Identidad revelada

Ya había mirado a Luo Qing Tong de forma un poco más diferente debido al recordatorio de Ming Zun, y ahora que vio que sus habilidades médicas eran tan magníficas, se sintió aún más encantado al verla.

"¡Bien, bien!" Miró a Luo Qing Tong, con la cara llena de alegría y risa.

"¡Sí! ¡Pequeña! ¡No esperaba que fueras tan buena en medicina! Tenías razón. La lesión en mi cuerpo es realmente muy grave, y además, ¡no puedes curarla!".

Su "no puedes curarla" era diferente al "no puedo curarla" de Luo Qing Tong.

El viejo pensó que no podía curarse.

Pero Luo Qing Tong sabía que podía curarlo, pero si lo hiciera ahora, tendría que exponer su visión ocular y revelar su habilidad a las personas.

¡Ella nunca haría algo así!

¡Cuánta codicia y persecución había atraído en su vida anterior cuando su visión ocular fue expuesta!

¡Ella había logrado estabilizar las cosas en esta vida! ¡Decidió no revelarla nunca más!

¡Sólo dejaría que la otra parte pensará que no lo podía curar!

"¡Claro! Ya lo he dicho, no puedo curarte". Dijo Luo Qing Tong, levantando sus pasos y a punto de salir.

"¡Espera!" El anciano la llamó, y entonces, una caja de brocado fue lanzada hacia ella.

Aunque no puedas curarme, no es tu culpa", dijo sonriendo. El viejo no es de los que intimidan a los niños pequeños, así que esta Hierba del Alma del Dragón del Cielo y la Tierra, ¡te la daré! ¡Por cierto! ¡Hay algo más dentro que te estoy dando! Espero que lo aproveche".

"¡Pequeño, el mundo exterior es enorme! Tu talento es muy bueno, no lo desperdicies". Lo dijo con sentido, se tocó la barba y sonrió al salir.

"... Es realmente impredecible ...", Luo Qing Tong tenía una mirada deprimida en su rostro.

Miró la única caja de brocado que tenía en la mano.

Era obvio que lo que contenía era la Hierba del Alma del Dragón del Cielo y la Tierra.

Pero, ¿por qué la otra parte se lo daría así no más? ¿Sólo porque ella había hablado de su lesión?

Luo Qing Tong arrugó el ceño con cierta confusión.

Este viejo había estado actuando de forma extraña desde que ella entró, y la llamó algo así como pequeña waifu ...

¡Espera!

El cuerpo de Luo Qing Tong se puso rígido al instante.

¿Ese anciano acababa de ver su identidad?

¡Santo cielo!

Por suerte no había nadie por aquí.

Luo Qing Tong miró alrededor del compartimento y lo barrió también con su visión ocular, asegurándose de que nadie más había oído la conversación de ella y el anciano antes de dejar escapar un suspiro de alivio.

No es que estuviera demasiado nerviosa, pero ese hombre, el que había ofendido en las Montaña Juiwu, también estaba en esta sub-ciudad del Dominio Negro.

Por suerte, no había espectadores en su encuentro con ese anciano, o su identidad habría sido revelada.

Esta reunión fue tan secreta y corta, que ese hombre no se habría enterado aunque fuera muy inteligente, ¿verdad?

Con ese pensamiento, se tranquilizó.

¡Sería un desastre si ese hombre se enterara!

¡Luo Qing Tong definitivamente no quería ser atrapado por él!

Aunque el propósito de la otra parte debería ser sólo el cerdito sagrado, éste estaba atado a su propia sangre, ¡Luo Qing Tong no se lo entregaría!

En cuanto a ella, ¡ya lo había ofendido tantas veces!

Con eso en mente, Luo Qing Tong salió de la sala VIP con palpitaciones.

Pero no sabía que a miles de metros de distancia, en la Mansión del Señor de la Ciudad.

Con un chasquido, Ye Qian Ming, que había estado prestando atención a los movimientos en la sala privada, ¡aplastó el pisapapeles de Taotie en su mano!

"¿Pequeña waifu?" El rostro del Supremo del Dominio Negro era oscuro y hosco, la voz que escupió, palabra por palabra, era indescriptiblemente fría y gélida.

Ese Doctor Maligno, ¿no era un anciano en absoluto?

¿Era aquella mujer que fingía ser la que había venido a engañarle?

Cuando pensó que podría haber sido engañado una vez más, una ola de ira se encendió en su corazón.

"¡Pasa las órdenes de su señoría! ¡Invita al Doctor Maligno a entrar en el palacio!".

¡Quiería ver como podía fingir la otra parte en la mansión del señor de la ciudad!