26 24 pt.1

me puse lidocaina y no siento la mano, aprovecharé para escribir ahora q no tengo dolor uu

dicen que cuando miras a la persona que amas o de la que estás enamorado, tus pupilas aumentan su tamaño hasta un 75% ;)

Después de casi tres horas de viaje en tren, bajaron en la estación con el equipaje.

—¿Pido un Uber?

—Si, bebé.— Jungkook le abrazó la cintura por detrás mientras su bebé pedía un Uber.—Nos están mirando mucho.

—No soy normal, Jungkook. ¿Qué esperabas?

—¿Quién quiere a una mujer plástica o a un hombre así si te tengo a ti? Completamente natural, precioso, hermoso, único, especial, deseable, delicioso, inteligente, cariñoso-

—Yah.— le cortó el rollo y Jungkook se molestó. Le agarró sus senos y los moldeó con sus venosas manos.—¡Jun-Jungkook!

—De lo que se pierden por creer que eres un error... Tae, de verdad. Mi amor, mi príncipe, dueño de mis primeras veces amo que seas mi novio, amo tanto tu cuerpo y tu bello rostro. La gente no es capaz de observar que eres bello es porque sienten envidia, ya quisieran ser como tú.— Jungkook siguió manoseándolo descaradamente en público.

Afortunadamente, no era una hora muy concurrida por lo que no habían muchas personas observando la obscena imagen.

—Jodido hormonal.— gimoteó su príncipe.

—Yo no soy quien levanta al otro en la madrugada porque se siente caliente, eh. Ese eres tú.

—Shh, el Uber ya llegó.— lo tiró de la mano y Jungkook lo siguió con el equipaje en mano.

Se subieron al auto y Jungkook no podía dejar de manosear a su príncipe. Era como una adicción.

—Me has hecho dependiente de ti, príncipe. Siempre necesito estar contigo y tocarte...

Taehyung en esa ocasión no llevaba una falda pero si llevaba un buzo bastante amplio para que Jungkook metiese su mano y nadie lo viese.

Jungkook se acercó aún más y recostó dulcemente su cabeza en el pecho de su TaeTae, disfrutando la calidez.

Ahora no tenía dobles intenciones, solo lo acariciaba íntimamente. Levantó sus piernas hasta el regazo de Taehyung, mas aún permanecía sentado en el asiento del auto.

Taehyung rió por lo tierno que había sido eso. Acarició su cabello negro y disfrutó de la cercanía.

—Queda poquito, bebé.— avisó Tae.

Cuando llegaron al hotel, los recibieron muy bien. La habitación justo daba para la playa, sin duda era una vista preciosa.

—Kookie, mi amor... Am, y-yo... Te-Tengo que ir a hablar a recepción para preparar algo...

—Hmm.— Jungkook alzó una ceja y su mirada se oscureció.—Te vas a ir justo cuando quiero que me mimes.— Taehyung se acercó a él y lo abrazó.

—Vuelvo en media hora, bebé. Será rapidito.— sus labios hicieron un puchero y Jungkook inconscientemente los besó.

—Está bien, mi amor... Haré la previa mientras te espero.— guiñó su ojo y Taehyung se sonrojó y antes de salir por la puerta Jungkook lo acorraló.

—Si un hijo de puta se acerca a hacerte daño aplicas la patada que te enseñé, ¿quedó claro?

—Si, papi.— frotó su zona de príncipe contra el miembro de Jungkook que comenzaba a despertar.

Taehyung se escabulló de sus brazos y salió de la habitación riendo.

Jungkook suspiró y se tiró a la cama, gimiendo frustrado. A Taehyung le gustaba provocarlo y dejarlo solo después. No era para nada alucinante solo masturbarse.

—Que va... No puedo soportar media hora.— su mano venosa izquierda comenzó a acariciar su miembro y con su otra mano buscaba algunos videos, que tenía con su príncipe, en su iPhone.

Se sacó la camiseta y bajó un poco su pantalón de buzo, sacando su miembro.

Reprodujo el video de cuando se follo a su príncipe en el gimnasio.

Taehyung estaba recostado en el lugar donde una persona se acostaba y hacía pesas. Jungkook estaba de pie y su miembro siendo masturbado con su mano.

Jungkook del pasado grabó el cuerpo completo de su príncipe y luego metió su miembro, sin importarle los gemidos dolorosos. Escupió saliva en su clitoris y masturbó exquisitamente.

