Capitulo 4. La comida se disfruta mejor acompañado

"De acuerdo, empecemos a comer" dijo Evan mientras tomaba la iniciativa y probaba una cucharada de sopa.

Martha no comió de inmediato, por alguna extraña razón ella quería saber la opinión del joven príncipe.

Por lo que solo se quedó mirando su reacción.

Debido a que el cuerpo de Evan había estado inconsciente por 2 días, su cuerpo estaba hambriento.

Por lo que no pudo controlar sus ganas por probar esta sopa.

La sopa caldosa de color amarillo tenía algunos "vegetales flotando", todos estos vegetales eran diferentes a los que Evan está acostumbrado.

La sopa tenía trozos de carne flotando, la presentación de este plato era sencilla.

La cucharada de sopa llegó a la boca de Evan y sorbió.

Una explosión de sabores se produjo en ese instante.

Un sabor dulce pero no tan dominante y a la vez contenía un rastro de sal intoxicaron el paladar de Evan.

Como si fuese una persona que había estado en el desierto durante mucho tiempo sin tomar agua, y que de repente alguien le ofreciera un vaso de agua. Sentía que ese vaso de agua era las más rica y sabrosa que había probado en su vida.

Esto anterior, era la mejor manera de explicar a la perfección la situación de Evan.

Debido a su gran apetito no haber comido nada durante dos días, sentía que era la mejor comida que había probado en su vida.

Como un loco, empezó a sorber más cucharadas.

Martha se quedó estupefacta. Arqueando sus cejas, su sorpresa no tenía palabras describir lo que estaba viendo.

Después de un tiempo, el plato que estaba llena de sopa se vació por completo.

"Eso estuvo demasiado rico, nunca había probado una sopa tan deliciosa" dijo Evan satisfactoria mente mientras se estiraba.

Evan era consciente de que debido a su apetito fue lo que hizo saber esta sopa como un manjar, pero también no por eso iba dejar de lado el crédito a la sopa elaborada por Martha.

En circunstancias normales, Evan opinaría de la misma forma. La sopa de verdura que había preparado Martha era deliciosa.

En ese momento, Evan se dio cuenta que había terminado el plato tan rápido antes que Martha, quien siquiera había probado una cuchara.

"Lo siento, tenía tanta hambre que me apresure a comer por lo que no me habida dado cuenta que termina antes" dijo Evan con tono disculpa mientras se rascaba la cabeza.

"No se disculpe, Su Alteza. Si no todo lo contrario, es un gran honor que le haya gustado la sopa que prepare. Si lo desea, puede comerse lo demás. Puedo entender que usted está hambriento debido a que estuvo inconsciente." dijo eso mientras ella empujaba el plato con sopa que Evan le había servido.

"No, no con eso ha sido suficiente. Así que adelante, come tranquilamente." Agitando las manos, Evan rechazo el plato de Martha.

Martha no tuvo otra opción, y al final tuvo que aceptar la decisión del príncipe.

Evan sonrió al ver Martha aceptando el plato.

Después de eso, Evan se levantó hacia el carrito con la intención de servirse una taza de té.

"Déjeme servirle, Su Alteza" al ver esa acción, Martha trato de levantarse, pero Evan la detuvo para que no lo hiciera.

"Está bien, solo es una taza de té puedo hacerlo por mi cuenta" negó la cabeza.

Coloco dos tazas, y vertió en ella el té que estaba aún caliente.

Esa fragancia hizo sentir renovado.

Evan no era un experto en te, pero sabía por el olor y el color verde del te, este era de buena calidad.

Llevo las dos tazas en una bandeja hacia la mesa, coloco una de taza en frente de Margaret.

Evan tomo dos cubos de azúcar y los vertió.

Después de ver que se disolvieran en el líquido, Evan tomo de la taza.

"Ah..." soltó un sonido de satisfacción.

Martha se quedó congela y solo su mirada sorprendida se observaba en ella.

"Si no comes tu plato se terminará enfriando, y la sopa no sabrá igual" indico Evan.

La chica despertó de su shock y solamente asintió. Tomo una cucharada de la sopa y sorbió.

