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Capitulo 8

Hola :D, espero disfruten el cap *Inserte gatito mandando un corazón* (psdta: pensaba que este cap tendría 3K o 4K de palabras y termino teniendo 9.5k XD)

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Un gran paisaje verdoso pasaba velozmente a través de la visión de la chica que simplemente observaba en silencio a través de las ventanas polarizadas del auto en el que actualmente estaba sentada como pasajera trasera

Soltando un ligero suspiro, la chica bajo la mirada con calma hasta su teléfono para observar la aplicación de mapa que había estado viendo desde que subió al vehículo un par de horas atrás, permitiendo que tararease suavemente para si misma al notar que cada vez se acercaba más a su destino

Suspirando para si misma, la chica simplemente dejó que su cuerpo se apoyase en la puerta del vehículo mientras que su rostro se apoyaba en la ventana del mismo, permitiendo que la chica viese el paisaje verdoso una vez más

Sin embargo, mientras veía a través de la ventana, la chica también fue capaz de ver un par de ojos negros totalmente apáticos que parecían haber perdido toda la luz que alguna vez habían tenido, acompañando de manera perfecta a las lineas ya secas de lagrimas que parecían haber caído hace mucho mas no habían sido limpiadas

A su vez, el leve rubor que siempre tenían sus propias mejillas parecía haberse esfumado a cambio de un tono más pálido que se adaptaba a su piel enfermizamente pálida que solamente contrastaba las oscuras ojeras bajo sus ojos

Junto a eso, sus labios alguna vez rosados y hermosos ahora se encontraban ligeramente partidos y extremadamente resecos, cosa que la chica simplemente ignoró como algo sin la más mínima importancia

Apartando ligeramente la mirada de la ventana, temerosa y avergonzada de su propio reflejo que ahí se hallaba, la chica solamente pudo suspirar levemente mientras recordaba lo que la había traído a este preciso momento

El día había empezado igual que cualquier otro en los últimos meses que había vivido, siendo que lo primero que mostró, tras abrir sus ojos, fue una leve sonrisa al pensar en cierto pelinegro

- Mejor me apresuro... - pensó con una ligera sonrisa a la par que rápidamente se ponía de pie de su cama para luego caminar velozmente hacia su armario

Con una sonrisa aún presente, la chica rápidamente extrajo su conjunto de ropa escolar que normalmente utilizaba previo a detenerse por un breve momento, dando fugases miradas a su puerta para luego volver a ver a su armario y agacharse

De rodillas, la chica movió su mano derecha para tantear suavemente la superficie de madera que era el inferior del mueble, sonriendo para si misma al sentir un pequeño agujero para luego meter su dedo medio y tirar para arriba

Ahí, revelado tras haber quitado aquella falsa tapa que la chica le había puesto, se encontraba un abrigo que la chica conocía perfectamente tras poseerlo por tanto tiempo

Dejando en el suelo la plancha de madera que había separado previamente, con sumo cuidado para evitar generar algún ruido, la chica pronto tomó la prenda de ropa con suavidad para luego acercarla a si misma y abrazarla suavemente

- No puedo esperar a verte hoy otra vez... - susurro mientras sus ojos mostraban un cariño claro hacía la prenda - sé que parezco intensa... Pero enserio, aunque nos hayamos visto hace apenas 3 días, ya te extraño mucho... - añadió mientras recordaba que el viernes pasado había sido la ultima vez que vio a cierto pelinegro que rondaba por su cerebro de manera casi constante

Sonriendo para si misma, la chica abrazó fuertemente al objeto mientras frotaba su rostro suavemente contra la tela, apenas percibiendo un suave aroma a detergente que hizo que frunciera levemente el ceño para luego suspirar

- A veces me arrepiento de tener que lavar esto... - pensó para luego depositar con suavidad y ternura el objeto de vuelta a su posición, cubriéndolo con cuidado con la misma plancha que había sacado previamente

Poniéndose de pie con una sonrisa natural en el rostro, la chica rápidamente cerro las puertas de su closet para luego correr con emoción hacía el baño de su hogar, adentrándose y empezando su rutina diaria que, pese a ser increíblemente veloz debido a sus ansias para ver nuevamente al pelinegro, mostraba una increíble cantidad de cuidado en cada centímetro de su propio ser

Saliendo del baño un par de minutos después, la chica rápidamente hizo su camino hacía el piso inferior solo para congelarse levemente al oír el reconocible sonido de una televisión

- Ellos... Están aquí...? - se preguntó mentalmente, sintiendo que su ánimo disminuía en varios pliegues que hicieron que su expresión se tornara en una ligeramente preocupada

Tomándose un breve momento para si misma, Akane tomó una profunda respiración para calmarse a si misma, lentamente relajando su estrés creciente mientras pensaba que todo valdría la pena más tarde cuando pudiese ver al chico pelinegro

- Tranquila Akane... Primero analiza tus actitudes más recientes... Diste algún indicio de haber encontrado a alguien que te agrade y de quien estas enamorada? Frente a ellos, no, nunca lo hice... Has faltado a alguna de las ordenes que te ponen? Como las clases de baile, actuación o quizás algún papel en alguna de las series en las que apareces? No, solo me han dado elogios últimamente... Entonces no tienes razón para preocuparte, lo peor que puede pasar es que digan que quieren que aparezca en otra película más o que quieren que los acompañe a otra de sus fiestas para hacer buenas migas con otros políticos o algo... - pensó la chica rápidamente para luego asentir para si misma

- No tienes nada que temer aquí, no hoy... - pensó a la par que forzaba cada musculo de su rostro para formar la expresión más amable y cariñosa que pudo fingir, sabiendo que lo mejor para ella sería tratar de mostrar una cantidad extrema de amabilidad e incluso sumisión de ser necesario para evitar problemas con "Ellos" 

Soltando un breve suspiro de ánimo para si misma, Akane simplemente empezó a caminar hacía la sala de su hogar con paso elegante amaestrado a través de largos años de estudios forzados

- Buenos días - comentó la chica con una sonrisa brillante en el rostro a la par que sus ojos se entrecerraban casi totalmente, permitiendo que la chica viese de manera discreta a los que actualmente se hallaban en la habitación

A la izquierda del todo, apoyado en una de las paredes con brazos cruzados mientras cerraba sus ojos tranquilamente luego de darle una ligera mirada de reojo, se hallaba un hombre ligeramente alto de cabello negro despeinado, ojos afilados negros y apáticos ocultos tras un par de lentes de montura que alejaban la mirada de sus pestañas rectas pero largas y de sus cejas afiladas, una nariz recta y respingada, mejillas delgadas y unos labios rosados que formaban una linea recta de apatía mientras que su vestimenta consistía en una camiseta negra ajustada que se ocultaba bajo una larga bata de laboratorio blanca, un jean negro ajustado en sus piernas y un par de zapatos semi-formales

Directamente frente a Akane, y dándole la espalda puesto que se encontraba sentada en el sofá para ver la televisión, se hallaba una mujer de larga cabellera negra que fluía por su espalda como una cascada mientras que su rostro oculto, uno que Akane conocía a la perfección pese a que la mujer no se encontraba encarándola, poseía una belleza y madurez que solo podían ganarse a través de los años, mostrando ojos color marrón, largas pestañas curvas del mismo color de su cabello, cejas delgadas y arregladas, una nariz recta y respingada, mejillas ligeramente llenas y labios rosados carnosos, siempre manteniendo una expresión apática y fría en lo privado de su hogar mientras que era una mujer amable y social en el exterior

