Capítulo 1

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Lucian esperó en silencio, sentado en una silla en una gran habitación. Ha su lado se encontraba Elizabeth quien balanceaba sus piernas de un lado a otro gracias a la altura de la silla. Ambos estaban en un extremo de la habitación donde Metatron y Michael los habían dejado, mientras que ellos al parecer buscaban a unas personas.

Lucian ignoró el tarareo de Elizabeth a favor de observar las pinturas que se encontraban colgadas en el lugar. La que más le llamó la atención fue la de un hombre que vestía con túnicas simples e incluso arrugadas y con algunos huecos. Estaba sentado en una silla de madera con una pata podrida mientras comía una humilde manzana y sonreía felizmente. Abajo de la pintura había un nombre escrito en el fino mármol. Su nombre era San pedro.

-Es muy humilde-Pensó Lucian observando con buenos ojos como el hombre aún siendo el primer papal, mostraba una gran humildad.

Dirigió su cabeza hacia lo que suponía era el actual papal y no le gustó lo que vio. En la pintura aparece un hombre de mediana edad con un cuerpo robusto y una tez blanca. Su cabello es color gris y sus ojos son de color dorados y posee una larga barba. Usa un traje de color verde y un abrigo de color gris. Posee una corona negra con forma de rombo en su frente al igual que a los lados de su cabeza. Además, posee varios anillos y joyas alrededor de su cuerpo. El marco de la pintura estaba hecha de oro puro y algunas joyas que seguro valían millones, estaban de adorno de más. El hombre estaba sentado en un Trono acolchado y enfrente suyo estaba una mesa con un banquete digno de la clase social más alta entre los humanos. El hombre sonreía con suficiencia mientras alzaba una copa de oro con incrustaciones de diamantes preciosos.

-¿Este es el actual papal Honest?-Se cuestionó Lucian mentalmente.

Incluso si era una pintura, podía notar el aire de arrogancia y superioridad del tipo por ser el actual papal. Cualquier idiota se daría cuenta del tipo de humano que es.

-¿En qué piensas Luci-kun?-Preguntó Elizabeth mirándolo con la cabeza ladeada.

-Como a las personas les gusta elegir pura mierda-Hablo Lucian sin molestarse en cuidar su vocabulario.

-Idioma-Chillo Elizabeth jalando la oreja derecha del peli plata.

-Solo digo la verdad-Hablo Lucian sin inmutarse por el dolor creciente en su oreja.

-Solo mira a San José y al actual Papal-Habló Lucian señalando las dos pinturas.

Elizabeth soltó la oreja de Lucian, y miró entre las dos pinturas, cuando vio la de San José, enseguida pensó que era una persona que sin duda estaba gozando de su merecido pase al cielo. Luego miró hacia la foto de Honest y frunció el ceño haciendo una mueca. No duró ni un segundo viendo la pintura, noto claramente las diferencias abismales entre ambas personas.

-Puede que sea un niño pero tengo la mente suficiente desarrollada para diferenciar entre personas humildes-Hablo Lucian haciendo un gesto hacia la pintura de San José.

-Y personas basuras-Habló Lucian haciendo una mueca y señaló hacia la pintura de Honest.

-No se como los Altos mandos del cielo permiten que un tipo como el, predique la palabra del señor Elohim-Habló Lucian claramente disgustado con solo ver una pintura del actual papal.

-Talvez no lo sepas por que te criastes fuera del cielo-Habló Elizabeth con una voz tranquila algo que sorprendió a Lucian.

-Pero existe una ley creada por el señor Elohim que no se puede remover ni siquiera por Metatron-sama. Sólo el señor Jesús tiene tal autoridad pero su alma y esencia están en la True Longinus-Hablo Elizabeth.

Lucian se atragantó con su saliva al escuchar donde se encontraba el alma del rey de reyes.

-De casualidad. ¿El Portador de la True Longinus puede comunicarse con Jesús?-Cuestiono Lucian.

-Lastimosamente no. En el cielo no se encuentran registros sobre portadores contactando al Señor Jesús-Habló Elizabeth ya que eso fue lo que dijo su padre. Además que ella tenía acceso a los registros de las Sacred Gear y nunca se mencionó a un Portador hacer tal hazaña.

-Pero volviendo al tema de la regla que impuso el señor Elohim-Habló Elizabeth volviendo al tema principal. Lucian la miró en silencio esperando a que continuase.

-Todos los seres angelicales tienen prohibido entrometerse en decisiones humanas ya que el Señor Elohim desea que los humanos no dependan muchos de los angeles-Hablo Elizabeth.

