Capítulo 2 – Situación

*¡Tap!* *¡Tap!* *¡Tap!*

Retrocedió asustado ante la imagen que lo recibió. Era como si la persona en el espejo del vestidor no fuese él, sino un cadáver disecado.

"¿¡Cómo podría una persona con heridas tan graves seguir viva!?»

Volteó la cabeza con incredulidad y miró al otro lado. A pesar de que estaba lejos y la iluminación era pobre, aún podía ver la herida penetrante y las manchas de sangre rojo oscuro.

—Esto es…—respiró hondo mientras intentaba calmarse.

Extendió la mano para presionar su pecho izquierdo, sintió su corazón acelerado, exudando una inmensa vitalidad.

Luego tocó su piel expuesta. Por debajo de la ligera frialdad fluía el calor.

Cuando se agachó, después de verificar que sus rodillas podían doblarse, se levantó de nuevo y se calmó.

—¿Qué está ocurriendo? —murmuró con el ceño fruncido. Planeaba inspeccionar seriamente su lesión en la cabeza una vez más.

Dio dos pasos hacia adelante y se detuvo de repente. La luz de la luna sangrienta era relativamente oscura, por lo que era insuficiente para su 'inspección seria.'

Un fragmento de memoria se disparó y giró la cabeza para mirar las tuberías de color blanco grisáceo y la lámpara de rejilla metálica en la pared justo al lado del escritorio de estudio.

Esa era la lámpara de gas más común de los tiempos. Su llama era estable y sus capacidades de iluminación eran excelentes.

Con la situación familiar de Klein Moretti, incluso una lámpara de queroseno era un sueño, y ni hablar de una lámpara de gas. El uso de velas era más adecuado para su posición y estatus. Sin embargo, cuando quemó el aceite de medianoche hace cuatro años para ser admitido en la Universidad de Khoy, su hermano mayor, Benson, sintió que era un asunto importante del cual dependía el futuro de su familia. Por lo tanto, insistió en crear condiciones de estudio propicias para Klein, incluso si eso significaba endeudarse.

Por supuesto, Benson, que sabía leer y escribir, y que había trabajado durante varios años, no era una persona precipitada que no pensaba en las consecuencias. Tenía bastantes trucos bajo la manga. Razonó con el propietario para 'elevar los estándares del apartamento mediante la instalación de tuberías de gas para mejorar la probabilidad de alquileres en el futuro'. El propietario se convenció y proporcionó el dinero para completar las modificaciones básicas. Luego, aprovechando la conveniencia de trabajar en una empresa de importación y exportación, compró una nueva lámpara de gas que estaba casi a precio de fábrica. Al final, todo lo que necesitó fue usar sus ahorros y no necesitó pedir dinero prestado.

Después de que el fragmento de memoria pasó por su mente, se acercó al escritorio, donde giró la válvula de la tubería y comenzó a girar el interruptor de la lámpara de gas.

Con un sonido de chisporroteo, una chispa sonó de la fricción. La luz no descendió sobre él como lo había esperado.

Giró el interruptor un par de veces más, pero todo lo que hizo la lámpara de gas fue chisporrotear y permanecer oscura.

—Hmm... —retrayendo su mano y presionando su sien izquierda, buscó por la causa hurgando entre los fragmentos de su memoria.

Unos segundos después, se dio la vuelta y caminó hacia la puerta. Llegó a la instalación de la máquina que estaba insertada de manera similar en la pared y tenía unas tuberías grisáceas conectadas a ella.

¡Eso era un medidor de gas!

Después de ver los engranajes y rodamientos expuestos, sacó una moneda del bolsillo de su pantalón.

Era de color amarillo oscuro y tenía un brillo de bronce. La parte frontal de la moneda estaba grabada con un retrato de un hombre que llevaba una corona, y tenía en la parte posterior un '1' sobre un puñado de trigo.

Sabía que esa era la moneda más básica del Reino de Loen. Se le llamaba centavo de cobre. El poder de compra de un centavo era aproximadamente de tres a cuatro yuanes antes de su transmigración. Tales monedas tenían otras denominaciones como los cinco peniques, medio penique y un cuarto de penique. A pesar de los tres tipos, las denominaciones no estaban en unidades suficientemente pequeñas. En la vida cotidiana, uno tenía que comprar varias cosas diferentes para gastar una sola moneda de vez en cuando.

Después de lanzar la moneda, la cual solo se acuñó y circuló después de que el Rey George III ascendiese al trono. Insertó la moneda en la delgada 'boca' vertical del medidor de gas.

*¡Clink!* *¡Clang!*

Después de que el centavo cayó al fondo del medidor, el sonido de los engranajes crujiendo sonó de inmediato, produciendo un ritmo mecánico corto pero melodioso.