Y, finalmente, a la derecha de la mujer se hallaba un hombre que igualmente se encontraba sentado en el sofá, mostrando unicamente su cabellera negra desarreglada que combinaba con la del primer hombre pese a que su rostro era mucho más frió que el del otro, siendo que su característica principal eran sus cejas afiladas que parecían mostrar enojo constante, largas pestañas rectas sobre un par de ojos afilados y mayormente entrecerrados que parecían ver todo a su alrededor como si fuese un analista en una venta de baratijas, teniendo a su vez una nariz recta y respingada al igual que los dos anteriores pero diferenciándose en sus mejillas hundidas que marcaban su barbilla de manera más notoria, teniendo un par de labios rosados que parecían nunca ser capaces de sonreír

Tragando suavemente la saliva que se había acumulado en su boca sin siquiera notarlo, Akane solamente pudo ser capaz de reír incómodamente cuando ninguno de los presentes devolvió su saludo matutino

- Bueno... Mierda, están los 3 juntos, de aquí salgo con más trabajo o termino con el rostro estampado contra el suelo... Y honestamente no sé cual es peor ahora mismo... - pensó mientras su propio ser parecía enviar una ola de furia misma a través de sus venas previo a que la chica lo controlase con leve dificultad

Tosiendo falsamente previo a caminar hacía ellos, la chica solamente fue capaz de ver discretamente al trío mientras los sonidos que emitía la televisión parecían ser ignorados por sus oídos debido a la atención extrema que había puesto de manera inconsciente sobre los presentes

- uh... Solo pasaba a saludar rápidamente ya que... Bueno, ya saben... Clases... Y todo eso... - comentó la chica con una ligera risa incomoda previo a que su cuerpo se tensará al limite cuando el hombre de la izquierda, el menor entre el trío que la había llevado a tal estado de alerta, suspiro para luego impulsar suavemente su cuerpo fuera de la pared y empezar a caminar hacía ella

Viendo al chico caminar hacía ella, Akane rápidamente empezó a procesar todo lo que había hecho hasta ese momento, analizando cada mínima palabra que había dicho mientras que su mirada se movía rápidamente a través de todo el cuerpo del chico, tratando de descubrir cualquier indicio de ataque con los conocimientos que lentamente había ido adquiriendo gracias a la serie de entrenamientos que Lucifer le había dado

- Puñetazo directo?... No, sus brazos están muy bajos para eso... Un gancho? Soy más baja que él, y él es quien tiene más entrenamiento en peleas, sabe que tengo la ventaja si intenta atacar desde abajo, puedo evitarlo... Patadas? Está usando Jean ajustados, es imposible que trate una patada alta, quizás media o baja para luego contrarrestar, o quizás... - pensaba la chica a altas velocidades, tratando desesperadamente de protegerse de cualquier tipo de ataque que el chico, su hermano, pudiese lanzare, solamente pudiendo congelarse de sorpresa ante la siguiente acción del chico

- Mi más sentido pésame - dijo el chico con un tono de voz vacío y neutro que Akane había oído desde su primera interacción con el chico, confundiéndola y sorprendiéndola con aquellas confusas palabras previo a pasar por su lado tranquilamente, dando leves pasos hacía delante para luego quedarse quieto y en silencio como si esperase algo

Abriendo ligeramente sus ojos y labios con sorpresa y confusión, la chica intentó comentar algo respecto a lo dicho por el pelinegro solo para congelarse nuevamente al oír una apática voz femenina y melodiosa hablarle

- Tienes permitido dejar el foco de atención por los próximos 30 días - dijo la mujer, la madre de Akane, a la par que se ponía de pie desde su lugar en el sofá, caminando tranquilamente en dirección a la chica para luego cruzar por su lado y detenerse pocos metros tras ella, esperando al igual que el hombre menor

Confundida, sorprendida y sintiendo una extraña premonición confusa pero dolorosa desde lo más profundo de su ser, Akane solamente pudo girar su mirada hacía el único hombre que no había hablado pero que ya se había levantado de su asiento para caminar hacía ella, siendo el primero y el único en detenerse a un mero metro frente a ella

- Se...Señor? - murmuró Akane en confusión mientras miraba hacía arriba a los ojos fríos de su padre que lentamente se movió para ponerse de manera lateral frente a la chica y permitir que la pelinegra siguiese su mirada a la televisión

- ...Que clase de mentira es esta? - fue lo primero que vino a su mente tras un breve segundo de parálisis total en el que incluso su corazón se detuvo, solamente pudiendo ver en absoluto silencio a la televisión presente en el lugar mientras que sus piernas la movían lentamente hacía delante, como si la cercanía al dispositivo electrónico pudiese cambiar la realidad que se hallaba frente a ella

- ...El motivo por el cual el joven se encontraba en las cercanías es un misterio hasta el momento, las autoridades sospechan de algún tipo de secuestro debido al estado en el que se encontró su teléfono y lo que relata el conductor del camión... - hablaba una mujer de manera profesional en el noticiero que reproducía la televisión mientras se mostraba la imagen de una carretera entre una montaña y el bosque cercano a su ciudad, mostrando a su vez la imagen del rostro de cierto pelinegro con una serie de palabras bajo suyo

"Minoru Kageno, joven estudiante de 16 años encontrado muerto hoy a las 01:27 de la mañana en las afueras de la ciudad tras haber sido atropellado por un camión, las autoridades sospechan de un secuestro y posterior escape desesperado por parte del chico"

- Falso...Falso...Falso, Falso, FalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalsoFalso.... - repetía la mente de Akane, inicialmente empezando lenta y dubitativamente previo a que se volviese una carrera demencial que trataba de salvar la cordura de la chica

- Muerto? Minoru? Imposible, no, no hay manera, nunca, no, jamas... - continúo pensando mientras trataba de dar un paso más adelante para tratar de corroborar lo leído, rápidamente teniendo que estirar sus manos para sostenerse del respaldar del sofá mientras que su visión parecía perder claridad y foco, haciendo que todo lo que viese parecieran una serie de manchas de colores confusos e irreconocibles

- Atropellado? Que clase de broma enfermiza es esa? Lo he visto esquivar balas cuando me salvo, la velocidad de una bala de pistola promedio es de 340 m/s aproximadamente, un camión, en esa carretera, solo puede ir a 16.6 m/s, es totalmente imposible que él no lo haya esquivado, es absolutamente imposible, una tontería total - pensaba a velocidades absurdas la chica mientras su respiración se empezaba a acelerar de manera imparable

- No fue un accidente... - susurró una parte en lo más profundo de su mente, deteniendo su corazón por un breve instante mientras que su mente parecía acelerarse aún más a la vez que la nariz de la chica soltaba una leve linea de sangre debido al estrés, pánico y la creciente furia que empezaba a acumularse dentro suyo

