esto sin ningún tipo de expresión, era casi como si la presencia de Jun importara poco.

Jun al escucharlo sudo frío, la voz de Dios era incomparable, te daba esa sensación de miedo y terror pero aún así siguió mirando hacia su dirección.

"bien te diré lo que pasara humano"

"si estas aquí no es por que me importes, simplemente me da igual la existencia de las personas, pero como soy poderoso y además estoy aburrido les daré a los humanos su más profundo deseo"

"¿deseo?"

"exacto, les daré su deseo máximo"

"la mayoría de los humanos desean tener una vida perfecta, una donde puedan ser los número uno, donde ellos puedan ser el centro de atención, para mi no es difícil así que les otorgó ese deseo, pero debes tener una condición"

"nunca debes ser malo"

"no me importa si no haces caridad o haces cosas desagradables pero nunca debes exceder el límite, si eres escoria eso es lo que te mereces, sufrir"

"...."

"bueno pero barata de charlas"

"yo he visto tu vida y bueno.... como decirlo... es miserable"

"digo.. Eh visto muchas vidas y no eres el primero con una vida así de aburrida, pero aún así eres increíble, no se como es que puedes vivir una vida tan...mala"

"pero bueno cada quien vive su vida como quiere"

"entonces que me dices, estas listo para saber tu deseo más profundo"

"este..."

"no me gusta esperar, más gente espera así que lo haré rápido"

"....."

"....."

Dios se tardó alrededor de unos segundos, el tiempo en este lugar era algo que Jun no podía medir, era simplemente un mundo extraño.

"bien lo tengo, tengo tu deseo, quieres ir a uno de esos mundos qué tanto te gustan esos mundos de anime qué tanto gustan verdad"

"¡como lo sabes!"

"jaja soy Dios idiota"

"¿se puede hacer eso?"

"por supuesto que se puede, vamos dime quieres ir a uno de esos mundos o simplemente quieres otro deseo, claro en caso de que no te guste lo que tenía planeado para ti"

"¡por supuesto que no, claro que me gusta esto! "

"bueno entonces dime a que mundo quieres ir"

"mhhhh"

"dejame pensar un rato"

"claro solamente que debes apurarte de acuerdo"

"claro"

Jun pensó durante mucho tiempo a que mundo ir, el pensó en todos los mundos qué le gustaban, pensó en todo y el tiempo corrió, Dios se aburrió de esperar así que simplemente con voz poderosa dijo unas palabras.

"se me acabo la paciencia, te enviare al mundo de naruto, adiós y que disfrutes tu viaje, el siguiente"

"ehh..."

Jun estaba por decir algo cuando de pronto toda su conciencia se volvió a desvanecer dejándolo inconsciente, el cuerpo en el que antes estaba se desintegró mandado su alma hacia un universo llenado de poderosos personajes.

"jejejeje humano, espero que te diviertas, he preparado un mundo alterno de ese mundo así que espero te gusten los cambios, además espero que los cambios que hice lo haga más divertido, lo que más me gusta de la vida es la diversión, si no te diviertes te mataré a golpes"

El Dios miraba a la dirección en done estaba yendo el alma de Jun