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En las duchas estaba un hombre muy descaso desnudo mientras las Jisoo tenía una manguera de agua la cual hacía que aquel chico estuviera ahogándose.

—báñate maldito imbécil.

Grita la menor de las 4 enfermeras. Con una amplia sonrisa en sus labios sin parar de reír hoy aquel hombre recibiría una visita de sus familiares.

—Si abres la boca te torturarse tanto que no podrás moverte en meses.

Gritaba la mujer en tacones abriendo aún más la llave para que el agua saliera con más presión.

—Por favor. Déjeme

Grito aquel chico, Jimin, un hombre enviado allí luego de que le diagnosticaron una mente suicida.

Jisoo ignoraba sus gritos aún "bañando" a aquel hombre.

—Es hora de ir con el paciente número 36

Hablo la mayor de las hermanas, Jennie.

—¿Hablas del bastardo de Kim Taehyung?

Pregunto Lisa a lo cual su hermana mayor asintió.

—Yo paso, ese tipo es un demente.

Justificaron Jisoo y Lisa al recordar las malas experiencias que han pasado con ese hombre, desde que le devuelva las inyecciones clavándolas en sus manos o brazos hasta que intentó abusar de Jisoo la primer vez.

—iré yo.

Hablo Rose con autoridad y una sonrisa, a esa chica le encanta sentir adrenalina y eso es lo que le hace sentir ese chico rebelde que muy pocas veces ellas, como mujeres, han logrado controlar.

Las chicas tragaron saliva y la vieron entrar a la habitación, Taehyung estaba de espaldas mientras novia su cuerpo de un lado a otro.

—Buenos días, pequeña peste.

Habla la joven sonriente.

—Tenemos que aumentar la dosis.

Habla con una sonrisa en sus labios mientras camina lentamente a él.

—Tenemos que aumentar la dosis

Hablo aquel de forma burlona imitando a la chica que acaba de ingresar a su habitación.

—¡A ver maldito idiota a mí no me vas a tomar como tú payaso!

Grito enojada acercándose al chico un poco más y al estar cerca intento clavar la jeringa en su brazo, pero el chico fue más rápido y la clavó en la pierna de la chica haciéndola gritar.

—¡Idiota! Tendrás el peor de los castigos.

Amenazó la castaña y llamo a dos de los doctores para que llevaron a Taehyung a la habitación del sótano, allí solo entraban aquellos pacientes que iban a terminar muriendo.

—Maldita sea.

Gruñó mientras saca la jeringa de su pierna y se levanta con un poco de dificultad.

Camino hasta aquellos oficiales encajando la jeringa con aquel líquido en su cuello.

—quiero que le proporcionan una camisa de fuerza, este gran hijo de puta pagará las consecuencias por sus actos.

Hablo la castaña mientras ve como el joven comienza a quedarse inmóvil.

El chico fue llevado a la habitación del sótano de aquel psiquiátrico, al estar allí despertó horas más tarde con una camisa de fuerza y atado a la silla.

—Desearas nunca haber nacido bastardo.

Rose hablo a centímetros de los labios del chico el cual aún seguía un poco atontado por el anestésico colocado anteriormente.

—Espero y esto no te duela mucho.