Lo improbable
A diferencia de lo que ocurre en los juegos donde una luz envuelve al jugador, aquí no hubo nada, ni me sentí especial, ni se curaron mis heridas... abrí la pantalla de estado para ver los cambios ya que no los notaba...
PERSONAJE: Ikky
Fuerza: 14 *subestadisticas desbloqueables después de stat +16
Destreza: 14 *subestadisticas desbloqueables después de stat +16
Constitución: 14 *subestadisticas desbloqueables después de stat +16
Inteligencia: 14 *subestadisticas desbloqueables después de stat +16
Sabiduría: 14 *subestadisticas desbloqueables después de stat +16
Carisma: 12 *subestadisticas desbloqueables después de stat +16
Percepción: 14 *subestadisticas desbloqueables después de stat +16
Suerte: 12 *subestadisticas desbloqueables después de stat +16
Vida: 14/24
Mana: bloqueado
Espíritu: bloqueado
Ki: bloqueado
Habilidades: Lanzada precisa 206/1000*Combate
Nivel: 1 Exp: 1/2000
Oficio: bloqueado hasta nivel 10
"Título: el persistente *efecto: cuando el personaje esté más de 1 hora luchando ignora el cansancio y entra en un estado de especial lucidez dando una probabilidad de crítico de +25%"
Los cambios se notaron en la práctica, aunque no me sentía ni más vivo, ni más sano, la cosa es que ahora me había acostumbrado a recibir ataques, los comenzaba a intuir, o sabía al menos como reaccionar a los más obvios...
La lanza antes pesada era ahora más ligera en mi mano, y ya no perdía el resuello a cada paso...
Sin embargo la siguiente muerte de una rata ya no se sintió tan bien, ya no me daban puntos de experiencia, o mejor dicho necesitaba matar 3 ratas para ganar un misero 1 por mil de experiencia...
La efectividad aumento, incluso comenzó a parecerme monótono la matanza desde el púlpito. Las ratas que me habían aterrado eran ya solo bichos a exterminar, no asustaban tanto, y sus posibilidades de hacerme daño eran muy limitadas, así llegué al final de la ronda 99... La voz de Data resonó...
"La ronda 100 es la última ronda posible de la fase de coliseo, ¿desea continuar en el coliseo o pasar a la siguiente ronda?"
No respondí enseguida, con mis experimentos anteriores sabía que no empezaría hasta que dijese algo... absorví las esencias de las ratas del grupo de 30 que acababa de matar y me baje del púlpito... estar al lado de la entrada había sido una ventaja, los enemigos no podían tomar carrerilla y tenían que girar para poder alcanzarme, pero que saldría ahora ¿50 ratas?, ¿100? ¿una rata gigante?
Mi experiencia como jugador aunque fuese un cheater era que una ronda final requería un jefe final, el problema era que habían sido 99 rondas con un incremento lineal de ratas... cierto que eran los mismos malditos bichos pero eran 30 ratas...
Andé hasta la puerta por donde había seguido y elegí el púlpito de la estatua de la izquierda, esto dejaba mi escudo pegado más a la pared y mi lanza con más libertad a la derecha, sin embargo no me encajé con la distancia que había 30 metros, tenía tiempo de encajarme en caso de necesidad...
El rastrillo se abrió...
"GRROOOLLLLLLLLLLLLLLLL!!!!!!"
Un rugido estridente pero potente barrio la arena...
El tiempo pareció pasar a cámara lenta, pasos pesados, muy pesados, resonaban... una rata de tamaño oso polar salió por la puerta...
Del suelo al lo alto de la espalda podía medir más de 1,60 estando a cuatro patas...
"mierda..."
Toda la ventaja que la altura me había dado contra las ratas normales no significaba nada ahora, es más podía hacerme perder un pie o cualquier cosa al estar mis piernas a la altura de una mandíbula del tamaño de una olla grande...
Las garras del tamaño de guantes de beisbol dejaban surcos en la arena, la aceleración fue impresionante para un animal de su tamaño... me parapeté apoyando mi pierna contra la estatua... 25 metros, 20 metros, 15 metros, 10 metros, 5 metros...
Cuando ya podía oler el apestoso olor de su boca lance mi lanza hacia adelante apuntando a su ojo y salté....
La lanza entre mi fuerza y el impulso de la bestia penetró en la cabidad ocular derecha, mi cuerpo en precario equilibrio salto un poco hacia ese mismo lado... al final la lanza hizo efecto palanca, y un enorme globo ocular fue arrancado de cuajo con un plooop...
La rata grito si se puede decir eso... no diré que murió ni que se revolvió con una furia asesina... asombrada por el dolor desconocido, y por la sorpresa hizo lo más propio de una rata … huir...
La rata gigante, o el rey rata si lo queréis llamar así salio en una dirección y yo salí en la contraria... Era un cheater no un guerrero no jodáis, pensar que lo remataría de inmediato era mucho esperar... me levante como pude y huí...
Elegí el púlpito de la estatua de la puerta contraría concretamente el de la derecha tal y como estaba de frente, no por nada sino porque esperaba que con la espalda en la pared y la visión reducida del rey rata por ese lado tuviese alguna posibilidad de sobrevivir...
Haciendo memoria puedo decir que me torcí un tobillo en la caída, me golpeé contra el suelo perdiendo el escudo ya raido en el interín... era un amasijo de madera poco utilizable. Para parecer más heroico diré que corrí … aunque cualquier espectador habría dicho que me arrastre rápido.