-Que regla más estúpida-Pensó Lucian inexpresivamente.

-Se lo que piensas y si. Esa es una regla estúpida-Hablo Elizabeth.

Lucian iba hablar pero se quedó callado al oír la puerta chirriar dando indicios que alguien la estaba por abrir. Así que rápidamente cierra la boca y mira en silencio esperando a que entren.

Michael y Metatron entraron tranquilamente, detrás de ellos venía un anciano ridículamente musculoso. Un hombre entre sus veinte y una hermosa mujer mayor que se podía hacer pasar por una Milf.

-Lucian-Llamó Metatrón a su hijo.

Lucian se levantó de su asiento y se paró enfrente de su padre en silencio.

Metatron tosió ligeramente e hizo un gesto hacia las nuevas personas que llegaron con él y Michael.

-Lucian. Quiero que conozcas a las mejores personas del Vaticano y a los más confiables en mi criterio.-Hablo Metatron e hizo un gesto hacia el anciano.

-Este es uno de los Cardinales Sacerdotes-Hablo Metatron.

Vasco es un anciano de 2 metros. Tiene el pelo blanco y arrugas en la cara; similar a la de un anciano normal. Aunque Vasco ya es viejo, su cuerpo es el de un hombre extremadamente musculoso. Tiene un cuello grueso, un pecho grueso, brazos gruesos y piernas que tienen circunferencia. Viste vestimentas sacerdotales.

-Es un gusto conocerlo Príncipe Lucian-Hablo Vasco extendiendo su mano.

Lucian miro un poco nervioso esa gigantesca mano. No sabía si aceptarla o no.

Metatron viendo el nerviosismo de su hijo, naturalmente lo entendió. Personas con el físico de Vasco no se veían todos los días. Sólo existía una persona y era un personaje de comics llamado Hulk. Le dio un pequeño codazo en el hombro para que aceptara la mano y no fuera maleducado.

-E-el gusto es mío señor Vasco-Habló Lucian aceptando la mano con nerviosismo.

Vasco sonrió un poco, entendiendo que el chico estaba impresionado al ver a un humano como él, pasar los estándares comunes físicos de un humano normal.

-Este glotón de aquí se llama Dulio Gesualdo-Hablo Metatron.

-Yo~-Saludo Dulio alzando una mano mientras seguía comiendo una bolsa de frituras.

Dulio es un apuesto joven de cabello rubio, ojos verdes y vestido con ropa de sacerdote.

Lucian lo miró en silencio en respuesta a su saludo.

-Y está es Griselda Quarta-Habló Metatron.

-Un gusto Joven Lucian-Hablo Griselda inclinándose respetuosamente.

Griselda es una hermana con la apariencia de una mujer de entre 20 y 30 años con ojos azules. Su apariencia es hermosa, parece del norte de Europa y tenía rasgos que la destacaban como una actriz.

-Hola-Saludó Lucian tranquilamente.

-¡Hola Gris-chan!-Hablo Elizabeth alegremente.

-Hola Eli-chan-Hablo Griselda con una sonrisa cariñosa.

Lucian miró a los tres adultos y decidió medir sus presencias. Cuando lo hizo quedó perplejo. Tenían unas presencias angelicales gigantes. Bueno, dos de ellos tenían presencias angelicales. Vasco tenía un aura sagrada poderosa que normalmente un humano puede despertar con un duro entrenamiento.

-Ellos te entrenarán a ti y aún pequeño grupo de jóvenes-Hablo Metatron.

-¿Ella no está con el grupo o si?-Pregunto Lucian señalando a Elizabeth.

-¡Mou! ¿Acaso no deseas a tu amiga Eli-chan junto a ti?-Hablo Elizabeth cruzada de brazos y haciendo un puchero que la hacía ver más adorable.

-Dos de ellos son ángeles. ¿No tienen deberes de los cuales encargarse en el reino celestial?-Preguntó Lucian ignorando el pequeño berrinche de Elizabeth.

-¡No me ignores!-Chillo Elizabeth cargando hacia Lucian.

-Quieta Eli-chan-Hablo Griselda agarrando a Elizabeth quien se sacudió en su agarre.

Lucian la miró con los ojos en blanco y en silencio.

Elizabeth le sacó la lengua moviéndola de un lado a otro.

-Elizabeth-can será entrenada en el cielo-Hablo Metatron con una sonrisa nerviosa.

-Y no te preocupes Lucian-kun. Gabriel y yo, les hemos permitido entrenarte a ti y a este nuevo grupo de jóvenes-Hablo Michael con una pequeña sonrisa.

