31. HORA DE LA VERDAD

POV JESSICA

En este mismo momento estaba sentada en la cama mirando por la ventana. Estaba agotada y aún no era ni medio día. Por otra parte, también estaba nerviosa porque esta tarde iría al médico y tenía miedo de lo que me pudiese decir. Estoy segura que el tumor creció, de eso no hay duda, pero no sé, a lo mejor ya no se podía operar o algo.

Por otro lado, durante toda la mañana, Mónica me estuvo contando en todo lo que estaba metida y ella sabía, me parecían muchas cosas la verdad y no tengo ni la menor idea de donde sacaba el tiempo. También estuvimos hablando de la manera en la que podía decir que estaba viva, la verdad, ninguna me convencía para nada, y menos a Jackson que estaba empeñado en que me debía de dar un poco de tiempo, pero tiempo es lo que no tengo. No quiero estar agachándome por una larga temporada para que no me descubran, quiero vivir una vida tranquila sin que nadie me moleste, pero al parecer, eso era imposible.

Tenía mil cosas en la cabeza y un dolor de cabeza considerable, por lo que decidí acostarme para dormir un rato, aún era temprano, y Carla me había enviado un mensaje diciéndome que vendría un poco más tarde de lo esperado, pero no demasiado. Bajé la persiana, porque la claridad del sol me molestaba en este mismo momento, me puse una almohada en la cara y a los pocos segundos me quedé dormida.

No sé cuánto tiempo pasó realmente cuando noto leves balanceos que acaban por despertarme, me aparto la almohada de la cara, pero pronto me la vuelvo a poner porque no sé quién coño encendió la luz.

-Apaga la luz que me taladra la cabeza.

- ¿Te encuentras bien cariño?

-Me encontraré mejor en el momento que esa maldita luz se apague.

Noté como se levantó de la cama, apagó la luz y cerró las cortinas de nuevo, para después sentarse a mí lado. Me pasó una mano por el brazo y me calmé un poco.

- ¿Te encuentras bien? ¿Necesitas algo?

-Necesito que no haiga luz.

- ¿Me explicarías lo que te pasa?

-Migrañas, eso es lo que pasa.

- ¿Quieres que vayamos al médico?

-Por esto no es necesario ir al médico.

-Te traigo una pastilla entonces.

-No es necesario, de verdad, sólo necesito oscuridad. ¿A qué venías de todos modos?

-Venía a decirte que la comida estaba terminada y que deberías bajar a comer algo, y a preguntarte eso de lo que me querías hablar a la mañana.

- ¿A la mañana cuando?

- ¿No le dijiste a Carla que te llamase cuando pudiese?

-Ah, sí, eso.

- ¿De qué querías hablar?

-Estuve hablando con Jackson ayer y me dijo que me encontraría un doctor para lo del tumor.

- ¿Lo encontró?

-Sí, y este quiere que vaya lo antes posible allí.

-Pues vayamos ahora mismo, cuanto antes te lo quiten, antes acabará todo esto.

-Lo sé, por eso le dije a Carla que quería hablar contigo esta mañana. ¿Vendrías conmigo a la consulta?

-Eso no tienes que preguntarlo, iré sin importar qué.

- ¿No tienes que trabajar?

-Eso es lo que menos me importa en este momento.

Cuando esas palabras salen de la boca de Santi, aparto la almohada de la cara y lo miro, porque algo en su voz me dice que algo no anda bien con el trabajo, y me preocupa porque sé que es algo que le gusta hacer, y cuando le veo la cara me confirma mis sospechas.

- ¿Está todo bien con el trabajo?

-Si, ¿Por qué lo dices?

-Porque sé que algo no va bien con el trabajo, me lo puedes decir ¿sabes?

-No te preocupes por mi trabajo.

-No me preocupa tu trabajo, me preocupas tú. ¿Me vas a contar lo que pasa o lo tengo que averiguar yo?

Flashback (Narradora)

Santi y los chicos estaban el estudio esperando a que llegase Carla para que el primero pudiese ir a la reunión con los jefes. Durante ese tiempo, Santi estuvo mostrándoles el lugar en el que trabajaba y los chicos estaban muy contentos con saber cosas sobre el trabajo de Santi y poder pasar un poco de tiempo con él para conocerlo un poco mejor. Mientras los chicos estaban mirando la mesa de sonido, Carla entra en la habitación enfadada y molesta.