Jungkook del presente gimió y apretó su miembro, le ponía tanto cuando masturbaba a su bebé y se lo comía entero. Siempre que podía se metía entre sus piernas y saboreaba todo.

Comenzó a masturbarse cuando el video llegó a la parte en que su bebé hacía ahegao y sus senos rebotaban acorde de sus estocadas bestiales.

Le subió el volumen y los gemidos de su príncipe hicieron que su orgasmo comenzara a llegar más rápido. Por más que trabajaba la resistencia, veía a su príncipe y se corría en exceso en poco tiempo. No podía evitarlo y tampoco era bueno para su salud.

Apretó su glande cuando su príncipe largó un duradero gemido.

Cuando el video llegó a la mitad comenzó a acariciar su falo, sus dedos rozando con sus testículos.

Dejó salir una sonrisa y se metió al Instagram, buscó el chat con su bello novio y comenzó a grabarse. Se masturbó más rápido y comenzó a gemir en alto, su abdomen bañado en sudor y contrayéndose deliciosamente.

—Príncipe...— gimió y apretó su miembro, corriéndose. Sus piernas temblaron y dejó salir otro gemido grave.

Envió el video y tiró su teléfono. Suspiró y disfrutó la sensación del orgasmo con una sonrisa de completa satisfacción.

—Me gustaría tener disponible la alberca también, tipo nueve de la noche.

—No creo que sea posible, estará disponible para después de las diez.— la señorita tecleó en el computador y miró a Taehyung.

Taehyung chasqueó su lengua y su expresión se endureció.

—Está bien, que sea a las diez. También me gustaría ese pack que salía en la página, este de comida.

—¿El de setenta dólares?— Taehyung asintió.—Si lo incluye al precio de la alberca quedaría en cincuenta dólares y en adición, le llegaría un pack de pareja. Lo que incluya debe ser elegido exclusivamente por usted.

—Me gustaría que me mandase un correo para verificar aquello... Me gustaría poder darle una sorpresa a mi novio, ya sabe.

—Comprendo.— la chica siguió escribiendo en el computador y el iPhone de Taehyung sonó.

Tomó su teléfono y vio que su novio le había mandado un video. Le bajó en brillo a su teléfono y abrió la notificación. Subió el volumen y el audio se reprodujo en sus AirPods. La sexy imagen de Jungkook masturbándose era insuperable. Se mordió su labio y aguantó su gemido de protesta. Estaba ocupado y aún así su amor jugaba sucio con él.

"serás hijo de puta🤤🤤..." escribió y envió. Guardó su teléfono totalmente avergonzado.

—El pack ya está listo y la reserva está confirmada. Serían doscientos dólares con un descuento del veinte por ciento por la primera vez de consumo. Ciento sesenta dólares, joven.

Taehyung tendió su tarjeta de crédito y su carita hizo un puchero. Había tardado muchísimo en juntar tres mil dólares para poder hacer el gasto del hotel y de los regalos para Jungkook. A pesar de que Jungkook contribuyó con la mitad del precio del hotel, seguía siendo elevado. Él realmente se había esforzado para darle una mejor estadía y unos buenos recuerdos.

Pagó y le entregaron el recibo.

—Una señorita subirá veinte minutos antes de la hora acordada para entregarle su pack y para darle la ropa adecuada y cómoda para subir. Recuerde que el piso es el veintisiete. También lea los términos y condiciones en caso de alguna queja o devolución de algún servicio o producto.

Taehyung asintió y tomó sus cosas. Llegó hasta la habitación y abrió la puerta molesto.

Jungkook estaba acostado en la cama aún con su corrida en todo su abdomen. El príncipe de Jeon, dejó sus cosas en la mesita principal y se tiró encima de Jungkook.

—¡No puedo creer que hayas hecho eso!— Jungkook gimió al sentir el roce contra su sensible miembro.

—Silencio.— lo calló y con su mirada le pidió que limpiara su abdomen.

Kim acercó su lengua y lamió las tiras cálidas de semen. Mientras lamía, dejaba deliciosas marcas. Delineaba cada cuadrito y sus manos traviesas rasguñaban sus brazos.

Cuando finalizó, le dio un rudo beso arcoíris. Kim se levantó como si nada y caminó hasta su maleta negra.

—¡Vamos a la playa! El día está precioso.

Jungkook se quejó y se levantó de la cama. Taehyung le ponía demasiado sensible y debilitaba su sistema.