Se quedó mirando el medidor durante unos segundos antes de volver al escritorio de madera maciza. Luego se estiró para girar el interruptor de la lámpara de gas.

Después de un poco de chisporroteo, ¡hubo un sonido agudo!

Una columna de fuego se encendió y creció con rapidez. La luz brillante primero ocupó las partes internas de la lámpara de pared antes de penetrar el vidrio transparente, cubriendo la habitación con un brillo cálido.

La oscuridad retrocedió rápidamente mientras el carmesí se retiraba por la ventana. Se sintió cómodo por una razón desconcertante y se acercó apresurado al espejo de vestidor.

Esta vez, inspeccionó seriamente su sien y no se perdió ningún detalle.

Después de algunas rondas de inspección, se dio cuenta de que, aparte de la mancha de sangre original, ya no salía líquido de la grotesca herida. Parecía que había recibido la mejor hemostasia y vendajes. En cuanto al cerebro blanco grisáceo que se retorcía lentamente y el crecimiento perceptible de carne y hueso alrededor de la apertura, daba como resultado que la herida pudiese demorar entre treinta y cuarenta minutos, o incluso de dos o tres horas antes de que solo dejase una cicatriz leve.

—¿Esos efectos restauradores son dados por la transmigración? —curvó la esquina derecha de su boca mientras murmuraba en silencio.

Seguido de eso, dejó escapar un largo suspiro. En cualquier caso, ¡todavía estaba vivo!

Después de tranquilizarse, abrió un cajón y sacó una pequeña barra de jabón. Tomó una de las viejas y desgastadas toallas que colgaban del lado de la alacena y abrió la puerta. Luego caminó hacia el baño público que compartían los inquilinos en el segundo piso.

«Sí, debo limpiar las manchas de sangre en mi cabeza, o seguiré luciendo como sacado de una escena del crimen. Está bien asustarme a mí mismo, pero si asustase a mi hermana; Melissa, cuando se levante temprano mañana al amanecer, ¡sería bastante problemático!»

El corredor exterior estaba completamente negro. Las siluetas apenas eran acentuadas por la luz de la luna carmesí proveniente de la ventana al final del pasillo. Parecían un par de ojos monstruosos que observaban en silencio a los vivos tarde por la noche.

Aligeró sus pasos mientras caminaba hacia el baño común con un miedo estremecedor.

Cuando entró, había aún más luz lunar, permitiéndole ver todo claramente. Se paró frente a un lavado y giró la perilla del grifo.

Al escuchar el fluyente sonido del agua, recordó de repente a su propietario, el Sr. Franky.

Como el agua estaba incluida en el alquiler, ese caballero pequeño y delgado que llevaba un sombrero de copa, un chaleco y un traje negro, siempre inspeccionaba el baño activamente para detectar cualquier sonido de agua fluyendo.

Si el agua brotaba demasiado fuerte, el Sr. Franky ignoraría todos sus rasgos de caballero al agitar su bastón y golpear la puerta del baño, gritando cosas como 'condenado ladrón', 'el desperdicio es un asunto vergonzoso', 'te recordaré', 'Si veo que esto sucede otra vez, lárgate junto con tu sucio equipaje', 'guarda mis palabras, este es el apartamento con la mejor relación calidad-precio en la ciudad de Tingen. ¡En ningún otro lugar encontrarás un propietario más amable!'

Dejando de lado esos pensamientos, usó una toalla húmeda para limpiar las manchas de sangre de su rostro una y otra vez.

Después de chequearse a sí mismo usando el deteriorado espejo en el baño y verificar que todo lo que quedaba era una herida horrible y una cara pálida, Zhou Mingrui se relajó. Luego, se quitó la camisa de lino y usó una barra de jabón para lavar las manchas de sangre.

En ese momento, arrugó la frente y recordó un posible problema.

La herida era demasiado exagerada y había demasiada sangre. Aparte de su cuerpo, ¡probablemente su habitación todavía tenía signos de su lesión!

Unos minutos más tarde, después de que terminó con su camisa de lino, regresó rápidamente a su apartamento con una toalla húmeda. Primero limpió la huella de sangre en el escritorio, y luego, utilizando la iluminación de la lámpara de gas, buscó los lugares que pudo haber omitido.

Al instante descubrió que una cantidad considerable de sangre había salpicado sobre el suelo debajo del escritorio. Y había una bala amarilla en el lado izquierdo de la pared.

—¿Soltar un disparo con un revólver apuntando a la sien?

Después de mezclar y combinar las pistas de antes, tuvo una idea aproximada de cómo había muerto Klein.

No tenía prisa por verificar su suposición. En su lugar, secó seriamente las manchas de sangre y limpió la 'escena'. Después de eso, tomó la bala y regresó a un lado de su escritorio. Abrió el cilindro del revólver y sacó las balas en el interior.