- ¿Pasa algo Carla?

-No, sólo vengo a por ti a la reunión.

-No parece que no pasa nada.

-No pasa nada, sólo que tenemos que ir a la puñetera reunión.

-Pero acabas de salir de una.

-Eso me da exactamente igual, quiero ver qué es lo que te tienen que decir.

- ¿Me tengo que preocupar?

-Espero que no, porque entonces armo un escándalo de mil demonios.

- ¿Qué es lo que te dijeron en la reunión?

-No me dijeron nada, pero insinuaron cosas que no me gustan para nada.

- ¿Qué insinuaron?

-No sé decirte, pero algo no me da buena espina. Espero que no te moleste que vaya contigo a la reunión.

-Sabes que no me molesta para nada, lo sabes. Pero ¿con quién se quedarán los chicos?

-Con los guardaespaldas. Ellos se encargarán de que no les pase nada.

-De eso no tengo duda.

-Entonces vayamos, te están esperando.

Antes de irse a la reunión llevaron a los chicos al despacho de Santi y dejaron a Halsted dentro con ellos, Hamilton se quedaría en la puerta y Pérez se iría con ellos. No es que necesitaran guardaespaldas dentro del edificio, pero Jackson se había encargado de que Carla tuviese un guardaespaldas al menos siempre con ella para evitar que esta hiciese alguna locura y para evitar que le pasase algo como le pasó a Jessica hace cuatro años.

Cuando entraron en la sala de reuniones, todos se giran en la dirección de ellos preparados para soltar la gran noticia, al menos para la directiva y Alison, pero no para Santi y Carla. Esto se quedan mirando para Carla ya que estaban enfadados con ella por no aceptar el trato que le ofrecían.

- ¿Qué haces aquí Carla? Tu reunión ya pasó.

-Eso me da exactamente igual, me voy a quedar.

-Esta reunión es con Santi, no contigo.

-A mí me da igual si está o no, sólo terminemos con esto de una vez.

-Carla se tiene que ir afuera.

-No me pienso mover de aquí y ya os advierto que no me vais a poder sacar de aquí de ninguna manera.

-Está bien, de todas maneras, te tendrás que enterar. Sentaos.

Se sentaron en las sillas en frente de la directiva y se quedaron en silencio mientras estos ordenaban los papeles y tanto Santi como Carla notaron la incomodidad del otro, Carla esperando a que no le ofreciesen a él lo mismo que ella, porque de ser así, se enterarían de lo que es ella enfadada de verdad.

-Bueno, esta reunión básicamente trata de una cosa simple y sencilla.

-Pues decidla ya.

-Queremos que seas la pareja de Alison.

Con eso los dos chicos se quedaron paralizados sin entender nada, al menos Santi, porque Carla no tarda nada en saltar.

- ¿Qué coño os pasa con querer emparejar a Santi?

-Son maneras de promocionar tanto a Santi como a su pareja.

- ¿Y por eso me dijisteis antes que tenía que ser la pareja de Santi?

-Te lo dijimos porque ya hay rumores de que vosotros sois pareja, por eso te lo ofrecimos a ti antes.

- ¿Y por qué tiene que ser Alison?

-Porque ella aceptó y sabemos que Santi lo hará.

-Yo no pienso aceptar eso.

-Pues no te queda remedio porque Alison ya firmó su contrato.

-Me da igual si firmó su contrato o no, yo no firmé nada y podéis tener por seguro que no lo haré.

-Pues tendrás que firmar o estás despedido.

- ¿De verdad queréis perder al que os consigue los mejores talentos?

-Encontraremos a otro que lo remplace, pero estoy seguro que no rechazará esta oportunidad teniendo en cuenta que lleva mucho rato soltero.

-Yo no estoy soltero, sigo teniendo novia.

-Una novia que está tres metros bajo tierra. Mira Santi, estos cuatro años te dejamos a tu bola porque sabíamos que no estabas bien, pero ya es hora de que te pongas a trabajar y hagas lo que te digamos.

-Pues siento deciros que nuestro contrato se terminó.

- ¿En serio vas a rechazar la oportunidad de tener una gran novia como será Alison?

-Ella será de todo menos una gran novia. No quiero tener nada que ver con ella ni, aunque no tuviese novia.

-Piénsate bien las cosas antes de hacer cosas precipitadas.

-No es nada precipitado, no pienso permitir que decidáis lo que hacer con mi vida.