No fue ni un minuto pero bastaba. Con una lanza, mis piernas fijas y mis ganas de despejar el piso 100 esperé a la rata... pero las cosas no serían tan fáciles... La puñetera rata hizo lo propio de su especie, quedarse en la esquina contraria, me miraba con una mirada entre aprensión y miedo, creo que era la misma mirada que tenía yo...
Como el bastardo no se acercaba fui avanzando poco a poco, un paso, otro, os diría que era una escena gloriosa, pero casi no podía sostener la lanza, casi estaba derrotado arrastrándome más que avanzando.
Estábamos a unos cinco metros una distancia más que segura, la rata chirriaba como un gato, el pelo erizado, frente a frente, yo sin habilidad... el tuerto con su miedo... Ahora era cuestión de quien daría el primer paso...
Siendo el vencedor del primer lance avance... mi lanza cogida con las dos manos apuñalo su pata delantera derecha... no era una herida grave pero le impedía moverse igual.
Al no tener el escudo no pude esquivar su gran cuerpo de primeras y una de sus garras alcanzo mi brazo izquierdo, aunque por la postura por suerte su boca no llegó a alcanzarme, rodé hacia mi derecha rodeándole y consiguiendo con mi lanza abrir una herida larga en su costado...
El rey rata avanzo de frente, yo me moví hacia la derecha en su angulo ciego, el saltó... os diría que magicamente lo esquivé... pero no fue así mi pierna fue machacada por su boca... un dolor horrible, insoportable me alcanzó... mi lanza pincho su boca y la bestia del infierno soltó la presa que era mi pierna... no me preocupaba la infección que sus dientes amarillos dejaría... era solo la sensación de una pierna desgarrada... mis gemelos colgaban viendose el hueso... la sangre manaba a borbotones...
Vida: 8/24
Mana: bloqueado
Espíritu: bloqueado
Ki: bloqueado
Habilidades: Lanzada precisa 206/1000
Nivel: 1 Exp: 405/2000
Oficio: bloqueado hasta nivel 10
Una de las malditas ventajas de la anatomía, es que si una rata gigante estando de lado se está comiendo tu pierna deja si cuello, su cuerpo completamente a tu merced, luchando por sobrevivir y aún con la lanza en la mano golpeé... la lanza atravesó el cuello... pero no soltaba la presa... mientras me sacudía para seguir desgarrándome volví a golpear, esta vez atravesé su boca de lado a lado...
Me soltó, pude arrastrarme hacia atrás.... el rey rata sangraba, yo sangraba más... optó por aplastarme... ese fue su error... todo el peso de una rata de 300 kilos cayo sobre la lanza alojándose en su cuerpo...
En una historia épica mi lanza habría atravesado el corazón de la bestia y habría muerto encima de mi... pero fue peor... la lanza solo atravesó uno de sus pulmones, herido de muerte si pero no una muerte inminente me arrastre hacia un lateral sin poder recuperar mi lanza mientras las garras del rey rata desgarraban mi hombro...
Con una lanza atravesada en un pulmón no es que la rata estuviera en su mejor momento, escupía sangre por la boca, apenas si se podía mover con la lanza saliendo de su cuerpo a través de su espalda...
Yo salí de debajo de su cuerpo por su costado derecho, entre sus patas delanteras y traseras... desde allí no me podía arañar... no me podía morder... pero yo tampoco estaba mucho mejor me desangraba... no era rápido pero era seguro que no aguantaría consciente más de dos minutos...
Me agarré al pelo de la rata y me aupe... me dolía el hombro destrozo, el cuerpo maltratado después de mil ratas y esta maldita bestia, pero me aupe... con dolor y un esfuerzo en ese momento sobre humado alcance la parte de arriba de la lanza que sobresalía por la otra parte del cuerpo...
Lo heroico sería contar que partí la parte sobresaliente de la lanza y apuñale hasta matar a la bestia... pero no tenía ni fuerzas ni forma de hacer eso... así que hice lo que más daño y dolor creí que podía hacer al monstruo... Comencé a mover la punta de la lanza y en consecuencia toda ella en circulos, ampliando y haciendo fuerza contra los bordes para que cada vez el circulo fuese más amplio y el dolor mayor...
La rata se sacudió en sus estertores... escupiendo sangre pero con suficiente fuerza para apartarme... y que cayese al suelo... no tenía fuerza para incorporarme para luchar...
Vida: 2/24
Mana: bloqueado
Espíritu: bloqueado
Ki: bloqueado
Habilidades: Lanzada precisa 263/1000*combate
Nivel: 1 Exp: 405/2000
Oficio: bloqueado hasta nivel 10
Ese maldito monstruo me miró y giró su cabeza hacia a mi, intentaba arrastrarse para acabar conmigo... no me cabía duda... me gustaría decir que cerre los ojos y esperé mi honrosa falsa muerte en este tutorial, pero no, pateé con todas mis fuerzas la cabeza de la rata que se acercaba a mi con mi única pierna sana...
Y en ese momento su ojos se voltearon... su cabeza cayo al suelo... y la voz de Data resonó en toda la arena...
"Felicidades al Jugador Ikky por ser el único jugador en matar al rey Rata"
"Felicidades al jugador Ikky por ser el único en alcanzar el nivel 2 en la fase de coliseo del tutorial..."
"Felicidades al jugador Ikky por superar las 100 etapas del coliseo del tutorial"