Un total de cinco balas y un casquillo; todas tenían un brillo de latón.

—En efecto... —miró el cartucho vacío frente a él y metió las balas en el cilindro mientras asentía.

Volvió su mirada hacia la izquierda y aterrizó en las palabras del cuaderno: 'Todos morirán, incluyéndome'. Después de eso, aún más dudas surgieron en él.

"¿De dónde provino la pistola?»

"¿Fue un suicidio o un suicidio falso?»

"¿En qué tipo de problemas podría meterse un graduado en historia de orígenes humildes?»

"¿Por qué tal método de suicidio dejaría tan poca sangre? ¿Fue porque transmigré de manera oportuna y llegó con beneficios curativos?»

Después de reflexionar por un momento, se cambió a otra camisa de lino. Se sentó en la silla y comenzó a meditar sobre asuntos más importantes.

La experiencia de Klein todavía no era algo de lo que tuviese que preocuparse. ¡El verdadero problema era descubrir la razón de su transmigración y si podía regresar!

Sus padres, parientes, mejores amigos y compañeros. El fascinante mundo de Internet y todo tipo de deliciosos manjares... ¡esas eran las razones que motivaron su deseo de regresar!

*Clic. Clic. Clic…*

Inconscientemente, La mano derecha de Zhou Mingrui estaba sacando el cilindro del revólver y golpeándolo para colocarlo de nuevo en su lugar, una y otra vez.

«Sí, no ha habido mucha diferencia para mí entre este período de tiempo y el pasado. Tuve un poco de mala suerte, pero ¿por qué transmigrar por alguna razón incomprensible?»

«Mala suerte... Sí, ¡hoy intenté un ritual para mejorar la suerte antes de la cena!»

Un pensamiento brilló en su mente, iluminando los recuerdos que estaban ocultos por una niebla de confusión.

Como político de teclado calificado, historiador del teclado, economista del teclado, biólogo del teclado y folclorista del teclado, siempre se había considerado a sí mismo alguien que 'sabe algo de todo'. Por supuesto, su mejor amigo a menudo se burlaba de él como alguien que 'solo sabe un poco de todo'.

Y uno de ellos era la adivinación china.

Cuando visitó su ciudad natal el año pasado, descubrió un libro encuadernado con un hilo titulado 'Adivinación por Excelencia y Artes Arcanas de las Dinastías Qin y Han' en una antigua librería. Parecía bastante interesante y podía ayudarlo a posicionarse en Internet, así que lo compró. Desafortunadamente, su interés fue efímero. El guión vertical que utilizó hizo que la experiencia de lectura fuese horrible. Todo lo que hizo fue pasar las páginas iniciales antes de tirarlo a un rincón.

Había experimentado una racha de mala suerte en el último mes; perdiendo su teléfono celular, clientes huyendo después de engañarlo y errores en el trabajo. Sólo entonces, de pronto, recordó el ritual para mejorar la suerte escrito al comienzo de 'Adivinación por Excelencia y Artes Arcanas'. Además, los requisitos eran extremadamente simples, sin requerimiento de las bases básicas.

Todo lo que necesitaba era conseguir cuatro porciones de alimentos básicos en su área y colocarlos en las cuatro esquinas de su habitación. Podrían colocarse en muebles como mesas y armarios. Luego, parándose en medio de la habitación, tenía que dar cuatro pasos en sentido contrario a las agujas del reloj para hacer un cuadrado. El primer paso le pedía recitar con sinceridad 'Bendiciones provenientes del inmortal, Señor del Cielo y la Tierra.' El segundo paso era recitar en silencio: 'Bendiciones provenientes del firmamento, Señor del Cielo y la Tierra.' El tercer paso era 'Bendiciones Provenientes del Exaltado Arco del Cielo y la Tierra', y el cuarto paso 'Bendiciones Provenientes del Celestial Digno del Cielo y la Tierra'. Después de que se daban los cuatro pasos, tenía que cerrar los ojos y esperar cinco minutos en su lugar original. Solo entonces el ritual sería considerado completo.

Como no le costaría dinero, buscó el libro, siguió lo que estaba estipulado y lo hizo antes de la cena. Sin embargo... nada sucedió en ese entonces.

¡Quién hubiese adivinado que en realidad transmigraría en medio de la noche!

¡Transmigración!

—Hay una clara posibilidad de que se deba a ese ritual para mejorar la suerte...

—Sí, debería intentarlo aquí mañana. Si realmente es por eso, ¡tengo una oportunidad de transmigrar de vuelta! —dejó de mover el cilindro del revólver y se sentó derecho.

En cualquier caso, ¡tenía que intentarlo!

¡Tenía que intentar un Ave María!