el extraño lazo de madre-hijo

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Hace unos cientos de miles de años atras, donde la vida en la tierra comenzaba a volver a poblar los bosques y selvas virgenes, un animal que casi se parecia a una de las modernas caminaba como si fuera la reina de este vasto terreno. Los animales que reconocian a este ser se escondian de inmediato, por suerte en este dia ella solo estaba dando un paseo sin alguna dirección clara.

A veces se detenia para rasgar los gigantesco arboles indicando que esta parte era su nuevo territorio, al atravesar el denso follage se encontro que habia llegado a un magnifico campo con variedades de hierbas y flores, alguno de estos eran raras y misteriosas, sin embargo la atencion de la criatura se concentro en un bulto sobre al medio de todo. Cuando se acerco se quedo confundida al ver una pequeña cria de esos monos que se encontraba en esta isla que gobernaba, agacho su cabeza y lo olfateo descubriendo una extraña esencia de la naturaleza y de... ¡ella misma!

Salto de la impresion y una risa femenina juguetona se escucho entre la brisa del viento, miro su alrededor y nego con la cabeza, seguramente esa mujer volvio crear otra forma de vida basada en su especie y de esos monos sin pelos. Escudriño el cuerpo del bebé encontrando que tenia el pelo negro, unas mejillas rellenitas que la tentaba rozar para ver que tan blandas eran, su cuerpo asi de simple vista estaba sano y por ultimo la piel era clara.

De repente el bebé da signos de despertar parpadeando unas cuantas veces mostrando el color escarlata de sus ojos y da un quejido por la fuerte luz del sol.

—(¿Qué? ¿donde estoy?)

Ya teniendo su visión acostumbrada a la iluminacion siente un aire caliente por todo su cuerpo, ve al lado de él que una silueta gigante lo estaba olfateando, su rostro se puso muy palido al observar una gigantesca leona de 2,50 metros de altura y una longitud de 6 metros, lo curioso es que esta criatura era muy diferente y era mas haya de lo normal ya que tenia alas iguales a las de los angeles. Dicha bestia se da cuenta que el niño estaba temblando y unos segundos despues un fuerte llanto se escucha en el campo, ella sin saber que hacer camina nerviosa en circulos hasta que da un rugido pero no uno amenazador sino uno mas suave, con su cola lo toma cuidadosamente y se le acerca a su rostro.

—(¡AHHH ME VAN A COMER! ¡ALEJATE, ALEJATE!)

El llanto se vuelven mas fuertes y ella paso su lengua sobre su rostro sintiendola suave, babosa y tersa como si lo estuviera lamiendo un perro, penso que iba a sacarle la piel ya que tenia conocimientos de que los felinos tiene esa parte aspera y rasposa. Unas lamidas despues se habia calmado (a pesar de tener toda su cara llena de baba), la leona confirmo que la criaturita era de cierta forma suya y tenia su sangre fluyendo en sus venas aun asi ¿Como era posible que su madre haya podido hacer tal cosa?

A bueno que mas da ella misma fue su primera creación y ahora este bebé es el segundo, la leona refregó su cabeza sobre el niño y quien dandose cuenta que esta criatura no le iba hacer daño. Su estomago ruge por comida, ella instintivamente se recuesta y lo acerca para que se amamantase.

El duda en hacerlo y gira su cabeza negandose a beber a pesar de las insistencias de su hambre. La leona un poco molesta agarra su cabeza con su cola girandola no tan fuerte y obliga al niño presionando su boca a uno de sus pezones. Al final se rinde y lo abre , el sabor era raro pero lo ignoro, luego de saciarce se acomodo y se puso a pensar su situación.

—(al parecer fui adoptado por este ¿animal? Bueno no tengo claro de lo que es, aun asi nunca encontraria una leona con alas en la tierra. Definitivamente ya no estoy en mi mundo sino reencarne en otro.)

Se queda meditando e intenta recordar algunas cosas, solo sabia que nacio y vivio en Grecia, mas haya no recordaba nada exceptuando su nombre y lengua materna.

—( Haber mi nombre era ¿Paris? ¿Ponciano? ¿Proteus? ¿Palas? ¿Perseus?... si Perseus es como me llamo, por la manera que hablo naci y me crie en Grecia, exactamente en Larisa aunque parece que uno de mis padres creo que era italiano. Que mas, que mas... uuummm no puedo recordar otras cosas) (suspiro) (ya da igual, seguro con el tiempo podre recuperar mi memoria)— Suspiro tristemente, esperaba que no tuviera familia que haya dejado atras, se acomodo mejor e intento dormir.

