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Lucifer, Príncipe de la oscuridad y la maldad

"Unamos nuestras fuerzas y luchemos contra nuestro padre. ¿Qué acaso no deseas ese trono?. Juntos podremos derrocar a ese viejo. ¿Qué me dices? ¿No quieres iniciar una rebelión?. Lucifer. ¿No deseas ese trono....?" Lucifer, era el arcángel más poderoso de todos los tiempos, él sucesor de dios en el trono, sin embargo, tal cosa nunca llegó, el trono fue simplemente algo que él no pudo alcanzar. Furioso por eso. Lucifer tomo rencor contra su padre y lentamente comenzó a despegarse de él y su hermano, Yahveh pudo verlo en sus ojos. Fue entonces que él aprovecho ese momento de debilidad de Lucifer, le dio la mano y le dijo que juntos podían tomar el trono, lo cautivo y le dio su mano para reclamar juntos el trono. Enfurecido, Lucifer acepto y allí fue donde todo comenzó, el inicio de su fin. Lucifer fue traicionado por su hermano y enviado al infierno por su traición al cielo. Allí fue cuando Lucifer lo entendió, él entendió la verdad de todo. Entendió que fue traicionado y ahora iba a buscar la venganza que tentó anhelaba...

Green0034 · Fantasy
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29 Chs

Capitulo 27: Problemas y mas problemas

"No somos iguales, nosotros somos bastante diferentes"

"¡¡!!"

Bell ahora mismo estaba parado frente a Héctor quien lo miraba con una mirada de sorpresa, él no se creía lo que estaba viendo con sus propios ojos.

Una velocidad sobrehumana que jamás había visto en su vida.

Sin embargo supo mantener la calma a pesar de su situación.

"Puedo destruirte si lo deseo"

"No eres mas que un simple humano y dudo mucho que soportes mi poder..."

"...."

"Hmph"

"Eres realmente impresionante plebeyo, me has sorprendido de gran manera en tu firme manera de mantenerte en la situación, eres alguien que no se agacha ante nadie y eso me agrada de sobremanera..."

"Pero también ocasionará tu caída si continuas en ese camino..."

"Pero en fin, me agradas, siento que eres la persona que he buscado durante tantos años..."

"Yo no deseo ser golpeado por ti, así que cumpliré cualquier petición a cambio de que me dejes ir sin ningún rasguño, si haces eso entonces me disculpare contigo y me iré sin volver a causarte ni un problema, así que, ¿Qué me dices?, ¿No quieres arreglar esto como caballeros?"

Héctor hizo una propuesta, acabar con todo y cumplir cualquier petición a cambio de no recibir ni un daño por parte de Bell, sabia que las diferencias de fuerzas eran enormes, él era un simple niño rico y Bell al parecer un artista marcial, por ello pidió amablemente que lo dejara ir a cambio de cualquier petición.

Todo era tan bueno que Bell eventualmente no le creyó, ver a Héctor actuar tan amablemente le hizo dudar instantáneamente de él.

"..."

"¿No lo deseas?"

"...."

"Mientes"

"¿Mmm?"

"Tu rostro me dice que mientes"

"En el interior de tu Ser tienes un enorme deseo de venganza, un deseo de acabar conmigo a como de lugar, pero estas esperando a que baje la guardia para intentar apuñalarme por la espalda"

"¿No es así?"

Bell sabia de las intenciones de Héctor, sabia que mentía y que en cuanto le diera la espalda él iba a atacarlo sin dudarlo ni un poco, había tratado durante toda su vida con múltiples traidores, múltiples traidores que tenían un parecido en común.

Las palabras que usaban sonaban demasiado perfectas, su tono de voz armonioso y con un aura de amistad, sus expresiones y la falsa sonrisa en su rostro, todo era tan evidente y alguien como Lucifer iba a ser complicado que lo engañaran, a fin de cuentas a él lo engañaron múltiples veces y es obvio que él sabia cuales eran los planes de dichas personas.

"...."

Héctor simplemente sonrió al ver que Bell había dado en el clavo, esta sorprendido por sus grandes ojos, era evidente que era diferente al resto y sin duda era digno de reconocer.

"Si que eres perspicaz, no te dejas engañar por las apariencias ni las dulces palabras, eres diferente al resto, en eso no puedo negarlo, sin embargo, ¿Crees que puedes detener mi movimiento?"

"¡¡Jajaa!!"

"¡¡Bell!!"

De su bolso saco un cuchillo que era de estilo militar y con bastante rapidez apunto su arma al cuello de Bell.

Al ver esto tanto Lilith como Natalie gritaron desesperadas por la escena que miraban ante sus ojos.

Muchas cosas pasaban por su mente, culpa, desesperación, ira, miedo y una terrible ansiedad, pasaron de una calurosa discusión a un terrible acontecimiento que iba a terminar en tragedia.

Ambas intentaron hacer algo pero eventualmente no había nada que pudieran hacer, sin embargo, Bell simplemente lo miraba con una mirada de desdén.

Estaba decepcionado al ver a un sujeto que era bastante repudiable.

"Eres basura"

Solo fueron cuestión de milésimas de segundo, el cuchillo estaba a punto de atravesar su cuello pero Bell simplemente detuvo la mano de Héctor con su poderosa mano, luego sostuvo su mano lo jalo y después le dio un poderoso puñetazo en todo su rostro.

"¡¡Paaam!!"

"¡¡AGhhhhhhh!!"

"¡¡Maldito!!"