- ¿"Mi más sentido pésame"? ¿¡"Tienes permitido dejar el foco de atención por los próximos 30 días"!? ¿¡Y esa jodida miradita a la puta televisión!? - pensó la chica mientras sus dientes se apretaban y suaves gruñidos empezaban a salir de sus labios, por primera vez incapaz de controlar sus emociones - estos hijos de puta sabían... Sabían que hablaba con Minoru... Sabían que me estaba acercando a él... - pensó a la par que sus manos apretaban el respaldar del sofá con fuerza, clavando sus uñas y dañándolas debido a la presión que estaba haciendo la chica

- Que mierda hicieron...? - gruño la chica en voz baja a la vez que giraba su rostro para ver al trío por encima del hombro, solamente siendo capaz de ver una serie de manchas confusas de colores pero sabiendo que el trío aún se encontraba ahí pero que se alejaba del lugar con calma

Sin embargo, pese a la pregunta de la chica, nadie le respondió de ninguna manera más que deteniéndose en sus lugares, cosa que la chica no sabia si era debido a su pregunta o al hecho que por primera vez, a lo largo de toda su vida, estaba mostrando todo el odio que había acumulado

- ¡Les hice una jodida pregunta, pedazos de sanguijuelas asquerosas y cucarachas de la sociedad! ¿¡Que mierda le hicieron a Minoru!? - gritó con una cantidad de furia tan profunda que daño levemente su garganta mientras sus puños se apretaban con mayor fuerza alrededor del respaldar del sofá, rasgando fuertemente el cuero que cubría el mueble mientras que sus dedos sangraban levemente por la ruptura de sus uñas

Por un largo segundo todo lo que se oyó fue la respiración agitada y desesperada que la chica emitía, apenas capaz de sostenerse en sus propias piernas mientras que sus labios continuaban soltando suaves, pero furiosos, gruñidos constantes que parecían ser los de un animal listo para pelear pese a saber que perecería en el intento

A punto de soltar otro grito de furia o incluso lista para atacar al trío en busca de respuestas a sus preguntas, una voz grave y helada repentinamente habló con calma que contrastaba totalmente el estado de alteración absoluto de la chica - No hicimos nada - comentó llanamente la voz de su padre

- Crees que creeré esa jodida basura!? - ladró Akane solo para conseguir un suave suspiro aburrido por parte de su padre

- No tengo ningún motivo para mentirte, niña... Sabíamos de tu relación amistosa con ese mocoso? Si, lo hacíamos, sabíamos que lo mirabas más de lo normal incluso antes que tu y él hicieran buenas migas... Investigamos al chico? Si, todo, desde su hogar hasta la ropa interior que usaba cada día... Podíamos matarlo y teníamos planes guardados para hacerlo en caso surgiera la necesidad? Si, teníamos más de 15 planes para acabar con él totalmente... Nosotros lo asesinamos? No, el chico no había interferido totalmente con nuestros planes y, en su lugar, tu misma estabas mejorando en tus actuaciones, el chico nos servía más vivo que muerto y eso es todo - habló fríamente el hombre previo a que Akane viese las manchas que representaban al trío alejarse mientras que sus oídos parecían lentamente perder su capacidad de escucha como si su cuerpo quisiese negar el mundo mismo

Gruñendo con furia cuando el trío se fue, Akane solamente pudo girar su rostro hacía la televisión solamente para notar que lo único que podía ver con normalidad era, de manera casi sádica para si misma, la imagen que el canal de noticias había puesto de Minoru, siendo aquello lo único que pareció se capaz de superar las restricciones que su propio cuerpo le estaba poniendo

Gruñendo, Akane se impulso bruscamente para alejarse del sofá sin notar las manchas de sangre que caían de sus dedos, caminando a trompicones hacía la televisión antes de golpearla suavemente con sus dos puños cerrados fuertemente

- Es una jodida mentira... Tiene que ser una jodida mentira... Es imposible que él este muerto... - gruño la chica mientras lagrimas caían de sus ojos previo a que golpease con leve fuerza la televisión, como si tratase de detener la transmisión y lo que ella consideraba una falsedad

- Los culpables entonces son este canal de mierda... Esto es una broma de mal gusto... Seguramente su programa de mierda estaba perdiendo audiencia y como sanguijuelas crearon una jodida noticia falsa para atraer a las masas... Voy a demandarlos... - murmuraba la chica entre gruñidos mientras sus puños golpeaban con creciente fuerza la pantalla, gruñendo al notar que se seguía transmitiendo lo mismo

- Encontraré a sus jodidas familias, les quitaré todo... Acabaré con su jodido programa y sus jodidas vidas por atreverse a siquiera jugar con este tipo de información... Así que paren... Dejen de transmitir esto... Paren ahora... - pensaba la chica, incapaz de hablar más mientras gruñía y golpeaba el televisor hasta que finalmente, con un grito que contenía tanto un gruñido de furia como un llanto, la chica golpeo el televisor con la suficiente fuerza como para romper el cristal, clavándose los residuos en sus manos mientras se inclinaba y lloraba en agonía emocional

- Minoru... - pensó con lagrimas cayendo de sus ojos a cantaros - eso es... Iré a su casa... Estoy segura que él estará ahí... Bromeará diciendo que soy una acosadora que lo espera hasta que salga de casa... Me reiré... Luego iremos a clases y pasaremos el día entero el uno al lado del otro... - pensaba la chica mientras sus labios soltaban suaves risas rotas y sus ojos continuaban derramando lagrimas, repentinamente sintiendo una mano tocar su espalda

- Suéltame! - gritó de manera instantánea, creyendo en un primer momento que quizás se trataba de alguno de sus familiares que venían a causarle un daño peor al que ya se encontraba sufriendo, rápidamente moviéndose lo más alejado que pudo antes de caer al suelo debido a su inestable estado mental, haciendo que gruñera mientras giraba su cuerpo y veía una mancha acercarse a ella

- No te me acerques! - gritó a la vez que metía su mano en el bolsillo de su falda y tomaba su celular, solamente pensando en tomar lo más cercano a ella, antes de lanzarlo con fuerza hacía la mancha que se acercaba a ella

Gruñendo con lagrimas en los ojos, la chica solamente pudo empezar a patalear y golpear locamente luego que la mancha esquivara el objeto y se lanzara hacía ella, rodeándola con sus brazos mientras la sostenía fuertemente contra lo que parecía ser su pecho

- Suéltame! - gritó forcejeando locamente, incapaz de reconocer cualquier tipo de imagen o sonido que la mancha tratara de emitir mientras el abrazo a su alrededor se apretaba - ¡Que me sueltes! - gritó mientras sus ojos derramaban lagrimas con mayor fuerza

Ahí, entre los brazos de una persona aún desconocida para la chica, Akane solamente podía ser capaz de pensar en aquellos 2 momentos en los que estuvo a punto de ser mancillada bajo las manos de unos enfermos que se habían atrevido a raptarla para luego ser capaces de hacer lo que quisiesen con ella, solamente evitando aquel destino gracias a un encapuchado que siempre parecido salvarla en el ultimo segundo 

- Minoru! - llamó entre lagrimas mientras sus forcejeo se hacían cada vez más y más débiles en una mezcla de debilidad emocional y el constante sangrado de su cuerpo