Unas horas mas tarde se vuelve a despertar sintiendo el movimiento de su nueva madre, estaba encima de ella y enrollado por su cola para su seguridad. Se fijo que el sol todavia permanecia en lo mas alto, de repente la leona se detiene y deja a Perseus en el suelo, se agacha un poco observando mas adelante una bestia que comia tranquilamente, media 3 metros y se parecia a un jabali por sus grandes colmillos que apuntaban hacia arriba.

—( ¿Que esta haciendo?)

Se acerco a su presa sigilosamente sin hacer ningún ruido y teniendo cuidado al pisar. Perseus intenta moverse para seguirla pero como es un recien nacido no pudo hacer mucho mas que rodar.

—ROAAA

Se impulsa y empieza a correr hacia el jabali, ella salta dando un giro 180° y en el aire lo muerde arriba del cuello derribandolo al suelo, alza una de sus patas sacando sus largas y afiladas garras y se las entierra cerca de su corazon dandolo por muerto.

Ahora tenia su cena lista, retirando sus garras del cuerpo empieza a comer, sus mandibulas eran tan fuertes que hacian polvo los huesos del jabali, se hizo un festin la carne junto con algunos organos que le gustaban. Ya satisfecha vuelve donde dejo su "cachorro" y deja los restos alli.

—(uuf que suerte la mia de no ser su almuerzo)— Con ese ultimo pensamiento es tomado de nuevo por la cola de la leona y lo deja encima suyo enrrollando su pequeño cuerpo al de ella para que no se caiga. A paso medio rapido va hacia un lago que estaba al sureste a unos 10 kilometros desde su posicion, Perseus admiro el paisaje y descubrio que los arboles eran mas grandes que el de su mundo, diablos hasta vio una especie de liebre (tal vez) que tenia el doble del tamaño de un perro, tambien durante el camino intento reforzar sus cuerdas vocales pronunciando las sílabas menos complicadas.

Despues de un corto viaje llegan al lugar su madre se acerco a la orilla para beber agua, él como tenia la garganta seca por los ejercicios empezo a llorar para que lo alimentara. Ella se acomoda y lo bajo para darle leche, mientras lo amamantaba pasaba su lengua en su cabecita o en su cuerpo bañandolo para marcarlo con su olor e indicarles a todos que este era su hijo.

Así paso el tiempo la leona habia cazado por segunda vez durante la tarde y solo pasandose a caminar sin rumbo, Perseus para no aburrirse en el viaje se entretuvo en intentar en descubrir los nuevos animales que encontraba, incluso de lejos habia visto grandes aves sin embargo no los podia identificar tambien de vez en cuando hacia detener a su madre (aun no estaba acostumbrado llamarla como su nueva mamá) para que lo alimentara. Ahora ya era noche Perseus noto que el dia fue muy largo, no sabia porque tenia bastante energia y lo mas impresionante es que podia ver con claridad la bella noche.

—(Me pregunto si reencarne en otra especie. No creo que sea un vampiro ya que estaba debajo de la luz del sol ni siquiera tengo apetito por beber sangre, tampoco no soy un hombre lobo o sino hubiera sentido una partes extras en mi cabeza y tener una cola)— se mueve para acomodarse mejor debajo del ala de su madre que lo protegia del frio —(bueno otra cosa a la lista para investigar mas adelante).

•••

Pasaron 2 dias desde su nacimiento, durante ese tiempo la rutina de Perseus era simple: despertar, comer, cazar (por parte de su madre), fortalecer sus cuerdas vocales, hacer sus necesidades, bañarse, domir un rato, comer, cazar, dar largas caminatas, colocar orden en el bosque ¿y ya dijo comer? Bueno este era su nueva vida diaria.

Lo mas interesante es que descubrio que el dia y la noche duraba mas, es decir que un dia tenia mas de 24 horas, esto lo pudo vereficar al despertar de sus horas de siesta y ver que el sol apenas se habia movido desde la ultima vez que lo observo. Hoy como siempre su madre se dedicaba a patrullar, las orejas de la madre de Perseus se movieron captando extraños ruidos de lejos, como si fueran gritos y gruñidos que venian rapidamente hacia su direccion.

— Hmp (esos monos de nuevo estan haciendo de las suyas)— Ella bufo descubriendo los causantes de aquellos sonidos.

Unos minutos despues una mujer y una niña salieron de los arbustos agitadas y empapadas de sudor, al ver a la bestia mas peligrosa de toda la isla frenaron de golpe y se paralizaron del puro miedo, sus cuerpos empezaron a temblar por la temible presencia que desprendia. Detras de ellas tambien aparecion dos hombres desnudos con una abuntadante barba y cabello.

El silencio inundo el bosque la leona gruño amanezadoramente por interrumpir su preciado paseo con su cachorro, al dar un paso los hombres inmediatamente salieron corriendo como gallinas dejando a esas dos chicas como sacrificio, la niña sintio deslizándose un liquido en toda sus piernas y empapo el suelo con su orina.