-Te daremos unos días para que te lo pienses.

-No los necesito, me largo hoy mismo de aquí. Le podéis decir a la prensa lo que queráis, que me despedisteis, que lo dejé, pero lo que tengo claro es que no pienso dejar que manipuléis mi vida.

-Piensa las cosas antes de actuar.

-Ya lo he pensado y eso es lo que voy a hacer.

-Pues esperamos que tengas suerte con tu vida, porque tal como fueron las cosas en los último cuatro años, dudo que consigas una discográfica que tenga nuestra paciencia.

-Eso ya lo veremos.

Con eso, Santi se levantó de la silla y salió rápidamente hacia su despacho para recoger las pocas cosas que tenía allí y largarse de la discográfica para no volver. Carla lo seguía, y a pesar de que ella tenía un contrato que no podría romper en ese mismo momento, haría lo que fuese necesario para encontrar la manera de romper con el contrato ya que no quería seguir en una discográfica que pusiera esas condiciones a sus trabajadores.

Fin flashback

-Es que realmente no es nada, sólo que no volveré a trabajar allí, eso es todo.

- ¿Qué? ¿Por qué? Si te encanta tu trabajo.

-Me encanta, pero digamos que no estoy de acuerdo con su manera de pensar.

-Hay algo que no me estás contando, lo puedo notar.

-Sí.

- ¿Me lo contarás en algún momento?

-Te lo cuento de camino a la visita al doctor, ¿te parece?

-Me parece, ahora ¿Puedes hacerme un favor?

-El que quieras.

-Necesito las gafas de sol, porque en serio, la luz me está matando.

-Bajaremos todas las persianas de la casa.

-Eso ayudaría un poco, pero tampoco me gusta que todo esté cerrado.

-Lo sé, pero es lo mejor para que no te duela la cabeza.

-Me las apañaré, pero no las bajes solo porque la luz me taladra la cabeza.

-Si es lo que quieres, lo haré.

-Gracias, te amo.

-Yo más.

Se levantó de la cama sin antes darme un beso en la frente y se dirigió a la cómoda donde tenía las gafas de sol al parecer. Para mi suerte, eran bastante oscuras y no permitirían pasar tanta luz, lo cual iba a ser una ayuda.

En cuanto me puse las gafas, bajamos a la cocina donde estaban todos, pero antes de entrar en este, Jackson me para.

-Ya están aquí los guardaespaldas, ¿Qué quiere que haga con ellos?

-Que entren a comer con nosotros.

- ¿Está segura señorita Leone?

-Segura, vosotros os encargáis de cuidarnos, pues comeréis con nosotros.

-No es necesario señorita.

-Sí que lo es, asique ve a llamarlos y venid a comer.

-Cómo quiera.

-Espero que algún día me llames Jessica a secas, nada de tratarme de usted y de llamarme señorita todo el rato.

-Lo intentaré.

-Y yo lo apreciaré, ahora ve a por ellos anda.

Con eso, Jackson salió de la casa para ir a por los demás guardaespaldas mientras tanto, yo y Santi fuimos al comedor para sentarnos y esperar por los demás.

-Bueno, llegó la diva de Jessica Leone que no puede estar sin gafas de sol dentro de la casa.

-No quiero quitarte el puesto de diva, pero las necesito. ¿Podríais bajar un poco esa persiana?

-Con lo que te gusta la luz natural ¿y quieres que bajemos la persiana?

-Carla, déjala.

-Es igual Santi, no me molesta.

- ¿Ves? No le molesta lo que le digo. Deberías preocuparte menos por tu querida novia que no le va a pasar nada.

-Eso lo puedes tener seguro. Pero te tengo que pedir un favor, Carla.

-Esto sí que es complicado de creer. ¿Jessica Leone pidiendo un favor?

-Sí, Jessica Leone está pidiendo un favor.

-No me lo puedo creer, pero dime, ¿de qué se trata ese favor?

- ¿Te puedes quedar con los chicos esta tarde?

-Eso no es un favor porque lo hago encantada, pero ¿se puede saber el motivo por el que quieres que me quede con ellos? No será porque quieres tener sexo con Santi sin que nadie te moleste ¿no?

- ¡¡¡¡Carla!!!!

-Por mucho que me guste tener sexo con Santi, no es por eso.

- ¿Entonces?

-Jackson consiguió un doctor para lo del tumor, y lo iremos a ver esta tarde.