Una sonrisa apareció un su rostro.

"No se puede comparar a como lo preparaba mi madre, pero aun así esta delicioso" murmuro en voz baja.

Evan logro escuchar ese leve comentario.

"¿Fue tu madre quien te enseño a cocinar?" pregunto Evan mientras tomaba otro trago de té.

"Si, todo lo que se fue gracias a ella" Martha dijo con un tono de melancolía.

"¿Puedes hablarme más acerca de tu vida?" pregunto Evan

Al escuchar la pregunta, Martha no sabía que responder.

No sabía por qué esta príncipe tenía interés de escuchar la historia de su vida, dudas surgieron dentro de ella.

"Perdón, no quiero que pienses que soy una persona entrometida. Solo quería escuchar la historia de cómo son las personas fuera de este castillo. A pesar que soy un príncipe, el estar dentro del castillo siento que no conozco en realidad como se vive el mundo. Siento que soy muy ignorante en este tema, por lo que me gustaría saber y aprender a través de otros que si lo saben" dijo Evan

Este comentario era verdad, él quería aprender y entender como era este mundo. Su conocimiento nulo podría provocar futuros problemas al tratar de relacionarse con otros, por lo que sería una gran oportunidad si Martha estuviera dispuesta hablar de su vida.

Tal vez Martha pudo captar la sinceridad detrás de esas palabras por lo que las dudas en ella desparecieron.

"Si es lo que desea Su Alteza" ella contesto.

"Yo vivía en un pueblo llamado Tulus…"

.....

Al escuchar la historia de Martha, Evan solamente suspiro.

El sobrestimo por completo este mundo, fue muy ingenuo al pensar que era fácil de entenderlo, pero la realidad es completamente diferente.

Es más complejo de lo que pensó.

Martha era originaria del Reino Entu, un reino gobernado por la raza bestia en la parte sur del continente.

La raza bestia está conformada por diferentes clanes de distintos tipos de bestia, un ejemplo Martha. Ella era perteneciente al Clan de los zorros.

Pero también existían otros más como Clan de los Oso, Clan de los Tigre, Clan de los lobos sólo por mencionar algunos.

'¿Serán figuras que tienen un cuerpo similar a un humano y partes de animal, o será que su cuerpo es completamente al de un animal?' la curiosidad lo invadió.

Martha vivía junto con su madre y su padre, ellos eran agricultores.

"Siempre ayude a mi padre en vender los diferentes productos que se obtuvieron en la cosecha. Terminando un día de mucho trabajo, mi madre siempre nos recibía con la cena lista. Era mi momento favorito, ya que nos reunimos en familia y hablábamos de las cosas interesantes que nos habían ocurrido. Aunque nuestra vida era simple y sencilla, éramos una familia feliz. Eso era más que suficiente." dijo como si todos esos recuerdos sucedieron el día de ayer. Una tierna y hermosa sonrisa estaba en su rostro.

"Éramos felices nosotros tres, pero no fue hasta que ese día llegó.... "

De repente, la actitud de Martha dio un gran cambio.

Esa sonrisa marcada en su rostro se fue desapareciendo.

Y su tono de voz cambió a tristeza y dolor.

"Cuando tenía 13 años, era un día normal como cualquier otro. Ayude a mi padre a cargar las cosas dentro de nuestra pequeña carreta para llevarlos a vender a la Ciudad Italika. Pero cuando estábamos apuntó de partir. Una caravana de la familia real llegó a nuestro pueblo. Resulta que la persona enviada era un mensajero, quien traía las órdenes de Su Majestad, Ra. Al leer el pergamino real, el mensajero difundió que el reino había entrado en guerra con un Reino humano adyacente a nosotros. Este reino era una gran amenaza para nuestra soberanía, por lo que el rey decretó que todos los hombres adultos del reino tenían que unirse al ejército para la defensa." dijo con tristeza

"Y fue así que mi papá tuvo que partir para recibir un básico entrenamiento militar para luego ser enviado como refuerzos de las tropas que estaban en las líneas enemigas. No tenía otra opción ya que eran ordenes de nuestro rey, si alguien quisiera negarse se le acusaría de traición y sería ejecutado. Dos días después, se habían hechos los preparativos para transportar a los hombres del pueblo a través de una carreta. Antes de partir, mi padre me dejó una hermosa medalla"

Ella dijo mientras en ese momento, sacó una medalla que colgaba en su cuello.

