webnovel

Corazón sangrante

La curiosidad.... es algo legítimo es todo ser humano, de ir más allá de lo que conocemos o experimentamos. Eso me hizo llegar hasta allí. ¿Me arrepiento? Claro que no, es lo más jodido, sadico y oscuro pero tremendamente placentero, quieres saber a qué me refiero? Ven a descubrirlo .

GermallonyN · History
Not enough ratings
6 Chs

Capítulo 5

Capítulo 5.

20 minutos y se acaba el show. Nos levantamos y nos sentamos en el bar, Lauren no es más que una guía, no es ni una dominante pero ni una sumisa. Este lugar como las vistas me tiene súper excitada, si me da un poco de vergüenza ver tanta libertad, pero coincidente de qué no estoy acostumbrada a esto.

Quiero hacer algo por qué hoy me propuse sexo no importa cómo.

-Lauren, y las participaciones son simplemente tomar puesto en algún escenario?-. La curiosidad.

-Vas a algún lugar disponible, y haces lo que quieras con tu pareja, si alguien quiere unirse se pide permiso y listo.- Me agrada el rumbo de esto.

-Creo que tengo ganas de participar.- Hasta que lo suelto.

Miro su cara, esta me sonríe como una chica que hizo algo mal ~ Traviesa~ me toma de la mano, para dirigirme a uno de los escenarios disponibles. Las luces tenues hacen un poco caótica la visión pero hay está lo bueno, no tener una gran bombilla molestando.

Esta deja mi bolso, en algún lugar del puesto para quedar frente a mi, tengo los brazos tendidos a los lados mientras espero a que pasara.

-Para darte un pequeño ejemplo, harás todo lo que diga sin rechistar, sabes tu palabra clave así que no cuestiones, no dudes, y no tengas vergüenza, esa palabra aquí no existe.- Sintiendo mi corazón bombear rápido me dejo llevar.

Lauren me besa con autoridad, sus manos pasan desde mi cintura hasta mi trasero una se queda ahí lo cual la otra sube hasta unos de mis senos. Los pellizca a través de la tela lo que me hace soltar un pequeño gemido, se separa un poco para ir a una pared detrás de la cama que tiene distintos artefactos.

Toma una venda y unas esposas. Se acerca a mi y pone la venda en mis ojos así anulando mi visión, comienza a besar mi cuello mientras sus manos van bajando mi vestido hasta caer. En un movimiento me tira a la cama para quedar recostada, arquea mis piernas y las abre, esto es jodidamente placentero, en un instante desabrocha mi sostén para atacar mis pezones. Sus manos masajean por encima de mi braga, su otra mano se encarga de hacer retorcer mis senos, suelto gemidos incontrolables por que las jodidas sensaciones me están matando.

Sus manos me abandonan para quitar mi única prenda, ataca mi vagina con su lengua en cuanto a mi humedad se desliza por los costados. Mantengo mis manos quietas, no quiero recibir una orden cuando esto se pone tan delicioso.

Esta para de repente al oir una voz masculina, prestó atención y ¡JODER! Qué voz, esta pidiendo permiso para unirse.

-Dalila estas dispuesta a dejarlo participar.?- Pregunta Lauren, asiento lentamente.

-Bienvenido al juego.- Dice Lauren así cortando mi respiración.

Siento unas manos esposando las mías a los laterales de la cama donde hay columnas, mientras que con mis piernas la amarra igualmente así abriéndome. Respiro por qué esto me excita pero asusta a la vez.

Un aliento caliente se encuentra en la curva de mi cuello mientras reconozco a Lauren besando mis labios vaginales. El tipo ~ así le dire~masajea mis senos con suma experiencia, los gemidos salen de una forma que me sorprendo de mi misma.

-Te estaré observando, tú disfruta.- Dice Lauren en el oído, asustándome en qué momento se movió?

Ahora teniendo sólo al hombre, es besa mi cuerpo de arriba hacia abajo, su mano masajea mi clitoris, así como por dos minutos estoy frustrada por qué cada vez que pienso que llegaré al orgasmo se detiene. En un momento desprevenida, me penetra a lo suelto un chillido, que la tiene grande!

Comienza el movimiento con una brusquedad, solo soy capaz de gemir, mi cabeza no genera más que lo que siento, creo que ni me acuerdo mi nombre. Este hombre es una fiera, me tenso al sentir como mi cuerpo es liberado en un orgasmo al igual que mi penetrador, siento sus fluidos bajar por mis caras internas del muslo. Respiro, eso fue jodidamente bueno, esperaba todo menos una follada así.

Comienza a quitar las cuerdas y esposas solo quedando la venda que es retirada, observó el piso para que mi ojos se adapten. Subo mi vista al hombre y creo que es hora de descender al cielo, esperaba todo el mundo menos quién está frente de mi.

-Hola querida Dalila- menciona este.

-Masón-