- ¿En serio?

-En serio.

-Esa es una gran noticia, pero no tienes ni porque preguntar si me puedo quedar con los niños, porque claramente lo hago con gusto. Ahora sí, luego me tienes que contar todo lo que te dijo, ¿entendido?

-Entendido.

Santi bajó un poco la persiana y se sentó a mí lado, y los guardaespaldas no tardaron mucho más en entrar en el comedor para comer. Esta sería una gran oportunidad de ver como se comportaban los guardaespaldas con los chicos y cuál sería el mejor para que se quedase con ellos, porque si había algo que no iba a permitir, era que algo les pasase a los chicos, no me lo perdonaría en la vida de ser así.

-Jessica, estos son los posibles guardaespaldas para los chicos. Ellos son Óscar, María, Eduardo y Max.

-Encantada de conoceros chicos.

-El placer es nuestra señorita Leone.

-Vale, antes de empezar con formalidades, no me llaméis señorita Leone ni me tratéis de usted, llamadme Jessica.

-Cómo quieras.

-Me da la sensación de que cogerán antes la costumbre que tú, Jackson.

-Lo estoy intentando señorita, no es fácil. Lo arrastro desde que salí del ejército.

-Y por eso te tengo paciencia, pero bueno. Ellos son Michel, Madison, esa de enfrente es Carla la loca…

-Gracias, creo que es la mejor presentación que me hicieron.

-De nada, y este de aquí es mi novio Santi.

-Un gusto a todos.

-Venga, sentaos. Espero que tengáis hambre, porque si no nadie se terminará de comer toda esta comida.

Se fueron sentado en la mesa y durante la comida todo fueron risas y buen rollo. Lo estuve pensando por un rato y creo que los iba a contratar a todos, cuanta más gente tuviese cuidando de las personas que más quería, más tranquila estaría yo. Cuando terminamos de comer, Santi se fue a hacer algún café y yo quedé desbloqueé el móvil para distraerme durante un rato, y vaya si lo hice, porque me empiezan a aparecer noticias de una tal Alison que al parecer había dado hoy una entrevista y en ella había dicho que estaba con Santi, y que estaban esperando un hijo.

Por lo que me enteré, ella es la chica que quiere conseguirse a mi novio desde el instituto, y si de algo estoy segura, es de que eso es mentira. Santi no estaría con nadie más, tengo claro lo que siente por mí y no me haría algo así, por lo que tenía que hacer algo para que esa tipa dejase de decir mentiras, y tenía que ser esta misma tarde.

- ¿Jess?

- ¿Qué?

- ¿Te encuentras bien?

-Sí, pero tengo que responder esta llamada. Vengo dentro de un rato.

Con eso salí del comedor y me fui al patio trasero para llamar a Mónica, ella era la que me tenía que ayudar con esto. Esta misma tarde iba a dar una entrevista e iba a desmentir lo que esa tipa estaba diciendo de mi novio.

-Hola Jessica.

-Mónica, necesito que me consigas una entrevista para esta misma tarde.

-Espera, espera, espera. ¿Qué es lo que está pasando?

-Te lo explicaré más tarde, pero necesito que me consigas esa entrevista.

-Conseguir una entrevista de última hora es muy complicado.

-Lo sé, pero sé que lo conseguirás.

- ¿Y digo que vas tú o qué exactamente?

- ¿Alguna vez recibiste una llamada para hablar de lo que pasó en Los Ángeles?

-Sí, hace un par de semanas me llamó una presentadora para hablar de lo que pasó ya que se acerca el quinto aniversario de tu supuesta muerte.

-Pues serás tú la que vaya, luego me apareceré yo.

-Eso es demasiado impactante.

-Lo sé, pero necesito hacerlo.

- ¿Saben tanto Santi como Carla lo que vas a hacer?

-No tienen ni idea y así va a seguir. Ellos se fían de mí, y así es como lo voy a hacer.

- ¿Y Jackson?

-No le gustará la idea, pero es igual. Quiero esa entrevista. ¿Para qué día era?

-Para esta misma tarde.

-Pues ya está, ya tenemos entrevista. Luego envíame los detalles de la entrevista por mensaje, antes tengo que ir al médico, pero estaré allí en cuanto termine.

-Vale, pero luego me tienes que explicar el motivo, al menos para estar preparada para todo lo que vendrá luego de esto.