- Minoru! Por favor! - llamó una vez más, sintiendo que los brazos desconocidos se movían para abrazarla con más fuerza, posicionando el brazo izquierdo en el centro de la espalda de la chica mientras que la mano derecha del desconocido se movía para empujar la cabeza de la chica con suavidad contra el pecho del desconocido, permitiendo que la chica gritase y llorase contra la tela suave de lo que parecía ser un traje elegante

- Minoru!... Minoru...! Minoru... por favor... Minoru... Por favor... No te vayas... Vuelve... - llamaba la chica en gritos al principio, lentamente transformándose en lloriqueos suaves, entrecortados y débiles que mostraban el estado de vulnerabilidad de la chica

- Por favor... Por favor... Minoru... Minoru... Minoru... - lloraba la chica a la vez que su consciencia lentamente se esfumaba bajo los suaves y paternales tratos que le daba el desconocido

Luego de eso la chica solamente había sido capaz de despertar varias horas después, ahora acostada en su cama mientras que veía a una gran mancha blanca sobre ella que parecía ser lo que alguna vez fue su techo

Mirando a su alrededor en inicial confusión sobre lo que ocurría, inconscientemente pensando que todo lo que había pasado había sido un sueño, la chica solamente pudo ver una serie de manchas de colores llenar por completo su visión a excepción de una ligera cosa

Ahí, a su lado en su espaciosa cama, se hallaba un muñeco que ella misma había hecho tantos años atrás y que siempre cargaba en su bolso, aparentemente habiendo sido colocado ahí por alguien para que eso fuese lo primero que ella viera

- Minoru... - pensó la chica mientras sus labios resecos se abrían levemente, para soltar un suave sollozo que fue incapaz de contener

- Minoru... - pensó nuevamente la chica, estirando lentamente su brazo hacía el muñeco solo para congelarse al notar la mancha blanca que rodeaba su extremidad

- esto... No es Minoru... Minoru... - pensaba la chica mientras mordía su labio inferior con molestia, gruñendo para si misma a la vez que giraba en su cama para luego levantarse temblorosamente de su lugar, sintiendo que sus piernas amenazaban con rendirse en cualquier momento mientras daba suaves y lentos pasos hacía la gran mancha marrón que era su armario

- Minoru... - pensó mientras sus manos se movían lentamente hasta los botones de su blazer, lentamente desabotonandolos y dejando que la prenda cayese al suelo con suavidad

Llevando sus manos a su camisa, la chica solamente pudo gruñir suavemente mientras desabotonaba la prenda para luego dejarla caer al suelo también, revelando sus largos y ligeramente tonificados brazos lechosos, su abdomen plano pero suave, su cintura delgada y abrazable y sus pechos grandes y firmes que eran contenidos por su sujetador negro

Ignorando aquello mientras aún caminaba temblorosamente, la chica llevo lentamente sus manos hacía su falda para luego bajar el cierre de la misma, permitiendo que la prenda cayese suavemente al suelo mientras sus gruesos muslos lechosos eran revelados junto a sus caderas anchas, su ropa interior negra y sus medias negras que le llegaban hasta las rodillas

Finalmente llegando a su armario, Akane permitió que su cuerpo perdiera fuerza y se apoyó en el mueble de madera, deslizándose suavemente hacía el suelo hasta que finalmente estuvo sentada

Mirando hacia abajo, Akane solamente pudo gruñir suavemente al ver manchas negras ocultar partes de su cuerpo - No... No es Minoru... - pensó a la par que sus manos se movían a su espalda suavemente, buscando a tientas por un breve momento antes de desabrochar su sujetador y lentamente removerlo de su cuerpo, revelando lentamente sus firmes y grandes pechos lechosos que eran coronados por sus pequeños y suaves pezones invertidos de color rosados rodeados por una pequeña areola del mismo color

Bajando sus manos, la chica suavemente tomó el elástico de su ropa interior y levantó levemente las caderas para luego deslizar la prenda hacía abajo, lentamente revelando su feminidad rosada y apretada previamente oculta debido a la tela de sus prendas además de revelar sus suaves, pero firmes y grandes, glúteos de color lechoso

Quitándose por completo su ropa interior, Akane solamente fue capaz de estirarse levemente para quitar el ultimo par de prendas que tenía puestos, silenciosamente quitándose sus largas medias para revelar el resto de sus largas y lechosas piernas junto a sus pequeños pies

Tirando sus medias de manera aleatoria al finalmente quedar totalmente desnuda, Akane solamente abrió su armario lentamente antes de estirar sus manos hacía la parte inferior del mismo, rápidamente quitando la falsa tapa que había puesto para luego sacar la prenda oculta con sumo cuidado

- Minoru... - murmuró la chica con voz ligeramente rasposa pero con ojos llorosos que silenciosamente derramaban lagrimas, permitiéndose a si misma abrazar la prenda de una manera cariñosa mientras respiraba profundamente el aroma de la misma, sintiendo un aroma muy familiar a canela pese a saber que en la mañana la prenda olía a detergente común y corriente, generando un suave hipido lloroso en la chica al reconocer que incluso su propio cuerpo parecía ser incapaz de aceptar la realidad de lo que había ocurrido

- Minoru... Mi Minoru... Eres tan cálido... Siempre lo eres... - susurró la chica mientras frotaba su rostro contra la tela de la prenda, tomando fuertes y profundas bocanadas de aire para absorber más y más del falso aroma que su propia nariz parecía crear para ella

- Puedes abrazarme...? Solo... Quiero que me abraces... Por favor... - susurraba la chica a la vez que lentamente movía la prenda para ponérsela a si misma sin cerrarla por completo antes de ponerse de pie y dar temblorosos pasos de vuelta a su cama, cayendo sobre el suave colchón para luego estirar su brazo izquierdo y tomar el peluche de Lucifer que ella misma había hecho

- Je...Je... Eres tan cálido... Aún recuerdo tu abrazo... Era fuerte... Pero muy tierno... Pese a que estábamos hablando de algo triste en aquel entonces... Tu eras muy tierno conmigo... Muy suave... Muy amable... - susurraba la chica mientras veía con lagrimas en los ojos al muñeco, sonriendo tiernamente de la misma manera en la que solo sonreía con Minoru, lentamente doblando sus piernas hasta que estuvo acunando completamente al mullido objeto con su frente desnudo mientras que el resto de su cuerpo era cubierto por el abrigo que el chico alguna vez había usado

Observando fijamente al muñeco entre sus brazos mientras parecía ser abrazada por el saco negro del chico, Akane solamente pudo sentir que su mente se sumía en una bruma de confusión que parecía hacerla incapaz de aceptar la realidad mientras que su estado de ánimo era sometido a una montaña rusa constante de tristeza y alegría desesperada que la mantenía congelada en su lugar sin importar cuanto tiempo pasase

- Hey... Alguna vez... Te dije... Lo tierno... Que eres...? - murmuró la chica lenta y dolorosamente, sintiendo que su garganta ardía en desesperación por un poco de agua que la chica no le brindo desde que había adoptado su posición actual

- Debo haberlo hecho... Verdad...? - susurró mientras miraba con ojos cansados y ojerosos al pequeño peluche que sostenía entre sus brazos que mostraban su tono de piel enfermizo

