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¡Capellán!

—¡El Capellán ha regresado! —exclamó—. ¡Tanto para vengarse como para devolver la bondad! —¡Su esposa e hija que han sufrido todos estos años se convirtieron en las mujeres más benditas de la Tierra! —comentó alguien con emocionón.

Firework · Urban
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¿Cariño?

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¿Cariño?

Un nombre tan dulce y simple era algo con lo que Oliver Walker había estado soñando todos estos años, pero ahora, ¡era como una aguja afilada que le atravesaba el corazón!

—¿Qué acaba de presenciar?

Emilia llevaba medias negras y estaba sentada en el sofá con una copa en la mano.

En cuanto a George Johnson, que quería matar a Olivia ese mismo día, estaba inclinándose y sentándose extremadamente cerca de Emilia.

¡Sus acciones parecían coquetas!

La ira iba creciendo lentamente dentro de Oliver.

Emilia no se quedó al lado de Olivia. En cambio, cuando Olivia más necesitaba a su madre, esta mujer actuaba como una cualquiera y vivía su vida en este sucio lugar.

¡Estaba extremadamente decepcionado!

¡La habitación entera se sintió fría al instante!

—¡Te he extrañado!

El anhelo y sufrimiento que Emilia había enterrado profundamente explotaron instantáneamente en ese momento. Emilia no se preocupaba por dónde estaba en ese momento. Tiró la copa y corrió hacia Oliver.

En ese momento, solo quería un abrazo cálido.

¡Quería desahogarse sobre todo el dolor que tenía dentro de su corazón!

Pero, cuando Oliver vio a Emilia corriendo hacia él, le dio una mirada fría y se hizo a un lado.

No era él quien era cruel. ¡Esta mujer no lo merecía! ¡No merecía su amor!

El único motivo por el que no le había gritado era que en una ocasión ella le había salvado la vida.

—Tú...

Emilia se quedó paralizada. Sus brazos todavía estaban en el aire a punto de abrazarlo, pero su hermoso rostro mostraba confusión y dolor.

—¿Por qué?

No entendía por qué este hombre tenía que ser tan cruel con ella.

¡Había estado luchando durante los últimos 8 años! ¡Recogía basura y vivía cada día horriblemente!

¡Todo esto fue por una promesa que le hicieron! ¡Esperó 8 largos años!

Si no fuera por ese amor, podría haber renunciado a su orgullo, casarse con alguien más y llevar una vida normal.

¡Pero no lo hizo! Todo esto fue por la promesa que él hizo. Juró que estaría a su lado por el resto de sus vidas tan pronto como regresara.

¡Pero, mira lo que sucedió ahora!

¡Este hombre que hizo la promesa la miraba con disgusto como si estuviera mirando a un extraño!

De repente sintió frío.

Tal vez... ¿ya olvidó su promesa y tenía una nueva familia ahora?

—¿Por qué? ¿Por qué haces esto? —La voz de Emilia se volvió ronca mientras preguntaba.

¡Esos hermosos ojos en forma de media luna ahora estaban cubiertos por una capa de lágrimas! Estaban llenos de resentimiento y furia.

—¿Por qué? ¿No lo sabes tú mismo? —¡El tono de Oliver era frío y cruel!

¡Durante los últimos 8 años, había estado luchando en el frente de batalla en Indiana para proteger al país, pero qué obtuvo a cambio?

¡La mujer que más amaba le trajo tanta humillación!

Emilia estaba atónita al ver que este hombre la despreciaba.

¡Ya se sentía humillada y esta vez, con la ira acumulada en ella, gritó:

—¡Sí, lo sé ahora!

—¡Me estás despreciando a mí y a mi trabajo!

—¡Pero yo soy Emilia! ¡Solía ser la Diosa de Colorado! ¡La chica que todos envidiaban!

—¡No tengo que usar ropa tan reveladora y fingir ser alguien sin dignidad!

—¡Ni siquiera necesito maquillarme para parecer barata!

La promesa que la mantuvo fuerte durante los últimos 8 años se estaba desmoronando lentamente. ¡El corazón de la mujer, que parecía fuerte pero en realidad era suave y débil, también se estaba desmoronando!

Enfrentando al hombre frío e inexpresivo frente a ella, desgarró su corazón y lloró:

—¡Pero tú... con qué derecho me miras con desprecio?!

—Cuando estaba embarazada y abandonada por el mundo, recogiendo basura para ganarme la vida, ¿dónde estabas como mi esposo?

—Cuando Olivia estaba enferma y necesitaba dinero, ¿dónde estabas como su padre?!

—¡Te lo digo! ¡Cualquiera puede humillarme o sentir asco por mí!

—¡Pero no tú! ¡No tienes derecho a hacerlo!

—Huhuhuhu...

