85.

Yuichiro miró por la ventana y pudo ver a docenas de personas saliendo del campus de la escuela. Gracias a la influencia de Sakayanagi-san, aunque sin su autorización, logró hacer que todos los empleados de la escuela regresen a sus hogares por la próxima semana. Hubo bastantes cuestionamiento, pero con suficiente dinero, logró hacer que la mayoría se fuera satisfecho. Obviamente hubo algunos profesores que no los mandó para la casa y los mantuvo en la escuela.

Regresando a su laptop, pudo ver que la mayoría de los supermercados ya están asegurados. Los gemelos no quieren que gente empiece a robar sus supermercados, por lo que colocaron alrededor de 3 o 4 soldados con armas para defenderlos. Lo mismo sucedió con las plantas eléctricas, y los distribuidores de agua, lo aseguraron para que puedan tranquilamente distribuir hacia el pueblo rural al costado de Tokio.

Mirando como fueron las cosas, no hubo ningún alboroto como pensó que sería. Fue sorprendente tranquilo.

Decidiendo salir, fue a comprobar que no haya quedado ningún trabajador del Keyaki mall rezagado, ni en ningún otro lugar. Llevó un arma en caso de que haya algún incidente, no quiere que algún tipo de infectado entre a la escuela.

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Kiyotaka, golpeó la puerta del director interino.

A pedido del director, había caminado hacia aquí, y encontró sospechoso que el portero en el primer piso del edificio no se encontrara en su puesto. Fue algo inusual, pero de todos modos se presentó a la oficina.

En el momento en que abrió la puerta, Kiyotaka se enfrentó a un grupo de personas, antes de que pudiera reaccionar, le apuntaron un arma a su cabeza.

Mirando alrededor de la habitación, encontró a Tsukishiro detrás de su escritorio. En un par de sillas al costado de la habitación, está Sakayanagi-san y su hija, mirando todo. Y parados alrededor de la oficina, están un grupo de 4 personas vestidas como militares.

Al ver a los militares en la oficina, él descubrió de inmediato la razón por la que están aquí. Su presencia significa que su padre ya comenzó con el plan.

Tsukishiro sonrió al ver como ni siquiera con un arma apuntando a su cabeza, el hijo de Ayanokoji-sensei no mostró ningún signo de miedo o vacilación en su lenguaje corporal. Él se relajó al saber que ya cumplió con su misión, capturar a los gemelos Akashi solamente será un bonus.

"¿Cuándo llamarás a los gemelos Akashi?" Preguntó Tsukishiro, mirando a Sakayanagi-san que no mostró ningún indicio de comenzar a llamarlos.

"Esperaré a que llegue Seijuro-kun, para que ninguno de los dos sospeche nada" dijo él.

Arisu, su hija, ocultó bastante su sorpresa al saber la intención de su padre de querer traicionar a los gemelos Akashi. Tuvo un dilema interno al saber que los hermanos serán entregados a Ayanokoji-sensei. Mirando el perfil de su padre, y luego volviendo a ver a Kiyotaka, que se quedó parado estoicamente en el centro de la habitación, soltó un suspiro casi imperceptible.

Kiyotaka al escuchar la conversación, quedó claro que ambos les van a atraer a una trampa a los hermanos. Y mirando a Sakayanagi-san, se sorprendió de lo hipócrita que fue, ya que no hace mucho le prometió que siempre y cuando sea un estudiante de ésta escuela, lo protegería contra su padre. Pero ahora, ni siquiera lo miró a la cara, solamente su hija, a su costado lo miró. Él mismo le había creído a Sakayanagi-san, por lo se decepcionó un poco que no fuera lo que aparentaba.

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Seijuro miró por la ventana del vehículo mientras se dirige a la escuela para reunirse con Yuichiro. Detrás del auto de Seijuro fue un bus con toda la generación de milagros, junto a sus familias. Seijuro también mandó varios buses para recoger a otros jugadores de basketball y sus familias, jugadores contra los que jugó, y que según su juicio, consideró que serían de ayuda en el apocalipsis.

Cruzando el puente, le mandó un mensaje a Yuichiro y a Sakayanagi-san para avisarles de su llegada.

Bajándose del vehículo fuera la escuela, se pudo apreciar la vestimenta que llevó puesta, un traje blanco y una camisa azul debajo.

Mirando hacia dentro de la escuela, se fijó que todavía no llegó ningún bus, por lo que son los primeros en llegar. Sintiendo si teléfono vibrar, vió un mensaje de Sakayanagi-san.

[Reunión en la oficina del director…] en el mensaje también vino con instrucciones sobre como llegar hasta dicha oficina.

Girandose, Seijuro habló con Mizuki.

"Tu encargate de hacer que todos se reúnan en el gimnasio, iré a reunirme con Yuichiro" dijo él, y asintió hacia un subordinado suyo para que lo siga.

Él a diferencia de Yuichiro, no entrenó tanto en peleas cuerpo a cuerpo, o en el manejo de armas, por lo que se sintió más cómodo con alguien de protegiéndolo en caso de que el loco de Ayanokoji-sensei haya puesto esporas en la escuela. Obviamente no está indefenso, pero siempre es mejor estar preparado.

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Yuichiro al ver el mensaje de Seijuro, regresó de verificar todo, y caminó hacia la escuela. Mirando desde fuera, no hubo ninguna luz encendida en todo el edificio escolar, excepto por los pasillos que dan a la oficina del director.

Caminando por el piso de los pasillos, el único sonido fue el de sus pasos, él no supo si fue éso, pero algo lo incomodó un poco, como si algo no estuviera bien.

Cuando llegó a la puerta del director interino Tsukishiro, la abrió sin ninguna vacilación. Al entrar lo primero que vió fue a Tsukishiro y Sakayanagi conversando relajadamente entre ambos.

Casi instintivamente movió su mano hacia el arma en la funda dentro de su blazer. Pero con el arma en mano, no alcanzó a sacarla, antes de que ya tuviera una pistola apuntando a su cabeza.

Girando para mirar a quién más está presente en la habitación, frunció el ceño.

Vió a 3 tipos con vestimenta militar, uno apuntando a Kiyotaka, uno apuntando detrás de Tsukishiro y el último fue el que tuvo el arma en su cabeza.

Mirando a Sakayanagi padre e hija, frunció todavía más el ceño.