- Yo... - susurró la chica una vez más, sintiendo que su corazón se apretaba y las lagrimas volvían a salir de sus ojos como si no les importara la falta de hidratación que ha tenido la chica - Y..yo lo hice...? Al...Alguna vez te dije que me parecías tierno...? Siquiera... Siquiera te mostré lo importante que eras para mi...? Minoru... Minoru... Minoru.... - sollozaba la chica con un leve tartamudear en su habla

Sollozando fuertemente, la chica solamente era capaz de ver al peluche mientras llamaba llorosamente el nombre del chico que alguna vez había sido capaz de calmarla por completo con su simple presencia, siendo que aquel hecho solamente servía para estremecer y generar más dolor en el pecho de la chica

- Quiero verte... - sollozo la chica mientras sus brazos apretaban al peluche con toda la fuerza que su debilitado cuerpo podía reunir, solamente siendo capaz de derramar lagrimas mientras pensaba en el chico

- Celular... - susurró una voz en lo más profundo de su mente, paralizando levemente a la chica previo a que ella sonriera débilmente mientras aún lloraba - cierto... Celular... Tengo fotos de él... - murmuró mientras sus piernas se movían lentamente, generando suaves sonidos de ruptura debido a que la chica no había movido aquellos músculos desde hacía un buen tiempo atrás 

Gruñendo suavemente por el dolor que le causaba mover sus piernas tras un largo, pero desconocido, tiempo de inactividad, la chica solamente pudo girar en su cama antes de alejar su brazo derecho del peluche para así estirarlo hacía la mancha marrón que era su mesa de noche, buscando a tientas su teléfono móvil por un par de segundos antes de soltar un suave hipido de lastima

- Cierto... Lo tire... - pensó la chica mientras su mente recordaba distraídamente el actuar que tuvo algún tiempo atrás, cosa que hizo que mordiese su reseco y partido labio inferior son suavidad mientras retraía su brazo una vez más a su posición alrededor del peluche

- Computadora... - susurró a la par que lentamente movía su cansado cuerpo, lentamente tomando asiento en el borde de su cama previo a intentar ponerse de pie solamente para sufrir de una súbita, pero increíble, cantidad de mareos que la tiraron al suelo de rodillas

- Minoru... - pensó la chica mientras sollozaba, lentamente poniéndose de pie una vez más con piernas temblorosas antes de empezar a dar lentos y débiles pasos hacía el escritorio de su habitación

Cayendo débilmente en su silla de escritorio, la chica suavemente levanto sus piernas y reposo sus pies sobre su asiento mientras ponía al peluche suavemente entre sus muslos y su abdomen para luego estirar sus brazos y buscar a tientas por un momento antes de encender el dispositivo electrónico que había estado buscando

- Ay... - susurró la chica con dolor cuando la pantalla de su computadora se prendió, quemando suavemente sus retinas cansadas al finalmente captar una fuente de luz tras mucho tiempo en la oscuridad de su habitación

Llevando la mano al ratón de su computadora, la chica abrió la aplicación de mensajería con maestría aprendida a lo largo de los años, razón por la que sabía de la ubicación exacta de la aplicación pese a que todo parecía ser manchas de colores desde su punto de vista

Centrando su mirada lo mejor posible, la chica trató de buscar el chat que tenía consigo misma para guardar cosas importantes tales como algunos apuntes o, en este caso, las imágenes que había tomado del chico de manera discreta en el pasado

Sin embargo, su atención rápidamente se vio arrastrada hacía abajo al notar una única imagen y un único chat que se veían con claridad para ella, siendo que la foto solamente representaba el rostro ligeramente inclinado de Minoru

- Minoru... Mensaje...? - pensó la chica al notar el pequeño circulito verde que le alertaba de un mensaje nuevo, confundiéndola levemente hasta que abrió el chat que había tenido con el chico

Con confusión inicial, la chica solamente fue capaz de ver en silencio el último mensaje que el chico le había enviado, permitiendo que inclinase levemente la cabeza debido a la confusión de ver un vídeo con una serie de letras y números extraños como mensaje

- Esto es... Del día cuando murió...? - pensó viendo en silencio la fecha en la que se le había enviado el mensaje, generándole aún más confusión previo a dar un leve click en el vídeo, poniéndolo en pantalla completa previo a enrollar sus brazos alrededor del peluche que tenía

Viendo en un inicio una pantalla negra, la chica solamente pudo abrir los ojos cuando la pantalla cambio y revelo a un chico pelinegro que sonreía levemente a la cámara, actualmente vestido con una camiseta negra y un pantalón jean negro mientras se sentaba en el borde de su cama, permitiendo que la chica notase que, pese a que sus ojos habían empezado a derramar lagrimas sin siquiera notarlo, la chica era capaz de ver con total claridad el entorno en el que se encontraba el pelinegro

- Hola Akane - saludo el chico de manera suave y amable que solo sirvió para generar más lagrimas en la chica que contuvo cualquier sonido que pudiese llegar a emitir, deseando más que nada ser capaz de oír la voz del chico

- Antes que nada, esto esta siendo grabado justamente el día después que me revelaste lo de tu familia... Si ha pasado más de un mes desde eso y aún sigo vivo y solamente encontraste esto por error, entonces deja de verlo, todo lo que voy a decir no tendrá sentido para ti... - continúo el chico con una ligera sonrisa para luego tararear una canción aleatoria como si esperase a que la chica cortara el vídeo, solamente generando más lagrimas en la chica al notar el rostro tranquilo que se encontraba mostrando el chico

- Si sigues viendo esto y ha pasado menos de un mes desde que hablamos de aquello... Entonces significa que morí - comentó con una apenada pero suave y calmada sonrisa que parecía ser dirigida unicamente a la chica

Con un suave suspiro que pareció relajar levemente al chico, Minoru solamente fue capaz de soltar una suave risa por lo bajo antes de levantar su rostro para ver hacía el techo de su habitación, pareciendo considerar que decir a continuación en un silencio que duro por unos largos segundos

- Antes que nada... Debo disculparme contigo - comentó el chico a la par que su mirada volvía a la cámara, observándola con una mirada culposa - yo... Soy consciente que conoces mi identidad como Lucifer... Y también sé que la razón por la cual no das un paso en nuestra relación es porque... Bueno, quieres que yo mismo te cuente respecto a ello... - comentó el chico previo a soltar un leve suspiro

- Sin embargo, no es que no te lo haya dicho porque no confíe en ti... En realidad, probablemente eres la persona en la que más confió... Y por eso mismo espero que seas capaz de creer lo que estoy a punto de decirte - continuó el chico en la grabación a la vez que su rostro ganaba una leve seriedad

- Mi muerte... No fue un accidente - declaró directamente para luego morder su labio inferior levemente - No digo que fui asesinado... En realidad, la razón fue totalmente mi culpa - confesó mientras la chica solamente era capaz de ver la grabación con lagrimas silenciosas cayendo constantemente desde sus ojos