"Él me dijo que a pesar de cualquier situación en donde creyera que no había salida, viera la fotografía dentro de la medalla. No entendí completamente sus palabras, aún era una niña después de todo. Me pidió que cuidara a mi madre, y esperamos a su regreso con una deliciosa cena. Esa tarde, cuando el sol se estaba ocultando las caravanas donde transportaban a los hombres partió. Antes que estuvieran lejos pude ver a mi padre, él tenía una sonrisa en su rostro. Sacó la mano de la caravana mientras se despedía." algunas lágrimas rodaron en las mejillas de Martha.

Sus orejas estaban decaídas.

"Quién sabría que esa sería la última vez que vería a mi padre"

Evan no dijo, mientras escuchó el relato de Martha.

Un largo silencio se produjo, sólo unos pocos sollozos se escuchaban.

Un tiempo después, Martha se limpio sus ojos mientras continuaba su historia.

"A lo largo de la historia, tanto la raza de los humanos como el de las bestias siempre se han visto como enemigos. Muchas guerras se han desatado sólo por esa simple razón." dijo un poco más tranquila.

"La naturaleza de cada raza es diferente. Los humanos son capaces de utilizar la magia al tener mayor poder mágico dentro de sus cuerpos en comparación a nuestra raza que es baja e inclusa nula. Aunque somos inferiores a los humanos con respecto al magia, podemos igualarlos gracias a nuestro poder guerrero. Ya que nuestros cuerpos son más fuertes que el de los humanos, podemos utilizar esa ventaja y podemos luchar directamente contra los humanos" dijo Martha explicando brevemente.

Pero en ese momento Evan estaba sorprendido.

'¿En este mundo existe la magia?' Evan estaba conmocionado.

La escena en donde magos conjurando diferentes hechizos provocando fenómenos naturales que desafían la lógica aparecieron en su mente.

Este descubrimiento hizo que tragar saliva.

Martha no se percató de esos pensamientos de Evan.

Ella continuó hablando.

"Aunque podemos igualar a los humanos, la diferencia de poder del reino enemigo era superior al nuestro por lo que fue cuestión de tiempo que invadieran nuestro reino. En menos de un mes, las fuerzas enemigas lograron derrotar a las tropas reales ubicadas en la frontera. De esta manera, pudieron ingresar al reino hacia la capital como su destino final. Una semana después de que el enemigo había podido invadir parte del reino recibimos una carta. Donde decía que mi padre había muerto en acción. Murió cuando su tropa había sido enviada para reforzar las tropas reales que estaban ubicadas en la zona oriental del reino, pero el escuadrón donde él iba fue emboscado. De 10,000 soldados que formaban ese escuadrón, ninguno sobrevivió"

Evan pudo sentir el dolor de Martha en esas palabras.

"Cuando me entere de eso, quería llorar. Pero algo me impidió. Y fue la promesa que le hice a mi padre. Que sin importar que, cuidaría y estaría a lado de mi madre. Por lo que tenía que ser fuerte para mí madre. Aunque sentía un gran dolor, decidí no demostrarlo." dijo con determinación.

" Los días pasaron, las semanas volaron y los meses terminaban, el ambiente de nuestra casa cambió. Madre cayó enferma debido a la tristeza. No comía y dormía bien, por lo que afecto a su salud. Su cuerpo débil no le permitía poder levantarse de cama. No pude hacerme cargo de las cosechas por lo que nuestros ingresos bajaron. Tuve que buscar algunos trabajos, cargando cosas, limpiando establos o cualquier cosa que me pudiera ayudar. Tenía que conseguir lo necesario para poder comprar comida y algunas medicinas para mi madre. Pero al final de todo ella falleció. Fue así que perdí a mis seres más queridos, perdí a mi familia." dijo Martha

"Después de la muerte de mi madre, un anciano que era conocido de mi padre se hizo cargo de mí. Si no fuera por él, tal vez yo también hubiera muerto por sentirme sola. Estoy muy agradecía con ese viejo, me dio un techo en que vivir y comida que tener. Era un médico, por lo que ganaba un poco de dinero." el tono de Martha era de gratitud.