Lucian asintió en silencio y miró a los dos ángeles detenidamente. Miró sus ojos y no notó esa mirada de un veterano que ha vivido incontables batallas a muerte como se reflejaban en los ojos de su padre. Supuso que eran ángeles jóvenes pero la pregunta era él, ¿como eran ángeles jóvenes? El Dios de la Biblia ya no existía por lo tanto ya no habrían nuevos ángeles. Su padre no le mantuvo en silencio sobre la muerte del Elohim ya que tarde o temprano se enteraría y era mejor que lo supiera antes que se volviera un tonto fanático como los demás que le rezan a su abuelo. Si uno de esos fanáticos religiosos se entera que Elohim está muerto. No dudaría en apostar que se suicidara sólo porque sus creencias de que un mundo sin Dios no era nada.

-¿Cómo puede haber ángeles tan jóvenes? ¿Se supone que él está muerto o no?-Pregunto Lucian muy curioso. Su cerebro le dolía por pensar más que lo que un niño de su edad podía pensar.

Michael abrió los ojos a lo grande, estaba conmocionado e incrédulo que Lucian supiera esta información.

Los nuevos ángeles y cardinal sacerdote miraron serios a Metatrón quien les vio con una ceja alzada en curiosidad.

-¿Acaso le dijistes que padre ya no está entre los vivos?-Preguntó Michael con una ceja alzada y con ligera molestia en su voz.

-Algún día se enteraría que padre ya no vive, pienso que es mejor que esté al tanto ahora que después.Habló Metatron distraídamente.

-Y respondiendo a tu pregunta hijo mío-Hablo Metatron tratando de cambiar el tema de conversación.

-Hemos logrado recrear nuestros propio método de reencarnación como los diablos. Nosotros usamos cartas y los ángeles reencarnados se llaman Santos valientes-Hablo Metatron dando una explicación vaga.

-Esa es la explicación corta y vaga pero sirve-Habló Michael inexpresivamente.

Lucian asintió en silencio y siguió viendo a los cinco adultos.

-Volviendo al tema del entrenamiento-Hablo Vasco recordándole a todos porque estaban aquí.

-Oh si. Gracias Vasco-Habló Metatron tosiendo un poco en su puño.

-¿Por qué no puedo entrenar en el cielo bajo tu tutela padre?-Pregunto Lucian.

-Es algo muy sencillo hijo mío. Aquí en el mundo mortal podrás tener un grupo de amigos con los cuales confío que te llevarás bien-Hablo Metatron.

-¿Cuándo conoceré a este pequeño grupo?-Pregunto Lucian.

-¡Oh, Oh, Oh! ¿Yo también puedo conocer a los nuevos amigos de mi amigo?-Preguntó Elizabeth entusiasmada por conocer a unas personas.

-Desgraciadamente no Eli-chan-Hablo Michael reventando la burbuja de la pequeña ángel.

-El grupo será presentado mañana y dudo mucho que Rafael permita que bajes de nuevo al Vaticano. Ya sabes cómo es ese hombre-Habló Metatron.

-P-pero yo-Hablo Elizabeth pero se interrumpió ya que soltó un bostezo adorable mientras se tallaba los ojos.

-¿Ya tienes sueño Eli-chan?-Preguntó Griselda suavemente ganándose un asentimiento de la pequeña ángel.

-Creo que ya es hora de volver al reino celestial-Habló Michael notando como ya oscureció en el mundo humano.

-Y ya veo que otro niño también tiene sueño.-Hablo Dulio mirando a Lucian quien parpadeaba constantemente y se tambaleaba un poco.

-Bueno. Les dejo en sus manos a mi hijo-Hablo Metatron tomando en sus brazos a Elizabeth quien se despidió de Lucian.

Lucian solo alzó su mano perezosamente.

-Portate bien Lucian-Habló Metatron mientras que él junto a Michael y Elizabeth desaparecen en una luz que los llevó al reino celestial.

-Griselda. ¿Puedes llevarlo a su habitación?-Preguntó Vasco amablemente.

-Claro-Hablo Griselda tomando en sus brazos a Lucian.

La rubia mayor dio media vuelta en sus talones y caminó fuera de la habitación.

-Adiós Hulk. Pecado de la gula-Habló Lucian despidiéndose.

-Mi alas son blancas como la nieve-Hablo Dulio ofendido.

Vasco negó con una sonrisa divertida.

-Repitelo hasta que tú mismo te lo creas-Murmuró Griselda cerrando la puerta detrás de ella.

Dulio se quedó ofendido.

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Fin del capítulo.

Tobe continúe.