Capítulo 68

El silbido del viento y el crujido de los escombros al ser pisados hicieron eco en los alrededores.

"Ogiwara... ¿Realmente hay alguien aquí?" Preguntó Saya suavemente mientras miraba el hospital Mochizuki... O bueno, los restos de este.

Como la mayoría de estructuras en los alrededores, el hospital tambien había tenido un gran daño en su estructura. Era tal que una gran parte de este se había derrumbado.

Shiryu silbó levemente mientras volvía a sorprenderse por la destrucción que dejó el temblor del primer día.

"No creo que debas preocuparte por eso, Takagi. No son personas tan poco tenaces para haber muerto tan facilmente"

Saya asintió con algo de dudas: "Entiendo pero... ¿Seguirán allí?"

Shiryu se encogió de hombros. Realmente no estaba seguro de que estuvieran allí, pero sino fuera así, ¿Donde estarían?, despues de todo, el hospital tiene un refugio subterraneo. Si no se refugian allí, ¿Donde lo harán?.

Shiryu usó [Detección de energía] en busca de alguna persona en los alrededores, y como pensaba, una buena cantidad de personas estaban reunidas en el subterraneo.

Shiryu no pudo evitar fruncir un poco el ceño. No era que sospechara de la identidad de las personas allí ya que lo más probable es que fueran pacientes o personal médico, sin embargo, eso le dificultaría las cosas a Shiryu.

Los miembros de Black Label podían matar personas, sin embargo, no mataban inocentes, al contrario, los salvaban.

Si bien Shiryu no iba a pedirles que mataran a los pacientes, sabía que tampoco los abandonarían.

Shiryu realmente no se sentía reacio a ayudar a las personas, sin embargo, no podía darse el lujo de ayudar a tantas personas que lo unico que harían es volver la situación en el grupo más dificil.

Con un suspiro, Shiryu se frotó la frente.

"¿Estás bien, Ogiwara?, ¿Estás cansado?"

Shiryu sacudió la cabeza y avanzó lentamente hacia el hospital: "No es nada. Solo sigueme de cerca"

Con un leve asentimiento, Saya se acercó al lado de Shiryu mientras observaba cuidadosamente los alrededores.

Shiryu debía de elogiar a Saya por ser tan cuidadosa, sin embargo, las debiles capacidades de Saya ahora mismo estaban reteniendo su mejoría.

Shiryu realmente no sabía en su totalidad como funcionaba el sistema que se le había otorgado a todos cuando todo había empezado, sin embargo, estaba seguro que debía de tener alguna capacidad similar a su sistema. Obviamente, no debería de ser tan fuerte, pero debía de tener la capacidad de fortalecer de alguna forma a los usuarios.

En fin, Shiryu ya había prometido encargarse del fortalecimiento de Saya, y eso iba a hacer. Ya había experimentado un par de cosas con Sayu desde antes de que el sistema apareciera y sabía que las personas normales podían despertar sus capacidades espirituales, ahora con el sistema eso debería de volverse mucho más sencillo de hacer.

Recordando algo, Shiryu se detuvo: "Takagi, elegiste aprendiz de mago, ¿Verdad?"

Saya asintió algo confundida: "Dijiste que era lo más adecuado para mi en ese momento, así que la elegí"

Shiryu asintió: "Bien. Cuando la elegiste, ¿Aprendiste alguna habilidad o algo así?"

"Aprendí control de mana nivel 1, y bola de fuego nivel 1"

Shiryu asintió en comprensión al mismo tiempo que una pregunta aparecía en su cabeza. ¿Por qué él no había obtenido nada al elegir su profesión?, ¿Ya había aprendido lo que se suponía que debía aprender al elegir la profesión?.

Dejando sus preguntas de lado, Shiryu pensó en las habilidades de Saya. Sin duda, ahora mismo ella era una inutil. Sus habilidades estaban en un nivel extremadamente bajo y aparte de control de maná, bola de fuego no tenía la cara de ser una buena habilidad, sin embargo, eso era suficiente por ahora.

Mientras hubieran zombies comunes por ahí, Shiryu podía hacer que Saya los matara y que subiera de nivel.

Sin más preguntas, ambos entraron al hospital.