-Eso haré, no te preocupes.

-Entonces hablamos al rato y suerte en la cita con el médico.

-Hablamos al rato y gracias.

-No hay de qué.

Con eso colgamos y guardé el móvil en el bolsillo. Me quedé un rato tomando el aire cuando de la nada aparece Jackson por la puerta del jardín.

-No sé porque me da la sensación de que está tramando algo.

-Punto para ti. Después de la cita del médico tenemos que ir a por Mónica.

- ¿Y a qué se debe ese cambio de planes? Se supone que iba a ir a la discográfica.

-En cuanto Mónica me confirme la hora te digo si vamos o no.

- ¿A dónde vamos a ir?

-En este mismo momento no me está permitido darte esa información, querido.

-Claro que me la puedes dar, soy tu guardaespaldas.

-Es cierto, te la puedo dar, pero como sé que me detendrás, pues no me lo puedo permitir.

- ¿Qué es lo que estás tratando de hacer?

-Te lo contaría de no ser porque sé que se lo vas a contar tanto a Santi como a Carla.

-Y debo suponer que ellos no se tienen que enterar.

-Créeme, se enterarán, pero ya no podrán hacer nada.

-Al menos dime si necesitaremos más guardaespaldas con nosotros.

-Eso dependerá, ¿crees que en un estudio de grabación los necesitaremos?

- ¿Estudio de grabación? ¿Qué diablos piensas hacer?

-Arreglar un pequeño asunto con una persona.

- ¿Y tardarás mucho?

-Pues no lo sé.

-Llevaremos más guardaespaldas entonces.

-Si así lo consideras, lo haremos, pero de una te advierto que no podrás detenerme, lo haré con tu ayuda o sin ella. Y más te vale no decírselo a ninguno de los de dentro de casa, porque me iré sin ningún guardaespaldas.

-Sé que lo harás, por eso no se lo diré a nadie. Pero tengo entendido que Santi vendrá con nosotros, ¿Se supone que lo vas a llevar allí también?

-No, vendremos a casa y pondré cualquier excusa que se me venga a la cabeza.

-Espero que esto no salga mal, de verdad te lo digo.

-Estoy segura que no saldrá como tenía esperado hacerlo, pero tengo que hacerlo

-Sólo espero que no te suponga un problema para tu salud, eso es lo único que me importa.

-No lo hará, asique no te preocupes.

-Me preocuparé siempre, eres una buena jefa y amiga.

-Me gusta más lo segundo que lo primero debo decir, pero me alegra que empieces a tratarme de tú.

-Lo estoy intentando con todas mis fuerzas, de verdad te lo digo.

-Estoy convencida de eso.

-Por cierto, sé que es poco tiempo desde que conoces a los guardaespaldas y todo, pero ¿ya tienes en mente a cuál quieres? No me gusta que se hagan ilusiones, al fin y al cabo, todos oyeron hablar de como tratas a tus guardaespaldas.

-Pues están de suerte, se quedarán todos.

- ¿Es en serio?

-En serio, al fin y al cabo, después de lo de hoy, vamos a necesitar más gente.

-Eso no hace otra cosa que preocuparme más.

-Tal vez debas preocuparte un poco por eso, pero nada más. Estoy segura de que todo saldrá bien.

-Sólo espero que no te metas en ningún lío.

-Y no lo haré, solo defenderé lo que es mío.

-Como sea, ahora vayamos a dentro antes de que salga Santi a buscarte.

-No lo hará.

-Me da la sensación de que no conoces a tu pareja.

-Lo conozco, pero no se preocupará, al fin y al cabo, estoy en casa.

-Pero eres lo más importante para él y estás enferma, asique sí, se preocupará.

-Vale, tienes razón. Vayamos, no quiero preocupar a nadie y así le diremos a los chicos que se quedarán con nosotros.

-Estoy seguro de que les encantará la noticia.

-Eso espero, porque van a tener que aguantarme.

-Lo harán con gusto como lo hago yo.

-Eres una gran persona Jackson.

-Eso intento.

-Pues lo has conseguido.

Con eso nos fuimos a dentro de la casa y le contamos a los demás guardaespaldas que se quedarían a trabajar para mí, cosa que parece que les gustó. Una hora más tarde, salimos de la casa para dirigirnos al hospital donde nos encontraríamos con el doctor y después nos iríamos a esa entrevista que tenía que hacer.