—Algún día terminarás por matarme, maleducado.

—Entonces...— Taehyung caminó hasta él, meneando sus caderas.—Edúcame, papi.— Jungkook lo acorraló contra el ventanal y lo manoseó completamente.

—Te vas a comportar, Niño maleducado.

—Hm, no papi.— su risa inocente cabreó a Jungkook.

—Me vas a obedecer en cada puta palabra, ¿he sido claro?— Taehyung no obedeció, queriendo desafiarle.—He dicho, ¡¿he sido claro?!

Sus ojitos se blanquearon cuando lo nalgueó fuertemente.

—Si, papi.— esa faceta de Jungkook era relativamente nueva. Ellos no sabían qué roles les gustaba dentro de la relación pero cuando comenzaron a hablar de ello, se habían dado cuenta que amaban el rol de sumisión y el rol de dominar. Jungkook amaba dominar a su bebé y Taehyung amaba ser dominado por Jungkook.

Jungkook en un principio se negaba a actuar de esa manera tan ruda y posesiva porque temía hacerle daño pero cuando su príncipe le rogó frotando su mejilla contra su miembro... Fue difícil negarse.

—Ten confianza mi amor, me encanta cuando dominas. Te ves tan sexy, tan rico, tan hmm~—gimió recibiendo las falsas embestidas.

Jungkook se separó y caminó con indiferencia hasta su maleta. Taehyung gimió frustrado y sacó su traje de baño.

—Te odio.

—Yo también te amo, mi príncipe.

—¿Por qué carajos eres tan caliente, Jeon?

—N-No sé.— se avergonzó y se colocó la camiseta negra.

Taehyung sonrió y se colocó su traje de baño. Jeon había quedado boquiabierto, en shock. Era la primera vez que veía a su príncipe con un traje tan atrevido y revelador. La mayoría de veces de cuando iban a la playa o a alguna piscina, su príncipe usaba ropa o trajes de baño completo. Pero nunca antes mostrando lo que era.

(foto en multimedia (al inicio del cap))

Pero ahora le mostraba todo. Era un paso enorme en la relación y en la meta de Taehyung de amarse. Si tenía la confianza de mostrarle su cuerpo sin miedo y comenzar a utilizar esos trajes de baño es porque comenzaba a aceptarse.

—Cariño, te ves precioso.— su rostro reflejó una sonrisa sin mostrar sus dientes, sus ojos fijos en el cuerpo de su bebé.—¿Eres real?

Los ojos de Tae se llenaron de lágrimas. Abrazó a su novio en lloró contra su hombro.

—Oh, mi amor. ¿Qué pasa, mi príncipe hermoso?

—M-Me siento avergonzado... de mi-

—Oh, cariño. Shh, no digas nada.— Jungkook se arrodilló y besó sus pies, sus besitos subieron por sus piernas delgadas y cuando llegó a su zona íntima acarició dulcemente y dejó un duradero beso en su pelvis. Su lengua rozó el borde del traje. Y sus manos acariciaron dulcemente su culo. Sua cálidos besos dibujaron un trazo imaginario en el abdomen de su bebé. Se levantó y sus manos tomaron sus senos con cuidado y lentitud.

Repartió besitos y caricias dulces. Sus ojos negros conectaron con los ojos azules de su bebé y quedó fascinado como sus pupilas aumentaban de tamaño rápidamente.

—Eres precioso, de verdad. Tu cuerpo es único, bello y natural. Quizás no naciste como las demás personas, ¿pero sabes qué? Eso es lo que te hace precioso y ser la envidia de cualquier persona. ¿Te has mirado al espejo? ¿Has visto estas preciosas curvitas? Es que me fascina. Veo tu cuerpo y me enamoro cada vez más. Estar junto a ti es como vivir en un sueño. Cada día qué pasó junto a ti y conozco aún más de ti me hace muchísima ilusión.

Taehyung bajó su mirada.

—No te avergüences, mi vida. Tu precioso cuerpo es Perfecto y si llegas a subir de peso o deseas modificarlo quiero que sepas que siempre estaré aquí para apoyarte en cada proceso. Aunque a decir verdad, estás más que Perfecto así. No cambies solo porque la gente no sabe apreciarte, aunque en realidad si lo hacen, quisieran ser como tú. Así de rico, porque mmmm, que delicia es mirarte.

avataravatar
Next chapter