- No puedo explicar mis razones ya que no seras capaz de creerlas por completo, por lo menos aun no... Pero quiero que sepas y creas plenamente en lo que te voy a decir - dijo el chico a la vez que se ponía de pie y caminaba hacia la cámara, arrodillándose frente a la misma y tomando un primer plano de su rostro que mostraba una suave sonrisa

- Volveré - declaró mientras sus ojos parecían atravesar el limite físico de la computadora y atravesaba directamente el alma de la chica - no puedo explicar como ni cuando... Puede ser en los próximos días, semanas, meses o quizás años... Pero te juro que volveré... Cuando lo haga, me veré diferente, pero... Confío en ti para saber que soy yo - hablaba el chico mientras que sus labios formaban una sonrisa tierna y suave, entrecerrando levemente sus ojos de una manera en la que mostraba un cariño que la chica nunca había visto con tanta claridad

- Te juro que volveré... Y cuando lo haga, permitiré que grites y llores todo lo que quieras para desahogarte de todos los problemas que hayas tenido hasta que nos reencontremos... Te sostendré todo el tiempo que quieras entre mis brazos incluso aunque caigas dormida... Lo juro - susurró el chico previo a soltar una leve risa

- Sin embargo... Hasta entonces, decidí dejar un pequeño regalo para ti... Las letras y números que adjunte a este vídeo son coordenadas... Ponlas en cualquier aplicación de mapa y te llevará a tu destino... Confío plenamente en que llegues a salvo ahí - dijo previo a ver a la cámara e inclinarse levemente, plantando un suave beso en el lente que, pese a lo tonto y raro que se veía, solamente sirvió para derretir el corazón de la chica

- Nos vemos pronto, Akane... - susurró el chico mientras alejaba levemente su rostro de la cámara y mostraba una expresión incluso más cariñosa y tierna que la anterior

- Te quiero -

Y con aquellas ultimas palabras, el vídeo se detuvo por completo mientras unicamente mostraba el rostro cariñoso que el chico había puesto por la chica, sonriéndole en un silencio absoluto que solamente era llenado por los gritos y llantos de la chica que llamaban el nombre del pelinegro en una mezcla de tristeza y dolor emocional pero también una cantidad casi insondable de cariño y esperanza por el chico

Perdiendo sus energías tras cada segundo en el que gritaba y lloraba, la chica solamente fue capaz de andar a trompicones hacía su cama antes de caer sobre ella, abrazando fuertemente al peluche del chico para luego caer dormida de manera casi instantánea

Horas después la chica despertó lentamente, abriendo sus parpados con cansancio notorio mientras su mirada lentamente se movía a su alrededor, captando una rápida y breve imagen de su habitación con la diferencia que, lo que antes había sido solamente manchas de colores, ahora todo era visto con claridad por la chica a la par que sus oídos captaban el suave cantar de las aves en el exterior, como si su percepción del mundo hubiese vuelto a la normalidad mientras que solamente dejaba una gran fatiga y dolor físico como remanente para probar el sufrimiento por el que paso la chica

Incapaz de pensar en otra cosa, la chica lentamente se puso de pie con piernas temblorosas para luego caminar hacía su armario con el peluche en brazos, abriendo el mueble con lentitud antes de dar una breve mirada a las prendas que ahí habían previo a elegir un simple par de botas negras altas, un jean semi-ajustado de color negro, unas bragas de color blanco y una camiseta sin mangas de color blanco que pronto vistió bajo el saco que el chico había dejado atrás

Saliendo de su habitación al estar totalmente cambiada, la chica dio lentos y temblorosos pasos mientras apoyaba su cuerpo contra la pared del pasillo, acercándose cada vez más a las escaleras antes de empezar a bajar con suma lentitud y cuidado, bajando la cabeza para ser capaz de ver con exactitud donde pisaba

- Akane...? - llamó una suave voz de manera repentina a la vez que la chica levantaba el rostro antes de encontrar su mirada con la de su chófer

- Alfred... - susurró la chica antes de ser sorprendida cuando el hombre corrió rápidamente escaleras arriba y la envolvió en un abrazo

- Finalmente... Finalmente saliste... - susurró mientras presionaba el rostro de la chica suavemente contra su pecho, permitiendo que la chica oyese el rápido latir de su corazón y el leve tono lloroso que contenían sus palabras

- Lamento haberte preocupado... - susurró la chica previo a que el hombre se apartara levemente de ella, negando con la cabeza suavemente

- No tiene motivos para disculparse... Solamente estoy feliz que finalmente saliera - dijo el hombre a la vez que se daba la vuelta y se agachaba, sorprendiendo a la chica cuando la tomo en un agarre de caballito para luego empezar a bajar las escaleras con ella a cuestas - debes tener hambre... Lamento no haber podido ayudarte más durante tu perdida - comentó el hombre mientras la chica rodeaba sus brazos alrededor de su cuello, aún sosteniendo el peluche de Minoru

- ...Que pasó...? Yo... Después que me entere... De la noticia... No podía ver ni oír nada... Era como si todo fuera borroso para mi... Solamente recuerdo estallar en furia y tristeza, ser abrazada hasta que me dormí y luego solamente pase mi tiempo acostada en mi cama... - susurró la chica a la vez que el hombre la cargaba hasta la sala, suavemente bajándola para dejar que la chica tomara asiento en el sofá

- ...Es...complicado, permitame que le traiga algo para comer antes de empezar nuestra conversación - dijo el hombre mientras la veía con ojos preocupados y suaves para luego ponerse de pie y alejarse del lugar

Suspirando para si misma, Akane solamente atinó a abrazar fuertemente el peluche de Lucifer que tenía entre brazos, suavemente bajando la cabeza antes de presionar un suave beso en la coronilla del objeto - gracias... Gracias por haberme salvado incluso cuando no estás aquí... - susurró previo a escuchar unos pasos acercarse a ella

Girando levemente la cabeza, la chica solamente pudo abrir levemente los ojos antes de soltar una suave y débil risa mientras que Alfred le sonreía, ponía una mesa de plástico portable sobre las piernas de la chica, y posicionaba un plato de comida levemente humeante que contenía arroz blanco, puré de patatas y varios nuggets con formas de dinosaurios

- Hey, ya no soy una niña... - comentó la chica con leve diversión mientras el hombre se arrodillaba frente a ella, tomaba una cuchara antes de llenarla con los alimentos y la miraba con una leve sonrisa

- Y yo solo soy su chófer, pero recuerdo que hacía este tipo de cosas por usted incluso desde que era una bebe - comentó previo a acercar la cuchara a la chica - así que abra grande señorita, aquí viene el trencito - comentó el hombre mientras la chica reía suavemente para luego comer la comida que el hombre le ofrecía, silenciosamente disfrutando del sabor que tenía la combinación de alimentos

Permitiendo que el hombre le alimentara un par de veces más, la chica rió levemente antes de tomar la cuchara por si misma y empezar a alimentarse por si sola, quedándose en silencio por unos largos segundos antes de suspirar suavemente

- Que pasó? - pregunto la pelinegra nuevamente en un suave susurro, permitiendo que su fugaz alegría momentánea se esfumara mientras su tristeza y el sentimiento de perdida la tomaban una vez más, con la gran diferencia que, a comparación con la primera vez, ahora la chica tenía una cantidad aún mayor de esperanza ciega que la mantenían calmada unicamente al recordar las cosas que dijo el chico a través de un simple vídeo