"Pero las malas noticias no dejaban de llagar. En menos de medio año, el reino humano pudo invadir la capital, matando la mayor parte de las fuerzas del reino. La familia real casi fue aniquilada. Solo un la reina y un par de príncipes logrando salir con vida. El rey había muerto mientras luchaba contra un grupo de humanos que lo rodearon y trataba de conseguir algo de tiempo para que los civiles pudieran retirarse de manera segura. Al caer la capital, el reino llegó su fin. Se recibieron órdenes de escapar y buscar refugio a los reinos vecinos. Pero todo fue demasiado tarde. Los humanos pudieron avanzar rápidamente su conquista al ya no tener mucha resistencia por parte de nuestro reino. En pocos días ellas llegaron al pueblo." dijo con enojo.

" Los soldados humanos eran como demonios. Mataban sin piedad, no les importaba si eran ancianos, mujeres o niños. Saquearon las casas y quemaron el pueblo. Muchos murieron, las mujeres fueron voladas y los hombres fueron asesinados. Ese viejo se sacrifico para darme algo de tiempo para poder escapar, pero debido a que solo era una niña no pude llegar lejos. Y terminé siendo capturada."

Evan quedó impactado por escuchar esta trágica historia.

Con sólo imaginar esas escenas, no pudo relacionar a esta amable y sencilla mujer que tuvo que pasar por un infierno en carne propia.

" Termine siendo vendida como esclavo. Llegué a tener diferentes amos, varios me torturaron y trataron de violarme, pero a pesar de eso como si tuviera alguien cuidándome varios sucesos ocurrieron. Algunos de las personas que serví murieron de manera misteriosa. Fue a todo eso que todavía pude seguir viva hasta el día de hoy." dijo ella

" Tal vez son mis padres quienes me están cuidando desde los cielos."

Miro ese collar y todo sentimiento de tristeza desapareció. Y una vez más una pequeña sonrisa apareció.

"Hace menos de 2 meses fui enviada al castillo junto con otras sirvientas como regalo de un noble para su padre. Fue como llegué aquí y debido a que Su Alteza solicitó mi servicio, fui reubicada hace dos días."

Mientras decía eso, volvió a guardar su collar dentro de su traje de sirvienta.

Miró nuevamente a Evan.

"Esa es la historia de mi vida" terminó diciendo eso.

Evan siempre presto atención a la historia de inicio a fin.

Gracias a esto, pudo tener una vaga idea de cómo era el mundo.

Era un mundo donde las guerras y los asesinatos sucedían diariamente.

Los fuertes gobiernan sobre los débiles.

Existe la magia.

Un escalofrío recorrió el cuerpo de Evan.

Al escuchar el fin de la historia, no sabía cómo expresar al enterarse de la cruel vida que tuvo que pasar Martha.

Evan se sintió un poco culpable, su intención de saber la historia de Martha era para poder obtener más información de este mundo.

Pero descubrió algo más que no estaba previsto.

"Lo siento, nunca pensé que hayas tenido que pasar por esa situación. Tal vez era algo que no quieras volver recordar, pero por mi tuviste que hacerlo. Así que, perdón" Evan se inclinó un poco en forma de disculpa.

"Su Alteza, no debe de bajar su cabeza con facilidad" ella contestó nerviosa al ver dicha acción.

"Puede pensar que es un pasado trágico, y está en lo correcto. Sufrí mucho en su momento y quería olvidarme de ello. Pero también sabía que, si lo hacía, sería como no aceptarme a mí misma. Ese pasado es también parte de mí, por lo que ignorarlo u olvidarlo es igual a no reconocerme. Por lo que las preocupaciones de Su Alteza son innecesarias." dijo ella con seriedad.

