webnovel

Capítulo 5 - Glicht #1

"¿Dónde estaba esto?"

Estaba en una biblioteca de algún tipo de lugar de estudio aburrido, casi podía sentirse una presión en mi cabeza.

"Aquí estás."

Una chica, piel clara ojos dorados y cabello tan rubio como el latón.

Si pudiera decir, ella podría representar la luz, casi un ángel si no fuera porque me irritaba los ojos.

Siendo una acción inconsciente trato de frotarlos con fuerzas, pero para mí confusión resultó que estoy utilizando guantes de lana blancos.

De hecho, mi ropa había sido cambiada por un uniforme de algún estilo de empresa o mayordomía. Llevaba un chaleco azul, una camisa a cuadros, pantalones azules y zapatos negros, todo a la medida. Incluso mi pelo estaba peinado con un pequeño flequillo popular que había visto en internet.

Cielos incluso note que llevaba un reloj en la muñeca derecha.

"¿Que paso? "hablé sin pensar, volviendo mi mirada para ver a la pelirrubia frente mío.

"¿Eh? Oh, ya terminé," dijo mientras colocaba algunas carpetas sobre la mesa, algo que apenas noté debido a mi repentina reubicación.

Observé más detenidamente el lugar y noté que estaba en una habitación con muchas sillas y mesas, posiblemente un área de lectura, viendo los estantes llenos de libros a lo lejos creo que era plausible mi idea.

"Solo debe presentar mi examen Físico y podre tener mi propia identificación" ella dice mientras se juntas sus manos y sonríe con emoción.

Si no fuera por qué estamos en una biblioteca o un lugar que puedo reconocer como una, posiblemente gritaría de la emoción.

Sin duda su emoción es contagiosa, dando una sonrisa diminuta, pero desvaneciendo gradual mente mi sonrisa al no saber sobre quién era ella o en dónde estaba.

No podía recordar qué había pasado. Recordaba levantarme temprano, ir a la escuela e incluso ver al profesor dando la clase, pero no tenía idea de cómo había llegado a este lugar.

"Y, ¿quién eres?" dudé en preguntar, pero al último no pude evitarlo.

Una forma más vívida de describir cómo se sintió todo sería decir que el tiempo pareció detenerse a mi alrededor. En un instante, una sensación gélida se apoderó de mi cuerpo, y la sospecha inmediata de que fue algo que dije solo intensificó esa sensación.

Consciente de que había metido la pata, me esforcé por enmendar la situación de la mejor manera posible.

"Quiero decir, me alegro por ti."

"Pero te juro que no sé quién eres," dije, moviéndome inquieto en la silla e incorporándome al notar la incomodidad y la mirada fija de la chica.

Estaba a punto de continuar hablando cuando su acción me dejó congelado en mi lugar.

¿Había parecido un tonto?

"Uh..." murmuré, confuso, seguido de un patético intento de aclararme la garganta. Mis pensamientos se arremolinaban, incapaces de encontrar un punto de anclaje.

¿Cómo no lo estaría? Ella se había movido de manera tan rápida y repentina. Que para mi confundido yo, solo podía quedarme viendo sus extrañas acciones.

"¿Te sientes bien?" preguntó con una voz teñida de preocupación, colocando su mano en mi frente. Sus dedos, tibios y finos, palpaban mi piel en busca de algún, ¿desperfecto? o ¿rareza?

Sinceramente, no estaba seguro de nada. La confusión me envolvía como una niebla espesa y la manera en que se estaban desarrollando las cosas no ayudaba a entender la extraña fantasía que estaba viviendo. Solo pude mirarla, incapaz de articular mis pensamientos.

Su expresión era de preocupación, sus cejas ligeramente fruncidas, los labios curvados en una línea de incertidumbre.

Las manos de la chica, cálidas y suaves, se movían con delicadeza sobre mi frente. Podía sentir el leve temblor de sus dedos, una señal de su propia incertidumbre o preocupación hacia . . . ¿mi?

¿Qué?

"No pareces enfermo" comentó finalmente, su voz apenas un susurro.

"No hueles a nada tampoco" dice mientras se acerca oliendo el notable aroma a perfume me envuelve a mi alrededor.

"Y aparte de eso estás muy guapo hoy" todo eso lo dijo, oliendo y escaneado me completamente.