Con un suave suspiro, el hombre solamente se mantuvo en silencio por un par de segundos antes de aclarar su garganta suavemente y ver hacía arriba, clavando su mirada con la de la chica 

- Cuando vi las noticias... - empezó con un tono suave - lo primero que hice fue venir aquí lo más rápido posible... Al llegar, tu... "Familia" se encontraba saliendo justamente del lugar... Pese a que no tengo permitido ingresar a este lugar normalmente, el señor y la señora lo permitieron bajo ciertas condiciones... En el momento en que entre, la encontré a usted, puños incrustados en la televisión, nariz sangrando, lagrimas y gruñidos incontrolables y con notoria debilidad muscular que intuyo fue producida por el choque psicológico del suceso... Cuando quise acercarme, usted trató de correr mientras gritaba presa del pánico... Por suerte, yo mismo estaba lleno de adrenalina al verla en ese estado, por lo que pude evitar el golpe que hubiera sufrido cuando usted me lanzó su teléfono y luego la abrace hasta que se durmió... La lleve a sus aposentos y he estado esperándola desde ese momento - relató el hombre a la par que la chica centraba su mirada en él, procesando sus palabras por lentos segundos antes de suspirar apenada

- Hice todo un desastre, eh...? - susurró antes de morder su labio inferior con culpa - perdón... Por haber causado tantos problemas... Y por haberte atacado... - susurró la chica previo a que el hombre tomara suavemente sus manos y le sonriera

- Esta bien, mi pequeña señorita... Todo eso valió la pena para poder verla finalmente recuperarse un poco - comentó mientras la chica mostraba una suave sonrisa que pronto se borró levemente

- ...Que te hicieron prometer? - preguntó la chica con duda que hizo que el hombre ganase un rostro culpable

- ...Dijeron que, debido a la insubordinación que usted mostró en su estado alterado, debía llevarla a su habitación cuando se calmara y no podía cuidarla de ninguna manera a menos que usted saliese de su habitación... Razón por la cual no pude siquiera llevarle algún tipo de alimento en los últimos días... - susurró el hombre con clara culpa y dolor mientras la chica mostraba sorpresa

- Espera, días? - preguntó confundida mientras el hombre alzaba levemente una ceja

- Eso es correcto, señorita... Lleva encerrada los últimos 5 días - comentó previo a fruncir el ceño levemente mientras miraba con mayor análisis a la chica - un momento... Esperaba que estuviera hambrienta y que su cuerpo parezca más débil de lo normal, pero ahora que lo noto, usted también parece estar falta de sueño y extremadamente deshidratada... - murmuró mientras la chica desviaba ligeramente la mirada - señorita... Ha estado durmiendo este tiempo? - preguntó el hombre mientras la chica continuaba con su mirada alejada

Suspirando suavemente, el hombre se puso de pie y tomo con suavidad la mesa portable junto al plato vacío y los cubiertos que la chica había estado utilizando, rápidamente moviéndose para cargar a la chica una vez más a modo de caballito

- A donde me llevas? - pregunto suavemente la chica

- A su habitación, usted va a descansar y no aceptaré ningún tipo de respuesta contraria... - le dijo el hombre previo a detener su paso al sentir que la chica ponía sus manos sobre sus hombros y cerraba sus manos en forma de puños alrededor de su traje, mostrando una desesperación silenciosa que congelo levemente al hombre

- Por favor... Iré a dormir después... Te juro que tomaré un profundo descanso... Pero... Necesito que me lleves a un lado... Por favor... - susurro la chica mientras su respiración parecía atorarse en su garganta, congelando al hombre por unos breves segundos previos a que soltara un suave suspiro

- ...Cual es la dirección? - murmuró el hombre mientras la chica lo abrazaba fuertemente desde atrás, mostrando su agradecimiento en aquel simple gesto

- Sabes donde esta mi celular? - preguntó mientras el hombre tarareaba y suspiraba antes de hacer su camino hacía la habitación que solía usar en los momentos en los que se quedaba en el hogar, tal y como lo estuvo haciendo los últimos 5 días

Bajando a la chica con suavidad al llegar a la puerta, el hombre entro rápidamente al lugar para salir breves segundos después, entregándole a la chica su dispositivo electrónico con la característica de tener la pantalla extremadamente rota

- ...Creo que lo tiré muy fuerte... - murmuró la chica mientras sostenía su celular con la mano derecha y abrazaba al peluche con su mano izquierda

- Me parece que si - respondió el hombre con una ligera sonrisa sarcástica antes de moverse para cargar a la chica una vez más - vaya buscando la ubicación... - dijo mientras caminaba hacía la salida del hogar

- Señorita? - llamó la voz suave del hombre, generando que la chica dejara de perderse en sus pensamientos a la par que daba una ligera mirada a su teléfono

- Lo siento... Gracias por traerme - dijo a la par que abría la puerta al notar que ya habían llegado, temblando ligeramente por el aire frió del exterior que pronto bloqueo al apretar el saco negro alrededor suyo, suspirando suavemente mientras que contenía las lagrimas leves que quisieron escapar al pensar que era el chico quien la abrazaba

- La estaré esperando aquí, tome todo el tiempo que necesite - dijo Alfred previo a ser sorprendido cuando Akane abrió su puerta y se inclino para encerrarlo en un suave y débil abrazo

- Gracias... Por todo... - susurró mientras el hombre solamente era capaz de sonreír levemente para luego palmear la cabeza de la chica con ternura

- Cuando quieras... Ahora ve a hacer lo que debas hacer - respondió el hombre mientras la chica solamente asentía suavemente para luego separarse del abrazo y alejarse con paso lento y débil del lugar mientras se adentraba en el bosque

Cojeando levemente al andar y usando los arboles como apoyo para tratar de mantener su camino, la chica solamente bajaba la mirada ocasionalmente a su celular para revisar su distancia en relación con su destino, finalmente suspirando al llegar al punto exacto en el que debía estar

Mirando a su alrededor, la chica solamente fue capaz de suspirar tras un par de minutos en total silencio, suavemente mordiendo su labio a la par que su brazo izquierdo se apretaba alrededor de su peluche - Donde lo dejaste, Minoru...? - pensó mientras su mirada se movía a través de las rocas y los arboles del lugar, súbitamente deteniendo su mirada en una roca que parecía ser ligeramente más grande

Frunciendo levemente el ceño, la chica se acerco lentamente hacía el objeto, entrecerrando suavemente los ojos antes de ver una gran linea delgada que parecía cortar parte de la roca de una manera claramente no natural

- Que se supone que significa esto, Minoru...? - pensó previo a girar ligeramente su mirada, notando que aquella línea parecía continuar gracias a un árbol que se encontraba varios metros detrás de la roca

Observando aquello la chica solamente pudo parpadear suavemente antes de dar unos pasos hacía atrás, siguiendo con la mirada aquella línea delgada que parecía alejarse y acercarse a través del paisaje, extrañamente formando una figura en su conjunto que la chica fue capaz de reconocer