"Me sorprende que a pesar de tener un pasado que muchos tal vez no podrían soportar, fuiste capaz de resistir y seguir adelante. Ese esfuerzo tuyo, tiene todo mi respeto." dijo Evan con toda sinceridad.

Esta chica frente de ella, tuvo que pasar por diferentes situaciones de vida o muerte, pero a pesar de ello, logró mantenerse de pie y continuó sobrepasando cada obstáculo que se le presentó.

Ese tipo de esfuerzo, claramente merecía todo el respeto de Evan.

Al escuchar la sinceridad de las palabras de Evan, Martha de sintió cautivada.

"Muchas gracias, Su Alteza. Es un gran honor que usted piense en mi de tal manera."

Ella agradeció.

"Pero hay algo que no puedo entender. Todo fue a raíz de la guerra contra el Reino humano que invadió tu reino destrozando todo a su paso, es normal culparlos ya que por ellos fue que perdiste a tu familia y tu casa. Por eso déjame preguntarte, tu... ¿Odias a los humanos?" preguntó con cuidado.

"Al principio si, consideraba a los humanos como demonios llenos de avaricia y lujuria. Los odie tanto que pensé si tuviera fuerza para luchar, haría todo lo que estuviera mi alcance para exterminar toda su raza." dijo con mucho rencor. La fuerza en sus palabras lo demostraba todo.

"Pero supe que es un error pensar de esa manera. A lo largo de estos años me he dado cuenta que no todos son así. No todos los humanos son ambiciosos, arrogantes o despreciables. Dentro de los humanos existen buenas personas. Seres que son amables y se preocupan por lo demás. Que, sin importar la diferencia de razas, te ven como uno de ellos. Supe que cometí un error al generalizar a toda una raza como seres despreciables. Por lo tanto, no odio a los seres humanos si no oído al ser vivo que solo tiene la ambición del poder acosta del precio de muchas vidas sin sentido. Eso es lo que más odio." Con seguridad, afirmó.

Esa afirmación, impresionó a Evan.

Se percató que Martha puede ser amable y sencilla pero también era valiente y decidida.

La impresión de ella en su mente mejoro notoriamente.

Un tiempo después continuaron hablando hasta que Martha había terminado la sopa.

"Muchas gracias por haberme platicado tu vida. Me ayudaste mucho, ahora puedo entender un poco más como es el mundo fuera de este castillo" dijo Evan

"No es nada Su Alteza. Me alegra podido haberlo ayudado." contestó ella.

Pará Martha, veía aúna persona sincera y amable por lo que se siento satisfecha al poder haber ayudado.

"Ahora entiendes el significado del dicho que mencioné en un principio" dijo Evan.

Martha sonrió.

"Si, Su Alteza. Tiene toda la razón, fue muy agradable comer con usted." dijo ella.

"Perfecto. A partir del día de mañana, tendrás que desayunar conmigo todos los días. Y no acepto un no como respuesta. Así que ¿Que aceptas? " cómo si estuviese hablando con un amigo, el bromeó al final.

Viendo la actitud y la petición del príncipe, Martha pensó que a este hombre no le importaba las etiquetas sociales.

Quería decir que no, debido a que es incorrecto que el príncipe coma de la misma mesa con sus sirvientes.

Pero algo evitó que lo dijera.

Ella mentiría si dijera que no se sintió agradable al hablar con este hombre, es como si fuesen amigos de años.

Al actitud y personalidad de este príncipe, hicieron que no sólo lo viera como su amo si no como una persona con el cual hablar.

Sin otra opción, Martha asintió.

"Si así lo desea, Su Alteza." dijo ella.

Antes de que Evan pudiera decir algo.

Alguien tocó la puerta.

Toc toc.

"Soy Mendel, Abel. Voy a entrar."

Se escuchó la voz de un hombre.

Una figura apareció detrás de esa gran puerta.

"Hey! Escuche que te habías despertado. Por lo..." dijo con un tono altanero antes de poder terminar.

Cuando vio a las dos personas sentadas en la habitación.