Se desató y lloró desde lo más profundo de su corazón. ¡Todo el esfuerzo mental que había hecho para asegurar que se mantuviera fuerte había desparecido!

¡Nadie la entendía!

¡Nadie!

¡Ni siquiera el hombre que más amaba!

Cuando Oliver escuchó llorar a Emilia, su corazón también tembló.

Apretó la mandíbula y habló con dificultad:

—No soy un buen esposo ni un buen padre, pero esto no es motivo para que puedas abandonar a Olivia y poder divertirte aquí en este lugar y traicionar a tu familia.

¿Acaso no había sido responsable con la familia?

¡Eso no era cierto!

Les había estado dando 10 mil dólares al mes. No importaba lo difícil que fuera la situación en el frente, aún así, transfería el dinero a la cuenta de Emilia cada mes.

¡Habían pasado 8 años!

¡En los últimos 8 años, debería haber millones de dólares! Incluso si la echaron de la empresa y no pudo trabajar, todavía podría haber mantenido a su familia en buen estado.

Además, todos estos años, en las cartas que recibió de Emilia, solo pedía dinero.

¡Ella nunca mencionó la enfermedad de su hija!

Sin embargo, lo que no sabía era que Emilia no había recibido ni un solo monto del dinero que él había dado.

—¡Por supuesto!

—¡Yo fui quien me hizo esto a mí misma! ¡Soy la villana aquí! —Emilia se mordió los labios mientras se sentía desesperanzada. Ya no quería defenderse. La sociedad le había enseñado a entender mejor después de todos estos años.

¡Oliver Walker solo había regresado para hacerla perder toda esperanza en la vida!

¿Dónde habría historias de cuentos de hadas en la realidad?

¡Perdió!

¡Lo perdió todo!

Clap clap clap

De repente, George Johnson comenzó a aplaudir después de disfrutar el espectáculo que se había presentado ante él.

—Todavía me estaba preguntando quién podrías ser, pero resultó que eres el padre de Olivia. El hombre inútil al que la Diosa de Colorado salvó de las calles.

—Pero eres, de hecho, un hombre inútil. ¡Ni siquiera puedes cuidar bien a tu esposa e hija!

Inicialmente pensó que Oliver Walker era alguien importante, pero resultó ser un hombre bastante inútil.

Ya no sentía miedo y comenzó a hablar con un tono un poco presumido.

—Pero como no pudiste cuidar bien a tu propia esposa, yo sí la he cuidado bien todos estos años.

—Y tu hija... cuando ella te llamó 'tío', ¿no te sientes avergonzado?

—¡Hahahahahahaha!

La risa aguda y penetrante que llegaba a sus oídos comenzó a causarle dolor en el corazón de Oliver Walker.

¡Era el capellán del país, pero no pudo proteger a su propia hija!

¡De hecho, la razón por la que Emilia terminó en este estado también fue por su desaparición durante todos estos años!

Sin embargo...

—Escucha bien ahora. ¡Soy el salvador de tu familia! —dijo George.

Al ver que Oliver Walker no decía mucho, George habló con aún más arrogancia:

—Si no hubiera ayudado secretamente a tu esposa, toda tu familia se habría muerto de hambre.

—¡Soy el salvador de tu familia! ¡Tienes que agradecerme!

—¿¡Comprendes?!

Emilia apretó el puño. George Johnson era de hecho el diablo. Solo le ofreció este trabajo por su apariencia ...

¡Pero no se puede negar que si no fuera por este trabajo, ella no habría podido mantener a la familia!

El corazón de Oliver se sentía como si lo estuvieran cortando con un cuchillo. La ira dentro de él crecía y sus ojos se volvían rojos como la sangre.

Pero a George Johnson no le importó y continuó:

—Arrodíllate ante mí y acepta divorciarte de Emilia ahora. Entonces, puedo compadecerme de ti como lo hago con un perro hambriento.

—¡Hahahaha!

—Emilia, ¿no quieres salvar a tu hija?

—¡Ruega entonces!

—¡Ruega que me case contigo!

—¿El hombre que esperaste durante 8 años? ¿Podría este hombre ayudarte como lo hago yo?

¿Sería capaz de salvar a tu hija que tiene leucemia?

—¡Hahahaha... Soy el hombre que necesitas!

—¡Para un hombre inútil como él, olvídate de 8 años! Incluso si le dieras 80 años, ¡seguiría siendo un ser despreciable!

¡Estas palabras de humillación estaban lastimando a Emilia! Sus ojos estaban llenos de lágrimas mientras miraba al hombre que amaba ¡Y todo lo que quedaba eran decepciones y resentimientos ilimitados!

—¡Basta!

Entonces, las venas en las sienes de Oliver Walker estaban saliendo mientras decía con un tono asesino:

—Tú... ¡definitivamente estarás muerto!