"¡¡AGHHHH!!"

Ni siquiera el poderoso ataque de Bell hizo que este se detuviera, tomo de nuevo el cuchillo e intento matar a Bell sin importar el costo, sin embargo, de nuevo fue repelido y recibió otro puñetazo en una de sus costillas.

Héctor solo sintió como el dolor punzaba profundamente su cuerpo.

"¡¡Puaaaj!!"

Bell no se detuvo allí, inmediatamente tomo el cuchillo con su pie y lo lanzo lo mas lejos que podia, luego con rabia, comenzó a patear a Héctor sin detenerse en ni un momento.

"¡¡Baam!!"

"¡Baaaam!!"

"¡¡¡Aghhhhhh!!!"

Solo podia gritar mientras aguantaba el dolor de los golpes que Bell le estaba proporcionando, mientras todo esto pasaba, la seguridad del lugar inmediatamente fue llamada para detener esta masacre, sin embargo, ya iba a ser demasiado tarde para poder salvar al joven señorito de la casa rica.

"¡¡Miserable plebeyo!!"

"¡Vas a pagar con sangre todo lo que me hiciste!"

"¡Veras el verdadero poder que nosotros en verdad tenemos!"

"¿Mm?"

"¿Pagar?"

Bell entonces detuvo sus patadas y entonces se agacho mientras tomaba del pelo de Héctor, este solo pudo gemir mientras miraba a Bell con su rostro repleto de moretones y algo de sangre.

"¡¿Crees que vas a quedar impune solo por que eres rico?!"

"¡¿Crees que me voy a detener solo por que eres un puto rico de mierda que no tiene nada mas allá del puto dinero?!"

"Como si fuera hacerlo bastardo, hoy vas a sufrir la peor paliza que jamás te han proporcionado"

"Vas a pagar con sangre todo lo que has ocasionado"

Bell estaba furioso, si odiaba algo era a estas personas que se hacían llamara de clase alta pero que no tenían nada de clase, simples mierdas que no tenían ni una pizca de modales, en su vida anterior conoció a miles de ellos, solo se dedicaban a lamer sus pies mientras decían que estaban de su lado, sin embargo, cuando menos lo esperabas, te daban la espalda sin dudarlo ni un poco, por ello estaba tan furioso con gente como él.

"¡Adelante, atácame!"

"¡¿Crees que le tengo miedo a los golpes?!"

"¡Como si no hubiera recibido una paliza antes!"

"Atácame maldito, mátame, destrózame y veras las consecuencias que vas a pagar, solo hazlo, destroza mi rostro y veremos que es lo que pasa"

"¡¡Ataca!!"

"¡¡Atacaaaaa!!"

Héctor comenzó a decirle a Bell que lo atacara con todas sus fuerzas, no temía de su poder y deseaba que Bell lo atacara con todas sus fuerzas, a pesar de la diferencias de fuerzas, Hector no tuvo miedo de Bell y le pidió que lo atacara para que viera el poder que los ricos tenían en este mundo, para que viera la diferencia entre ambos.

"¡¡Detente Bell!!"

"¡¡Bell... Si continuas las cosas empeoraran para ti y para tu familia, piénsalo un poco!!"

Las chicas intentaban hacer que Bell entrara en razón, sin embargo, al parecer él no sabia que hacer, por un lado se quería dejar guiar por la ira, por otro lado quería guiarse por lo mas cuerdo, sin embargo, ambas personalidades peleaban por ver que era lo que tenia que hacer.

Sin embargo, algo extraño comenzó a pasar.

De pronto noto que en el rostro de Héctor comenzaron a brotar lagrimas, lagrimas de tristeza y de un dolor que Bell parecía sentir, no era por los golpes, era por algo mucho mas interno que estaba guardado en lo mas profundo de su corazón, algo que deseaba sacar pero que no lograba hacerlo.

Como si ese dolor fuera el dolor de perder a alguien importante.

"¡¡Vamos ataca bastardo, atácame!!"

Mientras decía que lo atacara, sus ojos se llenaron de lagrimas que brotaban alrededor de sus ojos, sin embargo, las ganas de atacarlo se fueron por completo, no quería perdonarlo pero algo le impidió atacarlo mas, como si ese dolor lo sintiera el mismo.

"..."

Justo cuando Bell iba a detener sus golpes de la nada un enorme escalofrió recorrió su cuerpo, como si indicara que el peligro estaba cerca.

Era una sensación que nunca antes había sentido en su vida.

"Si que eres lamentable Héctor"

"¡!

"Lastima mi orgullo saber que una mierda como tu se va a casar con la joven señorita de la familia Ross"

"Me lastima saber que la familia Ross tiene un mal ojo en elegirte a ti por encima de mi, intente hacer algo pero ellos no me escucharon, sin embargo, la espera y la paciencia termino, ahora mismo ya no puedo esperar mas de esto, es momento de que tome cartas sobre el asunto ya que hoy tu serás mía"

-¡Esto!-

-¡Esto es!-

Hacia tiempo que Bell no sentía esta sensación, esta sensación de escalofríos que recorría todo su cuerpo, esa sensación de que algo no estaba bien, sin embargo, esta vez no era por eso que tenia esa sensación, era por una muy sencilla razón

Esta misteriosa voz tenia algo diferente que nadie en este mundo debería tener. 

Y es que este chico tenia algo que otros no deberían poseer.

-¡Demonio!-

Se trataba de un chico con un cuerpo de demonio.