El lugar estaba lleno de polvo, escombros y desorden, prueba de lo que había ocurrido hace pocos días.

Si bien se veía bastante mal, Shiryu esperaba que el lugar estuviera peor. Sinceramente, incluso podría tomarse como base temporal en caso de ser necesario. Aunque bueno, Shiryu no vendría a este lugar con ese proposito.

Shiryu avanzó junto a Saya con pasos silenciosos hacia el interior del hospital; la entrada al subterraneo estaba en un lugar bastante profundo, despues de todo.

Los ojos de Shiryu vagaban por los alrededores tratando de encontrar algo, pero no tuvo exito.

Sus demás sentidos estaban completamente alertas desde el principio, sin embargo, no podía encontrar nada.

Incluso había visto un par de muertos en el camino sin embargo... No encontraba ningún zombie.

Era un maldito hospital, los zombies deberían de inundar el lugar. Shiryu dudaba que los miembros de Black Label fueran tan habiles como para haber podido llevar más del 90% de los pacientes y visitantes al subterraneo.

El ceño de Shiryu había comenzado a profundizarse a medida que profundizaban, causando que el corazón de Saya comenzara a latir rápida y nerviosamente.

"Ogiwara, ¿Pasa algo?" Preguntó algo confundida.

Shiryu la miró por un momento y dudó en responder, pero al final lo hizo.

Shiryu asintió y volvió a mirar alrededor: "No hay zombies"

Saya estuvo un poco confundida: "¿No es eso algo bueno?"

Shiryu no sabía como responder. ¿Era realmente su buena suerte el no haber encontrado uno en el camino?, ¿Realmente no había nada fuera de lugar?

Shiryu no bajó la guardia incluso con esos pensamientos. Había aprendido su lección por actuar descuidadamente en el pasado. No iba a volver a cometer los mismos errores.

"Debes de pensar en lo peor, Takagi. Si te relajas, no podrás reaccionar en caso de un ataque"

Saya sentía que Shiryu estaba siendo algo paranoico, sin embargo, asintió. Si alguien con la fuerza de Shiryu se movía tan cuidadosamente, ¿Qué derecho tenía una debilucha como ella de actuar despreocupadamente?

Sin que se dieran cuenta, ya habían llegado a la entrada al subterraneo. Shiryu intentó tocar la pantalla que había a un lado, sin embargo, esta no reaccionó.

"¿Funcionaba con el suministro energetico de la ciudad?" Shiryu susurró suavemente.

Creía en su capacidad para forzar su entrada por la puerta, sin embargo, no era realmente una buena idea.

Mirando alrededor en busca de una alternativa, Shiryu observó el ducto de aire acondicionado.

Había una pequeña trampilla a unos 2 metros del suelo.

Shiryu sacudió su mano y una esfera de papel golpeó la trampilla con la fuerza suficiente para hacerla caer al suelo un momento despues.

Shiryu se giró hacia Saya y la observó fijamente durante unos segundos.

Saya estaba un poco confundida al principio pero luego entendió: "¿Como subiré?"

Shiryu dejó su alabarda en el suelo y se agachó mientras entrelazaba sus manos.

"¿Has hecho esto cuando eras niña?"

Saya negó con la cabeza: "No, pero lo he visto"

Saya guardó la pistola que tenía en su mano en la funda que yacía en su cintura y se acercó a Shiryu.

Saya puso sus manos sobre los hombros de Shiryu antes de poner uno de sus pies en las manos de Shiryu.

Sin demoras, Shiryu levantó a Saya hasta que pudo entrar al ducto.

Shiryu saltó y subió a la trampilla antes de manipular algo de papel para hacer subir su alabarda, la cual se estaba arrepintiendo un poco de traer.

Saya, que había girado su cuerpo mientras esperaba a Shiryu, no pudo evitar murmurar: "Es muy conveniente ser atlético, ¿Eh?"

Shiryu sonrió levemente y avanzó detrás de Saya.

No sabía porqué, pero sentía que se encontraría con algo problematico en este hospital, sin embargo, no estaba preocupado.

Simplemente avanzó lenta y serenamente con la intención de fortalecer a Saya.

Por cierto, no lo había notado antes pero en esta situación podía decirlo.

Saya tiene un lindo trasero.