La mujer instintivamente la cubrio con su cuerpo intentando protegerla de esa bestia. De repente entre el gruñido de la leona escucharon abucheos y balbuceos arriba de ella.

— baaa aaa bababaaa (¡oye! ¡no, madre no te las comas!)

— grr? (¿Por que?)

— buuu (bueno, yo... esta mal son solo gente inocente)

El bebé y su madre se comunicaron como pudieron, Perseus habia aprendido que ella era inteligente como un ser humano asi que ella sabria lo que intentaba transmitir. Luego de largos balbuceos, gruñidos, algunas palmaditas y un tiron, la discución habia terminado saliendo vencedor su hijo pidiendole que lo bajara y lo pusiera sentado entre medio de las hembras.

Perseus ya en el suelo noto bien a las dos personas delante de el, quienes se encontraban confundidas e impactadas por ver a un recien nacido.

— hermana ¿bebé?

— um bebé— asiente y le responde a su pregunta, la mujer pareciera estar rondando en sus 20, tenia cabello castaño y ojos marrones, su piel era media bronceada, su cuerpo es voluptuoso, sus senos que estaban en el aire eran grandes de copa-F con rosados pezones erectos y tenia puesto un tipo de falda hecha de hojas amarradas con lianas cubriendola hasta los muslos. En cambio la niña aun no estaba desarrollo, por su altura Perseus supuso que tenia como unos 10 años, su piel tambien es media bronceada, su cabello negro y ojos marrones, al igual que su hermana solo llevaba puesto una falda.

La niña se separo del abrazo protector de su hermana y se acerco al pequeño con curiosidad y temor.

—¡d-detener!

La mujer le grito desesperada, Perseus tomando nota que su lenguaje era diferente y por la escasa vestimenta se estaba haciendo una idea del periodo en el que estaba. Su madre da un pequeño gruñido como advertencia pero él le da unas palamaditas y caricias en la cola para hacerle entender que todo estaba bien, ella se hecha al suelo poniendo su cabeza en una de sus patas delantera, dejando medio abierto sus ojos por cualquier amenaza y expulso el aire de sus pulmones por su nariz. La niña finalmente se agacho y le toco suavemente la mejilla izquierda, Perseus en respuesta atrapo su dedo indice y la sacudio como si estuviera saludandola. Ella se rie mostrando sus saludables dientes y empezo a jugar sintiendose mas tranquila gracias a él.

— hermana

Llamo a la mujer para que se acercara, ella con cautela se acerca mirando de vez en cuando a la majestuosa criatura y se agacha al lado de su hermana menor.

— lindo — ella observa los rasgos de Perseus mientras acariciaba su cabeza, él le toma uno de sus dedos y sacude como lo hizo con su hermana en saludo. Perseus estaba incomodo por la desnudes superior de las dos mujeres pero no lo demostro. Levantaron sus brazos para examinar sus costillas vereficando que si no estaba desnutrido y a veces le quedaban mirando sus ojos ya que nunca habian visto alguien con otro color, un rato despues de jugar con Perseus el rostro de la hermana mayor se arrugo de preocupacion y tristesa, se levanto palmeando el hombro izquierdo de su hermanita para llamar su atencion.

— buscar mamá— La niña se inquieto y racia se separo de su nuevo amigo.

—( ahora que lo pienso ¿por qué estaban corriendo de esos hombres?)

Y antes de que se fueran agarro la muñeca de la niña deteniendola, lo miro preguntandose que pasaba, Perseus empezo a dibujar con su dedo en el suelo a 4 personas en palitos y encerro a dos de ellos en un circulo.

La mayor intento descifrar lo que él hizo, no obstante no entendio lo que Perseus queria decirles, viendo esto dibujo a uno de los que estaban encerrado dos circulos en donde cruzaba los brazos y el torso, luego al otro le agrego un palito entre medio de las piernas, tambien le dibujo a una de las que estaban afuera pechos indicandole que era ella.

— ¡mamá!

La niña señalo a la figura encerrada gracias a ello, supo que la preocupacion era que su madre no estaba con ellas sino tal vez perdida. Llamo la atencion a su mamá para ver si podia ayudarlas, ella se levanto estirandose para quitar su pereza, las chicas retrocedieron para darles su espacio, la leona puso a Perseus arriba suyo, quien balbuceo algunas cosas puntando sobre a lo que seria el hombre dibujado, ella estrecho la mirada y lo volvio hacia su hijo, en respuesta apunto a la direccion los que habian escapado hace unos momentos. Ella entendiendo salto sobre esas monos y corrio tras esos cobardes a traves de su olor. Las hermanas se miraron impresionadas por la figura y luego persiguieron al duo extraño.