El entorno a nuestro alrededor, la biblioteca, parecía desvanecerse en un segundo plano. El suave murmullo de los estudiantes y el susurro de las páginas pasando se convirtieron en un eco distante. La luz filtrada a través de las ventanas creaba patrones de sombras y luces en las estanterías llenas de libros.

"Hemm... ¿Gracias?" dije siendo una respuesta llena de nerviosismo y tal vez, ¿alegría?

Respiré hondo, tratando de calmar mi mente.

El peso de sus palabras había hecho que mi corazón rugiera como una tormenta y mi ansiedad temblante como un terremoto. ¿Qué me había sucedido? ¿Por qué no podía recordar lo que había pasado en la escuela?

¡DE QUE ME HABIA PERDIDO?

"Tu mano" ella volvió hablar siendo ahora una voz más de mando, cortando tal caos en mi mente.

"Ah?"

"Mi que" pregunte confundido, notando aun como su expresión de preocupación y tención crecía con cada segundo.

"Tu mano derecha, ahora" demando ella con voz aún más seria, lo cual hizo que yo casi robóticamente obedeciera su orden.

"Wao, tranquila, tranquila" dije intentando controlar la situación, no obstante, no me dejo ni si quiera reaccionar, siendo ella quien tomo mi mano derecha y con hábiles movimientos, accedió al reloj inteligente.

Seguidamente de eso ella saco de uno de sus bolsillos un teléfono inteligente, rápidamente tecleando algo rápido en este, después de un momento vi como su expresión cambio a una completamente diferente.

De preocupación, Miedo y Nerviosismo notorio en su rostro, paso a una irritada y molesta.

"Volviste beber" casi al instante ella pregunto, su tono, aunque molesto pude detectar tristeza saliendo de ella.

"beber, ¿beber que?" pregunte, arqueando una ceja un tanto confundido e integrado por la familiaridad de la chica hacia mí.

"¿Qué más podría ser? Alcohol. Has estado tomando recientemente", su voz dulce y preocupada ahora era más grave siendo un cambio abrupto, pero aun manteniendo bajo su voz, pero, evidente el enojo y frustración que escapaba de ella aun conservando la etiqueta de no gritar en la biblioteca.

¿Oh lo estaba imaginando?

ba. . .

No importaba. pensé para mi mismo, encontrando esto mas incomodo si no la detenía en este momento.

Si, no negaría que me habían culpado de cosas malas, pero ser un borracho sin siquiera poder probarlo tan siquiera. Eje, la vida era injusta.

"Amig, o... bueno conocida, enserio no sé quién eres" dije, con calma, repitiéndolo otra vez y mientras lo hacía me levante de la silla lentamente, manteniendo la distancia de ella si tendría otro arrebato.

Que por lo que vería no estaría lejos de suceder.

"Ah, por supuesto. Esto también tenía que pasar", dijo ella con molestia entre suspiros, tratando de calmarse mientras se masajeaba la frente.

"Mira no entiendes lo que sucede, pero el caso es que estas experimentado una falta de memoria debido a tus constantes vicios entre otras malas decisiones" exclama ella seguidamente para mostrarme la pantalla de su teléfono donde, parte de ver varias estadísticas, datos actualizados cada cierto tiempo, entre ellos hay uno marcados en rojo.

Siendo los que más resaltan y pareciendo que ella quiere que los lea, sigo su juego.

Vitamina B1 (Tiamina): 8 ng/mL

Vitamina C (Ácido Ascórbico): 0.2 mg/dL

Claro que, estos datos. No me muestran o dicen tener un significado para mí, no es como si lo entendiera o viera cual es el problema de ello, claro está.

Estoy teniendo problemas en la escuela, no creo ser el más indicado para esto.

"Disculpa, no seque dices" hablo mientras coloco la silla en su lugar, alejándome poco a poco, sintiendo una mirada intensa de ella e incomodidad invadirme, pero, como siempre, hago un intento y la guardo hasta los más profundo de mi cabeza a la vez que me concentro en busca de una puerta para dirigirme a ella, con un paso apresurado, pero no tan evidente.

O eso creo yo.

Tan cerca de salir de esta situación irreal y extrañaintento tomar la manija de la puerta hasta que