- Su logo... - pensó reconociendo que, lo que formaban las líneas al verse desde la perspectiva correcta, mostraban aquel logo que la chica había visto en el USB que el chico le había dado tiempo atrás con la ligera característica de carecer de la misma punta superior puntiaguda

Frunciendo levemente el ceño, la chica solamente dirigió su mirada a donde se suponía debía estar la punta superior de aquella imagen, solamente encontrando un árbol que parecía tener un agujero en la parte baja

Caminando hacía la zona, la chica no dudo ni un segundo antes de meter su brazo en el árbol, tanteando durante un par de segundos antes de sentir un duro material metálico que pronto sacó

- Una caja...? - pensó mientras veía el objeto metálico ligeramente grande y pesado en su mano, gruñendo para si misma antes de dejarlo caer suavemente en el suelo previo a notar lo que parecía ser una carta protegida por una pequeña bolsa para evitar cualquier tipo de suciedad

"Cumpleaños de una persona a la que quiero" leyó la chica con ligera confusión antes de notar que la caja parecía tener un pequeño panel electrónico en uno de sus laterales en el que se debía poner un código de números

Observando el panel durante un par de segundos, la chica pronto recordó aquellas ultimas palabras que el chico había dejado en su vídeo, provocando que la chica sonriese y lagrimease levemente al notar que, de hecho, su propio cumpleaños era la contraseña para abrir aquel contenedor

Abriéndolo con lentitud, la chica solamente pudo alzar una ceja con confusión al ver dos objetos a plena vista mientras que un tercero, más grande que los otros dos, era envuelto en un bonito envoltorio celeste con detalles rosados, todos y cada uno teniendo una nota que mostraba una caligrafía que mostraba una gran cantidad de esfuerzo y dedicación en cada bello trazo

Dudando por un momento, la chica decidió empezar con el objeto que estaba más a la izquierda, siendo un par de botellas pequeñas que cada una parecía ser de aproximadamente 300 mililitros con un liquido color café suave

Tomando la nota, la chica lentamente empezó a leer en voz alta para si misma - Ya que aún tienes mi saco y probablemente lo hayas lavado muchas veces, y ya que sé lo acosadora que eres conmigo, aquí tienes varios aromatizantes que yo mismo hice para que huelan como yo. Aplícale una gota cada 3 meses al saco y seguirá oliendo como yo, tierna acosadora - leyó previo a soltar una suave risa mientras sus ojos derramaban silenciosas lagrimas - Idiota... - susurro con una sonrisa cariñosa

Pasando su mirada hacía el segundo objeto, la chica solamente pudo alzar una ceja al ver lo que parecía ser un tubo metálico negro con un botón actualmente protegido, confundiéndola antes de tomar la nota y leerla - Esto... Es un ligero regalo que tengo para ti para que puedas protegerte mejor, ten cuidado con el filo y recuerda practicar con una versión de madera cuando entrenes - leyó causándole más confusión previo a tomar el tubo y tocar el botón con duda

Sin embargo, en el momento en que su dedo tocó el botón suavemente, una hoja plateada de espada repentinamente salio disparada desde uno de los bordes del tubo mientras la chica lo veía con ojos asombrados, solamente pudiendo sentir que su boca se abría en sorpresa cuando el borde de la espada se separó levemente y empezó a girar y vibrar a altas velocidades, lentamente ganando un color rojizo que hizo que la chica tragara saliva para si misma previo a tocar el botón una vez más y ver que la espada volvía a su estado plegado tras unos breves segundos

- ...Estoy muy segura que esto pudo haber hecho tus peleas más sencillas... Pero en serio me lo diste a mi...? - Murmuraba la chica antes de suspirar y negar con la cabeza, aún sonriendo y derramando silenciosas lagrimas mientras resistía el impulso de romper en lagrimas, usando como soporte emocional aquella promesa que el chico le había hecho

Suspirando y quedándose quita por un par de segundos para calmar su mente inestable, la chica pronto decidió tomar la ultima carta, sintiendo que luego de la espada nada más la sorprendería

- ...No tengo excusa para esto, y honestamente no quedo tan bien como esperaba... Pero, ya que ya tenías la mitad del dúo... Pensé que esto te gustaría - leyó previo a alzar una ceja con duda, inclinando levemente la cabeza - la mitad del dúo...? - murmuró para si misma, bajando la mirada hacía el contenedor una vez más antes de congelarse al ver de reojo al peluche que tenía en brazos

- ...No es posible, cierto? - susurró a la par que rápidamente dejaba su peluche en el suelo con ternura y tomaba el último regalo envuelto, temblorosa y gentilmente quitando las envolturas previo a sentir que su pecho se apretaba y sus labios soltaban un hipido que fue incapaz de contener

Ahí, cargándolo entre sus manos, la chica solamente pudo ver con lagrimas al pequeño peluche de larga cabellera negra, ojos negros y una sonrisa amable mientras vestía el mismo conjunto que la chica había vestido la primera vez que ella y Minoru se vieron fuera de la escuela, siendo que aquel peluche usaba lo que parecía ser una blusa blanca, una falda celeste y unas botas negras altas que eran complementadas con un saco muy similar al que tenía el peluche de Minoru, siendo que, a diferencia del peluche que la chica había hecho, el que tenía entre manos mostraba una clara inexperiencia pero a su vez un enorme esfuerzo y cariño puesto en cada costura

- ...Mierda... Minoru... Porque... Porque demonios... Justo esto...? No quería llorar más... Y aquí vienes tu a regalarme lo más hermoso que alguna vez recibí o recibiré... - susurró la chica entre hipidos y lagrimas, abrazando fuertemente el nuevo peluche durante breves segundos antes de colocarlo con suavidad junto al que ya tenía mientras trataba de controlar su ánimo una vez más, permitiéndose a si misma verlos con cariño y tristeza combinados previo a soltar una leve risa que buscaba tratar de calmarla a ella misma

- Suertuda yo de peluche... - murmuró mientras veía al par de peluches y su mente imaginaba, por un breve y fugaz momento, que se trataba del real Minoru y ella, solamente consiguiendo que su corazón se apretase por in breve segundo antes de relajarse al pensar una vez más en las palabras que el chico había declarado en el vídeo

Suspirando, la chica rápidamente empaco todo una vez más con la excepción del par de peluches, cargando con cuidado el contenedor metálico mientras que los peluches iban sobre el mismo, teniendo el uno al lado del otro mientras se apoyaban entre ellos como si representaran la relación que la chica había tenido y que deseaba tener junto al chico

- No me hagas esperar mucho... No sé si seré capaz de soportarlo... Pero... Haré lo mejor posible, Minoru... te quiero... - susurró la chica como últimas palabras al lugar que guardaba el último regalo del chico antes de empezar a hacer su camino de vuelta

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Bueno? Malo? meh?

Me gustaría saber si creen que pude describir con claridad la desesperación que creo que Akane sintió... tengan en cuenta que este Minoru es mucho más cercano y tuvo mucha más interacción con ella, a su vez, para Akane, Minoru es su primer amigo y su primer amor a la vez que también es su héroe y se volvió su soporte emocional luego de haber compartido, por primera vez, sus problemas familiares junto a él, so... espero haya quedado lógico y bien hecho...

Bueno, eso era todo, gracias por leer y bye bye :D

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